Relatos para amantes de los libros

Lo primero de todo gracias a Babelio y a la editorial Alma por darme la posibilidad de leer este libro, es una edición preciosa que ya cuando me lo ofrecieron su portada me atrajo y me animó a postular por él y además esta bellamente ilustrado por Natalia Zaratiegui.

El libro está compuesto por 23 relatos, y un prólogo redactado por Antonio Iturbe, me ha gustado mucho que a modo de introducción antes de los relatos de cada autor, Iturbe haya redactado una pequeña biografía del autor y nos hable un poco del relato en cuestión.
Estos relatos tienen como nexo común el mundo literario, hablan sobre escritores, editores, libros y también sobre los lectores, todo lo que engloba el mundo literario esta abarcado en los relatos que contiene este libro.
Son relatos de grandes autores clásicos, unos más conocidos que otros, algunos hay que al menos yo no conocía, me ha gustado conocer a esos autores, y hay también algunos autores que aunque conociéndolos aún no los había leído como Rudyard Kipling, Emilia Pardo Bazán o Gustave Flaubert.

Aunque a lo conocido me remito, se ve que soy lectora de costumbres y los relatos que más me han gustado son los de mis autores favoritos, Edith Wharton con su gran calidad literaria y esa crítica a la clase alta neoyorkina, Francis Scott Fitzgerald, que siempre es un verdadero placer poder leerle de nuevo y cómo no, el maestro del terror cósmico, H. P. Lovecraft e incluyo aquí a una autora que no había leído pero que sin duda volveré a leer, Katherine Mansfield.

La editorial Alma nos trae en su colección de clásicos ilustrados una selección de cuentos creados por autores destacados de la literatura universal, enfocados en el oficio de escritor y en la literatura. Además de su excelente trabajo de edición, cada uno de los relatos de este libro es una delicia por sí mismo. Como en todas las antologías siempre hay alguna historia que gusta menos que otra, pero en este caso puedo decir que no hay ni una sola que me haya desagradado o dejado indiferente. Todas son extremadamente buenas, muy variadas entre ellas en todos los sentidos. Cada uno de los autores trabaja a su propia manera, lo que es el oficio del escritor y lo que para ello supone la literatura, creando una obra muy variada y en la que se tocan muchos y variados palos y muy diversos géneros y estilos literarios. Además, el que solo conociera tres de estos relatos, y que gracias a este volumen haya podido leer a algunos de los autores que tengo más pendientes, a hecho de todo esto una gran experiencia.

He disfrutado mucho leyendo este libro. Por eso creo que lo mejor es que deje de hablar y permita que cada uno de los cuentos demuestre por sí mismo, porque esta lectura un 5 estrellas con todas las de la ley:

“Vida de Ma Parker” de Katherine Mansfield: En esta antología centrada en los libros, lo que menos me ha llamado la atención de este relato ha sido su relación con la literatura. Sí, hay la figura de un escritor egoísta y centrado en sí mismo, pero lo verdadera mente importante es ella, Ma Parker, la mujer que ocupa un oscuro lateral terciario en la vida del artista. La forma en que su cruda vida marcada por el trabajo duro y las pérdidas ocupa todos los espacios de la historia. Todo el cuento es un lamento. Un lamento cuya cuyo culmen es esa escena final desoladora, en la que la protagonista no tiene ni un lugar donde pueda llorar a sus anchas. Solo la lluvia. Es la primera vez que leo la autora, y esta toma de contacto me ha dejado noqueada.

“La Tarde de un Escritor”de Francis Scott Fitzgerald: Un escritor sale a la calle por primera vez, después de una larga enfermedad. En contraste con la vida que uno podría pensar que lleva un artista, (interesante y llena de creatividad por los cuatro costados) el periplo del protagonista es de lo más común, centrado en sus recuerdos y en extraer detalles que puedan inspirarle de lo que va viendo a su paso. Este paseo servirá a Scott Fitzgerald para dar una lección sobre literatura: no es algo estanco, sino algo que tiene vida propia más allá de su propio creador aunque muchas veces fluya a partir de sus recuerdos.

“Financiando a Finnegan” de Francis Scott Fitzgerald: con un tono Scott Fitzgerald se ríe de todo el mundo literario. Incluido el mismo, el autor prometedor que no acaba de cuajar en el mercado y cuyos editores y agentes confían desesperadamente en él, ya que la única otra opción es que les lleve a la bancarrota. La satírica en esta historia enmascara un punto acido que da que pensar mucho sobre el mundo editorial.

“Chist” de Antón Chéjov: el oficio de escritor es muy solitario, e implica ciertos sacrificios y sinsabores. Así que el protagonista de esta historia solo puede desquitarse siendo un tirano en su ámbito domestico. Siempre se ha dicho que los escritores son gente maniática a la hora de hacer su trabajo, y este relato lo ilustra totalmente. Porque como se dice en la introducción parafraseando a Kafka “nunca es suficiente silencio para escribir”. Por cierto, Chéjov es una asignatura que tengo pendiente, algo que deseo enmendar pronto.

“El Cuento Más Hermoso del Mundo” de Rudyard Kipling: las ideas budistas sobre la reencarnación y las vidas pasadas son una parte esencial de este cuento, donde un escritor trata de escribir “el cuento más hermoso del mundo” gracias a los sueños-recuerdos de un joven conocido suyo. Una metáfora de lo difícil que es poner en palabras una historia, hacer que lo que es bello en tu mente lo sea para el lector.

“Los Años Intermedios” de Henry James: Dencombe es un escritor que ha enfermado, y por ello está intentando recuperarse en un balneario. Durante su convalecencia recibe un ejemplar de su última novela publicada, la cual, insatisfecho con el resultado , final empieza a corregir al momento. Eso le llevara a conocer a un joven admirador suyo. El cuento pone en palabras la eterna insatisfacción del autor, en eterna búsqueda de una composición perfecta, que muchas veces cree a ver logrado. Toda su vida personal y laboral acaba siendo esa eterna odisea de lo intangible, del puro toque de las musas que le hace desear desesperadamente tener más tiempo para componer algo digno . Pero al final, como descubre nuestro novelista, quizás esta meta es ta irreal como las historias que compone. Lo que cuenta es lograr “un mínimo de calidad”.

“El Ángel de la Tumba” de Edith Wharton: Wharton nunca defrauda. En pocas paginas crea un historia de prosa depurada y sabor agridulce. En ella una mujer pierde la oportunidad de tener una vida propia por dedicar su existencia al legado de su abuelo, un ilustre filosofo cuyos trabajos, como nuestra protagonista comprobara, están destinadas a ver en el olvido. El cuento es una critica a la idealización de los autores, y a la necesidad de que uno se convierta en el autor de su propia existencia. Ni siquiera un feliz descubrimiento en la ultimas paginas quita a este cuento la atmósfera de vida desperdiciada por algo inútil que envuelve a la protagonista.

“Un Documento” de Leopoldo Alas “Clarín”: de este autor solo he leído algún cuento suelto. Y,oh Dios. Necesito leer ya “La Regenta”. Urgentemente. Que maravilla de cuento. Una historia costumbrista y que, en principio, no tendría nada de novedoso. Pero que se vuelve algo espectacular gracias al buen hacer de Clarín. Daba gusto leerlo, de lo bien escrito que estaba todo. La forma en que Clarín se mete en la mente de los dos protagonistas, la forma en que sabe convertirle en algo sensorial los sentimientos que les azotan, la forma en que desarrolla sus psicologías y les hace evolucionar a la par que avanza su aventura amorosa… todos e da de la mano con una acida visión hace el romanticismo puro en la literatura, señalando que solo es un pobre disfraz para la pasión carnal , pura y simple. Todo un coctel que bebe de la “Madame Bovary” de Flaubert y que da lugar a una metáfora sobre la creación y sobre como está bebe de la vida real, y sobre la arquitectura mental de los autores.

“Bobok” de Fiódor Dostoyevski: un cuento único en todos los sentidos. Un escritor de segunda se tumba encima de una lápida durante un entierro. Y oye las voces de los muertos, cuyas conciencias perduran unos meses después de ser sepultados. El dialogo de ultratumba que se establece entre personajes que en vida tuvieron posiciones o existencias dispares, es colorido, acido e (irónicamente) llenos de vida. No hay nada tenebroso en estos muertos, que ya no tienen nada que perder. Solo son de lo que es el estar vivo, en ellos perduran los ecos de su vitalidad y de las relaciones con los que tienen al lado, y su amor por lo carnal en todo su sentido. Un buen material que casi obliga ( como es obvio) al protagonista a buscar más ocasiones para oírles, con el fin de escribir sobre este insospechado tema.

“ Berenice” de Edgar Allan Poe: Nada que decir, excepto que Poe siempre es bien. Tengo muy pendiente la relectura de sus “Narraciones Extraordinarias”. La lectura de este relato tan famoso me lo ha recordado. Esta historia morbosa tiene algo de espeluznante que pone los pelos de punta.

“Carta a Eduarda” de Rosalía de Castro: una de mis eternas pendientes, que ha confirmado la necesidad imperiosa que tengo de leerla con este relato corto y con un contenido de rabiosa actualidad. Rosalía de Castro y pone, aparentemente, el foco en la abundancia de escritores que había en su época, en el hecho de que cualquiera podía publicar, aunque lo que hiciera fuera una auténtica bazofia. Nada nuevo bajo el sol, se ve que hay cosas que nunca cambian, y lo de que las editoriales hubiera más cantidad de calidad, es una de ellas. Y de paso, aprovecha para hacer una crítica a la posición de la mujer literaria de su época, señalando que de una forma u otra siempre está por debajo de su marido, y que al final todo lo que hace, para la sociedad, debe hacerlo en miras a su persona. Lo dicho, modernidad en estado puro puesta con unas palabras contundentes y de preciosa factura.

“La Palinodia” de Emilia Pardo Bazán: ay la Bazán. qué ganas tengo de leerla. Este cuento corto me ha parecido maravilloso. En el un poeta griego hace una dura crítica hacia la figura mitológica de Helena de Troya, la cual oculta la pasión que siente hacia la mujer del Rostro por el que mil naves partieron. El castigo del poeta se convierte en una fábula sobre la necesidad del artista de belleza estética y moral, y sobre los prejuicios que el arte ha impuesto a lo largo de la historia sobre las mujeres. Porque como bien se dice en la introducción, al final Helena de Troya lo único que hizo fue enamorarse. La guerra que vino después fue cosa de hombres.

“Y Va de Cuento” Miguel de Unamuno: La vergüenza que siento ante lo poco que leído de autores clásicos españoles es real. Y bochornosa. Aquí, una vez más se confirma mi necesidad de cambiar esto. Ines al final de este relato, Unamuno dice que podría estar con él infinitamente, que es casi como la vida, que sigue y sigue. pues con la literatura pasa lo mismo, se podría estar hablando de ella siempre y nunca acabar. En este relato, Unamuno nos habla ya no solo deseo que fin tiene la literatura, si entretener o no. También diserta sobre como el autor crea al héroe, pero a veces el héroe tiene tanta vida que hace autor. Y sobre la naturaleza del cuento como género. En uno de los párrafos (como si hubiera pocos) más brillantes de todo el texto, habla de que el importaban más las perlas que podían encontrarse en el relato (los hechos y circunstancias que serán dentro del), que el propio hilo conductor del collar. Y todo esto, hablando de un héroe llamado Miguel, catedrático enfrentado a las cuartillas blancas sobre su escritorio con la misión de crear un cuento. Literatura dentro de la literatura.

“Tesoro Extraído de Una Novela” de Raimon Casellas: No conocía a este autor, y me ha gustado el tema central del relato, como un hombre se enriquece gracias a la literatura de ficción, concretamente al Quijote. Pero he notado un cierto bajón respecto a las obras anteriores en todos los sentidos. Además me ha sobrado lo de el ataque a las gentes andaluzas tachandolas de vagas e incultas. Entiendo perfectamente que es te cuento y se autor están totalmente inscritos en el movimiento de Renaixença, y que no dejan de ser abanderados del independentismo catalán. Pero me parece innecesario el ataque, sobre todo, porque me parece muy fácil, simple y que cae en clichés. Créeme, las vidas de cualquier agricultor o trabajador del campo, ya sea en Cataluña, Andalucía o Castilla y León nunca han sido fáciles. Si quieres conseguir algo, nunca deberías atacar a la gente de a pie que solo intenta ganarse la vida. Me parece feo, y me da igual la época en que sea la crítica o de que la lado caiga.

“Best-seller” de O. Henry. Este autor me suena, pero hasta ahora no había leído nada de él. Este cuento me ha gustado mucho, está lleno de ironía y humor y buenos puntazos. Todo gira entorno a la crítica contra los Best-seller , un tipo de literatura muy denostada pero que por algo tiene éxito. Porque en el fondo, a todos nos gusta una buena historia con Drama y romance, para dar color a nuestras vidas monótonas.

“El Último Libro” de Alphonse Daudet: otro relato corto de rabiosa actualidad. Leyéndolo me he acordado de los bookstagramers a los que las editoriales les envían todas las novedades editoriales, independientemente de que sean el tipo de libros que ellos leen . Desde luego, eso está mal por parte de los sellos editoriales, pero al final la crítica va hacia las caras visibles, que aceptan cualquier cosa que les envíen gratis y, muchas veces, hacen reseñas, escuetas de estas obras que realmente no les interesa. Y, de todas formas, esta crítica también podría ir para muchos lectores que muchas veces compramos libros por el mero placer de tenerlos. Como veis, este cuento da para mucho y más de uno debería leerlo.

“El Librero Asesino de Barcelona” de Ramón Miquel i Planas: No conocía la leyenda-historia del librero asesino de Barcelona. Quizás si lo hubiera hecho, hubiera disfrutado más de esta historia. Pero tengo que reconocer que ese mito me llama mucho la atención. Y me encanta el hecho de que esté relacionado con la siguiente historia.

“Bibliomanía” de Gustave Flaubert. Si Flaubert es uno de los autores más importantes de la literatura universal, por algo será. Y en esta antología lo ha dejado claro, ya que ha sido varias veces mencionados. Solo 15 años tenía cuando escribió este relato, que vive del cuento que hemos podido leer anteriormente. Una historia en la que la obsesión por la posición de los libros y la mórbida mente de su protagonista está perfectamente retratadas, con un estilo narrativo que ya promete.

“Un Exlibris Mal Colocado” de Octave Uzanne: no conocía a este autor, pero el tono satírico y humorístico de este cuento me ha gustado mucho. Es una ácida crítica personificada en un estudioso de lenguas clásicas, por cuya obsesión acaba convirtiéndose en la comidilla de todos.

“La Biblioteca Universal” Kurd Lasswitz: soy de letras puras, y se nota a la hora de leer este libro. Me ha dejado totalmente perdida. Quizás sea uno de los libros que menos he disfrutado de esta antología. de todas maneras, reconozco que el relato tiene calidad y que las ideas que se expresan sobre la lógica y el conocimiento me han parecido tan acertadas como interesantes.

“Historia del Neocronomicón” de H.P.Lovecraft: Entiendo perfectamente lo que se dice la introducción de que has Lovecraft o se llama o se le odia, yo estoy un poco entre ambos ríos. de todas maneras, siempre he dicho que este relato tan corto me encanta. El Neocronomicón es un libro inexistente que ha dejado mucha literatura tras de sí. Me encanta que en tres páginas, el autor de esta referencia a otros cuentos suyos, saberlo da un plus a esta lectura. Si no sabes eso, creo que el cuento se te puede quedar un poco corto de todo. Como curiosidad, no sabía que el nombre del autor al que Lovecraft imputa la creación del libro maldito es un anagrama de la frase “all has read”

“El Descendiente” de H.P.Lovecraft: Y una vez más, el autor americano nos regala un relato lleno de referencias a otros trabajos suyos, creándose una historia muy sugerente y totalmente inscrita en ese mundo, tan personal que él supo crear y que a tantos fascina. El hecho de que este cuento esté inacabado, contribuye a la atmósfera de tensión y misterio sobrenatural que Lovecraft siempre supo imprimir en sus escritos. Uno se queda con muchas ganas de saber hacia dónde quería ir el autor y que desgracias traería el Neocronomicón a su nuevo dueño.

“El Rey Burgués” de Rubén Darío: y terminamos esta estupenda recopilación con este relato, lo primero en prosa que leo del autor nicaragüense. Y qué bonito lo que es cribe, como lo hace. Y que triste. El amor, al arte puro y a las letras que hablan de lo que verdad porfa no siempre recibe su justa recompensa. Es un relato triste y ácido, algo que no oculta la belleza del vocabulario, las imágenes literarias o la elegancia vacua y excesiva que rodea a ese rey burgués que mata el arte, bajo la apariencia de que lo ama y protege.

A veces una novela es demasiado. Porque acabamos de salir, muy afectados, de un viaje apasionante y terriblemente extenso, y necesitamos algo breve, que nos haga de bisagra antes de la siguiente aventura. Quizá porque queremos un libro para leer a ratitos, en la sala de espera, en un hueco entre clase y clase, y que nos deje saciados de intrigas y emociones. Para eso, queridos, existe, desde antes de Bandello, el relato.

Y como adoradores del libro que somos, ¿qué nos puede gustar más que leer sobre estos volúmenes que nos permiten soñar sin tener que dormir y viajar sin movernos de nuestro sillón? Por eso Alma Editorial, que conoce nuestras primitivas debilidades, ha creado un volumen  absolutamente hermoso e irresistible, titulado Relatos para amantes de los libros (2021), ilustrado por Natalia Zaratiegui.

En este libro descubriréis la terrible pérdida de una abuela que limpia la vivienda de un escritor (Katherine Mansfield); aquel que lamenta la ausencia de las musas y no sabe distinguirlas cuando las tiene delante ; los problemas económicos que suelen ir ligados a la profesión (F. Scott Fitzgerald); esas vidas pasadas que son imposibles de recordar, aunque algunos privilegiados vuelven a ellas (Rudyard Kipling); la nieta que, infatigable, pretende mantener viva la memoria de su abuelo (Edith Wharton) o una crítica a la sociedad sobre las mujeres que escriben, firmada por Rosalía de Castro, entre otros.

Muchas gracias por el ejemplar a @babelioespanol y a @almaeditorial y, sobre todo, por la confianza y el trabajo magnífico que realizan siempre por y para nosotros. Admirable, también, el gusto artístico de @nataliazaratiegui.
Enlace: https://www.instagram.com/mi..

En primer lugar agradecer a Babelio, Masa Crítica y a Alma Editorial por el envío del ejemplar. La edición de esta recopilación de relatos es preciosa 😍 y muy cómoda de leer. El libro trae punto de lectura, está ilustrado (hasta las guardas) y además venía acompañado del marcapáginas tan chulo que se puede apreciar en la foto superior.

Esta recopilación de relatos consta de 23 relatos de autores de varias nacionalidades, bastante conocidos, que vivieron entre la segunda mitad del siglo XIX y la primera del siglo XX, y sus obras, hoy en día, son consideradas clásicos de la literatura. Entre ellos podemos encontrar a Francis Scott Fitzgerald y H.P. Lovecraft, que tienen el honor de aportar a esta selección un par de relatos cada uno de ellos; Dostoiveski, Gustave Falubert, Chéjov, Leopoldo Alas "Clarín", Emilia Pardo Bazán y Edgar Allan Poe, entre otros.

Cada uno de los relatos está precedido por una introducción en la que el encargado de la selección de los mismos, Aitor Iturbe (periodista, escritor y profesor español), nos ofrece algunos apuntes sobre la vida de cada escritor y un resumen con una pequeña valoración de cada uno de ellos. Por eso, os recomiendo leer esta introducción una vez acabado de leer el relato, porque creo que ayuda a comprender mejor tanto al autor como a su obra, y creo que en la edición deberían haberlos puesto así, ya que su lectura anticipada puede liar al lector más que ayudarlo.

Las traducción de los distintos relatos que originalmente no fueron publicados en español, es bastante correcta, y se puede disfrutar con la lectura de cada uno de ellos sin padecer el horror de una traducción decepcionante.



Todos los relatos, en mayor o menor medida, tratan sobre el tema de la literatura y el mundo del libro en general. Sus protagonistas van desde autores hasta libreros, algunos más cuerdos que otros, y todos ellos con el nexo común de la pasión por la palabra impresa que tenían todos sus autores.



Esta recopilación ofrece una muestra de lo que grandes maestros de la literatura nos pueden ofrecer a los lectores que aún no hemos buceado por sus obras. A mí me ha ayudado a conocer a escritores como O. Henry, que me ha enamorado con su relato "Best Seller" y he podido estrenarme con la narración de escritores como Rosalía de Castro o Rudyard Kipling a los que conocía de nombre pero a los que aún, mi caprichoso y azaroso itinerario lector, no les había dejado hueco.

La lectura de este libro ha sido toda una gozada, porque yo soy una gran amante de los libros de relatos, y más aún cuando éstos tratan estos temas y están escritos por estos grandes autores. La mayoría de los relatos me han encantado y, aunque no todos están al mismo nivel, lo están al suficiente como para disfrutar bastante con la lectura del más flojo de ellos.


Además al estar ilustrado de una manera, aunque sencilla, en las que las formas simples en blanco y negro, iluminadas por algunos toques de amarillo, que ayudan a imaginar muy bien la historia que nos cuenta cada relato y hacen aún más agradable, si cabe, la experiencia lectora.



Por eso, si sois amantes de los clásicos pero os impone entrar en obras de más envergadura, esta deliciosa selección os hará disfrutar de la prosa de algunos de los grandes de las letras universales.
Enlace: https://misgrandespasiones-r..

Hoy os traigo uno de los libros de relatos que más he disfrutado últimamente.

En este libro, encontraremos 23 relatos en total de 21 grandes autores de la literatura. Todos los relatos son diferentes entre si, encontramos diversos géneros entre ellos pero lo que los une, es que todos tratan de una manera u otra con el mundo literario y los los libros.

Normalmente cuando leo un libro de relatos siempre hay algunos que disfruto y otros con los que no llego a conectar o no me gustan, sin embargo, en este libro en concreto me han gustado todos, en mayor o menos medida, eso si, pero en general ha sido una grata experiencia ir pasando por cada uno de los relatos y autores.

Además, me ha gustado mucho reencontrarme con relatos y autores que ya conocía, como en el caso de Poe, Lovecraft o Chéjov y descubrir autores que no había leído nunca y me han dejado con la necesidad de leer algo más de ellos como ha sido el caso de Katherine Mansfield, Edith Wharton, Flaubert o Henry James.

Un punto también interesante de este libro es que antes de comenzar cada relato, encontramos una página informativa donde brevemente nos cuenta algo del autor y del relato que vamos a leer y es algo que me ha encantado.

Y sin dejar de hacer mención a la preciosa edición en la que encontraremos diversas ilustraciones en tonos blanco, negro y amarillo acompañando a muchos de los relatos y que hacen que la experiencia aún sea mejor.

Sin duda, un libro más que recomendado para nosotros, los lectores.

Tengo unos cuantos libros de Alma Editorial (no muchos, porque casi todas sus publicaciones son clásicos universales que hace años que están en mi estantería y no tengo sitio para duplicados... pero unos cuantos sí tengo), y hemos sorteado entre vosotros ejemplares en nuestros aniversarios blogueros, pero creo que este es el primero que os traigo a Netherfield. ¿Y qué mejor que hacerlo con un libro sobre libros? Es más... ¿qué mejor que hacerlo con un libro sobre libros de la mano de relatos de autores clásicos? Voy más lejos... ¿qué mejor que hacerlo con un libro sobre libros de la mano de relatos de autores clásicos es una edición requetebonita ilustrada? Si no os parece suficiente os considero oficialmente unos desalmados y unos insensibles, que lo sepáis.

Relatos para amantes de los libros incluye un total de veintitrés relatos, buena parte de ellos escritos en el siglo XIX y unos cuantos en la primera mitad del siglo XX (probablemente los más tardíos sean un par de ellos publicados originalmente a finales de los años 30). La selección corre a cargo de Antonio Iturbe (periodista y escritor que quizás sea más conocido por estos lares por ser el autor de la novela La bibliotecaria de Auschwitz), que además es el autor del prólogo que acompaña a la edición y de las breves introducciones que acompañan a cada relato. Estas introducciones, por cierto, están muy bien pensadas y planteadas, porque en apenas unas breves pinceladas que no ocupan más de dos párrafos presentan al autor y esbozan la historia que vamos a leer a continuación (solo puedo ponerle un pero a la primera intro de todas, porque se traduce un término de manera distinta a como se traduce en el propio relato y causa al principio un poco de confusión, teniendo como tenía fácil solución en la corrección. Pero nada, es un pero pequeño que yo lanzo al aire por si hay reedición y se considera que se debe arreglar).

Y ahora vamos a lo que interesa, lo que importa, lo que hace que estéis desayunando croissants con uñas en este momento. ¿Qué podemos encontrar en estos relatos? Metaliteratura en todas sus formas y posibilidades. Tenemos a escritores a los que les ocurren cosas más allá de la escritura y tenemos a escritores que efectivamente ejercitan su trabajo ante el lector; tenemos a lectores que traspasan límites éticos en su adoración por sus escritores favoritos; editoriales y editores, libreros y librerías; escritores que roban ideas y escritores que se basan en hechos reales sin permiso; reflexiones sobre cómo un libro llega a ser un best-seller o sobre las mujeres escritoras en una sociedad que no estaba acostumbrad a ellas; juegos de palabras picarones a expensas de los ex-libris y coleccionistas de libros que rayan la locura en su obsesión por poseer el libro más especial del mundo. Literatura dentro de literatura contada de tantas formas distintas, con tantos estilos diversos, usando tantas vertientes posibles, como múltiples y variopintos son sus autores. A veces esa presencia literaria no es más que una excusa para contar una historia completamente diferente (me viene a la mente por ejemplo el primerísimo relato del libro, Vida de Ma Parker, de Katherine Mansfield), pero aun así permanece inalterable el por qué de esa presencia. No resulta imprescindible, pero ya que está, dice lo que tiene que decir y pinta lo que tiene que pintar.

Y os diréis: "Ya, ya, pero sé un poco más específica. ¿Cuáles han sido tus relatos favoritos?". Os aseguro que salvo un relato, con el que no he conectado nada (y que os apunto más abajo), todos los demás me han gustado mucho, cada uno por sus motivos, pero sí es cierto que unos cuantos, los elegidos, me han parecido fantásticos. No quiero alargar mucho la reseña ni tampoco quiero deciros demasiado de ellos porque al fin y al cabo son relatos y no se debe ir mucho más allá, así que solo pongo nombre a seis de ellos, aunque me duele en el alma dejarme unos cuantos fuera:

Los años intermedios (Henry James), porque es James en estado puro con su melancolía, su pátina nostálgica y esa búsqueda constante de la perfección y admiración encarnada en su anciano escritor protagonista.
Bobok (Fiódor Dostoievski), porque ese ratito que el protagonista pasa en el cementerio es de una genialidad, un humor y una imaginación desbordantes.
Un exlibris mal colocado (Octave Uzanne), porque Uzanne usa el concepto de algo tan literario como un exlibris para contar triquiñuelas extramatrimoniales de una manera fantástica.
Chist (Antón Chéjov), porque muestra al escritor egoísta que ni siquiera imagina su egoísmo y piensa que el mundo gira alrededor de su arte y su ombligo.
Bibliomanía (Gustave Flaubert), porque convierte la obsesión de un librero en un relato de misterio apasionante de apenas unas páginas.
Un documento (Leopoldo Alas, Clarín), porque lo que empieza como un amor platónico acaba en un perfecto ejemplo de escritor sin escrúpulos, con una puntilla final que suena a desaire de gran novela.

Os hablaba arriba del que menos me ha gustado con diferencia, y ese ha sido La biblioteca universal, de Kurd Lasswitz, pero porque mi capacidad mental y mi inteligencia limitada no dan para lo que este señor cuenta en su relato (era doctor em Física y Matemáticas). Supongo que sus semejantes intelectuales se lo pasarán pipa con esta historia, pero yo la he leído y me he quedado igual, no he entendido nada. Si os dijese otra cosa os mentiría. Hice la rama de Ciencias en el instituto por pura cabezonería y porque se me da genial complicarme la vida, pero ni me gustan ni se me dan bien. Así que a otra cosa mariposa, no pasa nada de nada :)

Relatos para amantes de los libros ofrece precisamente lo que predica en su título, así que si os gustan los relatos y os gusta la metaliteratura, este es vuestro libro. Yo además añadiría que es una joya para quienes les guste la literatura clásica, porque en sus páginas encierra relatos de grandísimos autores que abarcan la centuria comprendida entre la segunda mitad del siglo XIX y la primera del XX. Además de los escritores que os nombro arriba, podéis encontrar en estas páginas Francis Scott Fitzgerald, Edith Wharton, Edgar Allan Poe, Lovecraft, Emilia Pardo Bazán, Miguel de Unamuno, Rosalía de Castro, Rudyard Kipling... de verdad, es una selección fantástica y unos relatos que, en su individualidad, merecen mucho la pena. Yo estoy segura de releer más adelante no solo los que os nombro más arriba, sino unos cuantos que he tenido que dejar fuera por no extenderme. Y mención aparte merece la edición, con ilustraciones a cargo de Natalia Zaratiegui en solo tres colores (blanco, amarillo y negro), que complementan los relatos a la perfección.
Enlace: https://inquilinasnetherfiel..

Siempre me han gustado los libros que recogen relatos relativos a un tema, a mi personalmente me hacen descubrir autores a los que quiero leer de una manera más profunda. En esta ocasión, en este libro tan bonito, el hilo conductor es la literatura y el universo del libro. Vamos a encontrar historias que hacen referencia autores, libreros, lectores, editores...

Se trata de una recopilación que está hecha con mucho mimo y gusto, hay relatos para todos los gustos, tenemos misterio, ciencia ficción, género epistolar y mucho más, es una absoluta delicia poder leer a autores como Rosalía de Castro en una faceta que quizá no es tan conocida y lanzarse a leer a Lovecraft en un relato que es de mis favoritos, sin ser lectora del autor y no siendo el género de mis favoritos.

Entre mis relatos favoritos destacaría el Henry James, Edith Warton, Dostoyevski, Edgar Allan Poe, Rosalía de Castro, Octave Uzane y el que os he nombrado anteriormente de Lovecraft.

Creo que este tipo de libros puede resultar un regalo ideal para la gente que ama la literatura y los libros. al ser relatos independientes, se pueden leer y releer en cualquier momento y además, el libro es una preciosidad.

No puedo más que recomendároslo

Para empezar decir que la portada y el título me atrajeron muchísimo, todo muy cuidado, y, además, ilustrado. Pero de lo que hay que hablar es del interior. Este libro consta de veintitrés relatos de autores muy conocidos, tanto españoles como extranjeros, grandes clásicos de la literatura. Una selección muy variada que va desde mi querido Edgar Allan Poe pasando por Rosalía de Castro, Emilia Pardo Bazán a Unamuno o H.P. Lovecraft. Como siempre pasa en los libros de relatos, unos gustan más que otros, Berenice es una maravilla (para los que le gusta el género como a mí) también destacaría "El cuento más hermoso del mundo" de Rudyard Kipling y no sigo porque no pararía.
Estos relatos tienen varios temas en común, la escritura, la forma de vivir ( o malvivir) de ella, la vida de un escritor y, también, habla de los lectores, desde los ávidos que están esperando lo nuevo de un autor hasta los fanáticos que dejarían su trabajo por acompañar al autor.
No os voy a contar nada más, deciros que, además, la edición es preciosa y que merece la pena ser leído.

Relatos para amantes de los libros nos ofrece una selección de historias cortas escritas entre los siglos XIX y XX por autores muy venerados de la literatura universal. Como ya os podréis imaginar, el libro es el gran protagonista de esta colección en la que la figura del escritor y el lector pasan a un primer plano.

Por un lado, nos encontramos con historias protagonizadas por escritores y todo lo que conlleva su profesión. Los personajes nos enseñan sus inseguridades más profundas al no creerse lo suficientemente buenos o al hacer infinitas correcciones. Nos muestran sus manías a la hora de escribir. Nos hacen partícipes de los obstáculos e impedimentos a la hora de publicar con editoriales. Y también comparten con nosotros esas sensaciones al ver y tocar por primera vez su propia novela.

Por otro lado, nos encontramos ante protagonistas bibliófilos tan obsesionados con leer y coleccionar preciosos volúmenes que llegan a convertirse extremadamente huraños. Otros relatos incluso sacan a colación la paradoja entre la literatura para entretener y la literatura para desarrollar el intelecto. Me he dado cuenta de que muchos de los debates actuales ya existían hace más de 100 años. Otro ejemplo de esto es el rechazo al «best seller» o a la existencia de determinados clichés, pero en otra época distinta.

Uno de los placeres de leer este libro de relatos ha sido poder saborear cada historia plácidamente, hacer una pausa al acabar y reflexionar un poco sobre lo que acabas de leer a la vez que degustas en un mismo volumen la pluma de distintos escritores. Por último, la edición me ha parecido una preciosidad, tanto la portada como la forma en la que está construido: las ilustraciones de Natalia Zaratiegui, el prólogo e introducciones de Antonio Iturbe, el cuidado de la edición en el papel y el diseño... En pocas palabras, un libro que todo el mundo agradecería tener en su biblioteca personal.
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Esta edición preciosa de Alma es una selección de relatos de diferentes autores que ha seleccionado Antonio Iturbe e ilustrados por Natalia Zaratiegui, entre los que encontramos a: Katherine Mansfield, Francis Scott Fitzgerald, Anton Chejov, Rudyard Kipling, Henry James, Edith Wharton, Clarín, Dostoyevski, Poe… Muchísimas gracias a Babelio y a Alma por enviarme un ejemplar.
La verdad es que desde que vi el libro me llamó la atención la portada. Tengo que reconocer que soy una amante de los libros. Me encantan y me fascina el proceso creativo de un relato, libro, historia y la valentía de lxs escritorxs a poner en papel sus inquietudes o lo que llevan dentro. En esta antología encontramos libreros, lectores y libros. Diferentes historias y puntos de vista.
Unos relatos relacionados con el mundo del libro y todo lo que conlleva. Son historias cortas pero maravillosas. El que más he disfrutado es el de Rudyard Kipling, el cuento más hermoso del mundo. No sé si fue el momento pero me encantó. Otros que también me han gustado son los de Emilia Pardo Bazán, Rosalía de Castro y Edith Wharton.
Con algunos he sentido desasosiego y con otros curiosidad, como con el asesino librero de Barcelona. Me ha gustado reencontrarme con Raimon Casellas de quien había leído críticas de arte y me ha traído muchos recuerdos.
Os animo a leeros esta antología de relatos y descubrir autores que pueden sorprenderte.