Libro corto, ácido y muy divertido, con ciertos momentos de delirio absurdo, en el que vamos a ver las peripecias de la protagonista (una mujer europea), en una empresa japonesa. La autora plasma muy bien esa dualidad, sobre todo en el trabajo que supone la mentalidad nipona respecto de la de otros muchos países (en España seguro), de la que ya nos hacemos una idea, pero que nos acerca de forma cómica y crítica. Si bien las escenas están llevadas al dramatismo y al extremo en muchas ocasiones, es una buena puerta de entrada para quien tenga curiosidad sobre la sociedad japonesa, aunque este libro está centrado en la relación que mantienen en el trabajo, pues la historia se desarrolla casi en su totalidad en una oficina, y nos trae a una mujer que no tiene vida personal, pues su vida gira entorno al trabajo y a su total disponibilidad física y mental con el, así como su compromiso con el mismo, lo que puede extrapolarse a la realidad en muchas ocasiones. Por otra parte, este compromiso que parece que tiene la protagonista parece no verse reflejado en los resultados que obtiene, ni verse reconocido por sus superiores, teniendo que pasar por una jerarquía y una burocracia muy marcadas, curiosamente una mujer va a ser su talón de Aquiles, la única en la oficina aparte de ella, lo que nos da una idea de la crítica subliminal que pretende hacer la autora respecto del papel que tiene en muchos casos la mujer, y su rol en la sociedad. Libro muy ligero de leer, que puede tener una o varias lecturas dependiendo del análisis o profundidad que se le quieran dar, y que independientemente de si interesa o no el contraste de nuestra cultura con al japonesa, va a ser una lectura muy divertida y entretenida. + Leer más |