Lo que tenemos entre manos no es tanto una novela romántica como costumbrista, en la que se retrata la sociedad de la época desde el punto de vista de las mujeres. Como os podéis imaginar, estas estaban reducidas prácticamente a floreros incluso dentro de la aristocracia. En este estrato, la misión de la mujer era única y exclusivamente conseguir el matrimonio más ventajoso posible para ella y su familia, siempre en términos económicos y de posición social. Este tema lo vemos recurrentemente en otros clásicos como Mujercitas, que ha querido hacer un pequeño cameo en la foto 😜. Orgullo y Prejuicio no es una novela de amor al uso, sino una novela sobre personas buscando, obteniendo y, en ocasiones, perdiendo ese amor. de hecho, el título resume a la perfección al libro, pues los grandes protagonistas acaban por ser precisamente el orgullo y el prejuicio. Salvando el salto temporal, creo que la historia es perfectamente consumible hoy en día y no dudo de que en su momento debió de causar bastante revuelo por las ideas que la autora se atreve a poner en la mente de sus chicas, especialmente de Elizabeth. Si tenéis dudas sobre si leerlo porque el género no es el que más os llama o porque le tenéis respeto a los clásicos, ya os digo que ni es meramente romántico, pues se pueden extraer lecciones sociales, ni la narrativa es densa o lejana, como a lo mejor os habéis encontrado en otro clásico. ¡Dadle una oportunidad! + Leer más |