El retrato de una dama de Henry James
Llamo a la gente rica cuando son capaces de satisfacer las necesidades de su imaginación.
|
Calificación promedio: 5 (sobre 362 calificaciones)
/22 de Julio, 2022 | 18 hs | Sala Augusto Raúl Cortazar La Biblioteca Nacional entrega su premio de reconocimiento cultural al autor, traductor, periodista y crítico literario argentino. Con la entrega de la Rosa de Cobre a Marcelo Cohen, la Biblioteca Nacional reconoce el prolífico y constante aporte del escritor a la literatura nacional durante más de cincuenta años. Su obra personal, que comenzó a publicar en 1972, transita el cuento, la novela y el ensayo. Los acuáticos, El país de la dama eléctrica, El fin de los mismos, El oído absoluto o Un año sin primavera son apenas algunos nombres destacados entre sus obras. Las traducciones de Austen, Henry James, Ballard, Wallace Stevens, Fitzgerald, Burroughs, Svevo, Lispector, entre muchos otros, subrayan su talento y capacidad. de este modo y como consta en el espíritu de creación de la Rosa de Cobre, la Biblioteca Nacional prosigue homenajeando a los grandes creadores de las letras nacionales en agradecimiento al valor de sus aportes. Acompañan al autor Abel Gilbert y Maxi Papandrea.
El retrato de una dama de Henry James
Llamo a la gente rica cuando son capaces de satisfacer las necesidades de su imaginación.
|
El mentiroso de Henry James
Su técnica solía consistir en afirmar lo falso más que en negar lo verdadero.
|
Otra vuelta de tuerca de Henry James
Tuve la visión de un castillo de novela, habitado por un hada color de rosa, de un lugar con todo el colorido de los libros de historias fantásticas. ¿No era acaso una mansión de cuento de hadas a la que había ido a caer medio en sueños, medio despierta?
|
Los papeles de Aspern de Henry James
Su tía y usted son peores que esas carmelitas que viven encerradas en sus celdas. ¿Le importaría explicarme cómo sobreviven sin aire, sin ejercicio, sin ninguna clase de contacto humano? No entiendo siquiera cómo siguen con vida. Me miró como si hubiese hablado en un idioma desconocido, y su respuesta fue tan escueta que suscitó mi irritación: —Nos acostamos muy temprano… mucho más temprano de lo que se figura. —Estaba yo a punto de añadir que eso sólo contribuía a ahondar el misterio, cuando me proporcionó un poco de alivio diciendo—: Antes de su llegada, no vivíamos tan recluidas. Pero nunca he salido de noche. |
Otra vuelta de tuerca de Henry James
El verano ha terminado, el verano ha desaparecido; el otoño ha caído sobre Bly y había apagado la mitad de nuestras luces. Con su cielo gris y sus guirnaldas marchitas, sus espacios desnudos y las hojas muertas desparramadas, el lugar era como un teatro después de la representación, con los programas arrugados esparcidos por el suelo.
|
Otra vuelta de tuerca de Henry James
¿Era realmente aquella mansión un castillo de hadas y estaba yo soñando? No, no era más que un viejo edificio apenas adaptado a las necesidades de la vida moderna, un caserón cuyos escasos habitantes se sentían tan perdidos como en las bodegas de un gran barco. ¡Y era yo la encargada de llevar el timón!
|
El Eco de Henry James
Durante aquel breve viaje a España que ya se ha mencionado, durante las últimas semanas del verano... Fue en Granada donde Gaston estalló de verdad; allí, una noche templada, comunicó a su compañero que o se casaba con Francins Dosson o jamás se casaría con nadie.
|
Otra vuelta de tuerca de Henry James
Cuantas más vueltas le doy más cosas comprendo, y cuanto más cosas comprendo más miedo me da .
|
Londres de Henry James
Uno se siente a veces en peligro de ponerse a pensar con cierta mezquindad sobre la personalidad de los hombres. La cantidad, por así decirlo, ha engullido toda calidad, y la perpetua sensación de que otros codos y otras rodillas se hincan en los propios incita un intenso anhelo del desierto. Ésta es la razón por la cual la perfección consumada del lujo, en Inglaterra, no es otra que poseer un "parque", una soledad artificial. Internarse en medio de unas cuantas decenas de hectáreas de hierba tachonada de robles y mantener al gentío a distancia, fuera al menos de la zona de sombra, equivale a disfrutar de una comodidad que por las circunstancias llega a ser muy peculiarmente preciada.
|
Otra vuelta de tuerca de Henry James
Llegué un atardecer de junio y allí, en efecto, me esperaba un confortable coche. Viajando a esa hora , en un día bellísimo , por una comarca cuya dulzura estival parecía desearme la bienvenida más amistosa, recobré los ánimos, y cuando entramos en una alameda se apoderó de mí un alado optimismo que tal vez no fuese sino la reacción de mi profundo desaliento. Esperaba o temía algo tan lamentable , supongo, que el espectáculo que me acogió fue una exquisita sorpresa.
|
Los nombres de personajes en un libro aparecen: