InicioMis librosAñadir libros
Descubrir
LibrosAutoresLectoresCríticasCitasListasTest
Críticas sobre Un mundo feliz (104)
Ordenar por :   Fecha   Los más apreciados  



Añadir crítica
santialonsoyuso
 20 June 2018
¿Cómo seria para vosotros un mundo perfecto? ¿Un mundo sin guerras? ¿Un mundo sin fronteras? ¿Un mundo igualitario? ¿Un mundo sin confrontaciones?

Pero, ¿y si os dijera que el mundo perfecto es aquel en el que no hay sentimientos, anhelos ni pasado?

Un mundo feliz nos sitúa ante esta inquietante perspectiva en el año 632 tras (Henry) Ford.

Aldous Huxley trama ante nosotros una obra que dispone su eje principal en la sociedad moderna del futuro. Para ello, se sirve de una imaginación inhóspita sobre una visión del porvenir dada la época en la que se publicó el libro.

La firmeza y la excelencia de la narración convierten el ambiente de esta ficción en algo perfectamente tangible para el lector. Todos los detalles están cuidados minuciosamente y dispuestos de manera excepcional a lo largo de breves capítulos que agilizan el ritmo de una novela que es necesario digerir desde el sosiego y la tranquilidad más absoluta.

Los personajes muestran la bajeza del ser humano y de una sociedad aislada en una órbita ajena a la realidad. Sin embargo, por muy ilusa que pueda parecer la idea expuesta por Huxley, la precisión y la brillantez con las que adecúa la mentalidad y personalidad de cada personaje y los pasos hacia los que parece encaminarse hoy en día la Humanidad, convierten sus palabras en un vaticinio inquietante sobre el porvenir de nuestro sistema social.

No obstante, si hay algo que destacaría en especial no es la sobresaliente narrativa ni la sensacional ambientación, elementos que per se convierten este libro en una obra maestra, sino los diálogos y el trasfondo que habitan entre sus páginas.

No exagero si digo que, de todo lo que he leído (que cada vez va siendo un poco más), me he topado con las conversaciones más impactantes y que más me han removido hasta ahora.

Otro de los fundamentos principales sobre los que se asienta la historia y que ha resultado una delicia para mis emociones es la literatura. Las constantes alusiones a Shakespeare y la belleza desvirtuada de un mundo cuyas emociones fueron otrora regidas por la poesía, el teatro y la prosa nos trasladan a un entorno melancólico y triste pero hermoso al mismo tiempo.

Por último, el encuadre de las emociones clandestinas, la constante alusión a filósofos como Platón y Nietzsche (entre otros) respecto a los sentimientos, la religión, el miedo a la realidad y la falsa felicidad le dan la pincelada definitiva a la novela hasta convertirla en una obra de arte escrita.

Por ello, no cabe duda de que Un mundo feliz es una obra necesaria en la vida de todos nosotros.
Enlace: https://lacasadelnomada.com/..
+ Leer más
Comentar  Me gusta         20
Tardes_delectura
 13 April 2024
Un mundo en el que toda las personas son "felices" porque están programadas desde el nacimiento para que les guste lo que les toca hacer y les disguste todo lo demás.
Un mundo "perfecto" en el que nadie se puede salir de la casilla que le ha tocado vivir.
Me agobia pensar en un mundo así.
Comentar  Me gusta         10
Imp
 13 November 2023
Esta reseña contiene spoilers.
Paradójicamente el nuevo mundo de la novela se parece mucho a cualquiera de las grandes religiones que conocemos, con sus fórmulas para alcanzar la felicidad y el tal Ford creador, que sustituye a Dios, y no deja de ser otro dios.
Un mundo en el cual hay diferentes clases sociales no es ninguna novedad, la diferencia es que todos están satisfechos con el lugar que le fue asignado antes incluso de nacer, aunque, volviendo a la religión, no sé si de verdad hay algún cambio con respecto al mundo que conocemos, dado que las religiones suelen hacer a las personas más conformistas con su condición en particular. Manejan ideas de los designios divinos, el destino, etc., y todo ello implican un grado de aceptación de lo que ocurre. Lo único es que el mundo de la novela es hedonista.
El libro fue publicado en los años treinta, entre las guerras mundiales, y era un momento especial porque me imagino muy bien cómo la gente estaba cansada del riesgo de muerte, destrucción e inestabilidad económica, de ahí los locos años veinte, en cierto modo similar al mundo de la obra, solo que llevado a un extremo. Es decir, un lugar donde todo es artificial y promiscuo. Pensemos también que se escribe en los albores de la psicología moderna, de ahí la idea de los condicionamientos. Casi por primera vez, la psicología aparece como ciencia más o menos exacta.
Es verdad que existe una crítica al capitalismo y creo que eso es lo que hace que se reclame tanto la vigencia de la obra. Pero del mismo modo también existe una crítica al comunismo —Bernard se apellida Marx—, dado que hay uniformidad entre clases, hasta el punto que se fabrican mellizos.
Para lo corta que es, la obra tiene varias aristas. Por un lado, creo que para Bernard ir a la reserva consiste en asomarse a la realidad, y, por lo tanto, a la verdad. Se reproduce un poco el mito de la caverna de Platón, o, una matrix, que es el lugar donde vive Bernard.
John es un personaje interesante porque pese a su individualismo, cuando lo conocemos, él hace todo lo posible por formar parte activa de la sociedad de los salvajes, pero nunca lo aceptan por completo. En el mundo nuevo, tampoco lo aceptan tal cual porque allí él no es una persona, sino un objeto de estudio. Bernard tiene la oportunidad de ser diferente, pero también elige y anhela ser como sus iguales. Lo que desea es pertenecer a algo. En ese sentido, ambos parten de la misma carencia.
El tema de las drogas recreativas está muy presente. de hecho, la base de esa sociedad es nada menos que el soma. Haciendo una búsqueda sencilla por internet me encontré con este dato: en España hay un consumo de 91 dosis diarias de ansiolíticos por cada 1000 habitantes. Recuerdo hablar con un farmacéutico que me contó que casi un 40% de la población se toma ansiolíticos o antidepresivos. Cito el periódico Público: “La última Encuesta Nacional de Salud, realizada en 2017, ya revelaba que el 12,48% de los mayores de 15 años consume tranquilizantes, un porcentaje que sube hasta el 30% en el caso de las personas mayores jubiladas, al 42% en las incapacitadas para trabajar y al 24% en las que se dedican únicamente a las tareas del hogar”. Después la pandemia es el COVID19. El soma parece una droga más eficaz que las que venden en las farmacias. La felicidad que aporta el soma se paga con la adicción (falta de libertad) e incluso con la vida.
La alternativa al mundo feliz encarnada en John no sé si es mucho mejor, pero reconozco que hago una lectura actual. Tampoco me gusta el hecho de que la mujer sea atacada y agredida y que se le llame ramera por hacer lo mismo que todxs. John no vaya por ahí llamando «rameros» a los hombres, que se comportan igual que las mujeres. Los conflictos de Bernard, el hombre, son de índole intelectual, los de Lenina, sexual. Siempre es lo mismo. Pero, de nuevo, admito que es una lectura actual y no me estoy situando en los años treinta. Aún así, quiero dejar constancia de mi pataleta.
Tal vez el ejemplo de John sea el punto débil de la novela y el motivo por el cual, aún gustándome, prefiero 1984 u otras distopías. No veo la necesidad de otro Dios o mortificarse para sentirse vivo. al final, puede que ambos mundos, el feliz y el salvaje, sean igual de indeseables. El suicidio de John es el único final posible. El individuo o el disidente no puede con la masa. Es triste, pero cierto.
+ Leer más
Comentar  Me gusta         10
Vanevska
 27 November 2021
Este libro es de los que considero de "lectura obligada", además de que es para todo tipo de públicos, ya que como en mi caso, no soy una gran aficionada a la lectura de ficción pero aún así lo he leído porque sabía que me iba a gustar y no me equivoqué.

Superó todas mis expectativas desde el principio de la lectura, ya que comprobé que lo que se exponía eran cosas que aunque no iguales, SÍ parecidas, había un mundo que pese a ser distópico, pero tenía eso que a veces uno piensa sobre cómo sería un mundo donde no hubiese guerras, pobreza, las personas estuviesen desinhibidas, de buen humor, saludables y bueno técnicamente muy avanzadas.

Los seres humanos se cultivan en castas: Alfa, Beta, Gamma, Delta y Épsilon, siendo todos ellos muy diferentes físicamente y en inteligencia.

Es un buen libro para al menos conocer este tipo de mundo, donde prevalece la superficialidad, donde parece que así y todo se podría ser feliz pero bueno, el ser humano quiere tener "estabilidad", en el libro recurren al "soma" para tener pensamientos positivos pero hasta una gran toma de estas pastillas tampoco va a conseguir estar feliz, realmente NUNCA SE ES TOTALMENTE FELIZ!!!!
+ Leer más
Comentar  Me gusta         10
leleentrelibros
 19 May 2021
Es la historia más extraña que leí en mi vida. Comencé leyendo esta novela con la escueta noción que se trataba de una distopía, qué tanto podría asombrarme después de le Guin, Lovecraft o una Agustina Bazterrica con su inolvidable denuncia en “Cadáver exquisito”. Si lo hizo fue especialmente por el choque cultural de mi vida en 2020 d.C. y la de Bernard Marx en 1908 d.F., tal y como le ocurrió a John que venía de una reserva de salvajes.

El libro “Un mundo feliz” del escritor británico Aldous Huxley versa sobre un futuro lejano en donde se han abolido conceptos tales como familia, monogamia, individualismo, Dios. Los hombres dejamos de ser vivíparos utilizando tecnología reproductiva y cultivando humanos. Descartamos diez pensamientos melancólicos con un gramo de soma, una droga posterior al mezcal y sin sus efectos secundarios. Todo el mundo es feliz, actualmente. Para luchar contra la confusión el poder ha sido centralizado y se han incrementado las prerrogativas del Gobierno. Se induce a amar la tarea asignada, la comunidad a través de la hipnopedia y los Ministerios de Propaganda.

Un Estado totalitario realmente eficaz sería aquel en el cual los jefes políticos todopoderosos y su ejército de colaboradores pudieran gobernar una población de esclavos sobre los cuales no fuese necesario ejercer coerción alguna por cuanto amarían su servidumbre. Desde el mismo momento que se encuentran en un frasco son condicionados a un género, una clase, una ideología que los acompañará hasta su último suspiro.
Existe un gran contraste al respecto con nuestro siglo XXI, y resulta de la intensidad del condicionamiento. Cuando una mujer está embarazada (madre, qué obscenidad, se pondría escuchar de Lenina o de cualquier otro) se crean esperanzas de ese feto, cómo será, niño o niña, si será abogado como su padre o arquitecto como su madre, si tendrá hijos y me hará abuela, si será apuesto con cabellos rubios y ojos claros.

Hoy se ha puesto en marcha una revolución para eliminar todas esas inducciones a una vida que se considera perfecta en función a discursos verdaderos con efectos específicos de poder, otorgando la posibilidad a las personas de ser y vivir como lo sientan, acorde a sus deseos dentro de un contexto socioeconómico y cultural.

En cambio, en la sociedad que nos pinta Huxley se ha suprimido toda brecha de incertidumbre, de confusión, se ha cortado la libertad al punto que unas gotas de más de alcohol puede formarte con una estructura corporal inferior a los de tu clase, puedes nacer estéril, si te sumerges en estados como la soledad, la ira o la tristeza debes inmediatamente emerger olvidándolos mediante una tableta de soma o un sucedáneo de pasión violenta, la gran conciencia de clase Alfa, Beta, Gamma, Delta o Epsilon regula las relaciones con respeto o desprecio, se alaba el comportamiento neumático, los cuerpos esbeltos, eternamente jóvenes e infantiles considerados carnes para satisfacer el erotismo inherente y alimentado desde temprano en el ser humano.

Dios es Ford sin su concepto de deidad, Freud sin psicoanálisis. al igual que Auguste Comte propusieron un orden espiritual alternativo, no por falso sino por complejo. Impusieron el rito de la Orgía Porfía como servicio de solidaridad, admitieron la T como símbolo, prohibieron la biblia por antigua, repartieron soma en lugar de ostias.

Entre la ciencia pura y la felicidad, se inclinaron por la segunda en búsqueda de la consagración de la deseada estabilidad. Tres veces por semana entre los trece y los diecisiete años se repitieron el axioma hipnopédico de la ciencia lo es todo, para que ingenieros emocionales como Helmholtz practique una especie de ciencia supervisada por el Interventor Mundial de Europa Occidental, Mustafá Mond. Una ciencia no auténtica que permite tratar con los problemas más inmediatos y rechaza el verdadero progreso científico por considerarlo una amenaza destructora del sistema que creó.

Me pregunto qué hubiera pasado si el liberalismo al reemplazar la religión por la ciencia en el siglo XVIII hubiese volcado su lucha en el camino de la felicidad y no el individualismo a fines de alcanzar el bienestar general. Por supuesto que no se llamaría de tal modo la corriente, sobre todo el mundo no sería el mismo ¿Nos encontraríamos en los inicios de un mundo feliz? ¿Vale la pena pagar el precio por el equilibrio y la felicidad? Yo considero que no, como Mr. Salvaje exclamo a los cuatro vientos: ¡Reclamo el derecho a ser desgraciada!
+ Leer más
Comentar  Me gusta         10
Leercomoformadevida
 11 November 2020
Lectura conjunta que hice con Natalia de @natinbooks, y que no nos ha dejado indiferente para nada. Una gran distopía que nos trasporta a un mundo donde todo el mundo es fabricado para ser feliz.

Todo el mundo es creado con unas habilidades y unas características, para que cada persona sea feliz en el puesto que le haya tocado vivir en la sociedad, sin preguntarse ni querer descubrir otras realidades.

Una distopía muy completa e inquietante al mismo tiempo. Ya que habrá un par de protagonistas que se planteen esa realidad donde viven, visitando un lugar donde las personas aún son salvajes, que sienten y aman, e incluso hay madres que tienen a sus propios hijos…

Totalmente recomendable su lectura, que nos hará plantearnos si preferimos ser felices o humanos, donde nos preguntaremos que es la felicidad realmente y donde reflexionaremos sobre el futuro hacia donde vamos.

En mi opinión, la “felicidad” que vemos en el libro es la “ausencia de tristeza”, no la felicidad para la cual necesitamos sentir y tener emociones.
+ Leer más
Comentar  Me gusta         10
ruedespoemes
 16 September 2020
La dicotomía Huxley-Orwell dominará la historia de la literatura. Es extremadamente fascinante ver como estos dos autores debaten a través de sus textos el futuro de la humanidad.
Concretamente, Huxley ofrece una alternativa basada en la felicidad, drogas, sexualidad liberada y diferenciación de clases. Considero que es más díficil mostrar las consecuencias negativas del "mundo feliz" que propone Huxley, pues se debe profundizar más acerca de los resultados que se consiguen al tener a hombres felices creados en un laboratorio trabajando cómodamente en sus puestos de trabajo. Supongo que es otra manera de deshumanizarnos y, en ese sentido, veo reflejado parte del sistema educativo actual en el libro, donde se mata la creatividad y se fomenta la pérdida del alma renacentista.
Comentar  Me gusta         10
Psk_destroll
 24 May 2020
Me encantó. Un libro para reflexionar.
Comentar  Me gusta         10
entremislibros
 02 March 2020
Se centra en un futuro hipotético en donde la tecnología y la fabricación en masa lo es todo, de hecho en esta nueva sociedad los años se miden después de Ford (Henry Ford) cuyo año de inicio es 1908, las relaciones personales y las emociones han desaparecido, todo está en perfecto orden, todo el mundo es feliz y si no lo es unos gramos de Soma una droga muy popular lo solucionan, los libros antiguos (clásicos y libros de esta época) son considerados pornográficos y están prohibidos, los conceptos de pareja, relaciones estables, familia y padres tampoco existen, son considerados obscenos, los seres humanos son creados en probetas en un centro de incubación, pero eso no es todo, este mundo es tan organizado que desde el momento de la “fabricación humana” se tiene en cuenta la casta a la que pertenecerá, así encontramos que las clases sociales son estas castas que son nombradas como Alfa, Beta, Gamma, Delta y Epsilon que a su vez tienen otras subdivisiones (más y menos) y y son condicionados físicamente desde la probeta y mentalmente por medio de hipnopedia para pertenecer a estas sin aspirar a pertenecer a otra, las personas no desarrollan signos físicos de envejecimiento, llegan a una edad avanzada conservando la lozanía de la juventud.

Todo esto da escalofríos porque las novelas distópicas tienen esa facilidad para hacer pensar que estas autocracias o sociedades “mejoradas” no son tan disparatadas como se podría creer y que el afán de perfección puede llevar a el hombre a plantearse un futuro similar a este, totalmente automatizado, aséptico y donde el consumismo es uno de los valores más importantes.

La trama se centra en Londres y además de presentarnos este nuevo orden, nos habla de varios personajes: Bernard Marx un alfa-más que no encaja del todo en esta categoría tanto por su aspecto físico (tienen parámetros en cuanto a estatura y demás) como en su personalidad y el trato hacia los demás por lo que tiene una reputación sospechosa, Lenina una beta-mas guapa, bastante popular y “neumática” (esto es una cualidad muy apetecida).

Helmholtz Watson amigo de Bernard y un alfa físicamente y mentalmente sobresaliente, pero con ciertas inquietudes intelectuales que no serán bien vistas y John el salvaje un hombre que por un hecho fortuito no salió de una probeta, nació de una madre en una reserva salvaje en Nuevo México en donde nada de esta sociedad aún funciona y que llegará a Londres a revolucionar el orden establecido.
Como decía estas historias hacen reflexionar mucho sobre las implicaciones de una sociedad distópica pero este libro además cuestiona sobre el papel de cada quien en la sociedad, Bernard era un poco marginado por sus “defectos” y esto lo hacía inconformista, se negaba a usar Soma, pero cuando tiene un momento de celebridad su comportamiento se adapta al de los demás, Helmholtz encaja perfectamente y es muy popular pero al relacionarse con John todas sus inquietudes de tipo artistico y emocional salen a flote lo que lo pone en el ojo del huracan pero acepta su destino, Linda la madre de John es quien peor parada sale de esta historia, esta tan condicionada que a pesar de haber vivido en la reserva salvaje durante veinte años aún extraña la vida de antes y nunca fue felíz, fue estigmatizada durante esos años en la reserva por su liberalismo y forma de pensar y criticada y objeto de burlas cuando llegó y podría seguir asi pero se haría demasiado largo
Es una novela que recomiendo por lo mucho que hace pensar, el final no me gustó creo que pudo ser mejor pero suele pasar que estás distopías no cierran del todo aunque en este caso tenía en John como una pieza importante para otro fin.
+ Leer más
Comentar  Me gusta         10
ritmanbooks
 03 February 2020
Huxley creó un mundo distópico perfecto, tan detallado que es fascinante conocer su mecanismo. Sin embargo, considero que falta profundidad y sentimiento, tanto en los personajes como en la trama. Sentí que no llegué a meterme en la historia ni conocer a sus personajes.

Lo recomiendo solo porque es un clásico: todo el mundo debería leerlo y conocer de primera mano el asombroso e inquietante futuro que imaginó el autor.
Comentar  Me gusta         10


Comprar este libro en papel, epub, pdf en

Amazon ESAgapeaCasa del libro





Test Ver más

¿Cuánto sabes sobre Aldous Huxley?

Fue un escritor

estadounidense
británico
australiano
escocés

10 preguntas
17 lectores participarón
Thème : Aldous HuxleyCrear un test sobre este libro