Nos reencontramos de nuevo con la familia Sempere y con mi favorito Fermín, que vuelve a destacar por sus comentarios. En esta ocasión, el peso de la novela recae sobre un nuevo personaje, Alicia Gris que me encanta por su peculiar personalidad. Superviviente nata, herida en la infancia por una bomba. Es una detective a sueldo que trabaja en la sombra para el Régimen y trata de encontrar al Ministro de Cultura desaparecido. En su investigación irá recomponiendo un puzzle que conecta con la historia de su vida, poniéndola en contacto con el resto de los personajes. Mujer excepcional que levanta pasiones pero que a la vez sufre un tremendo dolor físico y emocional que marcan su carácter. Una mujer peligrosa y a la vez frágil, que consigue revelar un misterio que nadie quiere que se descubra. La novela presenta la España de la postguerra, los esfuerzos de la gente por seguir con sus vidas, las relaciones de poder entre las altas esferas, las tramas de venganza, las traiciones y los abusos que se produjeron después de la Guerra Civil. Y sobre todo se plasma el peligro que tiene salirse del camino dictado por el régimen. Alicia que cuenta con el beneplácito del Ministerio del Interior debe trabajar en la sombra con el riesgo de que la suerte se le vuelva en contra. A su vez comparte protagonismo con un policia impuesto para ayudarla y que será un compañero paciente y comprensivo en sus aventuras. Encontramos malos, oportunistas, traidores, héroes, víctimas y supervivientes… El lenguaje es muy ágil, con misterio e incluso humor en algunos pasajes, mientras en otros es emotivo y nostálgico. Mantiene un ritmo trepidante hasta los últimos capítulos. Vamos saltando en la historia de España desde el inicio de la guerra hasta la muerte de Franco y recorremos muchas de las vivencias de la población. Una trama impresionante que nos estremece por el drama que transmite. Entretenida, apasionante, interesante, intrigante y emotiva.
+ Leer más