Tolstoi participó en las guerras que fueron el principio de las transformaciones sociales. Él siguió las etapas más importantes de la revolución en su carácter de propietario terrateniente o colaborando con distintas organizaciones sociales. Bajo este aspecto su conducta vital, es continuador de escritores, artistas y eruditos del Renacimiento y del Iluminismo. Por lo cual es un hombre que participó activamente y de distinta manera en las grandes luchas sociales de su tiempo y que se convierten en escritor a través de las experiencias de su vida.
El problema central de sus obras es el problema ruso de los campesinos, el cambio decisivo de la literatura europea, la derrota de la revolución del 48. En Ana Karenina se manifiesta lo cerca que está Rusia al régimen capitalista. Ahora no se trata de un simple fracaso económico, sino que está la perfilación del capitalismo, contra la cual Tolstoi está en protesta. Ilustra en la obra las grandes catástrofes, los grandes cambios trágicos de los destinos humanos, naturalmente a través de una minuciosa y detallada descripción de las fuerzas motrices, es decir, no sin la epicidad intensa en el sentido profundo de la palabra.
Tolstoi en esta obra expresó los aspectos significativos y fuertes de la rebelión campesina como también lo incompleto, atrasado, incierto y pusilánime. Por ello la posibilidad de acción de los personajes cae en el dilema de: capitalización o fuga.
El autor le da particular importancia al aspecto físico de sus personajes, a los fenómenos físicos que provocan o acompañan los procesos psicológicos; pero su modo de escribir no cae en puramente lo físico y psíquico, sino en la acción. En Tolstoi la acción es incesante en torno a posibilidades extremas, jamás alcanzadas pero siempre presentes, del carácter de cada personaje. Esto abarca desde las posturas políticas que toman hasta las relaciones que establecen cada uno de ellos con sus pares. Esto hace reflejar las críticas de Tolstoi a las problemáticas de su contemporaneidad. Levin oscila entre el conservadurismo reaccionario en ocasiones, otras considera irrebatibles los argumentos contra la propiedad privada de la tierra. Son dos puntos extremos donde el personaje trata de comprender los problemas de la época en relación a posibles soluciones de sus problemas vitales. La relación de Levin con su hermano, con su mujer, con sus amigos y con otras personas están conectadas a sus intereses vitales, esas oscilaciones revocan y concretan su rostro sin borrar sus contornos. Oblonsky, Vronsky y Karenin: hombres que representan la burocratización de la nobleza y se convierten gradualmente en máquinas que dividen el trabajo. El personaje de Ana oscila entre su deber de madre, esposa y mujer en la sociedad y su imagen dentro de la nobleza. Ana, particularmente es la intensificación extrema de las pasiones: su personaje muestra en una forma trágicamente intensificada, las antinomias que están presentes, pero diluidas y degradadas, en todos los amores y en todos los matrimonios burgueses. Tolstoi caracteriza la belleza de Ana únicamente a través de su influencia sobre la acción, a través de las tragedias que provoca en la vida de otras personas y en la suya propia. Su suicidio tiene una particularidad: Sus últimas palabras fueron “¡Señor, perdón por todo!” antes de ser arrollada por el tren. En esta simple frase, que de simple no tiene nada, Tolstoi construye la siguiente característica de la personalidad de Ana: Ella pide perdón a Dios e indirectamente a los lectores también. Ya que depende del lector determinar si su atracción emocional de Ana supera el juicio moral a su vida. En última instancia para los lectores el perdón puede menos o quizás más importante que la identificación con ella.
Al mismo tiempo, cada escenario o episodio dentro de la novela está ligado al desarrollo de cada personaje. Existe una conexión de cada parte individual de los personajes. Por ejemplo los bailes, en los círculos en la sociedad, en las visitas, en las conferencias, en los diversos trabajos agrícolas, en las carreras de caballos, en los juegos de cartas. Son diversos aspectos y fenómenos que no son simples escenarios ni accesorios, describen y realzan el cómo las acciones representan la totalidad de las cosas para la evolución íntima de uno o más personajes de la novela.
Por todo lo expuesto anteriormente punteo con 5 estrellas esta obra. La considera una de las mejores obras que leí por la complejidad de cada personaje, las conexiones de sus destinos y las críticas políticas y sociales que el autor manifiesta en cada página.
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