El último verano de Silvia Blanch

¡Hola a todos! La reseña de hoy se trata de El último verano de Silvia Blanch, la última novela de Lorena Franco.

Descubrí la pluma de Lorena el año pasado, si no recuerdo mal, ya con El club de medianoche me dejó totalmente conquistada su pluma y quería repetir con ella sí o sí. En esta novela he leído a una Lorena totalmente distinta al registro en el que la descubrí, en esta ocasión estamos ante un thriller de lo más envolvente.


La historia nos sitúa en Montseny, Barcelona. Silvia Blanch desaparece el 27 de julio de 2017 sin dejar rastro. Desde entonces, hasta la actualidad, 2020, el caso de Silvia Blanch ha quedado en el olvido y hasta la propia policía ha desistido en continuar con la investigación. Alejandra Duarte, una periodista que trabaja para un periódico local de Barcelona, viaja a Montseny en busca de respuestas sobre el caso de Silvia Blanch. Allí, entrevistará a familiares, vecinos, amigos, pero no es bien recibida en un pueblo en el que le han advertido que “todos mienten”. Alejandra no cesará en su empeño en esclarecer por su cuenta qué pasó con Silvia Blanch, incluso arriesgando su propia vida. ¿Conseguirá Alejandra descubrir lo que realmente le pasó a Silvia Blanch?


Los que habláis conmigo a menudo sabéis que estoy en una época en la que no paro en todo el día y ando bastante liada con temas personales, es por eso que mi ritmo de lectura ha bajado considerablemente. Los días en los que me bebía un libro en dos o tres días pasaron a mejor vida. Hasta que empecé a leer esta novela, que he finalizado en prácticamente dos días del enganche que tenía.


Estamos ante una obra que nos mantiene en tensión desde el primer momento y adentra al lector de pleno en la trama. Lorena Franco ha sabido encauzar la trama de una manera sublime para que el lector no pueda parar de leer.

La trama comenzará situándonos en un momento del día de la desaparición de Silvia, para continuar un año después de este suceso y hasta la actualidad. La novela cuenta con varios saltos temporales entre pasado y presente y varios narradores, pero en ningún momento lleva a confusión y hace la lectura muy amena.



La protagonista principal de esta historia es Alejandra Duarte, que será la encargada de llevar a cabo todo el trabajo de investigación del caso Silvia Blanch. Alejandra comenzará su investigación un año después de la desaparición, en 2018, cuando ya el caso se ha dado por cerrado y la policía no va a realizar más investigaciones. Movida por su espíritu investigador de periodista, Alejandra será la pieza fundamental de la trama. Para mí ha sido un personaje muy bien creado y con muchísima valentía, si que es verdad que a veces creía que estaba demasiado obsesionada con el caso Silvia Blanch, pero es algo que ella misma asume y sabe perfectamente. A lo largo de la novela, Alejandra pasará por momentos de verdadero miedo y terror, y es que, meter las narices demasiado en el pueblo de Montseny, le puede costar caro.






Además de Alejandra, está claro que tendremos muchos más personajes que van a ser en su mayoría los principales sospechosos de la desaparición de Silvia. No os voy a revelar ningún nombre ni la relación de parentesco con la desaparecida, pero solo os voy a decir que he dudado de todos y cada uno de ellos en algún momento de la novela, y eso es simplemente gracias al gran trabajo que ha hecho Lorena Franco con estos personajes. Aunque tuviese mis propias ideas y conclusiones, al llegar al final, me ha dado la vuelta por completo a todas mis sospechas.


La pluma de la autora me ha sorprendido gratamente en este género. Lorena Franco nos presenta una historia perfectamente definida y plasmada de una forma que introduce al lector en la investigación como si la viviese en primera persona. Una trama elaborada y muy bien hilada, con esos saltos temporales y cambios de narrador que te hacen sospechar de todos. Ha sabido introducir esos momentos de tensión y suspense a la perfección. Para mí ha resultado ser una historia directa, ágil y amena. Me ha parecido muy acertado que se lea tan rápido gracias a esos capítulos cortos que nos presenta la autora.


La historia se encuentra narrada en primera persona por Alejandra y los demás narradores que encontraremos en capítulos alternos. Es la forma ideal para esta obra ya que así conocemos de primera mano los pensamientos de los protagonistas. Incluso hay algunos narrados por la propia Silvia Blanch que nos van a despejar muchas incógnitas.


La novela se compone de 320 páginas que se leen de manera rápida. Con capítulos cortos, a veces, hasta de una página, y numerosos diálogos, hacen de esta obra un libro perfecto para desconectar y leer en una tarde.



En conclusión,El último verano de Silvia Blanch, es un thriller ambientado en Barcelona basado en una desaparición sin resolver. Con unos personajes perfectamente creados que te harán dudar de todos y cada uno de ellos. Una obra en la que Lorena Franco ha sabido jugar perfectamente con las palabras para hacer dudar al lector.
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No había leído nunca a Lorena Franco y este año me apetecía leer algo de ella. Había leído muy buenas críticas de su anterior novela y con este nuevo título me he animado por fin, El último verano de Silvia Blanch.

Silvia Blanch desapareció hace un año. No ha vuelto a aparecer, y la policía no sabe nada, ni tiene ninguna pista fiable. Detuvieron a su primo por no tener coartada, pero al poco tiempo le dejaron libre por falta de pruebas. La última persona que la vio fue una mujer que ahora está muerta por lo que el caso está en punto muerto. Nuestra protagonista, Alex, es periodista y la mandan cubrir el caso un año después. Tiene una entrevista concertada con la familia, y su jefe le ordena acudir al pueblo donde desapareció y crear un reportaje jugoso para el periódico. Allí, Alex comienza una investigación por su cuenta y riesgo, comenzando una obsesión malsana por conocer el paradero de Silvia: ¿huyó de todo o alguien cercano ha podido matarla? Y lo más importante, ¿dónde está?

Esta historia es terriblemente adictiva. Con una prosa muy hábil uniendo el diálogo con las descripciones justas y necesarias consigue un ritmo notorio y una gran ambientación: escrita con capítulos cortos, muy ágiles y narrados de forma acertada consiguiendo una lectura trepidante y absorbente. Los capítulos son narrados mayoritariamente por Alex en el presente contándonos los hechos y la investigación que lleva a cabo; otros son narrados por Silvia, desde el pasado y unos días antes de su desaparición nos narra los últimos pasos que dio antes de desaparecer; y por último, tenemos unos capítulos sueltos narrados en tercera persona donde básicamente son diálogos de terceras personas creando mayor sugestión si cabe. Todo esto consigue que la intriga aumente y el suspense se dispare, ya que hasta el final no podremos adivinar, para nada, el final que nos depara la autora.

La atmósfera que ha creado la autora en el pueblo es esencial para transmitir esa sensación de incertidumbre, de dudas y sospechas: todos guardan secretos, todos mienten y todos tienen miedo a descubrir realmente qué ha podido pasarle a Silvia. A pesar de ser una novela corta y rápida la autora ha dado el punto justo a todos sus protagonistas, sobre todo a los dos personajes más importantes, Silvia y Alex. Estas dos tienen ese punto de perfilado perfecto, pero donde caben muchas dudas en ellas. Las conocemos, sabemos mucho sobre ellas, pero de algún modo la autora crea ese halo de misterio en las dos, sobre todo en Silvia: un personaje con muchas sombras y a la que finalmente conoceremos bastante. Los otros personajes nos crean muchas sospechas ya que vamos a sospechar de todos: de la madre, del padre, de la hermana, del primo, del novio, del vecino… todos y cada uno de ellos, a medida que avanza la trama, parecerán sospechosos de algo, y en cada página entenderemos que puede ser cada uno de ellos el culpable de la desaparición de Silvia, pero no sabremos de verdad quién está detrás de todo, o si es Silvia quién ha creado todo este embrollo.

Una trama que me ha tenido totalmente entregada a la novela: tenemos intriga, pasiones desenfrenadas, acción y muchos secretos familiares que despertarán odios y más mentiras y secretos. Desde que empecé hasta que terminé no pude parar de leer y es que apenas me duró tres días: un libro ameno, muy entretenido, de fácil enganche y sobre todo bien desarrollado. No he encontrado ningún punto negativo, aunque si tengo que encontrar alguna pega (para que la autora consiga la excelencia en su próxima novela), sería el no encontrar a la policía en ningún momento: creo que hubiera tenido un mayor sustento, más base, más profundidad, y con ello conseguir un thriller perfecto. El último verano de Silvia Blanch es realmente un thriller, un devora-páginas total, que nos va a sorprender en su recta final y que nos tendrá en vilo hasta el minuto final. Una novela híper-recomendable y que me ha encantado.
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Con el final bailandome en la cabeza todavía, puedo decir que estoy gratamente sorprendida de esta lectura.
Tan dinámica que cuando te das cuenta llevas doscientas páginas leídas y quieres más; Adictiva, cautivadora, morbosa, sentimental...encontramos historias dispares contadas en varios capítulos por sus protagonistas.Con una prosa muy fluida, la autora nos interna en un pequeño pueblo lleno de secretos, donde nuestra protagonista tiene que realizar un articulo para el periódico donde trabaja y así empieza su obsesión por Silvia, por el pueblo, por los integrantes de la familia de la desaparecida.

Una protagonista apasionada, obsesionada con el caso de Silvia.
Un protagonista atormentado por los secretos.
Unos personajes que aún secundarios han sabido darle el toque justo para que los protagonistas brillen.

Una historia que en parte parece tan real, nos adentra en el pensamiento de sus protagonistas, sacándole punta a los detalles, haciendo que el lector de devane el seso y no sepa en qué momento saltará la chispa en la que nos de esa pista fundamental para saber , quién es el asesino.
Muy bien argumentada, con personajes con carácteres muy bien definidos, una obra muy bien escrita y estructurada. 

Es un libro que he leído del tirón, literalmente.
Lo empecé una tarde y al día siguiente lo terminé.
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Se trata de una historia de intriga, con mucha carga de incertidumbre y mucho suspense.
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Silvia, una joven vecina de un pueblo catalán, desaparece sin dejar rastro.
Todo aquel que la conoce coincide en que la desaparición no es voluntaria pero no hay indicios de nada que lleve a pensar lo contrario.
Tras una investigación policial que no arroja ningún rayo de esperanza y en la que parece que todo ha fallado, el caso se cierra.
Aquí entra en juego una joven periodista del periódico "Barcelona ahora", Alex, que será la encargada de hacer una entrevista a la familia de Silvia por el aniversario de su desaparición.
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Alex verá que hay algo que no cuadra en toda esta historia y se obsesionará de tal manera que le será imposible dejar de destapar secretos y mentiras.
Su presencia en el pueblo de Montseny no es bienvenida y así se lo harán saber.
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¿Qué secretos esconde la desaparición de Silvia?
¿Dónde está Silvia?
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Desde que empecé a leer a Lorena siempre ha sido un acierto.
Es un libro de lectura muy ágil, con capítulos cortos en los que cada capítulo es narrado por un personaje de la trama.
De esta manera se vuelve aún más ágil y adictiva la historia, creando nuevos misterios e inquietudes con cada página que leer.
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Sinceramente el final, he empezado a vislumbrarlo cuando un personaje desvela un dato, a priori sin importancia
Aún así, me ha parecido una trama muy bien urdida, con muchos giros y, sobre todo, donde nada ni nadie es lo que parece.
Todos mienten.

Segunda toma de contacto con la pluma de la autora y me declaro fan total de esa manera que tiene de escribir tan ágil, sencilla y adictiva.
En este libro conocemos a Alejandra Duarte a la que todo el mundo llama Alex.
Alex trabaja en un periódico y tendrá que ir al lugar donde desapareció Silvia Blanch a hacer una entrevista a los familiares de esta para ver cómo llevan el hecho de que haya pasado un año de la desaparición y no sepan nada de Silvia ni que fue de ella. A partir de ese momento Alex se obsesiona un poco con descubrir la verdad, porque parece que todo el mundo miente.
La historia está contada a varias voces, por un lado veremos el punto de vista de Álex y el de Jan (primo de Silvia) que mantiene todo el rato conversaciones muy sospechosas con alguien que no sabremos quién es hasta el final. También alterna el presente con el pasado, dónde iremos conociendo a Silvia en primera persona hasta momentos antes de desaparecer.
La verdad que a veces pensé: "Alex hija de mi vida, que te vas a meter en líos". Ella tenía que sacar su vena periodística y no parar de indagar hasta descubrir la verdad.
Me ha parecido una mujer bastante fuerte e impulsiva.
Leer este libro ha sido un enganche, lo leí en dos días, terminaba un capítulo y necesitaba saber qué iba a pasar en el siguiente.
Sospeché creo que de casi todo el mundo y solo empecé a imaginar quien era el culpable cuando a penas quedaban unas 50 páginas más menos.
Acabé pillando cariño no solo a Álex, también a varias personas del pueblo y entendí muchos comportamientos.
El final del libro me ha parecido muy acertado y me ha dejado bastante satisfecha.
Recomiendo mucho esta lectura si estás empezando a leer #thriller porque la pluma de la autora invita a ello y si eres lector/a habitual de thriller yo creo que también te puede gustar mucho porque creo que mantiene muy bien la incógnita hasta final del libro.

El libro es de lectura rápida y facilita .
Una chica desaparece y en el primer aniversario de su desaparición mandan a cubrir el reportaje a una periodista para que cubra la noticia , esta periodista es Alex , será la encargada de contar la historia de Silvia y desvelarnos que es lo que ocurrió el día de su desaparición .No he llegado a empatizar con este personaje en ningún momento . Todos los personajes son muy planos y desde mi punto de vista la historia no está muy desarrollada. Hay momentos en el libro que incita a seguir leyendo y querer saber más , pero no es de lo mejor que he leído . Creo que el final con giros inesperados aunque algo predecibles esta como sacado de la manga y de manera apresurada . Es entretenido pero es un libro que para mi pasará indiferente.

Libro que recomiendo y que te atrapa desde la primera página, y que no podrás dejar de leer.

Lorena Franco ha crecido como autora y se ha convertido en la reina del thriller.
La novela desarrolla una historia en la que no se sabe qué pasó realmente con Silvia Blanch y pondrá en jaque al lector en todo momento colocando prácticamente a todos los personajes como posibles responsables de la desaparición de Silvia.
Además, sitúa la novela en un pueblo de Barcelona llamado Montseny en el que la condiciones atmosféricas son las ideales para el desarrollo de un thriller, lugar idílico para ponernos en tensión en todo momento.

Me ha parecido una trama brillante y muy bien hilada.

La novela tiene intriga de principio a fin y un poquito de romance. Descripciones las justas y necesarias, no excesivas del tipo de aburrir al lector.

Novela 100% recomendada si buscas una lectura entretenida, bien escrita y que se lee prácticamente del tirón.
No defrauda.

Esta ha sido una lectura imprevista que he disfrutado muchísimo. La pluma de Lorena Franco te mantiene en vilo hasta el final. Esta es una obra llena de misterio, dudas e intriga que no deja indiferente

Alejandra Duarte, una joven periodista que trabajada para un periódico local de Barcelona debe ir a Montseny para entrevistar a los padres de Silvia Blanch con motivo del articulo que escribirá sobre el primer aniversario de su desaparición. Silvia, aparentemente buena chica, con un prometedor trabajado en la ciudad condal, feliz con su pareja, un día desaparece sin dejar rastro, a excepción de su coche al lado de la carretera de camino al pueblo. Álex solo tiene que realizar la entrevista y escribir el articulo correspondiente...pero por alguna razón cree podrá realizar la investigación que la propia policía no supo realizar llegando a rozar la obsesión por el caso, y las personas implicadas.

Esta es la premisa que nos presenta la autora, un thriller de capitulos cortos, contados en primera persona por varios personajes que se van alternando en varías épocas, (días previos a la desaparición, el aniversario, actualidad..... )y muy bien hilados entre si, que nos mantienen pegados al libro haciendo casi q lo devores, bajo la premisa de que "todos mienten ". Además de Álex, tenemos una serie de personajes que no sabes por donde pillar y de los que es fácil sospechar y luego defenderlos, para luego volver a sospechar de ellos en el siguiente capitulo y que nos llevan a plantearnos multitud de teorías de lo que pudo pasar, todo ello narrado de forma que no pierdas la tensión ni un solo momento y lo único que quieras es averiguar qué le pasó a Silvia. Cabe destacar también el escenario donde ocurre todo y esa sensación de estar siendo siempre observado por alguien y que consigue dar más tensión al asunto.

Desde luego, a mí me encantó y creo que investigaré más a la autora. Y vosotros, queréis saber que pasó realmente con Silvia Blanch?

Será casualidad, pero en lo que va de año van ya tres novelas sobre personas desaparecidas los que llevo. El último verano de Silvia Blanch entra en la categoría de joven desaparecida sin dejar rastro (el otro apartado sería el de niños).
Distintos personajes van narrando en primera persona los sucesos, incluida la propia Silvia, partiendo desde antes de su desaparición hasta, ya evidentemente muy al final de la novela, el momento de la misma.

La que más interviene es Alex, auténtica protagonista de la novela, muy por encima de la propia Silvia. Una periodista que ve tras publicar su artículo la posibilidad de hacer su sueño realidad.

Una novela que está ambientada en el Montseny, un lugar y un paisaje del que se enamora Alex y cuyo amor transmite al lector. Un lugar tranquilo y pequeño, en el que todos saben de todos por más que muchos tengan muchos secretos que ocultar. Un lugar en el que como dice uno de los personajes, todos mienten

Una idea recorre de una punta a otra esta novela: hay sucesos de los que ninguno estamos libres.


Ha escrito Lorena Franco un thriller que se lee con interés, con unos personajes con una personalidad compleja que en todo momento nos tienen en vilo, porque cualquiera puede ser el responsable de la desaparición o haber contribuido a la misma. Eso suponiendo, que es algo con lo que la autora mantiene la intriga que realmente haya desaparecido.
Ese coche del que vio bajar entre la lluvia a Silvia acompañada de un hombre, sin signos de violencia y sin que haya aparecido ningún cuerpo, unido a los hechos que Silvia nos va contando, llevan a pensar en que su desaparición puede ser voluntaria.

Un poco le baja la nota a la novela su final, que sin ser malo (no voy a entrar en detalles para no destripar la novela a nadie) parece un poco tramposo, en el sentido de que pocas o ninguna pista a dado la autora para que pudiéramos llegar hasta él.
Con todo, una novela que se lee con mucha fluidez e interés. Y eso, en los tiempos que corren donde la mente se nos va con demasiada frecuencia y la capacidad de concentración en muchos momentos está bajo mínimo, es ya mucho decir.
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