Ensayo sobre la ceguera

Me ha impactado sobremanera. Me ha sorprendido la historia. Me ha hecho sufrir y sentir miedo y claustrofobia de verdad.

Claustrofobia no solo por la historia, sino también por el estilo y la forma de escribir de Saramago. En un principio es asfixiante, luego te acostumbras. Pues ya nos hace ver él mismo en su novela, que el ser humano se acostumbra a todo.

La humanidad que rápido se desvanece cuando las necesidades aparecen.

Es una historia desgarradora. ¿Qué pasaría en el mundo si todo aquel que habita en él, se quedara ciego de repente?

Esto es lo que les sucede a los personajes principales que iremos acompañando durante todo el proceso de adaptación a la ceguera.

Ya de por sí, no ver, ni saber cómo vivir sin vista es un horror pero, si encima te apartan y te marginan socialmente, se complica la cosa.
Que harías si te dejarán a tu suerte y en manos de una ley injusta; la ley del más fuerte... ¡Imaginaos! El caos y la brutalidad que podríais vivir.

Los protagonistas van perdiendo poco a poco su humanidad para mimetizarse con un entorno hostil y salvaje. Tienen que vivir cosas que nunca imaginaron y hacer cosas que no habrían hecho en otras condiciones.

Pero aún, en medio de la barbarie y del hundimiento, siempre hay un bote salvavidas. Siempre queda gente buena, siempre hay un resquicio de esperanza y unas ganas locas de seguir con vida.

¡Escalofriante!

Saramago recibió un premio Nobel de literatura en 1998, Ensayo sobre la ceguera fue publicado en portugués en 1995.
Este libro nos lleva a una plaga de "ceguera blanca" que invade a una ciudad todo empieza en un semaforo, Saramago decide no ponerle nombres a sus personajes, pero entre ellos se destaca una mujer esposa de un medico que fingió ser contagiada y a través de sus ojos vemos todo lo que pasa, este es un libro que nos invita a ver todo lo que pasa a nuestro alrededor, y no dejemos la justicia en manos de unos cuantos, nos deja ver que con poco que hagamos estamos cooperando por tener un mundo mejor, nos deja ver como nuestro lado egoísta impera en nuestro mundo haciéndonos cada vez menos humanos.Por ultimo me despido con dos frases del libro:
La vida se entregó a nuestras manos tras habernos hecho inteligentes, y hasta aquí la hemos traído.
Creo que nos quedamos ciegos, creo que estamos ciegos, ciegos que ven, ciegos que, viendo, no ven.

Cuando surgió esta lectura conjunta, no lo dudé. Este libro llevaba mucho tiempo entre mis pendientes, así que era mi gran oportunidad.

¿Qué pasaría si toda la población empezará a quedarse ciega sin causa aparente? ¿Será algo contagioso? ¿Qué ocurriría si se hacinara a los ciegos y contactos estrechos en un manicomio abandonado?

Con esta premisa, José Saramago plantea un escenario apocalíptico en el que nuestro sufrimiento irá en aumento a medida que avanza la historia.

En formato ensayo, sin diálogos y con párrafos eternos, la historia evolucionará ágilmente contra todo pronóstico. Sólo las dos últimas partes del libro se me hicieron cuesta arriba, pero fundamentalmente por su crudeza.

Ensayo sobre la ceguera habla del miedo a lo desconocido y de cómo este miedo que se desata en una situación extrema, lleva al ser humano a superar los límites de la moralidad. Saramago hace un crítica social brutal y nos muestra que el enemigo no siempre es algo externo, sino que puede estar dentro de nosotros.

👩🏽‍🦯 Voy a empezar conteniéndome las ganas de hacer spoiler sobre este libro que se que por aquí hay gente que lo tiene pendiente.

👩🏽‍🦯 ¿Quién dice que en un ensayo no se pueden hacer teorías? 🤣. También os digo que alguna era profunda y podría haber resultado, pero nos hemos quedado con las ganas de saberlo, así que en mi cabeza he dado en el clavo ✌🏻.

👩🏽‍🦯 Comencé la lectura como en el Shambala, montada en un coche que sube una cuesta infinita para que me dejaran caer al vacío y luego la más absoluta inmundicia (no lo digo yo, lo relata el autor).

👩🏽‍🦯 Trata sobre una pandemia en la que la sociedad se va quedando ciega. ¿Podéis imaginar lo que ha sido que la mente asocie y disocie realidades del último año y medio? Pues eso. Pensaba que sacaría muchos momentos para la reflexión pero es que quitando un par de momentos, no me ha dado para más.
Quizá el rechazo que me estaba creando de por si la historia, me ha cegado a mi también y no he sido capaz de ver esa brutal crítica social de la que dicen que cuenta.

👩🏽‍🦯 Saramago tiene una particularidad a la hora de escribir y es que los signos de puntuación así como las conversaciones al uso que conocemos o a las que estamos acostumbradas, brillan por su ausencia. Para un ratito esto es bien, pero tras 400 páginas, no puedo decir que se me ha hecho pesado.

✍️ “En una pandemia no hay culpables, todos somos víctimas”.

🖇 LC con @victor.jbeltran, que no sé en qué momento me dejé convencer para leer un clásico 🙃, pero ciertamente ha sido un lujazo hacer este viaje a ciegas contigo. Además, sé que no voy a estar sola en este barco, lo cuál agradezco enormemente. Un placer enorme 💜😘.

👩🏽‍🦯 Mientras releía una y otra vez para corregir las meadas fuera de tiesto, que en ocasiones las tengo, me he decidido a compartir con vosotros un símil con el que he dado al pensar en el libro (⚡️SPOILER ALERT ⚡️):
👀 Por momentos me ha parecido que pudiera hacer una comparativa entre el asilo y un campo de concentración de la Alemania nazi. ¿Se me ha ido la olla? Posiblemente, pero la opresión bajo la que viven con esa escasez, los militares vigilándoles, esa falta de “auxilio” no sé, me ha recordado un poco a eso, y tampoco me ha hecho demasiada gracia el tema.

La novela quizá más famosa de Saramago es sin duda un clásico que hay que leer. Un brote de ceguera comienza a expandirse en una ciudad como una epidemia, se intenta contener recluyendo a todos los infectados o posibles infectados en lo que antes era un sanatorio para enfermos mentales, pero pronto toda la ciudad se queda ciega. Las consecuencias de la epidemia se ven en todo nivel: pronto, todos empiezan a actuar como animales luchando por sobrevivir, los instintos más bajos salen a relucir y la violencia se vuelve algo cotidiano. Ya no hay quién controle o guíe, todos son ciegos luchando por sobrevivir en un mundo donde no pueden ver nada. Saramago se enfoca en la historia de los primeros infectados: un hombre y su mujer, una joven prostituta, un niño, un hombre anciano y el médico oftalmólogo que los atendió y su esposa, que es la única que nunca pierde la vista. Como son los primeros en ser trasladados al manicomio, podemos ver cómo las cosas van cambiando y cómo el sanatorio se llena rápidamente y la ley de la supervivencia manda: abusos de poder, violencia y violaciones, inanición, caos y muerte rodean a los personajes en todo momentos, mientras cada uno hace lo que puede, desde su propia perspectiva y circunstancia, por aguantar. Es una gran novela que hace reflexionar en torno a la ceguera del ser humano, ya no en una pérdida de la vista, sino en una ceguera que parece ser una constante que nos ciega de los demás y nos hace ensimismarse y actuar como si fuéramos los únicos importantes, cuando, en realidad como relata Saramago, es imposible sobrevivir estando ciego y aislado. El hombre es social y, por eso, no puede permitirse ser ciego ante el otro. Es curioso cómo los personajes no tienen nombre; cualquiera de nosotros puede ser uno de esos ciegos anónimos.
(Leer la novela en medio de la pandemia de COVID en 2021 es sin duda una experiencia única: el libro tiene más alcance y lleva a reflexionar mucho más sobre lo que cada uno hace y está dispuesto a sacrificar para sobrevivir, el papel que uno juega ante sí mismo y para con la sociedad, las circunstancias tan diferentes entre unos y otros, y la ceguera que el humano debe curarse.)

¿Sabéis la sensación que te deja un libro cuando permanece contigo días, incluso semanas? ¿Esa necesidad de querer hablar de él, no sólo de la trama o de los personajes, sino también de su estilo? ¿Sabéis cuándo crees que un texto es rompedor y luego lees a todo un Nobel, alguien que supuestamente está ya muy encasillado y te destroza los esquemas? ¿Sabéis esa sensación de querer apreciar más lo que tienes porque damos tantas cosas por sentado que la caída puede ser fatal? ¿Sabéis cuando te das cuenta de lo frágil y vulnerable que eres y la importancia del otro? Pues eso es Ensayo sobre la ceguera.

Hace unos días que he finalizado lo que podría clasificar como la lectura más profunda que he tenido este mes.

A priori no es un libro que me hubiera llamado la atención y el autor tampoco, aunque sabía algunas cosas de él por lo famoso que fue al ganar un premio Nobel y por haber fallecido en una de las islas.

La novela trata de un tema bastante jodido, una ceguera blanca que afecta a todo el mundo, una pandemia que manda al carajo la vida tal y como la conocemos. Un caos absoluto al no tener visión de nada de lo que ocurre. La única que conserva sus ojos intactos es "la mujer del médico". El no decir su nombre no es casualidad, aquí nadie tiene.
La parte en la que son llevados a una cuarentena forzada dentro de un manicomio vacío ha sido la más dura de leer para mi. Las aberraciones que allí se cometen y la inmundicia que los rodea me han parecido de una crudeza importante.

En este libro, Saramago ha jugado con mi mente y me ha transportado a ese mundo miserable y vil que describe. Lo hace tan bien que yo he podido oler cada aroma descrito.

Aunque tengo que ponerle un pero a esta obra y es la forma de escribir del autor, me ha imposibilitado muchas veces su lectura, me ha cargado la vista que no utilice las normas de puntuación y que mezcle diálogos.
Me he perdido en un potaje de letras, he tenido que releer muchas veces y encontrar el sitio donde me había quedado, a veces era misión imposible.
Además he leído lento, demasiado lento y me ha sacado de la historia bastantes veces.

Aún así creo que lo que se relata, merece la pena ser leído aunque sea una vez en la vida. Hay muchísimas reflexiones y mucho debate moral.

Una ceguera blanca se extiende entre la población de un país no determinado de una manera fulminante. El gobierno confina a los infectados y a los que han tenido contacto con los infectados en un manicomio abandonado y les deja a su suerte, dejándoles claro que no van a hacer nada por ayudarles.

Conocía la premisa de este libro y me daba reparo leerlo porque sabía que iba a ser un libro muy crudo. No me equivocaba en esto último es un libro crudísimo, que nos narra el peor lado del ser humano, pero es un libro que me ha enganchado desde la primera frase.

Por cómo está escrito, en párrafos largos, sin guiones de diálogos, sin nombres de personajes, sin lugares reconocibles, puede parecer difícil de leer que nos vamos a perder o algo así, pero nada más lejos de la realidad, está tan bien escrito, que el autor hace que no nos perdamos en ningún momento, es mi primer Saramago y creo que no va a ser el último.

Es una historia muy cruda pero muy recomendable y más teniendo en cuenta la pandemia que estamos viviendo, hace que se remuevan muchas cosas. Yo no puedo dejar de recomendaroslo, será una de mis mejores lecturas del año sin duda.

Sin ninguna duda, de los mejores libros que he leído nunca. Lo vi por primera vez en una libreria y, por curiosidad, leí la primera página... cuando me quisé dar cuenta llevaba ya dos capítulos y no podía parar.
Acabo de descubrir además que existe una adaptación cinematográfica, se llama "A ciegas", y se puede ver en Amazon Prime Video, pero no puedo hablar más de ella porque no la he visto y no sé cuán fiel será al libro.

José Saramago, narrador y ensayista portugués, ganador del Premio Nobel de literatura en 1998, publica este libro en 1995, pero su edición en español aparece en 1996.
Una novela donde prima la metáfora y teje una parábola aterradora acerca del ser humano.
“Creo que hay mucha ceguera en el mundo y este mal se extiende. Claro que no es una ceguera física, o al menos no solamente...”
Su particularidad: No emplea signos de puntuación, teniendo en cuenta más "la voz que dentro de la cabeza del lector dice que los ojos que simplemente ven", por lo cual su lectura implica todo un desafío.