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Críticas sobre Los renglones torcidos de Dios (116)
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Naniilectora
 25 November 2022
No sé como comenzar a dar mi opinión sobre este libro porque me dejó trastocada la mente 😝, el autor incluso ingresó en un psiquiátrico antes de escribir la novela 😱 y se nota muchísimo en el libro, tenéis que leerlo.

La trama nos hará dudar todo el libro ¿es Alice una enferma mental paranoica o por lo contrario entró por su propio píe para averiguar un caso como detective? 🤔
A través de Alice conocemos las profundidades de un psiquiátrico, lo complicado que es descifrar la mente, las patologías y sobre todo como llegar a curarlas.
He sentido pena, rabia, dolor, angustia con está historia porque al igual que Alice le tomé mucho cariño a Ignacio Urquieta (el fóbico al agua), Alicia (la niña oscilante), Carolo Bocanegra (el falso mutista), etc… y creí estar dentro de esta historia.
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Celia_0504
 21 November 2022
“Dios escribe derecho con renglones torcidos”.

Me ha resultado muy difícil escribir esta reseña. Y no solo por lo descolocada que me ha dejado este libro. Que también. Pero más bien se ha debido a que “Los Renglones Torcidos de Dios” es un libro muy valorado entre quienes lo han leído, la mayoría de opiniones sobre él que he leído son muy positivas. Pero a mi, aunque me ha gustado… no me ha parecido lo que esperaba encontrarme. Una vez más (por qué no es la primera vez que me pasa) creo que las altas expectativas y la fama de la propia novela me han jugado muy mala pasada. Lo que es innegable es que en 1979, Torcuato Luca de Tena escribió una novela inclasificable, de esas que no dejan frio o indiferente a nadie. Y creo que ese es un piropo que se le puede poner a pocos libros y que dice mucho de su creador.

No soy muy quisquillosa cuando leo reseñas, y mucho menos cuando las hago, pero si hay algo que no me gusta mucha es que en ellas aparezca la manida frase de que para conocer el argumento de tal o cual libro lo mejor es leerlo y dejar que el texto te sorprenda mientras lo vas descubriendo. No digo que te destripen toda la trama, faltaría menos, pero ese comentario siempre me ha parecido muy carente de imaginación y que demuestra pocas ganas de esforzarse por describir el libro. Pero llego “Los Renglones Torcidos de Dios” para callarme la boca porque ahora me toca usar a mi la frasecita de las narices. No sé si será porque he cogido el libro sin saber mucho sobre él, pero realmente creo que estamos ante una novela que cuanto menos sepa sobre ella al abrirla por primera vez mejor. Así es más fácil que todo lo que pasa entre sus páginas pueda sorprenderte. Baste decir que nuestra historia empieza con la llegada de una mujer, Alice Gould, a un manicomio en plena Castilla. Se supone que Alice ha sido ingresada debido a un peligroso problema mental. Pero, según ella, se las ha ingeniado para meterse en el lugar en calidad de detective infiltrada para desentrañar un asesinato que tuvo lugar hace unos años en Madrid.

A partir de ahí Luca de Tena extenderá una red en la que el lector acabara irremediablemente atrapado. Todo su libro es un juego, un juego en el que el lector se verá obligado a decidir sobre qué opinión le merece la protagonista. Y todo ello aderezado con una trama detectives y con un fino y lucido tratado sobre la situación de los manicomios y la locura humana. En ese sentido es un libro que a veces se hace muy difícil de leer. Por la crudeza de muchas de las cosas que trata, al hablar explícitamente de enfermedades mentales, suicidios, autolesiones e incontinencia física o sexual. En ese respecto encontramos a un autor muy concienciado con la situación que en la España de los 70-80 se vivían en los manicomios, siendo una parte muy importante e interesante de la trama la disputa que hay dentro del propio centro sobre dos formas de entender la psiquiatría y el trato hacia los pacientes. Luca de Tena presenta a los pacientes que pueblan el centro donde acaba ingresada Alice desde una perspectiva profundamente humana, empatizando y compadeciéndose de ellos y de su situación, viéndolos como seres humanos dignos ya no solo de compasión, sino de ser tratados con cuidado y consideración. Y también hace de su libro un canto a la labor dura, ingrata y poco considerada de tantos médicos, psiquiatras, psicólogos , enfermeros y cuidadores que hacen ímprobos esfuerzos por cuidar de todos estos “renglones torcidos de Dios”, de hacer que tengan una buena calidad de vida y que se encuentren bien tratados y atendidos. No en vano ( y esa es una de las cosas que más me ha llamado la atención de toda la obra) el propio Torcuato Luca de Tena ingresó por voluntad propia en un manicomio para documentarse para su libro, fingiendo tener una dolencia mental. Esto le da a todo lo escrito una patina de realismo que resulta muy interesante, y facilita que el lector conecte con todo lo que se cuenta.ademas de que se nota que ayuda a crear una ambientación muy conseguida y que introduce a quien lee en ese microcosmos que supone el manicomio. La situación de su protagonista permite a Luca de Tena no solo hacer disquisiciones de corte filosófico, humano y moral. También le permite explayarse sobre como era la vida para los residentes y los trabajadores de los manicomios, sobre las dificultades y problemas que encontraban en su día a día, y abogar por que se mejorasen las condiciones de dichos lugares y el trato psiquiátrico y humano ofertado a sus pacientes y habitantes.

Después de leer esta novela solo puedes alegarte de que las condiciones hayan mejorado en los centros psiquiátricos en la actualidad. Desde luego el cambio de paradigma medico se nota no solo en eso. El propio escritor usa una terminología y unos nombres que ya han quedado muy desfasados, y que en la actualidad serian vistos con bastante suspicacia ( cuantos menos) si se usasen. Pero bueno, al fin de al cabo el libro ya tiene sus añitos y es hijo de su tiempo. Hay que juzgar a las obras según el periodo histórico en que surgieron, sino muchas no pasarían el corte de lo aceptable en estos tiempos que vivimos ahora.

Desde luego , no se puede negar que los años le han pasado factura a la novela. Y no solo en el aspecto antes mencionado. La propia prosa de Luca de Tena tiene un sabor muy añejo e incluso muy pesado y barroco, si bien es ,también, muy directa, sin que por ello no deje de ser muy rica y compleja. Pero aún así muchos diálogos me han parecido muy poco naturales y creíbles, me dejaban la sensación de que estaban demasiado preparados y de que eran muy impostados. Lo que mas he valorado de la narrativa de la novela es la manera en que, desde el primer momento, lleva de la mano al lector y le guía por el laberinto humano, moral y mental que es su trabajo. No solo se trata de que logre que el lector no se pierda entre los mil y un giros que pueden despistarle y que cambian constantemente las tornas dentro de la novela. Es también el hecho de que logra que le resulten conocidos y perfectamente diferenciables unos de otros, algo de agradecer debido a la gran cantidad de personajes que aparecen a lo largo del texto. Y también por la fuerza que tiene el propio argumento y la manera en que el autor juega con el lector por medio del personaje de Alicia. Desde el minuto cero hasta el ultimo punto de la novela uno no sabe que pensar de ella, ¿esta loca o, por el contrario, está cuerda y es más lista que nadie? Ese enigma mantiene totalmente en vilo durante toda la lectura, siendo una de sus fuerzas motoras al ser una de las heridas que tira al lector para continuar con el libro.

Desde luego que “Los Renglones Torcidos de tiene muchos puntos a su favor,y que a mi me han gustado. Pero aún así, siento decir que ha sido una lectura que no ha terminado de convencerme del todo. Y como he dicho más arriba, eso era algo con lo que no contaba. Estaba convencida de que iba a resultarme una obra maestra. Pero para mi a tenido un ritmo muy irregular que me ha sacado muchas veces de lo que tenia delante. Y es que en muchos momentos me gustaba lo que estaba leyendo, donde la atmósfera de duda y tensión que el autor manejaba y los giros de guión y los descubrimientos que se hacían en la historia me tenían muy enganchada y me resultaban muy disfrutables. Pero estos momentos se han alternado con partes en las que la lectura se me ha hecho repetitiva, aburrida y terriblemente densa. No es un libro fácil de leer, hay muchas situaciones angustiosas y duras, y la prosa de Luca de Tena es resulta a veces muy farragosa de digerir. Y si a esto se suma todas esas partes en lo que es la trama propiamente dicha no avanza y se estanca solo en las descripciones de la vida y las dolencias y actuaciones de pacientes del manicomio, ha hecho que muchas veces no me haya convencido lo que leía y que a medida que avanzaba la trama se me hiciera mas pesada y me diera la sensación de que no avanzaba. Y de ahí que mi interés fuera paulatinamente desvaneciéndose.

Además, acabe muy saturada del personaje de Alice. En muchas ocasiones no me la podía creer, todo lo que hacia o, incluso, pensaba, me parecía muy fantasioso incluso para un personaje cuya cordura esta en tela a de juicio durante absolutamente toda la obra. Es cierto que Alice es una de las cosas que marcan la diferencia de esta novela respecto a otras, y que la incertidumbre que genera el hecho de que este o no loca, y sea realmente un psicopata delirante es algo que intriga, y mucho. Su descripción psicológica está finamente triturada durante las mas de 400 paginas que componen el volumen, de una forma muy nítida y conseguida, de forma que la gran mayoría de sus actuaciones se pueden justificar por su forma de ser. Y tiene. Y por detrás no se puede negar que tiene una historia de fondo muy consistente. El hecho de que las dudas entorno a ella queden sin resolverse al final de la obra me ha parecido todo un puntazo, ya que Luca de Tena logra que esto funcione sin que resulte frustrante para el lector y que casa con la atmósfera recrea a lo largo de la novela . Pero a la vez me ha sido imposible tragarme la forma en que logra meterse en el bolsillo a la inmensa mayoría (que no a todos, y eso es importante) , y acaba representada como una suerte de Sherlock Holmes en versión femenina, siendo mas inteligente, bella, elegante y compasiva que la inmensa mayoría del resto de caracteres. Esa idealización que ella puede tener de si misma es comprensible por su perfil psicológico, pero que otros personajes se la crean y la asuman totalmente hasta limites insospechados me ha escamado mucho y me ha parecido incomprensible porque me costaba verla como algo que pudiera darse en la vida real.

De todas maneras es un personaje muy bien desarrollado y caracterizado, algo que se extiende también al resto de pacientes y profesionales del centro psiquiátrico. Todos resultan bastante creíbles y tienen, de alguna manera, su peso e importancia dentro de la historia. Aunque el personaje de Ignacio Urquieta me ha decepcionado un poco. Parecía un personaje que prometía, con una presentación dentro del libro bastante potente gracias al dialogo que cruza por primera vez con Alice, con la cual desarrolla una amistad muy interesante y que prometía mucho. Y todo esto con una dolencia detrás que era muy sorprendente por lo diferente que resultaba y por lo bien llevada que estaba, ya que todo lo que había detrás de ella estaba muy bien explicado y resultaba muy creíble. Pero todo ese trabajo de fondo de personaje para mi se ha quedado en nada. al final Ignacio no pincha ni corta dentro de lo que es la trama, su historia se cierra de una forma que bien llevada está, pero que no deja su huella dentro de la historia. Una pena, porque, como no he parado de decir en todo este párrafo, prometía.

En resumidas cuentas, “Los Renglones Torcidos de Dios” me ha parecido una novela que tiene muchas cosas positivas y muy buenas pero que no me ha terminado de convencer. Me esperaba poder ponerle cinco estrellas, y le he acabado por poner 3,8. No es mala puntuación, pero me esperaba más de esta obra. Los personajes, la ambientación, el trasfondo y el juego que tiene como pieza central a su protagonista están muy conseguidos, además de que es una novela que se puede adscribir dentro de varios géneros. Luca de Tena lleva muy bien la tensión y el misterio detectivesco junto a la crítica a los cuidados a la salud mental y a las diferentes formas de entenderlos durante la época en que escribió su obra. Pero aún así, para mí esta novela no termina de despegar debido a lo densa que se va volviendo según va avanzando. Tanto que en buena parte de su tramo central sentía que no avanzaba absolutamente nada con esta lectura. Eso es lo que me ha decepcionado de ella. Porque aunque es una novela desfasa en muchos aspectos, no se puede negar la gran labor como narrador de su autor y su compromiso a la hora de hablar sobre la locura y como es la vida dentro de un manicomio y a reconocer la labor y dedicación de sus trabajadores.
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caciquem
 18 November 2022
La protagonista, Alice Gould, es capaz de mantenernos enganchados de principio a fin. A través de su personalidad el lector se introduce en la propia novela, dudando por momentos de lo que puede ser real o no, te creas una opinión que a medida que la novela avanza te la cuestionas.
Sin duda los diálogos , las descripciones de lugares, personajes y experiencias están tan logradas que ves la realidad que el autor quiere plasmar.
Terminé la novela y aún me cuestionaba cosas.
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cvcalabor
 17 November 2022
Empezar diciendo que hay que tener en cuenta que el trato a las personas mentales es el dado en los años que fue escrito el libro, no se puede juzgar como si estuviese escrito en 2020.

Partiendo de esa base, decir que iba con las expectativas tan altas que me ha resultado meh. Tampoco estoy acostumbrada a leer en un castellano "culto" por tanto se me ha hecho bien denso.

Aún así me ha gustado la historia, la evolución de los personajes y como te hace dudar todo el rato de si realmente es verdad que está enferma o no.

Creo que está muy bien hilado y pensado, y toda la información que da respecto a las enfermedades me parece muy interesante.
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5an
 16 November 2022
Ahora entiendo por qué este libro es uno de esos que la gente recomienda cuando lo lee. Me ha fascinado. Trata del internamiento de la detective Alice Gould en un centro psiquiátrico. Desde el principio del libro se nos cuenta que este internamiento se hace de manera voluntaria, pero fingiendo una enfermedad mental, teniendo como cómplices tanto al doctor que recomienda su ingreso como el propio director del centro, y todo ello se hace para conseguir averiguar quién es el asesino del padre de su cliente.
Durante todo el libro iremos dudando constantemente de las palabras de Alice y de su salud mental, dudando constantemente sobre si es detective realmente y dice la verdad o si, al contrario, está enferma de verdad. Todo ello rodeado de una variedad increíble de personajes, con sus propios diagnósticos que quedan perfectamente reflejados, con una serie de términos de psicología que son super interesantes y muy bien enlazados.
Me ha parecido sublime. El único pero que le pongo a esta lectura es no haberlo leído antes.
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alpolorenedo
 13 November 2022
Los renglones torcidos de Dios era uno de esos pendientes de años ha, siempre lo quise leer porque las críticas eran positivas y además porque uno de los pocos libros que he releído es "Edad prohibida", también de Torcuato Luca de Tena, un título que leí con unos 16 años y me impresionó, quizás porque la "edad prohibida" de los protagonistas es esa edad que tenía yo en ese momento, edad que está marcada por las sensaciones exageradas y las primeras veces, posteriormente como digo lo releí precisamente para ver como cambiaba la percepción con los años, también me gustó pero no me marcó como entonces.
Ahora y al hilo de la nueva propuesta cinematográfica tuve la fortuna de que me regalaran un ejemplar y ya no lo dejé pasar, mejor leerlo antes de ver la película.

En el inicio del libro nos encontramos con una nota aclaratoria donde nos indica que el libro es el resultado de la visita por parte del autor de numerosos manicomios, que entonces por ese momento estaban pasando a denominarse hospitales psiquiátricos, para posteriormente ingresar en uno de ellos simulando una psicosis depresiva y así poder recopilar las vivencias y personajes en los que poder dar forma a lo que posteriormente sería su obra.

Esta premisa sin duda es un acicate para el lector, ya que una experiencia de este tipo tuvo que marcar en gran manera al autor que entiendo que se jugó el tipo al ingresar en esta época en una institución de este tipo, donde sabías cuando entrabas pero lo de salir podía embarrarse a cualquier giro del destino. Creo que era Santa Teresa de Jesús la que decía que Dios escribe derecho con renglones torcidos, que no es otra cosa que a quien tiene fe no le hace falta ver las cosas, y según el autor los errores de la naturaleza que se pueden observar en estos centros son los que intentan enderezar los medícos y el personal al servicio de los desaventurados que bogan por allí, precisamente a este personal el autor en la entrada agradece la labor ejercida por todos ellos, una tarea encomiable en lo que denomina "pavorosa realidad" y a la que no se ha prestado la atención debida.

Con una narración en 3ª persona y con un estilo antiguo y clásico , no hay que olvidar que leemos una obra escrita en el año 1979, tendremos que acostumbrarnos al uso del lenguaje algo más culto de antes pero una vez cogido el tono de la novela fluirá sin ningún tipo de problema y con el añadido de que este propio uso de la palabra dota a la misma de un ambiente que envuelve al lector de lo siniestro del entorno., y nada mejor que un ejemplo de como narra:
"Alicia deseaba dormir para estar lúcida y despejada a la mañana siguiente. Mas entre el querer y el poder media un abismo. Estaba físicamente cansada, pero su mente no cesaba un punto de maquinar y ese galán esquivo que era el descanso parecía haber renunciado definitivamente a visitarla. Cuando al fin consiguió adormecerse tuvo un sueño tan profundo cuanto parlanchín desasosegado."
En seguida conoceremos a la que es la protagonista de la obra, Alice Gould, la cual ingresa en el "sanatorio" de forma voluntaria, para investigar desde dentro, y por encargo de un cliente (ella es detective), un caso complicado. Hasta aquí todo normal, sino fuese porque los médicos tienen otra versión, eso es lo que piensa ella pero en realidad ha ingresado porque está obsesionada con matar a su marido que es quien la ingresa por intentar envenenarlo.
¿no me digas que no pinta interesante?
A partir de este interesante inicio tendremos toda una obra que engancha al lector de una manera trepidante ya que para empezar la protagonista es de esas mentes brillantes que son capaces de rebatir y manipular todo lo que hay a su alrededor, incluso a los médicos más expertos, por lo que los numerosos diálogos que se intercalan en la novela me han parecido brillantes y de una lucidez digna de resaltar, estos mismos dan a la obra un estilo muy teatral.

De la misma forma hay que destacar la cantidad de personajes que irán desfilando por la novela, tanto en el equipo médico y del personal del centro psiquiátrico, como un "carromato de hombres fenómeno" que forman todos los pacientes del mismo, cada uno con sus "manías" y "locuras".

El estilo de enredo y diálogos envueltos en razonamientos para desvelar entuertos y misterios me ha recordado a las novelas de Agatha Christie.

Los capítulos se distribuyen de la A a la Z, como intentando poner un poco de orden en el caos de la convivencia del centro en el que Alice tienen que intentar mantener su cordura.
CONCLUSIÓN:

Los renglones torcidos de Dios es un clásico de esos que hay que leer, no solo para descubrir el estilo del autor y del momento y que me ha recordado algún libro de la época de Jesús Torbado, sino porque la obra para mí es tremendamente inteligente y encierra varios trasfondos:

Hace un alegato a la inteligencia muy maltratada en la sociedad actual, y es que no hay que tener miedo a decir que hay personas que tienen esa cualidad y otras que están en el punto opuesto, y precisamente a esas mentes hay que estimularlas para que pongan sus cualidades al servicio de la sociedad. (En la obra Alice llegaba a creerse la madre protectora de los pacientes).

También se puede observar el valor de la palabra y de la lealtad, incluso dentro de un marco donde en principio no se esperaría nada de esto.

Otro sería la manera en la que la sociedad arregla esos renglones torcidos de Dios, apartándolos y escondiéndolos de la sociedad. Hoy ya no se les aparta pero se les deja vagar libremente como sino pudiese hacerse nada, medida una vez más que consiste en mirar hacia otro lado y dejando solos a los pacientes, familiares y vecinos que conviven con estos trastornos y sus consecuencias.

En definitiva una lectura que he disfrutado mucho tanto por los personajes, como por la ambientación arropada por unos diálogos brillantes mezclados con una narración culta e inteligente que aporta ambiente a la obra que te traslada sin querer a los años 70 de una España muy diferente a pesar de no haber pasado tanto tiempo.




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Saandraa_gaarcia
 01 November 2022
Hacía muchos años que tenía este libro por leer. Cierto es que lo compré en digital y se me hacía un poco cuesta arriba leerlo así. Hace unos meses lo encontré de segunda mano y no dudé en comprármelo.

De entrada es un libro que llama mucho la atención, que tiene una sinopsis que te atrae, pero a mi gusto, no ha sido tanto como esperaba. Me ha gustado como está escrito, me han gustado mucho los personajes principales y toda la atmósfera que crea el autor en ese centro donde se centra la trama, pero a ratos se me hizo un poco plomo. Hay ciertas partes que para mi gusto se podía haber ahorrado. Tanto así que llegué al final un poco por acabarlo, pero sin mucho interés.

Es una pena, pero estas cosas pasan. Creo que un libro un poco sobrevalorado. Me gustaría igualmente ver la película, seguramente esta contada de una manera que pueda engancharme mucho más que el libro.
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Arquetipa
 27 October 2022
Este es uno de mis libros favoritos y de los pocos que he releído. Algo que me gusta destacar es que, para mí, tiene de los mejores diálogos de que he leído. Alice Gould es mi personaje favorito de la literatura. Los personajes son geniales.
Dato. El autor internó voluntariamente en un psiquiátrico para escribir esta historia.
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Letrasdeluz7
 27 October 2022
Alice Gould de Almenara ingresa en un sanatorio mental no por estar enferma, sino para investigar el asesinato del padre de su cliente, ya que ella es detective privada. Esto solo lo saben su cliente y el director del sanatorio, pues para el resto del mundo es Alicia de Almenara y padece un trastorno psicológico que la ha llevado a intentar envenenar a su marido en varias ocasiones, he ahí la causa de su ingreso.

Una vez en el sanatorio, Alice observa a todos y cada uno de los internados y se encuentra con infinidad de trastornos y enfermedades mentales; unos usuarios están más afectados, otros menos y otros mucho pero con apariencia de sanos. Alice no pierde detalle sin olvidar que su misión es averiguar quién es el asesino del padre de su cliente.

Conforme avanza la trama, la inteligencia de Alice queda patente pero también la duda de si realmente está sana y «secuestrada legalmente» o es una paranoica que se cree detective privada y en realidad nada de eso es real y está muy enferma.

Llevaba años queriendo leer este libro pero no ha sido hasta ahora que han hecho la adaptación en cine cuando le he dado la oportunidad y de verdad os digo que se cuela entre mis mejores lecturas ya no solo de este año, sino de toda mi vida. Para escribir la novela el autor ingresó de forma voluntaria en un hospital psiquiátrico fingiendo una psicosis depresiva, por lo que convivió con los enfermos mentales como uno más. Esto hizo que dotara a sus personajes de las características de las personas a las que conoció y que profundizara en cada trastorno.

Teniendo en cuenta que la obra tiene más de cuarenta años y hay vocablos y expresiones que ya no se usan en el ámbito psiquiátrico, opino que Los renglones torcidos de Dios es una auténtica obra de arte en todos los aspectos. La historia de Alice me ha mantenido en vilo durante toda la trama, pero la profundidad con la que se habla de las enfermedades mentales me ha hecho no querer despegar los ojos de las páginas.

También invita a la reflexión, ya que todavía existen muchos tabúes en torno a la salud mental. En el libro se trata a los pacientes como lo que son, seres humanos con sentimientos, emociones y dignidad, y sobre todo, con mucho cariño y empatía. Como dice el autor en una parte del libro, «la verdadera locura quizá no sea otra cosa que la sabiduría misma que, cansada de descubrir las vergüenzas del mundo, ha tomado la inteligente resolución de volverse loca».

Ahora me da miedo ver la película por si no cumple mis expectativas, ya que el libro ha dejado el listón muy alto.

No dejéis de leer este maravilloso clásico del siglo XX si no lo habéis hecho aún.
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conb_debarbara
 21 October 2022
Alicie Gould es una mujer adinerada, investigadora de profesión. Cuando un cliente le pide que encuentre al asesino de su padre, se ve obligada a internarse en un psiquiátrico para encontrarlo. Esta es su versión. La de los médicos es otra. Alice sufre de una terrible paranoia que la ha llevado a envenenar a su marido hasta en tres ocasiones. La verdad y la mentira nunca han estado tan cerca.

Antes de nada cabe mencionar que es una obra del año 1979, con lo cual nos encontraremos con una narración muy distante de la moda actual. El autor visitó y se internó con pacientes para comprenderlos mejor. Esto da lugar a una obra muy rica en descripciones y explicaciones con un marcado rigor científico. Así como de una gran variedad de enfermos. Es un golpe de realidad que nos permite aprender mucho de nuestra mente y de sus afectaciones. Una obra interesantísima si sentís curiosidad por el tema.

Entrando en detalle, su estilo es muy recargado. Es una obra muy rica en vocabulario, pero que sabe atrapar al lector contemporáneo. Los hechos nos atrapan precisamente por el tabú de lo que se nos está contando. Es como mirar por la ventana de un psiquiátrico. La guinda del pastel es la increíble Alice Gould, un personaje inigualable. Cuando parece débil, se despliega como una mujer astuta en un final de infarto.

En resumen, una obra muy especial, que no me ha decepcionado en absoluto. Tengo que advertiros que se debe hacer una lectura concienzuda, entendiendo el momento en el que fue escrita y a sabiendas de que será densa, pero os aseguro que merece la pena.

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