Siega

Vaya enganche con este libro. No sueo leer distopías pero vi tantas buenas reseñas de este libro que me lancé, ¡y cuánto me alegro!

Nos encontramos con una historia fluida, con acción desde el principio y con protagonista principal femenina que aunque es adolescente, tiene bastante asentada la cabeza.

El worldbuilding me ha encantado. No hay muerte, no hay dolor, la sociedad vive feliz y una mente artificial controla todo menos la muerte... 🤔👌🏻

Además, mención especial merece la edición de Nocturna, que como siempre me encandila con sus páginas negras al inicio de cada capítulo 😍

3.5 estrellas Creo que la idea principal de la historia es muy interesante. Y hay ciertas situaciones en la historia que no vi venir y que me sorprendieron mucho. En general me gusto el desarrollo de la historia y voy a continuar con los siguientes libros. :)

Siega es una novela que a priori tiene todo lo que a mí me gusta. Me encantan las distopías, y es una distopía muy interesante y de esas que dan que pensar. Tiene ritmo ágil y entretiene mucho, la lees sin apenas darte cuenta. Está claro que va dirigida a un público más juvenil pero he de decir sin ambajes que a mí también me ha conquistado y, aunque, como dicen por aquí, no me ha volado la cabeza, la he disfrutado lo suficiente como para recomendårosla sin ninguna duda.
La historia seguro que ya la conocéis porque es una de las que han pululado por Instagram hasta la saciedad. Nos presenta un mundo sin muerte y todo lo que ello conlleva, incluída la necesidad de poner una cota de " muertes necesarias " para mantener el equilibrio demográfico. Aquí es cuando entra en acción la institución de la Guadaña y la figura de los segadores, los encargados de hacer este trabajo sucio pero necesario. No me negaréis que el tema es más que interesante y puede dar lugar a muchas reflexiones. En este caso el libro reflexiona sobre este tipo de sociedad y todo lo que conlleva, pero de una manera un tanto superficial, sin entrar en profundidad en lo que sería algo así, en la necesidad de adaptarse y olvidar muchas de las convenciones y de la ética que conocemos hasta ahora. El ser humano ha convivido con la muerte desde siempre, es parte de su existencia, y eso no lo ha convertido en algo mejor, al revés, muchas veces ha usado este hecho en contra de su prójimo. Cuando esta amenaza desaparece todo cambia pero entonces aparece la figura de un segador cuyo deber es matar para equilibrar la balanza. ¿ Es esto un asesinato necesario? ¿Matar está bien en este caso?.
Sólo os dejo estos apuntes sobre el libro pero está claro que estas reflexiones dan para mucho y supongo que en otras manos esta historia se hubiera convertido en algo más profundo y más denso. No os preocupéis, en este caso la historia tiene el suficiente interés y ritmo como para enganchar desde el principio y no preocuparnos por nada más. Ah, y es trilogía, así que seguro que el tema se desarrolla más en las siguientes entregas. Veremos qué nos depara.

El worldbuilding que hace el autor en este libro es uno de los mejores que he visto en los últimos tiempos. El autor nos presenta un mundo donde la muerte ha sido controlada y sólo los segadores son capaces de decidir quienes mueren. Sin embargo, el sistema es complejo, ya que nos deja entrever que ese mundo tan bien calculado, en realidad, responde a criterios meramente humanos.
La historia del libro es buenísima. Ambos protagonistas (Rowan y Citra) son dos adolescentes que son elegidos para convertirse en segadores. La introspección de los personajes, la manera en la que están narradas sus perspectivas y cómo el autor juega con ellos me parecieron sublimes. A lo largo de este primer libro, la trama va evolucionando de manera gradual, pero sin olvidarse de los continuos plot-twist de la historia. Porqué sí, la trama es buena y encima está lleno de giros inesperados.
No quiero desvelar nada de la trama, porque es mejor ir descubriéndola y dejarse sorprender. Pero prometo que os dejará con la boca abierta
La única pega, es que lo leí en inglés y creo que lo hubiese disfrutado más si lo hubiese leído en español. Sin embargo, me muero de ganas por saber cómo continúa esta historia y más aún con ese inesperadísimo final de la primera parte.

En resumen: Adictivo, con un gran worldbuilding, muchísimos giros de trama y unos personajes de 10.

Puntuación: 4.5/5⭐⭐⭐⭐🌟

🖤Review🖤

🇬🇧I loved the worldbuilding of this story as much I loved the characters of the book. Scythe is full of plot twist that made me binge read the book. I wasn't expecting almost any of the things that happened in the story. Also, I loved how the characters developed and the story between them. An addictive book, full of action and plot twists.

4.5/5⭐⭐⭐⭐🌟
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📖 En síntesis, podemos decir que este libro es una distopía (muy) juvenil.
Me parece que parte de una premisa muy guay y original: la humanidad ha alcanzado el conocimiento absoluto hace cientos de años y se ha conquistado la mortalidad. La gente ya no muere por accidentes o causas naturales, pero, para que siga habiendo recursos (y espacio😅) para todos los humanos, ya inmortales, hay que realizar cribas. Y ahí es donde entra la figura del segador, que es el encargado de ejecutar esta criba.
La gracia del libro es este trasfondo moral, y es que ¿qué criterio siguen los segadores para cribar a alguien, para decidir quién vive y quién muere?

📚 Creo que es un libro con muuuuchas posibilidades y se me ha quedado un poquito corto, superficial. Bien es cierto que quedan dos libros más de esta trilogía para poder sacarle más chicha, ¡veremos! Eso sí, es entretenido, se lee súper rápido y se sale de lo habitual.
Me fastidió un poco la idea del argumento el pensar... Bueno, girl, poned un sistema de control de natalidad y santas pascuas, ¿no? Así no hay que matar a nadie 🤷🏻‍♀️ pero debe haber sido un comentario común porque ya he visto que el autor intenta resolver este lapsus en el siguiente libro 🙈
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Siega es un libro que nos presenta un mundo distópico dirigido por una especie de inteligencia artificial llamada Nimbo. En este mundo no existe la muerte, por lo que se creó una organización con poder propio llamada la Guadaña, formada por segadores, quienes se encargan de cribar a las personas para acabar con la sobrepoblación. A partir de aquí, vamos a conocer el mundo de la mano de Rowan y Citra, quienes son elegidos para convertirse en segadores y deberán superar una serie de retos para conseguirlo.

La historia me ha encantado, en mi opinión el autor ha creado una gran historia con un mundo y unos personajes también estructurados y desarrollados, que no puedo hacer otra cosa que admirarle.

Una de las cosas que más me ha gustado es que enfrenta la moral contra el poder, haciendo que unos personajes se enfrenten a principios de ética a la hora de cribar, mientras que otros criben por el sentimiento de poder que les da llevar a cabo la criba. Esto va a hacer que nuestros protagonistas se enfrenten a retos con su propia integridad ética a lo largo de toda la historia.

Por otro lado, me ha gustado mucho que a lo largo de los capítulos aparezcan testimonios de los propios segadores, exponiendo sus sentimientos y principios acerca de la criba y también que, tras convertirse en segadores, tengan que elegir nombres de personajes históricos importantes, dejando atrás su propia identidad.

Los personajes me han encantado, sobretodo Citra, pero no quiero decir mucho más porque quiero que la conozcáis por vosotros mismos. Simplemente quiero destacar que vamos a ir viendo un gran desarrollo a la largo de toda la historia.

En este caso, no puedo destacar nada negativo porque la historia me ha maravillado. He de decir que llevaba las expectativas por las nubes y no me ha decepcionado ni un ápice.

¿Os imagináis un mundo donde no existiera la mortalidad? Siega nos lleva a ese mundo donde nadie puede morir,para no superar el límite de población establecido existe el trabajo de los segadores. Conoceremos Citra y Rowan que tendrán que aprender a ser segadores,aunque aún no desean ese trabajo. Me encanta esta saga,el mundo Nimbo y como puede perder valor muchas cosas por el hecho de no poder morir. Lo que molaria tener en este mundo son los nanorobots. Que te curas muy rápido y no sientes dolor.

En el mundo de Siega no existe la muerte. La humanidad ha alcanzado tal nivel de desarrollo tecnológico que la muerte ha sido eliminada de la vida de las personas. No solo nadie muere ya por causas naturales, cuando una persona muere debido a cualquier otra causa es llevada a un centro de reanimación y en un par de días está de nuevo viva y en perfecto estado. La muerte es menos molesta en el mundo de Siega que un pequeño resfriado en el nuestro. Los seres humanos son pues inmortales y tienen la posibilidad de “reiniciar el contador” cuando les parece oportuno, rejuvenecer su cuerpo hasta la edad que les parezca más adecuada. Por si no fuera poco todos tienen miles de nanobots microscópicos inyectados en el cuerpo que sanan cualquier posible herida y evitan el dolor físico. Seres humanos inmortales con cientos de años de edad viviendo en cuerpos jóvenes y perfectos. Además, hace décadas que la humanidad llegó a la cumbre del conocimiento, no hay nada que la humanidad no sepa ni nada que le quede por inventar. Inmortales centenarios con acceso a todo el conocimiento posible. Quien dirige este mundo perfecto es el Nimbo, una superinteligencia digital justa y equitativa que ha llevado a la humanidad a su culmen. Neal Shusterman abunda en diversas ocasiones en el absurdo de una vida sin complicaciones. Los seres humanos de esta novela son personas sin objetivos ni metas. En un mundo en que se ha alcanzado ya todo el desarrollo tecnológico posible, nada queda por inventar, las personas acuden a las escuelas y universidades más por ocupar su tiempo que por un interés genuino en tener más conocimientos. El Nimbo controla absolutamente todo en el mundo, desde los coches que conduce de forma remota, hasta el último proceso de la fábrica más remota del planeta. Las personas acuden al trabajo cada día como forma de mantenerse ocupadas, pero lo cierto es que nada de lo hagan en su puesto de trabajo tiene una importancia real, pues todo está dirigido y controlado por el Nimbo. Nadie muere, nadie pasa hambre, nadie se queda sin trabajo, nadie tiene un aspecto que no desee tener. La vida dura centenares de años pero pasa entre la más absoluta rutina y falta de pasión. En el mundo de Siega no existe la muerte, así que la humanidad la ha inventado.

El único problema real de la humanidad es la sobrepoblación en un mundo limitado, y el último acto de verdadera libertad humana antes de entregarle el mundo al Nimbo fue la creación de la Guadaña. Esta organización es responsable de mantener a la humanidad en unos números compatibles con los recursos y el espacio del planeta. Los miembros de esta organización, los segadores, son los encargados de cribar a la población. Acabar con la vida de las personas de forma aleatoria, equilibrada y aséptica para mantener a la población en unos límites aceptables. Todo perfectamente organizado, con unas normas y unas cuotas que cada segador debe cumplir. Las víctimas de los segadores son las únicas que no pueden ser reanimadas. Cuando un segador mata, lo hace para siempre. La Guadaña es la única organización totalmente ajena al Nimbo y los Segadores las únicas personas que no son controladas ni pueden tener acceso al mismo. El último reducto de dominio humano, y por tanto el único lugar en que las viejas costumbres humanas de la política, la traición, la intriga y el ansia de poder todavía siguen vigentes.

Todo Siega es una crítica a la sociedad de la comodidad. Si tenemos lo que queremos cuando lo queremos, dónde queda el mérito, dónde la emoción. Hacen falta esfuerzos, sufrimientos, escasez, en definitiva, anhelo por una vida mejor para hacer a las personas moverse hacia delante. Uno de los aspectos más interesantes de Siega es el propio concepto del Nimbo, contrariamente a lo que estamos acostumbrados en historias en las que un superordenador toma conciencia y trata de dominar el mundo, el Nimbo no es un ente maligno, no se trata de una inteligencia artificial autoritaria con afán de autorreplicación y dominio sino una inteligencia con un sentido de la moral y la justicia más elevado que el de los seres humanos a los que gobierna. El Nimbo es al fin y al cabo perfecto, y como tal gobierna el mundo de forma sabia y equitativa, dando a cada uno lo que necesita en el momento en que lo necesita y repartiendo los recursos de la forma más justa. En un determinado momento se dice que el Nimbo decide qué delitos persigue y cuáles pasa por alto, no porque no los vea –el Nimbo lo ve todo- sino porque decide que no merecen ser perseguidos. El Nimbo es capaz de discernir entre un verdadero acto de maldad intencionada y un inocente accidente con un sentido moral e incluso humano del que la fría justicia humana carece.

La Guadaña es todo lo que le falta a esta humanidad perfecta. Externamente la presencia de los segadores presenta una amenaza de muerte real. Los segadores se pasean por la calle con sus largas túnicas causando miedo y rechazo en las personas con las que se cruzan, dándoles algo que temer, algo de lo que huir, algo a lo que admirar incluso –los segadores son temidos y adorados como auténticas estrellas a partes iguales-. de esta forma la muerte se convierte de nuevo en algo cotidiano, algo con lo que vivir, algo que encontrarse al pasear por la calle. Una de las pocas emociones intensas y reales que quedan. Internamente, los segadores son las únicas personas del planeta con un trabajo que importa. Más allá del debate sobre la diferencia entre la muerte y el asesinato –del que hay mucho en la novela- las acciones de los segadores se mantienen en el tiempo, tienen un impacto en las personas y en la sociedad, tienen una responsabilidad, algo por lo que vivir. En un mundo de personas inmortales, los segadores son los únicos que están realmente vivos.
Enlace: http://quienvigilaaldrender...

Escribir Ciencia ficción no es fácil, por lo general los autores retoman temas antes tratados y le dan un "toque" propio.
Comencé a leer este libro temiendo encontrarme otra trilogía estilo "Los Juegos del Hambre" o "Divergente", afortunadamente mis sospechas fueron infundadas.
A partir de la perspectiva de dos adolescentes el autor nos introduce en un mundo utópico, en la que la humanidad a logrado vencer la muerte, el envejecimiento ha dejado de ser un problema y los suicidios y accidentes fatales son bromas de mal gusto.
Tampoco existen gobiernos independientes ni guerras; la sociedad está " organizada" por el Nimbo, una IA que evolucionó de la "nube" actual y se encarga del bienestar general.
La única organización independiente a Nimbo son los segadores, una especie de fuerza político-militar cuyo objetivo radica en mantener el equilibrio de la población humana...
O sea, son los únicos con licencia para matar.
Pero no se trata solamente de un buen "worldbuilding", la novela tiene un ritmo ágil, fresco, las páginas pasan ante nosotros sin casi darnos cuenta, y cuando piensas que sabes hacia donde va encaminada el autor te sorprende con giros inesperados.
Los personajes están bien logrados, aunque los secundarios se roban el protagonismo. Quizás uno de los pocos elementos que pudieran resaltarse como negativo.
Romance bien tratado, intriga y acción son elementos presentes en esta novela, pero a mi juicio lo mejor es la inquietante reflexión a las que nos lleva el autor a través de los fragmentos de diario que dan inicio a cada capítulo.
En resumen, Siega es una novela que no sólo deben leer los amantes de la ciencia ficción... Espero que su continuación sepa mantener su calidad y no se pierda en la cotidianidad del género.

"Sentir dolor nos libera para sentir la alegría de ser humanos."

En ocasiones no podía parar de leer. He profundizado relativamente poco en distopías pero me ha convencido para seguir con este género y con este autor.

Me ha gustado mucho cómo trata un tema tan trascendental como la muerte, las reflexiones que hace sobre la humanidad, el envejecimiento o más por encima las religiones y muchomuchísimo los fragmentos sobre diarios (de sus señorías Curie, Faraday y demás - algunos los he marcado y hasta los leía en voz alta-).

Mientras leía me he dado cuenta de que a diferencia con otras distopías donde prima el caos, esta es totalmente diferente, ya que a este mundo se llega gracias a que la humanidad ha vencido a enfermedades y guerras y se conquista la muerte: “sin embargo, como ocurre en tantas ocasiones, una vez que poseímos el conocimiento infinito, de repente nos pareció menos importante”

Si tuviese que resaltar algo que me ha hecho fruncir el ceño ha sido la relación entre Citra y Rowan *hablo desde el desconocimiento de que no sé como es en los siguientes libros*, pero como no me lo he tomado como lo principal -estaba yo errequeerre con el tema de la muerte- pues le he dado menos importancia.