Violeta

Una ficción histórica narrada de una manera tan realista que en más de un capítulo te lleva a pensar que estás leyendo una biografía.

A través del siglo de vida de Violeta, la protagonista, y que abarca desde 1920 hasta 2020, contados por medio de una extensa a carta a alguien muy querido por ella, somos espectadores de primera fila de todos los acontecimientos, buenos y malos, que conforman su historia.

Como toda buena biografía digna de ser contada y leída, encontramos amores y desamores, traiciones y lealtades, dudas y certezas. Una mujer que en muchos aspectos es una adelantada a su época pero que en otros aún se siente sujeta a los corsés que la sociedad impone, luchadora por los derechos y libertades de la mujer y defensora de las igualdades sociales sin perder de vista su situación más bien privilegiada, manteniendo cierta ceguera ante hechos que prefiere ignorar, enfrentándose a pérdidas y abusos, la vida de Violeta es apasionante no solo por todo lo que la rodea, sino también por esos personajes que terminan formando su pequeña y elegida familia.

Narrado al más puro estilo de Isabel Allende, ese que te envuelve y te mete en la historia hasta hacerte creer que vives los sucesos junto a los personajes, consigue hilar hechos de relevancia mundial, movimientos sociales o situaciones políticas con distintos momentos de la vida de Violeta para convertirla en un personaje prácticamente real.

Para quienes hemos leído sus novelas, no es difícil relacionar ciertos personajes con algunas personas y familiares que han formado parte de su vida, ni hace falta que nombre Chile para que localicemos allí la existencia de Violeta.



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Mi primera incursión en la pluma de Isabel Allende no me anima en exceso a continuar, pero tampoco a abandonarla por completo. Bien, sin más. Una vida, claro. Ni fuegos artificiales ni necesidad, supongo. Es también un ejercicio de normalidad, pero de haberlo sabido me hubiera saltado esta lectura y hubiera comenzado por la Casa de los espíritus o Retrato en sepia. No está mal, ya digo, pero en un mes lo olvidaré. Bastante mérito por mi parte leer algo tan narrativo.

Violeta nació en 1920, en plena epidemia de influenza, en la capital de Chile. Un siglo después, en 2020, en plena pandemia de coronavirus, escribe está biografía, para que si querido Camilo conozca todos los detalles de su larga vida.
Una vida llena de baches. de momentos que la marcaron de por vida, que la hicieron crecer, que la hicieron entender y la hicieron ser.
Una vida interesante, como tantas otras, una vida imperfecta, donde no siempre tomó las mejores decisiones, no siempre llegó a tiempo. Una vida que, al leerla, te emociona.

Es una novela extensa, a momentos bastante densa, sobre la vida de Violeta, la protagonista. Quizá no sea una vida heórica, de grande hazañas. Pero si muy entretenida.

En mi opinión, el principio es lento y poco interesante, su infancia consta de presentaciones de personajes que más adelante sí tendrán relevancia.

Cuando conoce al padre de sus hijos, la historia empieza a ponerse más interesante, la acción se intensifica y los sentimientos cobran protagonismo. Hasta ese momento no logré engancharme.

Después, los acontecimientos van pasando más rápido y los cambios políticos se vuelven cruciales. Diría incluso que esta novela tiene un fuerte componente político y mucha critical social con tintes feministas.

Es difícil hablar del libro sin hacer spoilers, así que simplemente diré que hay amor, obsesión, viajes, dolor, esperanza, agonía, sufrimiento, impotencia y ternura. Todo junto.

He escuchado mucho que se parece a La casa de los espíritus, pero como yo lo hago todo al revés, he empezado por los últimos libros de Isabel y ese aún no lo he leído. Prometo que será el siguiente.

Isabel me gusta mucho, además, me gusta leerla en verano, es una especie de tradición creada sin querer que he abrazado en los últimos años.

Aunque no sea de mis libros favoritos, es siempre un placer leerla. 💜

Puntuación: 6,75/10

Como no podía ser de otra manera Isabel nos narra de manera clara, directa y fluida los 100 años de Violeta, la gran protagonista de esta historia.
Nacer en pandemia de la gripe española 1920 y morir en la pandemia del coronavirus 2020 😥 (telita con la narración y como he vivido toda la pandemia otra vez) ❤️‍🩹.

Encontraréis muchos acontecimientos históricos, luchas, ideologías, sentimientos, relaciones amorosas, lo que la protagonista nos muestra una persona completamente real y humana. Por ello me quedo con el mayor mensaje de esta historia "La lucha de una mujer por vivir su propia vida".

Allende narra muchas barbaries que han sucedido a lo largo de la historia pero nunca intenta polemizar. Se centra en la vida misma,como la pureza de las cosas, la solidaridad, en que nunca es tarde para amar…

Me ha entretenido mucho esta historia, hace que devores las páginas, te emociones y también valores la vida.

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A Isabel Allende la leí mucho hace tiempo y siempre al terminar uno de sus libros me sentía un poco huérfana y con el corazón encogido. La única manera que encontré para describir su escritura suave y bonita fue comparándola con una caricia al alma. Largo pétalo de mar no lo fue y Violeta mucho menos.
Violeta es la narradora del libro, una mujer de 100 años que nació en medio de una pandemia y ha vivido lo suficiente como para padecer otra. Ella es la voz de una época. Épica y apasionante según la contraportada, aburrida y falta de atractivo para mi.
A Violeta le falta fuerza, pasión y personalidad. le falta atraparte. La sensación que tuve fue la de estar escuchando el rollo de una abuela, plano y lineal, sin sorpresas, como si la escritura de Isabel Allende se hubiera aguado con los años y hubiera perdido garra y profundidad.
Fue una autora muy importante para mi y tiene un lugar especial en mi biblioteca. Con ella descubrí un mundo y un estilo preciosos y agradables que eran casa. Por eso, me duele no sentir lo mismo con sus historias más recientes. Pero, quiero seguir probando. Necesito recuperarla.

Es increíble como una novela como Violeta nos puede enseñar que los seres humanos no hemos aprendido la gran cosa en estos 100 años que han transcurrido a partir de la época en la que inicia la historia. Violeta inicia con una pandemia, una pandemia como de la que justo va saliendo la humanidad y la manera en la que se narran los acontecimientos en Violeta te deja helado porque es ese mismo comportamiento de incredulidad y superioridad ante las enfermedades el que imperó en estos dos años. Y de la crisis económica ni hablar, es tanta la similitud que te llega a confundir.

En cuanto a la historia. Violeta es de esas novelas que yo disfruto sobremanera pues no deja ningún cabo suelto ya que no solo conoces la vida de nuestra protagonista de inicio a fin, también disfrutas de conocer a otros personajes que de alguna manera influyeron en su vida y ella, al haber vivido una vida larga, nos brindará un amplio repertorio del cual es difícil tener un favorito pero, en mi caso, fue Torito el que se ganó un espacio en mi corazón.

Isabel Allende tiene una facilidad para presentarnos a mujeres fuertes, empoderadas, con ideas progresistas sin importar el año en que transcurra la historia y esta ocasión no es la excepción.

Con Violeta conoceremos a muchas mujeres valientes que merecen todo el respeto y la admiración del mundo pues aun cuando nacieron en una época donde la mujer carecía de voz y voto, supieron imponerse e impulsarse hasta llegar a ser y hacer lo que les venía en gana. Y esa sensación de poder con el mundo se transmite a cualquier lectora que se deje seducir por esta novela.

La historia básicamente es la de una mujer que nació en los años 20, que sufrió desavenencias en sus relaciones amorosas y además se tuvo que enfrentar a situaciones tan ambivalentes como las que solo se viven con los hijos. Una mujer que lucho, progreso y se reconcilio con la vida hasta sus últimos días.

En resumen, una novela entrañable, vasta en personajes y acontecimientos tan memorables que llevan al lector a través de una línea del tiempo que sin duda disfrutará.

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Lo que me encontré al leer "Violeta" fue una grandísima historia de la mujer que da título a la novela. Abarca desde 1920, con el nacimiento de la muchacha en plena "gripe española", hasta 2020 con la famosa pandemia por coronavirus. Podemos ver cómo ella y esta familia pasan por diferentes guerras en su país natal, Chile, como lo pierden todo y logran sobrevivir. También hay amor, desamor, tragedias, momentos muy cálidos y mucha documentación histórica.

Isabel plasma en Violeta una mujer valiente, con una gran evolución pese a los duros sucesos que la acompañarán, una mujer empoderada que luchará por los derechos de la mujer.

Aunque pueda parecer que al narrar durante 400 páginas toda la vida de una persona, es una lectura totalmente ágil, que consigue meterte dentro desde el primer capítulo y de la que querrás saber lo que pasa en cada año de su vida.

Excelente novela. Volvió a la bella pluma de sus primeras novelas, la extrañaba. La recomiendo.
Violeta, la protagonista, narra a través de una carta a una persona que adora detalladamente su vida, sufrimientos, pérdidas de seres queridos, desengaños amores, amores apasionados, momentos alegres, las dos pandemias (La gripe española y covid 19). También contando los momentos históricos más relevantes del siglo XX.

Una historia llena de ternura, amor en todas sus variantes y una lucha constante. Violeta vive toda una vida de la que aprenderá de la única forma que tenemos, equivocándose y asumiendo la situación a la que le llevan sus errores.
Isabel Allende vuelve a crear una historia que retrata 100 años de lo que suponemos es Chile (nunca lo dice expresamente), en un relato enternecedor.

Violeta de Isabel Allende, publicado por @plazayjanes
Isabel Allende nos narra la vida de una mujer de cien años, desde su nacimiento –que coincide con la época de la llamada “gripe española”– hasta sus últimos días en 2020 -en medio de otra pandemia, la del Covid-19- . Recorre acontecimientos importantes en el ámbito político y social de Chile durante el siglo XX y cómo ella vive dichos cambios. Pero lo que más me ha gustado es el cambio, la evolución que hace la propia protagonista, una mujer fuerte, inteligente, trabajadora…Los pensamientos de esa anciana a toro pasado son maravillosos, su humor, su forma de ver la vida mientras sucedían las cosas y como, a sus 100 años, las ve ahora. No es una obra maestra, pero es muy entretenida de leer, pasas muy buen rato y lo más importante: te hace olvidar y reflexionar.