Tokio blues

Murakami es mi crush literario y cualquier libro que escriba lo consideraré una obra de arte. Dicho esto, "Tokio Blues" es una historia de amor donde todo entra en juego: la muerte, el sexo, las enfermedades mentales... Creo que todos nos hemos sentido como Watanabe en algún momento de nuestra juventud y, al final del libro, este entrañable protagonista terminará formando parte de nosotros.

En general, los personajes están bien construidos, aunque sobre unos cimientos patriarcales en los que destaca la mujer como objeto sexual. Un solo personaje, además secundario, me ha gustado.

Murakami expresa con ternura y delicadeza, narrando una historia pausada y profunda y tratando la salud mental y las emociones con honestidad y empatía.

El contexto y la situación individual de cada uno están bien expresados, pues el lector logra imaginar cada escenario físico y emocional con plena facilidad.

A pesar de que los personajes me han puesto muy nerviosa, he encontrado una narración delicada y preciosa que me ha mantenido disfrutando de una historia pausada, sin una trama.

Éste es uno de esos libros que lo último que se te ocurre decir al final, o durante su lectura es "bueno, sin más". Podrá gustarte o no, eso está claro. Pero lo que no te va a dejar es indiferente. Me gustan los libros que suponen un viaje y esta historia lo ha sido. Un viaje y enorme. Un viaje por la vida, no sólo la del protagonista y el resto de personajes si no también por la tuya propia. Sí, también hace viajar al lector por su propia vida. Te permitirá reflexionar y replantearte multitud de temas de tu vida.
Sin duda te marca. Sin duda esta historia, me ha marcado.
Haruki Murakami, bienvenido a mis estanterías. Has llegado, para quedarte.

Cuando leí este libro estaba en una de esas rachas en que parece que no encuentras un libro que te cautive así que me tardé mucho leyéndolo.
Personaje favorito: Reiko, me parece una persona con la que me gustaría tener amistad.
Personaje que no me gustó: Watanabe, simplemente no congenié con él.
A mitad del libro estaba convencida que prefería a Midori en lugar de Naoko y aunque así sigue siendo, al final no me gustó tanto Midori como pensé que lo haría.
Lo que más me gustó: El lenguaje es hermoso. Me gusta la manera en que Murakami “pinta” sus paisajes.
Lo que no me gustó: No soy fan de los personajes atormentados que languidecen en brazos de la depresión.

Esta novela convirtió a su autor en un fenómeno social en su país, hasta el punto que emigró a Estados Unidos, dónde continuó con su obra. Obra intimista, nostálgica y preciosista se convirtió en un fenómeno para adolescentes.Tokio Blues es el título de la edición española, el título original de la obra es Norwegian Wood"

381 páginas.
Año 1987.

Watanabe es un joven que estudia en la universidad de Tokio en los años 60. Los domingos suele ir a pasear con Naoko, la novia del que fue su mejor amigo antes de que ocurriese algo que nadie se esperaba.

Mientras ambos intentan recuperarse de sus traumas, aparece Midori, quien también está pasando su propio duelo, e irrumpe en la vida de Watanabe poniendo todo patas arriba.

Me ha parecido un libro triste.

Es un libro que habla del duelo, de sui*dio y de amor.

Habla de la intensidad romántica, de las inquietudes, sentimientos y sensaciones de la juventud. Pero, sin embargo, no he logrado empatizar ni comprender a los personajes.

Watanabe es tan frío y seco en sus diálogos que me resultaba hasta incómodo. Aunque creo que esto es más una cuestión cultural, me explico: creo que tenemos una imagen de los japoneses muy definida, como personas introvertidas, contenidos, muy suyos; se nos presentan como la antítesis de nuestra forma de ser extrovertida e intensa. de ahí que estos romances me resulten frios y asépticos. Siento este libro, siendo un drama romántico, se me ha antojado distante y frío. le da más importancia a los encuentros sexuales que a los sentimientos.

Sí me ha gustado el importante foco que pone en la salud mental, en su cuidado y normalización.

Es genial leer el libro mientras escuchas de fondo las canciones a las que alude.

He visto que hay una peli de 2010. ¿La habéis visto?

Puntuación: 6,5/10

Me ha costado empezar el libro. Hacia la página 100 logré engancharme un poco. Y ahora que lo he terminado, pienso que no es para tanto. Entiendo a la gente que dice que es un libro prescindible.
Sin ser un mal libro, siento que no me ha aportado mucho.

No he entendido a ninguno de los personajes del libro.

La pluma del autor me ha gustado mucho y sus reflexiones son en algunos tramos fantásticas, también el clima que consigue pero la historia me ha desconcertado e incomodado a partes iguales. No sé si esta sensación tiene algo que ver con que es la primera novela japonesa que leo o con la época en la que se ambienta.

Me resulta muy incómoda la forma en la que se trata la sexualidad, el desarrollo en las relaciones de los personajes y que absolutamente todos los personajes femeninos estén hipersexualizados.

Me parece fascinante la narrativa de esta novela. La forma en la que el autor nos presenta los hechos resulta conmovedora a la vez que un tanto satírica, pues añade un toque de humor negro. Sin embargo, no deja de lado la sobriedad con la que se debe hablar sobre los temas que trata. En definitiva, esta lectura me ha dado una perspectiva diferente sobre la vida y me ha hecho reflexionar más que muchas otras obras. Creo que es una novela que todo el mundo debería leer y reflexionar, pues realmente hace ver las cosas de otro modo.

Trata la llegada a la edad adulta de un joven que además acaba de cumplir la mayoría de edad, La obra está ambientada en los años 68 y 69, en el contexto de las protestas universitarias y los cambios sociales que se produjeron a partir de esta fecha, en sumo, la llegada de la libertad. Un libro lleno de muerte y sexo, y, aunque está envuelto en melancolía, se siente alegre, cosmopolita y moderno. Me hizo sentirme a gusto, como en un rincón íntimo de mi propia casa.
En el libro Watanabe conoce el amor con diferentes mujeres. al mismo tiempo, aparece atrapado en tríos emocionales: Naoko, Kizuyi y Watanabe; Naoko, Rioko y Watanabe; Nagasawa, Hatsumi y Watanabe. Con la única con la que está en “dúo” es con Midori, que viene a ser el retrato de una joven absolutamente fantástica. Para mí, lo mejor de la novela es la complejidad de los personajes. Como lectora he sentido que los iba descubriendo a fondo, y los iba queriendo a todos. al que menos, al protagonista Watanabe, tal vez porque el libro logra que nos sintamos Watanabe, que descubramos el mundo a través de sus percepciones en lugar de verlo a él.
La ambientación también es perfecta. Nos sentimos dentro de la residencia, de los barrios de Tokio, de ese sanatorio tan maravilloso. Muchos quisiéramos estar recluidos en un lugar así. Lo curioso es que pese a que los hechos relatados son tristes desde una óptica objetiva, la lectura es intimista y llena del placer de la nostalgia, sin estridencias melodramáticas.

Sin palabras.

Que no os confunda mi primera frase, pues no lo digo en el buen sentido. Que tampoco os confunda mi segunda frase, pues no lo decía en sentido negativo. A estas alturas estaréis tan confundidos como yo con este libro y es que quizá esa sea la palabra que en un principio no encontraba: confundido.

Confundido porque, por un lado me ha parecido un libro con un ritmo que adormece, acompañado de una accion igual de lenta y de descripciones innecesarias que aportan poco o nada. Sin embargo, los temas que aborda, las reflexiones que te provoca y la incómoda posición a la que te lleva en muchas ocasiones me ha parecido realmente atractiva. Me ha resultado especialmente interesante ver la diferencia cultural que existe a la hora de tratar la sexualidad.

Es posible que las segundas sensaciones sean causa de las primeras, no estoy seguro, pero me parecía injusto puntuar negativamente a un libro que ha conseguido algo que no muchos hacen.

En definitiva, si no te importa hacer frente a una narración parsimoniosa, puedes disfrutar de una lectura muy estimulante.