La maldición de Hill House

La maldición de Hill House narra el experimento del doctor John Montague en busca de pruebas de hechos paranormales en la casa que da título a la obra. En él participará la protagonista, Eleanor Vance, una mujer solitaria que ha experimentado previamente fenómenos tipo poltergeist, y que pronto entablará un vínculo especial con Hill House...

Una de las cosas que más destaca de esta novela es cómo lleva el tópico de la casa encantada un paso más allá. La presencia oscura que acecha en Hill House no es un fantasma o un demonio, sino que es la propia mansión la que parece haber desarrollado una conciencia propia, malévola, capaz de apoderarse de las de otros.

Shirley Jackson se vale más de la sensación de angustia y desorientación para construir la amenaza de Hill House que de la presencia explícita de lo sobrenatural. Por eso también cultiva una inquietante ambigüedad: no sabemos si los acontecimientos que se narran suceden en realidad o son el resultado de la autosugestión, la histeria colectiva, la paranoia...

¿Y qué hay más terrorífico que empezar a sospechar que nuestros sentidos nos traicionan, que todo está en nuestra cabeza? Quizá por eso Eleanor nunca logra escapar de Hill House: porque no puede huir de sí misma.
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¿Crees en los edificios encantados? ¿En castillos, mansiones, hospitales o incluso cárceles en las que los fantasmas se han quedado atrapados y no dejan de dar sustos a todo aquel que se atreve a ir a investigarlos? ¿No estás cansado de que las historias sobre estos lugares sean, hasta cierto punto, predecibles? Entonces, ¿qué tal si te adentras en la más fabulosa de todas ellas, una en la que no podrás dejar de leer adictivamente hasta el final? Me estoy refiriendo a La maldición de Hill House, el clásico de terror del siglo XX de Shirley Jackson que ha inspirado, además de varias películas, una exitosa serie de televisión, y que la editorial Minúscula por fin ha reeditado en el otoño de 2019. Si quieres saber un poco más sobre este libro antes de decidirte por él, solo tienes que seguir leyendo esta reseña.
Obsesionado por alcanzar cierta reputación en el complicado mundo de lo paranormal, el doctor John Montagne decide alquilar la mansión de Hill House, maldita prácticamente desde su construcción, para llevar a cabo en ella un experimento. Para el experimento, consistente en la estancia en la casa durante varios días del doctor y dos desconocidas que él mismo se ha encargado de reclutar, y un representante de la familia propietaria de la casa, el aspirante a famoso investigador de lo oculto acabará contando con Eleanor Vance, una treinteañera que, tras la muerte de su madre vive con la familia de su hermana; Theodora, una joven alegre y divertida que decidió aceptar el reto por mero impulso; y Luke Sanderson, el joven miembro de la familia dueña de la casa. Si bien la estancia comienza con una mezcla de escepticismo y el optimismo, pronto los sucesos extraños comenzarán a sucederse. La iracunda casa está cansada de estar vacía y pronto se fijará en alguien para hacerle compañía. ¿Conseguirán nuestros investigadores salir indemnes de la experiencia?
Entre unas amenazantes montañas, más allá de un pequeño pueblo, se encuentra la laberíntica Hill House. La historia de esta casa está llena de algunos momentos trágicos, por un lado, y otros inexplicables, por otro. No es de extrañar, por tanto, que sea el lugar elegido por doctor John Montagne (un tipo que pronto descubriremos que vive a la sombra de su autoritaria mujer) para llevar a cabo su investigación paranormal.
Aunque en principio esta parezca una novela coral, pronto nos daremos cuenta que ni el sabio doctor, ni la vivaracha Theodora ni el simpático Luke tienen el mismo peso en la historia que la casa, ese monstruo de habitaciones tan estratégicamente situadas que son siempre difíciles de encontrar (lo que hará que cualquier visitante, cuanto menos, se irrite), y Eleonor, la desdichada chica que, tras la muerte de una madre a la que debió cuidar durante su juventud, busca su lugar en el mundo.
La impredecible Eleonor no es una amargada, como los insoportables Dudley, los inquietantes guardeses de la casa. Tampoco es tan divertida como Theodora o Luke, a los que coge pronto cariño (especialmente a Theodora). Eleonor es una mujer perdida en el mundo a la que se le ha privado de tener juventud por estar al pendiente de una madre que estuvo enferma demasiado tiempo. Convencida de que aún tiene tiempo para hacer cosas interesantes, y siempre acompañada por una gran imaginación y sus ganas de disfrutar de cada momento, Eleonor se monta en el coche que comparte con su hermana, sin permiso de esta, y emprende el que ha de ser la gran aventura de su vida. Pero, ¿cómo acabará esa experiencia para ella? ¿Y para todos los demás?
Los que ya habéis leído anteriormente la otra magnífica novela de Shirley Jackson publicada en España también por Editorial Minúscula, Siempre hemos vivido en el castillo, ya sabréis que esta autora, ya fallecida, era capaz de crear historias increíblemente espeluznantes, personajes capaces de hipnotizar al lector y atmósferas tan atrayentes como opresivas. He de decir, por tanto, que La maldición de Hill House es otra magnífica muestra de lo que la prodigiosa mente de esta escritora atemporal era capaz de idear en cuanto a grandes historias de terror psicológico se refiere, y que la lectura de esta deliciosa novela no solo os sorprenderá, sino que os hará plantearos no solo si los edificios encantados existen, sino también hasta qué punto puede llegar la imaginación y la autosugestión a la hora de creer en ellos. Dicho esto, ¿a qué esperáis para poner rumbo a Hill House? Estoy segura de que la casa os atrapará. ¡Pero no temáis, que esta vez será para bien!

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LA MALDICIÓN DE HILL HOUSE
El mes de Halloween y el de las escritoras mujeres, ¿se podía elegir mejor libro?
No es mi primer libro de Shirley, y si con “Siempre hemos vivido en el castillo” me conquistó, con este me ha enamorado.
Tiene una capacidad impresionante para crear ambientes estremecedores, de aires inmensamente densos, espacios tenebrosos.
Y a su vez nos presenta personajes llenos de contradicciones, de lados oscuros, de reacciones inesperadas…
Así que si unes una mansión encantada con personajes peculiares, y mezclas sucesos paranormales con trastornos o traumas mentales, tienes los ingredientes perfectos para disfrutar una lectura llena de suspense y misterio.
✍ Shirley Jackson
📖 265 páginas
📚 @editorialminuscula

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Esas casas encantadas, embrujadas y misteriosas atraen, hasta la fecha, a lectores ávidos de estremecimiento. Hill House una de las obras a las que muchos recurren, y admiran, una de las novelas definitivas del género.

En esta historia asistiremos, de la mano de los personajes a una casa perdida en un pueblo, rodeada de colinas, bosques y soledad, cuyo fin será estudiar, desde un punto de vista académico, fenómenos paranormales que se atribuyen al interior de esta mansión. Ya sabemos que eso nunca acabará bien.

En este punto se me borró parte de la reseña, que ya estaba terminada, pero intentaré retomar las ideas: esta obra es, más que una historia de fantasmas en viejas casas abandonas: la historia de un lugar que sirve como catalizador de los demonios internos, miedos y problemas profundos de esos pobres diablos que entran en ella. Las preguntas constantes que me hice durante la lectura eran: ¿qué sería de mí en Hill House? ¿qué pasaría conmigo allí? Es inevitable pensar en ello porque sabemos que, de alguna manera, no es la casa, somos nosotros. Quizás esta idea sea atrevida de mi parte, pero creo que es eso lo que encandila de este libro, lo que atrae a tantos lectores y escritores a esta obra: que el terror no está allí, el terror lo lleva quien accede. Así sentí La maldición de Hill House, y con ese final, me atrevo a decir (ya que estoy con los atrevimientos) que no ando tan desencaminada, espero, y que por eso vale la pena que tú también llames a la puerta de la mansión y entres.

Ya me contarás...

La nada más absoluta.

Ni terror, argumento tan vacío como todos y cada uno de sus personajes, una trama sin sentido, unos diálogos con menos sentido aun, superfluos y repetitivos…

Nada llegó a captar mínimamente mi atención, el final una tontuna y de modo muy abrupto.

Incluso me atrevería a decir que está tanto mal escrito como mal traducido.

No recomiendo perder el tiempo con esto.

Eleanor recibe una carta donde la invitan a pasar una temporada en Hill House, en contra de los deseos de su hermana toma el carro sin permiso y maneja rumbo a una aventura que no terminara de la mejor manera.
Hill House es una casa, que se dice, embrujada, pero Eleanor no es la única en ser convocada, al llegar a la mansión se encuentra con diferentes personajes:
El Doctor Montague, el responsable de convocar a las personas en Hill House para investigar los sucesos paranormales que hay, Theodora, una atractiva pero infantil mujer, Luke, el sobrino de la dueña de la casa, los Dudley, un extraño matrimonio encargados de cuidar la casa y que desde el primer día les hace saber a los demás que ellos partirán de la casa antes del anochecer y que siempre están cerca de una salida rápida.
Nos enteramos que quien diseño la estructura de la casa lo hizo de tal manera que esta curvada y que algunas dimensiones están desproporcionadas para que la gente al irse piense que las demás casas son las diferentes, esto según el doctor explica muchas cosas de porque se les hace difícil orientarse dentro de ella.
La casa al parecer en el día es un lugar tranquilo, pero el tormento empieza al ponerse el sol, pero al parecer los personajes femeninos son los que más sufren ataques o eventos paranormales, lo que poco a poco va debilitando su salud mental hasta el punto de volverse peligroso.
Si bien iba con muy altas expectativas de no poder dormir después de leer este libro quede un tanto desilusionada, y no es porque la autora haya escrito un mal libro, al contrario, la forma de escribir de Shirey es uno de los mejores, pero al parecer el terror de antes no es el mismo de la actualidad, y no es tanto causa de la autora sino de los tiempos en los que vivimos, muchos de los aspectos de terror se basan en golpes, araños o sombras en las puertas o por la casa, referencias como el del picnic en que no te describen el suceso en sí, pero te hacen saber del terror que sus personajes están atravesando, así que mucha de la magia de terror este libro se basa en la psicología, así que si eres una persona miedosa tal vez este sea tu libro, ya que el miedo que te hará sentir será proporcional al miedo que te puedas auto inducir.

¿De qué trata La Maldición de Hill House? Primero que nada tenemos al Doctor Montague, un profesional que quiere investigar el extraño fenómeno que parece rodear a ciertos acontecimientos del ámbito parasicológico, por lo que necesita un escenario que haya sido testigo de este tipo de fenómeno, y así elige a la misteriosa Hill House. Pero también va a necesitar a sujetos de estudio y es aquí donde entran nuestros queridos Luke, Theodora y Eleanor. Luke es el próximo heredero de Hill House, su familia es dueña de la propiedad y él debe estar presente en la investigación como parte de los requerimientos para llevar a cabo la misma. Theodora es una mujer extrovertida, inteligente y que ha tenido ligeros roces con al ámbito paranormal, al principio se nos pinta muy dulce pero su verdadera y seductora naturaleza van saliendo a la luz poco a poco, finalmente tenemos a la, que a mi parecer, es la verdadera protagonista, Eleanor es una mujer de 32 años sumamente inocente y crédula, sedienta de cariño y de pertenencia, ella ha vivido su juventud cuidado a su enferma madre y ahora que esta última al final muerto Eleanor no sabe que hacer con su vida por lo que, cuando se le presenta la oportunidad de ir a Hill House, no duda en aceptarla. Estos 4 personajes y el escabroso sitio Hill House serán la mezcla perfecta para una novela llena de suspenso, misterio y extraños acontecimientos… ¿Te atreves a recorrer los pasillos de esta casa?
Este libro, a pesar de ser sumamente pequeño, me imponía bastante, tenía muchísimo miedo de leerlo, y no exactamente por la temática “spooky”, era más bien que llevo varios años sin leer autores clásicos o tan contemporáneos como la buena Shirley Jackson y estoy un poco desenganchada de su forma de expresarse y de su uso de lenguaje (la verdad es que con los años me he vuelto un poco floja para ciertos retos lectores, pero ya estamos trabajando en ello y en seguirme retando con nuevas lecturas). Así que ese libro se quedó un buen rato acumulando polvo en mi librero, pero, como surgido de un abismo infernal, apareció el Miedotón y todo cambio. El Miedoton es un maratón de lecturas de terror que organizó mi querida Vikinga Lectora y así llegó el momento de la Maldición de Hill House de abandonar mis estanterías y enamorarme con su historia. Desde las primeras páginas me enamoré de la ambientación tan terrorífica y magnífica, pero ya para finalizar las primeras 50 páginas yo estaba enamorada de la pluma de la autora y ahora quiero leer todo lo que tengo de ella (La Lotería nada más lol) porque me encantó su forma de expresarse, su manera de utilizar las palabras (era tan bello todo) y la forma en que fue entretejiendo una historia de terror y suspenso sin necesidad de sustos o descripciones profundas y detalladas, solo un par de momentos realmente aterradores, todo lo demás era una construcción lenta, paso a paso que llevaba a sustos terribles. Lo mejor de todo fue mi experiencia leyendo el libro, pues lo leía a eso de la medianoche y realmente me ponía nerviosa (tiene años que un libro de terror no me ponía tan a la expectativa de que algo pueda pasar, así que disfruté muchísimo la experiencia).
Realmente no hay mucho más que decir de esta novela, es muy pequeña y no quiero caer en algún spoiler, solo diere que la ambientación y la bellísima prosa de la historia son suficientes para que esta enamorada y a los pies de Hill House. Les recomiendo muchísimo esta lectura para estas fechas en las que buscamos lecturas temáticas, no tiene sustos grandes así que no se preocupen por dar uno que otro brinquito y mejor dejénse llevar por la atmósfera genial de la historia. Un pequeño consejo es que escuchen la banda sonora de la historia, la pueden encontrar en Youtube, les ayudará a adentrarse más en el libro y les dará una experiencia maravillosa. Sin lugar a dudas, La Maldición de Hill House se ha vuelto una de mis historias favoritas, ¡Altamente recomendable!

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Wow, ¡por fin una novela creppy que me pone los pelitos de punta! Lo he pasado mal con este libro, pero a la vez no puedo negar que ha sido super emocionante leerlo, conocer a sus personajes tan extravagantes, adentrarme en los pasillos de esta mansión encantada (o maldita, aunque ¿no es acaso lo mismo?), sorprenderme por los sustos y el hechizo que tiene sobre los que se atreven a permanecer entre sus paredes durante más de un par de noches.

Ha sido escalofriante, enrevesada y retorcida, de esas historias que vas leyendo y se introducen dentro de ti hasta que no sabes dónde acaba la novela y vuelve la vida real, cuando dejaba este libro de lado aún seguía bajo el embrujo de Hill House, pensaba en sus personajes, pensaba en su pasado, pensaba en lo que podía pasar la siguiente noche y pensaba en la pobre Eleanor. Porque sí, quizás no he terminado de conectar con los personajes por sus grandes dosis de extravagancia, pero la vida de la protagonista es triste y desdichada, sus pensamientos revolotean hasta sentir lástima, aunque sin surgir esa necesidad de protegerla y guarecerla bajo tus brazos porque es una criatura frágil que intenta demostrarse a sí misma (o más bien a los demás), cómo de independiente y fuerte es.

El resto de personajes tampoco de quedan atrás, a través de conversaciones sin mucho sentido, se va desgranando su personalidad, sus miedos y sus realidades; sus silencios permiten conocer aquello que evaden, sus actitudes ante determinadas situaciones hacen que puedas verlos completamente transparentes. Y puede ser que no se profundice en ellos demasiado, son ambiguos y escurridizos, pero es justamente lo que más encaja con esta novela, no conocerlos, ver las capas más superficiales que realmente muestran algunos de sus secretos más profundos.

Y el desenlace... uff, ha sido caos y horror, pero me ha maravillado. Realmente deja ese poso de pensar ¿qué acaba de pasar? ¿Qué sucede realmente con la casa? ¿Y la vida de los personajes? Pero me parece perfectamente adecuado con todo lo anterior, con los capítulos cargados de dudas y los personajes difuminados. Creo que no podría haber tenido un mejor final.

Los objetos cotidianos
El doctor en Filosofía, John Montague, lo tiene claro, si quiere realizar un estudio sobre fenómenos paranormales tiene que vivirlos, así que decide alquilar Hill House, una casa de dudosa reputación de la que nadie quiere hablar. Sin embargo, no puede llevar a cabo el experimento solo, así seleccionará a sus acompañantes entre personas que, de una u otra manera, hayan tenido contacto con lo paranormal. Así encontramos a Theo y Eleanor, a ellas se les une Luke, heredero de la casa y por lo tanto necesario para la experiencia.
Con estos ingredientes se nos presenta La maldición de Hill House. En un primer momento reconozco que la novela puede despistarnos un poco, ya que la narración fluctúa entre la descripción muy detallada de los objetos y los pensamientos, quizá algo inconexos, de las protagonistas femeninas. Sin embargo, cuando estamos situados en la casa, durante la primera noche, comenzamos a lanzarnos en una narración que sin dejar los detalles nos abruma por lo desquiciante.
Así, poco a poco la novela nos irá contando las sensaciones de los habitantes de Hill House, aunque se centrará mucho en los personajes femeninos. Con ellos, seremos conscientes de que los cambios se producen en los objetos y las salas de la casa, y que no serán tanto manifestaciones. En este sentido, el terror de Shirley Jackson me ha encantado porque apela a esos momentos en los que miramos un objeto de casa que creíamos que estaba de una manera y se presenta de otra. Es ese terror de lo mínimo que desquicia.
Obviamente a medida que pasan más tiempo en la casa, los fenómenos aumentan en su presentación y en su tensión narrativa. de este modo, Theo y Eleanor comenzarán a tener pensamientos perturbadores, que particularmente me han agobiado por lo reales y por, quizá, la posible frecuencia con la que, sin motivo aparente, aparecen en nuestros pensamientos diarios. No quiero dar más detalles para no hacer spoiler. Por su parte, los personajes masculinos, verán mermada su masculinidad, porque básicamente, a pesar de que lo intentan, su capacidad de protección es nula. Dentro de esa idea de lo desquiciante, este otro punto que me ha gustado de la novela, ese quiero y no puedo de Luke y John.
La clave de lo femenino
A pesar de que no suelo ser muy «política» en las reseñas, en este caso tengo que reconocer que no paro de pensar en que esta novela me ha gustado, tal y como está contada, porque la ha escrito una mujer y las protagonistas son mujeres. Creo que el hecho de que la perspectiva sea femenina ha enriquecido ese miedo por lo mínimo, ese miedo por lo que pensamos y no por lo que hacemos. Stephen King, por ejemplo, que admira a esta escritora, tiene un terror que va desde lo psicológico a lo espectacular, y ha bebido mucho de Shirley, pero no consigue que un «y yo más» sea tan espeluznante como sucede con los personajes de Eleanor y Theo.
Además, la perspectiva de la «ama de casa» creo que tiene un peso importante y necesario en la novela. La autora, a pesar de ser escritora de éxito ya en su época, se vio obligada por su marido a encargarse en exclusiva de sus hijos y su casa. Esto lo vemos perfectamente expresado, por ejemplo, en cómo es Elanor, en cómo es la señora Dudley, en cómo es Theo, y creo esta perspectiva y estos personajes eran muy importantes en la época, pero también en la nuestra, porque hemos avanzado muy poco.
A todo esto tenemos que añadir unas descripciones muy detalladas, pero para nada pesadas, una configuración de escenarios estupenda y una ejecución de diálogos magistral, que se mueven entre lo que se dice, se piensa y se entiende. En definitiva, un estilo muy particular, atrayente y absorbente.
Y no hacen falta más motivos
Todo esto, es decir, el enriquecimiento cultural y literario, más una narración agobiante y desquiciante (perdón por repetirme), hacen que tengamos una historia de miedo que cuando menos nos lo esperemos puede sucedernos a nosotros. Os animo a leer, sin duda, la novela. Espero que os guste

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Me enteré de la existencia de Hill House cuando leí hace como 6 años Salem's Lot. al inicio del libro, King compartió un pequeño fragmento sobre Hill House que despertó mi curiosidad y desde entonces he querido leer el libro de Shirley Jackson.
Ahora con el estreno de la serie de Netflix le terminé dando su oportunidad al libro. Peeeeeeero hace poquito me enteré que la peli La maldición que se estrenó en 1999 era una adaptación de este libro. Cuando era chica amaba esa película, crecí viéndola básicamente. Así que cuando me metí a leer el libro iba con eso en mente y medio me arruinó la lectura.
Qué decir de Hill House? Tenía una idea sobre la historia y resultó que terminó yendo por otro lado.
La premisa de esta historia nos cuenta que el Doctor Montague, un académico al que le interesan los hechos sobrenaturales, quiere hacer una especie de experimento en una casa que tiene fama de estar encantada. Así que para su experimento recluta a personas que han tenido antecedentes de tratar con temas extraños. de los que terminan aceptando unirse al doctor tenemos a nuestra protagonista, Eleanor, a la coqueta y misteriosa Theodora y al sobrino de la dueña de la casa, Luke.
La historia está contada desde la perspectiva de Eleanor, así que es a la que mejor conocemos.
Lo que más me llamó la atención de la historia fue: cómo nos describen a la casa, los comentarios y descripciones de Hill House son exquisitos. Cómo la pintan con una maldad latente, es simplemente genial.
Y lo otro que me llamó la atención son las interacciones de los personajes. Se toman casi todo con un humor inesperado. Sus charlas tienen tintes disparatados y tienden a cambiar de tema o inventarse historias sobre sí mismos.
Los hechos sobrenaturales que viven nuestros protagonistas nos dejan con pequeños sustos e incluso algunos interrogantes. Pero el desenlace del libro es bastante irregular, algunos pueden considerar como el desenlace obvio de la historia. Pero no era lo que me esperaba, acá tiene la culpa la película que les dije antes.
Al terminar de leerlo me pispié algunas reseñas que elogiaban lo que había hecho la historia, eso me dio una nueva perspectiva para considerar la historia. Pero no hizo que me satisficiera como hubiera querido.