Rey blanco

4'5

Pues, ¿Qué puedo decir? Me lo leí en dos días. Si has leído Reina Roja y Loba Negra y te han gustado...¿A qué esperas para leer este?- Si no te los has leído te los recomiendo...pero en orden, incluso te recomendaría que leyeras antes otros dos libros del autor: El Paciente y Cicatriz. Ritmo desenfrenado, mucho sentido del humor, mucha más ironía, un montón de muertos, persecuciones, explosiones, diálogos con chispa y dos personajes principales que enganchan.Como final de la trilogía es perfecto, todo encaja, aunque te esperan unas cuantas sorpresas...

Pues vamos allá. Rey Blanco es para mí, y ante todo, el mejor libro de esta serie. Si Reina Roja fue "fuaaaa", Loba Negra fue "whaaaaat", Rey Blanco es "...". Por partes!

El comienzo, sin tener que avanzar mucho ya te dice "quédate reina, que esto te va a gustar". Hay un momentazo (el acuerdo autor-lector me impide dar información) cerca de la página 50 que me provocó mi primera pausa. Demasiada carga, demasiada tensión, necesité un momento para respirar. Antonia, por supuesto, en una explosión de rabia contenida... (no hay mas datos, leedlo)

Segundo momentazo, cerca de la página 250, eso es ansiedad viva. Este fue mi segundo parón. Me vino a la mente solo una pregunta: Juan, no serás capaz, ¿no?

En el tercer momento, casi llegando a la página 400, y que implica toda la cuarta parte de la novela, me quedé sin aliento. Debo decir que en este libro me he dejado llevar, y lo he leído con música (no lo suelo hacer, me distrae mucho, pero ha sido el mejor acierto en días). Me han acompañado durante más de 50 páginas Myrkur y Kalandra, ¡ni queriendo habría elegido una banda sonora mejor a las primeras escenas de esta parte! Tiemblas con las palabras, tiemblas con el sonido. Pocas veces una melodía había acompañado tan bien a un momento como lo ha hecho hoy, sientes en tu propia carne la ansiedad de la situación. He vivido a cámara lenta cada movimiento, cada sensación. He tenido que parar, releerlo, revivirlo (nunca perdió fuerza). Ni las mejores películas han logrado ponerme tan atacada como esto. Me viene a la mente la película adaptada a la novela "La niebla" de Stephen King del 2007, la escena final me traumatizó cuando era niña, me ahogaba. Puedo comparar ese momento acompañado con la música de Mark Isham con estas páginas (en general la película es un poquito 🫣, pero tiene cositas).

No me despido triste de este libro, pese a haber comenzado de forma desordenada, Cicatriz y El Paciente me mantendrán en sintonía durante unas días más. Sólo estoy agradecida a @juangomez por brindarnos estos momentos de su cabezita, por ayudarnos a amar la literatura e impulsarnos a la lectura (que buena falta nos hace).

Más allá de si tiene o no final, esta tercera parte (o quinta según inspiración divina del autor) es, en líneas generales mucho mejor que la anterior.
Tampoco era tan difícil.

Pero me llaman poderosamente la atención dos cosas:

La primera es la mejora repentina de su prosa, sintácticamente hablando, sigue siendo el autor y se le reconoce, pero le han pasado la lima, le han quitado las impurezas, errores, incluso muletillas. Vamos que el editor ha trabajado en lo suyo.

La segunda es el postureo de Jurado con aquello de que Antonia y Jon están en manos del lector.

Muy bien Juan, ya que preguntas, no, no quiero que continue la saga, es suficiente.

El problema es que, no gustándote esta respuesta, no deberías haber realizado la pregunta y voy más allá, hecha, has de respetar los noes, ya sé, las ventas mandan.

En cuanto al libro, el ritmo es trepidante, el autor engancha y entretiene, esto lo sabe hacer muy bien, pero en su rompecabezas hay varios vacíos.

Dudo que sea demérito y por una vez sí creo que es planificado...huele a precuela...al tiempo...

Eso o que nos salga por peteneras, introduzca algún personaje de otro de sus libros y diga que llevaba trabajando la idea de su septualogía 14 años. No colará Juanito.

Saltos aparte (me recordó a Dan Brown y su saltito en Ángeles y demonios) el madrileño tiene un que sé yo, que atrapa, hace que sus libros se devoren y es excelente en tensión narrativa. al César lo que es del César.

Ahora bien, con respecto a Antonia, no le sabe sacar todo el potencial y le sucede con muchas parejas en sus libros, uno siempre se le queda cojo. A Marco Antonio, lo que es de Marco Antonio.

Buen libro, aquí si sentí que formaba parte de una trilogía, White es un villano brillante y donde aparece sube el pan.

No es necesario leer El paciente para esta entrega (ni para ninguna otra) aunque esa lectura aporta mucho sobre el perfil de White.

Notable como thriller individual, como cierre...
El perro del hortelano.

PD. Esta reseña fue escrita mucho antes de que se publicara Todo arde.
Estoy por montar un gabinete de futurología.

Con «Rey blanco» se da por finalizada la trilogía que comenzó con «Reina Roja», pentalogía si contamos «El paciente» y «Cicatriz». Aunque la historia principal queda cerrada, el autor deja la puerta abierta a una posible continuación.

Si has leído «Loba Negra» sabes que finalizó con uno de los protagonistas metido en un buen problema, «Rey blanco» comienza justo en ese punto.

La obra es muy dinámica, adictiva y fácil de leer. Antonia y Jon están en serio peligro en numerosas ocasiones, y eso nos mantiene atrapados.

Cuando conocemos a Antonia ella ya es la Reina Roja de España, ahora vamos a descubrir cómo llegó a serlo. Nos enteramos también del pasado de Sandra Fajardo, una de las villanas. Los secretos que afloran aclaran las cosas y permite al autor darle a la historia un cierre redondo, aunque deja una puerta abierta a futuras aventuras de los protagonistas.

Al principio pensaba que no me iba a enganchar, porque no recordaba algunas cosas de las entregas anteriores y andaba un poco perdida, pero enseguida me metí en materia y quedé totalmente atrapada. Tardé en ponerme con esta entrega, a pesar de tener el libro en casa, por culpa de un gracioso que me destripó una parte. Por suerte no me avanzó tanto como yo creía, pude cortarlo a tiempo.

Encontramos mucha acción, peligros y traiciones, pero también lealtad. Antonia va a tener que esforzarse para atar todos los cabos y mantenerse serena cuando el pasado aparezca para golpearla.

Jon sigue en su línea, ni estando en peligro es capaz de dejar de proteger a su compañera. Hay algunas partes divertidas gracias al carácter de Jon y sus intentos de espabilar a Antonia.

No es una lectura complicada aunque sí muy adictiva, cumple la función de entretener y hacernos pasar un buen rato y también nos da lo que esperamos encontrar al adquirir la obra.

Me lo he pasado muy bien con la lectura, es cierto que algunas cosas se adivinan pronto, pero tiene unos cuantos giros inesperados que te mantienen pegada a la novela.

Ya tengo en casa «Todo arde» y espero ponerme pronto con la lectura. Quiero ir a ciegas, así que desconozco si guarda relación con esta serie o no. Ya os lo contaré cuando la lea.

Si os gustan los thrillers adictivos sin demasiadas complicaciones, esta es una buena opción. Os animo a darle una oportunidad, pero comenzad, a ser posible, por «El paciente».

Tercera entrega protagonizada por Antonia Scott y Jon Gutiérrez, y nos sumerge en una emocionante carrera contrarreloj en diversos escenarios. Obligados por White, los protagonistas se ven enfrentados a la tarea de solucionar antiguos casos sin resolver.

El autor nos guía hábilmente a través de una trama complicada y enrevesada, hilando las piezas del puzle que ha ido dejando aquí y allá durante el relato. al llegar al desenlace, todos los flecos sueltos se entrelazan, y el caos se resuelve de forma satisfactoria.

Esta novela presenta una prosa notablemente más pulida sin perder el estilo característico del autor, creando la sensación de estar leyendo un guión más que una novela.

El ritmo narrativo sigue siendo trepidante, con capítulos cortos llenos de acción que atrapan al lector y lo llevan a devorar una gran parte del libro sin darse cuenta. Una vez más, Juan Gómez demuestra su habilidad para cautivarnos desde las primeras páginas.

En general, en mi opinión, "Rey Blanco" mejora notablemente a sus predecesoras y un final digno para la saga (en principio). Un thriller emocionante que mantiene al lector pegado a sus páginas. Si te gustan los libros de intriga con conspiraciones, esta novela es una buena elección.

"Eso es lo fascinante de los puzles, cuando solo queda una pieza, las demás te indican su forma exacta."

A rey muerto, rey puesto... ¿o quizás no? Afirma el autor que las continuaciones de una obra o su destino pertenecen, en realidad, a los lectores. Ellos tienen la llave de la siguiente puerta. No está tan desencaminado, en un mundo donde lo comercial prima sobre lo intelectual y las secuelas dependen más de los números que de la condición. Por suerte, esta trilogía (o pentalogía) de Gómez-Jurado cumple con esa calidad esperada.

REY BLANCO sigue abierto, da esquinazo a la muerte y deja la siguiente llave en el umbral de lo enigmático. Posiblemente, imposible alejarse del apego de unos personajes que son como de la familia, con sus maldades, extravagancias y sus rarezas, que es la familia si no -nadie es perfecto-, pero los ingredientes de esta ensalada son los mismos que vimos en REINA ROJA y LOBA NEGRA, es decir, si hemos llegado hasta aquí con cierto interés o devoción, difícilmente quedaremos decepcionados con su degustación.

Aparece una mención a Dan Brown que dice: "lleva veinte años escribiendo la misma novela". Curiosamente, los detractores de Gómez-Jurado opinan parecido y lo comparan con el autor de El código Da Vinci en cuanto a formas. No ganarán el Nobel, tampoco lo necesitan, sus libros juegan en la liga de "aventuras para ser devoradas despiadadamente" y pasar un buen rato de lectura ligera, suspense y mucha acción, bien documentada. Puro Rock N Roll escrito en negro sobre blanco. Y ahí siguen sumando puntos.

REY BLANCO cumple con las expectativas, se devora desde la primera página hasta la última, con giros argumentales bien traídos y cerrando los huecos que iban quedando abiertos en REINA ROJA y LOBA NEGRA, dejando espacio para posibles nuevas aventuras con Scott y Gutiérrez. Acción, suspense, incertidumbre y tensión a raudales, cánones del buen thriller. Mr. White cierra su pentalogía, un buen villano siempre otorga mayor empaque a una obra. Ya saben, ese que se parece al que hacía de padre en 'Lo imposible', habíamos dicho...

Pues como que prometía mucho y... Solo eso. No me ha gustado nada su final. Descafeinado, vacío, simplista. Bastante decepcionada, la verdad.

Reina roja se lanzó en 2018, Loba negra en 2019 y el último Rey Blanco en 2022. La serie ha sido un éxito editorial, más de dos millones de lectores se han enganchado a los personajes de Gómez Jurado, solo hay que ver la cantidad de críticas y citas que tienen estas novelas entre los lectores de Babelio. Yo, en la reseña de Loba Negra, ya me declaré una rendida admiradora de Antonia y Jon, los protagonistas, con todos sus atributos, sus personalísimas características y la forma tan estudiada del autor en su creación.
En Rey blanco se descubre el origen del misterio y da final a la serie. Las aventuras que viven Antonia y Jon, en esta entrega llegan a ser tremendas y muy angustiosas, porque corren contra reloj para salvar la vida de Jon, le han insertado una bomba en la espalda y el malo les hace resolver una serie de crímenes, para no hacerla estallar. El final a mí me ha dejado muy satisfecha, y como siempre digo un buen final remata una buena historia.
Yo me he preguntado, leyendo estas novelas, de dónde saca Gómez Jurado tanta sabiduría, solo tiene 45 años, y desde el principio hace un despliegue de conocimiento del ser humano increíble, las citas de Babelio sobre ella así lo corroboran y para muestra un botón: “Más importante que mantenerse vivo, es mantenerse humano” o “Lo más importante de la vida, el 90% es estar junto a quien tiene que estar, el 10% se improvisa sobre la marcha”
Los recursos literarios que emplea aquí, también son su característica en las otras novelas, como las palabras intraducibles, o los sarcasmos y el humor de Jon. Todo ello hace muy recomendable leer estas novelas y conocer la literatura del autor.

Un par de años después de terminar Loba Negra, decidí que ya no podía dejarlo pasar más. Me encantó que tenía los 4 libros anteriores en la cabeza y con un mínimo repaso volvía a tener las piezas en mi poder pero me faltaba colocarlas bien.

Para ello me ayudé de Antonia Scott y Jon Gutiérrez, que son dos protagonistas de los que se quedan, de los que no se olvidan y de los que nos encantaría poder acompañarlos en más casos. Sin duda, uno de los puntos fuertes de la “trilogía” son estos protagonistas y un villano que ya nos encontramos en El paciente y que nos persigue hasta el último de los cinco libros de la imagen, y que no nos dejará indiferente.

Reseñar un thriller es muy complicado, porque puedes contar poco, porque a la mínima que destacas algo o pones algún pero a la trama puedes dar indicios de cosas así que no lo haré. Solo diré que, como los anteriores, cada capítulo te lleva a querer, o más bien necesitar, leer el siguiente. Que cada página está teñida con tensión y emoción. Y que me parece un cierre correcto a esta serie de libros, aunque nos deja con ganas de más Antonia y Jon.

En conclusión, para los amantes del género, Antonia y Jon no pueden faltar en tu biblioteca.


Frases destacadas.

“El mundo es mucho más fácil cuando eres idiota, porque una de las bendiciones de serlo es que no sabes que lo eres”

“La justicia no es satisfacción, es la verdad en movimiento. Porque la primera es imposible, y la segunda es su trabajo”

“Más importante que mantenerse vivo, es mantenerse humano”