La hora de las gaviotas

Un asesinato. Un pueblo dividido por una tradición. Vecinos enfrentados. Una sucesión de heridas sin cicatrizar, venganzas, ajustes de cuentas, recelos, sospechas con Hondarribia al fondo y con dosis de rivalidades policiales, violencia machista, alarma social, la presión de los medios de comunicación, el tráfico de estupefacientes. La ertzaina Ane Cestero, de traumática infancia y escasa paciencia, es la protagonista de esta novela, que muestra un buen manejo de la intriga gracias a los recurrentes puntos de giro y a los capítulos cortos de final con intríngulis. a partir de la mitad de la novela, hay los suficientes cabos sueltos para que el lector no deje de leer hasta el final gracias a ese polivalente juego de apariencias engañosas y de naipes marcados que permanece página tras página. de igual modo, Martín despliegue un ramillete de personajes bien perfilados con sus sombras y sus luces interiores, con sus debilidades y sus fortalezas y utiliza el diálogo no solo para perfilarlos, sino también para que avance la acción y la lectura se agilice, por lo que su empleo es un acierto para el libro. Su final sorprendente y la historia paralela del ertzaina Madrazo completan la guinda del pastel literario, porque hay momentos para la lágrima, para la tensión, para los nervios, para la emoción...
El escritor demuestra un dominio de las técnicas de la novela policíaca y una capacidad para lograr una novela, que pide a gritos una tvmovie. Lástima de algunos deslices, como “a los miles de personas” (p. 19), frases mejorables caso de “como haya habido partido y el River haya perdido” (p. 53), que no empañan el buen resultado final. Ibon Martín es al País Vasco lo que Domingo Villar es a Galicia y tiene futuro en el complejo mundo editorial.

De nuevo se reúne la Unidad especial de Homicidios de impacto, en esta ocasión en Hondarribia y al igual que en el primer libro de esta serie empieza de forma impactante. Hay cambios en el equipo, un nuevo integrante y no esta Madrazo, aunque este aparece con otra trama más personal que vamos conociendo poco a poco a lo largo del libro.
Me ha parecido una historia trepidante, nadie es lo que parece, van apareciendo sospechosos y sucesos que aparentemente no tienen conexión, la trama esta muy bien hilada y enredada dicho sea de paso, tenemos asesinatos, incendios, desapariciones, sabotajes varios, narcotraficantes, trata de blancas y explotación sexual entre otras cosas.
En este libro me ha dado la impresión de que se muestra a los protagonistas más íntimamente, más reales con sus emociones y vulnerabilidades, hay temas que les toca muy de lleno como en el caso de Cesteros con el maltrato y la vemos muy vulnerable por momentos.
Se nota la buena documentación e información en temas como la pesca, la recogida de algas, el txakoli, las costumbres en general de la zona y sus localizaciones, son lugares que dan ganas de visitar.
Hay escenas que me esperaba no se muy bien el motivo y otras que me han sorprendido bastante, solamente he encontrado algo que me hizo dudar casi al final de la historia y espero despejar dudas releyendo.
Los personajes me encantan, Cestero en su linea, de mujer fuerte, decidida, no piensa demasiado las consecuencias, ella actúa por instinto, tiene dudas y en ocasiones se encuentra algo perdida, pero no se da por vencida nunca. Julia es muy inteligente, es un pilar importante del equipo y gracias a ella se descubren muchas cosas, espero que encuentre lo que busca en el siguiente libro. Aitor también es otro pilar para Cestero, ella confía ciegamente en ellos dos y forman el mejor equipo. Iñaqui es el nuevo, al principio no me caía nada bien, pero al final se integra a la perfección.
Se que la unidad volverá a juntarse pronto, por desgracia suceden crímenes y asesinatos y espero que Madrazo este presente de otra manera más directa y a ver que pasa con todos ellos.
Ha sido todo un acierto leer este libro y lo recomiendo sin dudas, una lectura que os mantendrá en vilo hasta ultima hora, donde su autor juega un poco con nosotros y al final aunque hay muchas tramas, todo queda resuelto a la perfección.

La hora de las gaviotas es la segunda parte de la serie de Ane Cestero, que comenzó con La danza de los tulipanes que tuve ocasión de leer hace algún tiempo (aunque aún no esta la reseña subida en el blog, algo que procuraré solucionar en cuanto pueda), por lo que al ser una segunda parte puede contener SPOILERS de la primera parte.

La hora de las gaviotas comienza con la celebración en el pueblo de Hondarribia de la marcha mixta (que consiste en la participación de un grupo de mujeres en un desfile alternativo al desfile tradicional que solo permite la participación de los hombres), parece todo bastante normal a pesar de las habituales protestas de los defensores de la tradicional, pero todo se torna en tragedia cuando una de las participantes es brutalmente asesinada, todo apunta que el agresor pertenece a los defensores de la tradición, así comienza la investigación por parte del grupo de Cestero, dirigidos por un nuevo jefe debido a la ausencia de Madrazo y con la imposición de un nuevo miembro que ocupará el puesto del fallecido Txema, Iñaki, algo que no gustara nada a Ane.
Una trama que nos dejará muertes, secretos, conflictos, machismo y feminismo extremo.

De este autor como ya os he mencionado había leído anteriormente La danza de los tulipanes, un libro que disfrute muchísimo y que me dejo con ganas de leer algo más de este autor (tengo pendiente la trilogía de Los crímenes del faro) y me he alegrado mucho de poder reencontrarme con los personajes de la danza de los tulipanes, creo que en este libro hemos una gran evolución en el personaje de Cestero, siendo capaz de controlar sus impulsos, también he disfrutado mucho de la trama de Madrazo (espero que tenga más protagonismo en los siguientes libros), también espero que cambie un poco el personaje de Iñaki.
También he disfrutado mucho de la temática en la que ha decidido inspirarse el autor, ya que por desgracia hay muchas muertes (y otras agresiones) por violencia de género, y el peligro que pueden tener el radicalismo extremo.
Sin duda, Ibon Martín se ha convertido en uno de mis autores imprescindibles, ya me conquistó con La danza de los tulipanes, y lo ha vuelto ha conseguir con La hora de los gaviotas, y estoy deseando leer más sobre este autor, os lo recomiendo si os gusta la novela negra y libros protagonizados por mujeres fuertes.
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Desde el momento en que supe que habría nuevo libro de Ibon Martín, y más concretamente protagonizado por Ane Cestero, lo apunté como a leer sí o sí. Tras «La danza de los tulipanes», vuelve a meterse de lleno en un crimen y su investigación en el libro «La hora de las gaviotas».
A veces las expectativas juegan una mala pasada, sin embargo, en esta ocasión no ha sido así. Me he encontrado una historia que me ha atrapado con el paso de las páginas, que fluye, una obra que he disfrutado.

En «La hora de las gaviotas», Ibon Martín nos reencuentra con Ane Cestero, la suboficial al cargo de la investigación en el primer libro, que vuelve con fuerza para hacernos disfrutar de la obra. Ane toma de nuevo las riendas para llevarnos por una trama de asesinatos, crítica, reflexión, fuerza pero sin dejar de lado el suspense y la tensión palpables a lo largo de toda la obra.

Una historia que va variando el ritmo, con un inicio elevado, y tras este mientras se va desarrollando la investigación baja la velocidad hasta ir poco a poco volviéndose más vertiginoso.

Nos vamos a encontrar con situaciones nada esperadas, giros argumentales y varias escenas muy sorprendentes, de las que te dejan maldiciendo al autor. Momentos duros que a la obra le van muy bien, que ayudan a aumentar las sensaciones mientras se lee, independientemente de que nos guste más o menos lo que sucede.

Por otro lado, cuenta con una gran crítica entre sus páginas utilizando un hecho real, ficcionándolo para hacer que todo encaje. Además, nos lo encuadra en un escenario espectacular que ayuda a crear ese ambiente de tensión y suspense, mientras se disfruta de su localización.

La trama inicial se mezcla con una subtrama más pequeña pero que nos acerca a conocer más a un personaje de la obra. El libro es cerrado, la trama tiene un punto y final, sin embargo, seguro que habrá más de Ane Cestero.

Este es el segundo libro de Ibon Martín que leo y seguro que no será el último, además de tener ganas de seguir leyendo novelas protagonizadas por Ane Cestero.

Narración
Utiliza la tercera persona para desarrollar la obra, una narración que se disfruta a lo largo de sus capítulos. Con una extensión corta hace que se lea de forma muy fluida, que las páginas se vayan consumiendo sin darte apenas cuenta.

Con su pluma no solo nos traslada al lugar elegido mediante sus descripciones, sino que consigue crear belleza literaria alternando con momentos más truculentos. Una novela que se lee fácilmente, bien expresada, con diálogos que amenizan la narración, y descripciones adecuadas que no se hacen largas.

Con su crítica, le da un toque más reflexivo a la obra, plasmado una realidad social en ella, no quedándose en lo superficial.

Personajes
Volvemos a ver a Ane Cestero, seguiremos su nueva investigación, así también tendremos de vuelta a su equipo y a sus amigas. En este sentido, nos explicará lo necesario para no perdernos si no hemos leído el libro anterior. Y en caso de haberlo hecho, nos sentiremos de nuevo conectados a ellos y con ganas de conocer sus andanzas.

El personaje de Ane Cestero es acertado y tiene ese «algo» difícil de describir que hace que conectes con él. Una protagonista adecuada para el libro que tenemos entre manos y que viene a subir el nivel de la historia.

Valoración final
El libro «La hora de las gaviotas» de Ibon Martín, me ha resultado una lectura muy entretenida, que me ha gustado bastante, una narración estupenda y sorpresas entre sus páginas. Sin duda, recomendable si te gusta el género o te animas con él.


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Este segundo caso de la suboficial Ane Cestero nos lleva hasta la localidad guipuzcoana de Hondarribia y su comarca, siendo Irún la comisaria que eligen como centro de operaciones, donde se tienen que enfrentar al asesinato de una mujer, Camila, que participaba en el Alarde mixto de esta localidad guipuzcoana con gran cantidad de la población en contra de que las mujeres participen en los desfiles. Después de este hecho, tienen que enfrentarse a varios crímenes más relacionados con el primer asesinato. Así como deben lidiar con el exmarido de Camila, en principio el sospechoso principal de la policía.
En todos los casos que tienen que investigar, amén de otras escenas de la novela, se observa el poso de la intransigencia hacía lo nuevo o diferente y la violencia machista, ya sea física o psicológica, que en mi opinión van unidas, siendo un tema que flota en el ambiente durante toda la obra.
Al igual que ocurre con el paisaje de Hondarribia, Irún, Hendaia y toda la comarca que se convierten en uno de los personajes principales y gran protagonista junto con su flora y su fauna.
Siguiendo con la investigación en curso, Cestero y su equipo de la UHI van avanzando en la resolución de los casos relacionados con el Alarde mientras van saliendo a la luz las rencillas que todos los pueblos esconden. Además Cestero tiene que hacer frente a las envidias de otros policías por ser ella quien lidera la Unidad de Homicidios de Impacto de la Ertzanintza y no un hombre de más graduación. También se verá coartada por un nuevo superior que es más político que policía, y el cual le ha colado un chivato en el grupo.
Después de mucho pelear también descubren una red de trata de personas que pasaba desapercibida bajo el negocio de la pesca y con el paraguas de los respetables miembros que formaban parte de ella. Ese paraguas también esconde tráfico de drogas. Todo este tema resulta una denuncia social acerca de los más horrendos crímenes y delitos que unas buenas relaciones sociales pueden ocultar. Además de poner sobre la mesa el grave problema de los mandos policiales sin vocación que están más pendientes e interesados en salir en la foto, cual político, y ponerse medallas que de ayudar en la resolución efectiva de los casos. Juntando todo esto a la labor que ejerce la prensa, generalmente excelente, siempre necesaria, pero que también tiene sus tintes sensacionalistas que perjudican en ocasiones el trabajo de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado y de las Comunidades Autónomas por unos cuantos espectadores, lectores u oyentes.
No quiero olvidar tampoco el viaje que Madrazo, el verdadero jefe de Cestero y padre del UHI, para reconciliar dos mundos, dos vidas, que la Sociedad vasca, y española, tuvo que vivir, sobrevivir y sufrir por la locura y/o intolerancia de unos cuantos.
El final está muy bien hilado, tanto que guarda una sorpresa que pocos podrán intuir.

Tradición y dolor
Se celebra el Alarde de Hondaribia, una fiesta tradicional con muchos años de recorrido que cada año pone encima de la mesa la misma cuestión: la igualdad de la mujer. Este año todo está controlado para que no haya disturbios, la suboficial Ane Cestero es una de las encargadas de proteger a la compañía mixta. Sin embargo, una de las participantes es asesinada en pleno desfile. Un pueblo que se enfrenta, una mujer asesinada por serlo…
Así, vemos que el comienzo de la novela nos sitúa en unas coordenadas muy claras. En una localidad donde hay conflicto severo en cuanto el papel de la mujer, se comete un asesinato que a todas luces es machista. Nos situamos, por tanto, en un thriller, donde nuestra protagonista, Ane Cestero, tendrá que encontrar al asesino del Alarde.
De este modo, entramos en una investigación complicada por la magnitud del delito y por la poca colaboración ciudadana. Nadie en el pueblo ampara a un asesino, eso por supuesto, pero no dejaremos de leer diferentes opiniones sobre si la fallecida se lo merecía o se lo iba buscando. El autor consigue en estas primeras páginas que el lector entienda que más allá de la investigación policial, el problema que encontramos es de base ideológica y que eso, por suerte o por desgracia, determinará las posibilidades y dificultades de la investigación desde un principio.
Temática y humanidad
Tanto es así que el propio lector verá desde un principio que la propia protagonista y su equipo tendrán dificultades para sustraerse de su propio pensamiento. Pero es lógico y es algo que me ha gustado de la creación del autor, presuponer que un investigador por conocer la ley es capaz de sustraerse a su propia ideología y que es capaz de llegar a la objetividad porque es algo así como un santo de la justicia es ridículo.
Gracias a esta humanidad que encontramos en todos los personajes, el autor nos ofrece a parte de la investigación, conflictos que podemos encontrar hoy en día a nuestro alrededor: si se hace o no justicia frente a los maltratados, frente a los delincuentes, la efectividad de la policía, los problemas sobre la lentitud del sistema judicial, etc.
Para ello, encontraremos en la obra un entramado de personajes y líneas de investigación que estará muy bien engarzado y que dará al lector las alas suficientes para empezar a hacer sus propias conjeturas desde el principio. Los diferentes escenarios y el propio habla de los personajes, nos llevarán a configurarnos muy bien la situación y la personalidad de cada uno de ellos.
Tempo pictórico
Otra de las cosas que más me ha sorprendido de la novela es lo tremendamente pictórica que es. A lo que me refiero es que no solo los escenarios están bien descritos, sino que además los colores que encontramos en ellos, las comparaciones que se van haciendo hacen que el lector sepa exactamente a qué se refiere el autor, qué sensación provoca y qué angustia estamos pudiendo sentir como personajes.
Lo cierto es que esto, bajo mi punto de vista siempre, ha sido un arma de doble filo para mí al leer la novela. Por un lado, esto hacía que me introdujera de lleno en la trama, pero por otro lado, sobre todo hacia el final de la novela, sentía que se iba ralentizando un poco. Quiero decir, cuando estás a punto de resolver el caso que todo es frenético, los personajes se mueven de un lado a otro y que lo que mayoritariamente está haciendo el lector es pensar quién es el asesino para saberlo un segundo antes de pasar la página; quizá detenerse en demasía en la tensión no es lo que uno está dispuesto a hacer. Pero, lo dicho, es lo que me ha pasado a mí, quizá otro lector lo disfrute aún más.
Un thriller trepidante, pero algo más
La verdad es que para mí este autor ha sido un descubrimiento. Había visto su obra anterior, La danza de los tulipanes, en redes y no me había fijado mucho, pero después de este acercamiento a su prosa, de seguro que lo volveré a leer. No solo, a nivel de trama, ofrece una investigación y caso bien configurados sino que, además, nos ofrece unos personajes muy bien caracterizados y de cierta profundidad.
A parte de esto, la novela se permite el lujo, y lo hace estupendamente bien, de plantear al lector cuestiones que están en su día a día, y que por suerte o por desgracia no le son ajenas. Así, a la vez que estamos disfrutando de una thriller genial, estamos viendo el reverso de nuestra sociedad, que a veces parece que queda muy oculto. Añadid, una prosa que se sigue muy bien, unos escenarios que ojalá vivir allí y tenéis una lectura que no os defraudará. Espero que os animéis con ella.

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No conocía anteriormente a Ibon Martín ni a Anne Cestero. Me daba miedo leerme un libro cuyos personajes ya tenían anterior desarrollo, pero he podido seguir plácidamente la lectura.

Con La hora de las gaviotas salgo de mi zona de confort, leyendo un thriller de carácter más adulto, y por tanto, más regio. Narrado en tercera persona, cuenta con la perspectiva, entre otras, de Anne y su compañera Julia mientras investigan una serie de crímenes, aparentemente sin relación alguna.
Todo empieza con el Algarve (tuve que buscar sobre la fiesta y me quedé blanca) donde un asesinato enciende una alarma social. A raíz de ésto, más asesinatos lo acompañan. El equipo de investigación deberá averiguar qué pasa.

Martín ha enlazado los casos a la perfección. Acostumbrada a adivinar el resultado antes del final, me ha tenido en vilo y me ha sorprendido mucho.

Sin embargo, me ha fallado la ambientación. Me perdía mucho, pese a describir los paisajes extensamente y el libro poseer un mapa. Me ha desorientado mucho.

Por último, agradecer a Martín su representación de la mujer, del feminismo, y de los problemas a los que nos enfrentamos cada día. Me ha gustado la visión que transmite.

"La hora de las gaviotas" es la segunda novela que leo de Ibon Martín. le conocí por "La danza de los tulipanes", y me encantó su manera de escribir, y además el personaje tan potente que crea con la inspectora Cestero. Así que no dudé en leer su nueva novela en cuanto salió, y seguramente que en breves, me anime con las anteriores, por que me ha dejado con ganas de leer algo más suyo.
En "La hora de las gaviotas" volvemos a tener en activo al grupo UHI, compuesto por Cestero, Julia, Aitor, y el recién llegado Iñaki. En este caso Madrazo no está activo, pero también va a tener su parte dentro de la novela. Una parte que aunque me ha resultado algo fuera de contexto (veremos si para otra novela tiene algún significado), si que me ha gustado y me ha emocionado. Además lo veo como un pequeño homenaje a la ertzaintza y a lo ocurrido con su padre, no se puede decir más por no hacer spoiler, pero cuando llegues al final, lo entenderás.
Ibon Martín nos trae un asesinato en plena fiesta del Alarde. Una fiesta que no conocía, y que me ha resultado muy curiosa. Pero también me parece sorprendente que en pleno Siglo XXI que estamos, aún haya este tipo de situaciones, de lo más machistas, injustas y que, aunque se diga que son tradiciones, no me parece correcto. Seguramente que se pueda llegar a algo intermedio, y que no repercuta en ese desfile con plásticos negros, en los insultos y en la denigración que ello aporta.
Es a raíz de este asesinato cuando el UHI empieza a investigar lo ocurrido y cuando todo se les empieza a complicar, ya que unos misteriosos mensajes y nuevos asesinatos ocurren en Hondarribia.
La trama me ha encantado, he estado en todo momento intentando averiguar quién podía ser el asesino, pero también el motivo, ya que por momentos parece que los asesinatos son al azar pero a la vez que están unidos por algo.
Llega un momento en que empiezas a dudar de casi todos los protagonistas, incluso de algunos ertzainas.
Los personajes están muy bien creados, son muy potentes e incluso los secundarios tienen su parte de renombre dentro de Hondarribia, lo cual hace que tengan peso en la trama y los asesinatos. Que el autor no se ciña sólo a los componentes de la UHI me parece un punto a favor, ya que consigue que nos metamos más de lleno en la historia.
Cestero es muy peculiar, con un carácter muy fuerte, y además insistente, pero lo bueno es que no se rinde ni es fácil que acate ordenes. Aunque nos resulte llamativo, es gracias a ello que la historia avanza y tiene tanto potencial.
Ha habido un momento, con Cestero volviendo a casa, en que me entró angustia por saber que ocurría, el autor aquí consigue ponernos los pelos de punta.
Un final que nos sorprende, a la altura del resto de la novela, pequeños cabos sueltos cobran sentido y toda la trama queda bien cerrada.
En resumen, "La hora de las gaviotas", es un thriller trepidante, y que nos va a dejar con ganas de más.

Hola lectores!📖☕️
Hoy os traigo de Ibon Martín, editado por Paza y Janés.
Decir que este es el primer libro que leo del autor y, aunque aparecen algunas referencias a su obra anterior, se puede leer perfectamente de manera independiente.
Ibon Martín narra esta historia de manera ágil y con una trama rápida, nada más empezar la novela ya se desarrollan los hechos luctuosos. Un atroz crimen sacude las fiestas principales de Hondarribia. Una mujer resulta acuchillada en pleno desfile del Alarde. Y no será la única mujer víctima de este caso que tendrá que resolver la unidad especial con la suboficial Ane Cestero al frente. Un asesino que es capaz de actuar a plena vista de todos y pasar desapercibido.
Capítulos cortos que han conseguido atraparme, con bastantes giros que han hecho muy amena esta lectura en tercera persona. Además el autor consigue fusionar completamente la historia con el paisaje donde se desarrolla, la costa vasca. Hasta el punto que a través de sus páginas he logrado viajar y hasta sentir el olor a mar por momentos.
Por otro lado, las gaviotas también son protagonistas y aparecen por todo el libro. Unos animales maravillosos, pero que en esta historia resultan inquietantes, haciéndome recordar los míticos pájaros de Hitchcock.
A medida que leía fui sacando mis propias conclusiones, aunque el autor ha sabido sorprenderme totalmente con un final que no me esperaba para nada.
En el libro se tratan temas tan delicados como la violencia machista, la explotación sexual o las drogas.
es una novela negra que ha conseguido entretenerme y mantenerme en vilo y enganchada a la lectura, lo que me ha animado a leer el anterior libro del autor .

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¡Qué ganas tenía de leer este libro! ¿Por qué? El anterior #ladanzadelostulipanes me encantó. Recuerdo que me dieron las mil de madrugada porque no quería dejarlo sin descubrir el final, y fue uno de los favoritos del año.

Este 2°que leo del autor, es cierto, que al principio es algo lento, pero rápido coge ritmo.

Para mi gusto, uno de los puntos fuertes es que cuenta con los mismos protagonistas que en el anterior. La suboficial, Ane Cestero, encargada de dirigir el caso junto a sus compañeros, Julia y Aitor, los cuáles ya son parte de su familia. Es un acierto porque ya los conoces y puedes profundizar más y mejor en la trama. Me gusta lo bien definidos que están y la naturalidad con la que les da vida el autor.

Todo parece estar preparado para el desfile anual del Alarde en Hondarribia, cuando alguien da una puñalada mortal a una mujer. A partir de ahí, cunde el pánico entre los habitantes y entra en acción la UHI (unidad de homicidios de impacto).

Trata temas como la violencia de género, machismo, maltrato, el odio, el acoso.. Destacar, la soltura que tiene el escritor para describir los paisajes de la costa vasca, así como, sus pueblos, habitantes, etc.

Me han dado ganas de viajar al País Vasco y poder caminar por esas empedradas calles, recordando a Ane Cestero. Según iba leyendo, iba buscando info en internet sobre el enclave y la historia del Alarde mixto. Ojalá, en algún momento se unifique en un único desfile en el que haya igualdad entre hombres y mujeres.

100%recomendable a los amantes del género policíaco.
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