Ruina y Ascenso

Avisar que esta reseña contendrá spoilers de los anteriores libros, para poder contaros todo lo que quiero.

Tras postergar el hacer esta reseña, aquí está. Tengo que reconocer que este libro es el que mas me gustó de los tres, el final que le da Leigh a la saga es increíble y sin duda uno de los mejores cierres que he leído.

En este libro nos volvemos a encontrar con Alina, bajo tierra por su protección, según el Apparat, y débil por no poder usar su poder, es por eso que sus amigos se las ingenian para ayudarla a conseguir llegar a su poder y que vuelva a ser la invocadora de luz, la chica fuerte en la que se había convertido. Y funciona, vaya si funciona.

Gracias a la intervención de sus amigos, Alina consigue liberarse y volver a encauzar su lucha y sus prioridades, está decidida a encontrar el pájaro de fuego, el tercer amplificador que la ayude a derrotar al oscuro y a sus nuevas criaturas.

Aunque como siempre en este tipo de historias, a nuestros protagonistas no le sale todo bien, y es que un pelotón del primer ejercito atrapa a Alina y pretende entregársela a El Oscuro, a cambio de una buena recompensa. Sin embargo aparece cierto personaje que me encanta para salvar a Alina y a sus amigos, todos lo conocéis ya y se trata del príncipe Nikolai.

Y es aquí cuando empieza a ponerse mas interesante la historia, Alina decide emprender junto a sus amigos la búsqueda del tercer amplificador, pero justo antes de que puedan salir en su búsqueda El Oscuro encuentra su escondite y suceden cosas que no te esperas.

Me encantaría hablar del final del libro de lo que me hizo sentir, de lo que me hizo disfrutar, pero estaría haciendo demasiados spoilers del final de la historia. Lo que si puedo decir es que la forma de cerrar toda la historia, la forma en la que le da un final digno a todos y cada uno de los personajes, como no deja ningún hilo suelto, sin duda Leigh Bardugo sabe como tratar a sus personajes.

También quiero destacar la evolución de todos los personajes, desde la Alina que conocimos en Sombra y Hueso, asustadiza e influenciable a la Alina fuerte y decidida que esta dispuesta a sacrificar todo, hasta su felicidad por salvar a Ravka y acabar con El Oscuro, pasando por un Mal mucho mas maduro. También nos encontramos a un David mas hablador y a una Genya más guerrera y una larga evolución, casi todos a mejor de los personajes que ya conocemos.

La historia empieza con poco arranque, a diferencia de los dos tomos anteriores. Nos encontramos a una Alina que ha aprendido algunas lecciones y eso la ha hecho más fuerte y más decidida. La trama nos presenta, de nuevo, un camino por recorrer, pero esta vez se me ha hecho un poco pesada por momentos, sobre todo si tenemos en cuenta que en esta tercera parte la escritora ha optado por hacer capítulos más extensos (para mi gusto demasiado) y eso dificultaba la concentración y el ritmo de la lectura. El nivel de plot twist ha estado a la altura del resto de los libros de la trilogía.

Con respecto al mundo que la autora ha construido sigue explorándose a través de los personajes de una manera unificada y amena. Quedaba poco territorio por descubrir, pero aun así la autora consigue sorprendernos con nuevas localidades y nuevos parajes fantásticos.

Los personajes, como los lectores de esta trilogía sabemos, no son el punto fuerte de los libros, ya que cuesta un poco conectar con ellos. Sin embargo, me he encontrado bastante en sintonía con Alina, pues creo que ha sabido evolucionar y situarse en su lugar en todo momento (aunque a veces desespere un poco); yo sí he sabido comprenderla y la apoyo en sus decisiones y en sus acciones.
Respecto al personaje de Mal, también evoluciona muchísimo en este libro y se puede decir que lo podemos llegar a conocer más, sobre todo con lo que respecta a Alina. Tengo que admitir que pese a las críticas a mi Malina me ha gustado y estoy contenta con el final del personaje masculino a pesar de todo lo que me ha hecho sufrir.
Sobre los otros personajes no sé decir mucho sin hablar demasiado, pero estoy un poco enfadada con uno en concreto, el Oscuro... Y después un poco enfadada con Leigh Bardugo por el destino que le ha entregado a cierto personaje.

La narración siempre me parece perfecta y a estas alturas solo puedo decir que desde luego Leigh Bardugo se ha convertido en una de mis escritoras favoritas. La recomiendo muchísimo si quieres volver a disfrutar de leer fantasía.

Quiero decir, que este libro no te deja respirar... Pero ni un minuto! En cada hoja esta pasando algo, te están revelando algo, o estas sufriendo por algo. La verdad, no creí que me gustara este libro, pensé que iba a tener que sufrir mucho con el final...

Alina se encuentra bajo tierra luego de ser rescatada por los seguidores de la Invocadora del Sol, aquí ella es solo una santa y una prisionera. Todos los Grisha están separados y controlados por el Apparat. En la superficie, el Oscuro gobierna con tiranía.

Su única esperanza es recuperarse y salir en busca del Principe (Si es que aun sigue con vida) y del pájaro de fuego.

Uff, que difícil reseñar este libro sin spoilers. Debo decir, que estoy muy conforme con este libro... y solo me dejó con más ganas de Grishaverse.

A diferencia de los otros dos libros, en este, terminé adorando a Mal. (Oscuro, te sigo amando igual). de alguna manera, en este libro lo podemos ver de otra manera, esta cambiado. Acepto el destino de Alina y entiende que eso es más grande que todo. Incluso que lo que pueda sentir él. de esa manera, esa dedicación, hizo que lo adorada. Creo que fue porque termine de entender como se sentía el respecto a Alina.

Igual, sigo amando al Oscuro. (Lo siento, pues siempre oscuros y siniestro para mi).

Este libro esta lleno de revelaciones, de batallas constantes, de miedo, de tristeza. Pero por sobre todas las cosas, refleja mucha esperanza en cada una de las palabras que se dicen o hechos que suceden. Sentí, que aunque por momentos, todo se veía muy mal, siempre había algo de luz al final.

Me gusta mucho como se unieron un montón de cosas al final, del pasado y del presente. Y como deja abierto para los demás libros (los cuales quiero tener ya!).

Lamenté muchas pérdidas de personajes. Y a la vez, estoy muy contenta con algunos finales. No todo fue: y comieron perdices. Pero creo que cada personaje, tuvo un final acorde a lo que había sucedido en el libro. (o no, algunos no tienen final, de ahí los próximos libros).

Recomiendo mucho esta saga, me recuerda mucho a Eragon por momentos.

Libro: Rojo esta vez, y brilloso. Con el pájaro de fuego en la tapa. El mapa al principio y la calificación de Grishas. Igual que los otros, una gran edición.
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Último libro de la trilogía de Sombra y hueso y libro que, como los dos anteriores, he devorado. Sin duda esta trilogía pasa a mis mejores lecturas del año y no dejaré de recomendarla. Estoy tan enganchada que ya me he puesto con la siguiente bilogía de este mundo, Seis de cuervos.
He de decir que estos libros me han enganchado como nada y me han parecido muy originales. Además, me enamoré de varios de los personajes con los que he sufrido como nada.
Si tuviera que decir un pero sería que creo que esta historia podría haber dado para mucho más, pero aún así fue increíble.
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Bueno este último libro me ha gustado mucho más que el segundo. Ocurren muchas más cosas y hay más acción. No sé me ha hecho pesado como me ocurrió con el anterior. Y en cuanto al final, bueno está bien, independientemente de que me hubiese gustado que la trama romántica hubiese acabado de otra manera, creo que ha rematado la trilogía de una forma aceptable.

Siguiendo la estela de los libros anteriores tengo momentos en los que Alina me encrespa un poco con las vueltas que da, Mal sigue siendo insoportable y Nikolai junto al Oscuro roban todos los momentos en los que aparecen. La historia avanza bastante rápido hasta que se llega a un punto de inflexión necesario para rntender lo que sucede, y que añade emotividad a la trama. No obstante, el final es la parte más floja desde muchos puntos de vista, siendo demasiado "feliz".

No sé qué tiene esta trilogía que me tiene enamorada. En esta ocasión le pongo las cinco estrellas porque me parece que este tercer libro está mejor construido, con una trama completa y que se desarrolla mejor que los anteriores.

La pega que le puse al segundo era que la batalla para mi gusto se desarrollaba de una forma muy rápida. En este libro no ocurre así. Es verdad que me estaba poniendo nerviosa al ver llegar el final del libro y seguir con la batalla final pendiente, pero al final se resuelve muy bien todo.

Me encanta Mal en Ruina y Ascenso, en el segundo libro hubo algunos aspectos del personaje que flojearon, pero, para mi gusto, mejora en el final de la historia. Sigo siendo fan absoluta de Nikolai, ojalá hubiera aparecido más, y estoy deseando leer la bilogía que le han preparado a él solito.

En cuanto al Oscuro, qué voy a decir. Es un personaje completo que me ha ido gustando cada vez más y al que se comprende perfectamente. A pesar de ser el malo de la película, no puedes evitar desear que se vuelva bueno o se salve de alguna manera.

De otros personajes ya ni hablo, porque qué se puede decir de ellos. Baghra, Tamara, Tolya... incluso Zoya, el reparto de personajes de esta trilogía es espectacular. Quedan recomendadísimos los tres libros y ahora toca seguir con Seis de cuervos 👏

El desenlace final de la trilogía en el que acompañaremos a Alina en busca del último amplificador, el pájaro de fuego, para que pueda derrotar al Oscuro.

Para mí ha sido el mejor de la trilogía, porque la autora ha sabido alargar la acción a lo largo de los capítulos y mantenerme con las ganas de saber qué va a pasar. En los anteriores libros pasaba todo demasiado deprisa, era todo demasiado fácil y casi no te daba tiempo de asimilar las cosas. En este caso los preparativos para la gran batalla final se van desarrollando poco a poco a lo largo de las páginas.

En mi opinión, ha sido un gran desenlace, estoy satisfecha con el destino de cada personaje. No obstante, me fastidia bastante no haber disfrutado mucho los anteriores libros.

Mi corazón ahora mismo está dividido entre Mal y Nikolai, que le den al Oscuro. Han sido sin duda mis dos personajes favoritos de la trilogía. Alina me gustó en el primer libro y tiene una evolución bastante grande a lo largo de todos ellos, pero su cambio de actitud y su ansia de poder constante no me gusta y me llegó a cansar un poco.
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Con este libro pongo fin a la primera historia del Grishaverse de Leigh Bardugo y ahora solo quiero seguir explorando este universo con el resto de historias que tiene.

Es difícil hablar de este libro sin hacer ningún tipo de spoiler sobre los sucesos ocurridos en los anteriores y en este, asique no voy a entrar en detalles pero diré que creo que ha sido mi favorito de la trilogía.

Esta tercera parte es un libro lleno de acción y giros inesperados, los protagonistas no tienen ni un momento de calma donde parar a pensar mucho rato. Todo se va desarrollando a un ritmo más rápido de lo que esperaban y eso les lleva a tener que estar cambiando sus planes y estrategias iniciales para adaptarse a los acontecimientos sobre la marcha.
Tengo que admitir que durante la lectura no sabía por donde iba a ir el final de la historia, pero no me lo esperaba para nada así. Me ha gustado mucho el final porque me ha parecido muy sorprendente y distinto a los finales a los que estamos más acostumbrados. Eso si, la trama más romántica de la historia reconozco que no me ha gustado mucho como acaba, aunque después del epílogo me ha convencido más porque hace que el libro acabe de una manera muy bonita.

Mis personajes favoritos de esta trilogía son sin duda el Oscuro y Nikolai. Dos personajes que a pesar de no ser los que más aparecen en la trama son los que tienen detrás historias muy interesantes que despiertan mi curiosidad. Me hubiera encantado conocer más detalles de toda la vida del Oscuro y estoy deseando leer El rey marcado para tener la oportunidad de conocer más a Nikolai.

La parte final del libro es pura adicción lectora, no pude parar de leer hasta llegar al final, si mal no recuerdo fueron unas cien páginas del tirón y lo disfruté muchísimo, emocionante, emotivo e inolvidable.

El primer libro me resultó casi perfecto, esperaba que ese “casi” se completara en los siguientes libros, pero realmente he sentido cierta decepción al encontrar el mismo patrón, inicio de diez, argumento interesante pero lento y final de diez. Me ha faltado más “chicha” en la parte central del libro que despertase mis ganas de leer porque realmente he leído obligándome y pensando en llegar lo más rápido posible al final.
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