El mentiroso

Leída dentro de la iniciativa #agostonegro

Tengo sentimientos encontrados con este libro.
El punto de partida de la historia está bien si no eres tiquismiquis, según se desarrolla se va entreteniendo demasiado y se hace un poco largo, aunque los capítulos cortos y la propia narración hace que la lectura sea rápida y fluida, te mantiene enganchado.

Yo no soy muy hábil pero estaba clara la motivación, quién es él/la los/las asesinos/as menos… Hay un giro final que me comentaron que era buenísimo, a mí me ha parecido un poco culebrón peliculero de A3.
Por otro lado, me ha gustado la ambientación, hay mucha descripción, pero muy bien integrada en la historia, muy chula.
De los personajes me quedo con el abuelo del protagonista que refleja la dureza de afrontar el inicio de una enfermedad degenerativa, como tienen que hacerse cargo los familiares, la ayuda necesaria y el propio enfermo que es consciente de lo que se le avecina.
¿Lo recomiendo? Sí, es ameno y entretenido, aunque no ha sido la novela de mi vida me ha gustado leer a este autor que era nuevo para mí.

Creo que ya es más que sabido que Mikel es uno de los autores nacionales de thriller que más me gustan. Lo que siempre destaco de su estilo narrativo es la capacidad de construir unas magníficas ambientaciones y ciertos momentos de tensión.

En esta novela, el autor vuelve a recurrir a sus habituales habilidades para contarnos la historia de un jardinero que se despierta aturdido en una fábrica junto a un cadáver. Un episodio de amnesia le impide establecer hasta qué punto él está implicado en la muerte de ese hombre.

Mientras descubrimos lo que está sucediendo a manos del protagonista, recorremos el imaginario pueblo costero de Illumbe, lugar que ya tuve el placer de conocer en la última novela de Mikel “en plena noche” que debo reconocer que me gustó mucho más que esta.

Esta historia me ha entretenido y como comenté presenta diversos momentos de absoluta intriga y tensión, pero quizá en algunos tramos se me ha hecho algo repetitiva, no terminando de fluir a tanta velocidad como otras de sus anteriores novelas. Aún así es un libro que he disfrutado, si bien es cierto que no se coloca en mi top de las del autor.

De momento mis tres favoritas siguen siendo: la última noche en Tremore Beach, en plena noche y el extraño verano de Tom Harvey.

Pero como siempre, les animo a descubrir y seguir leyendo a Mikel porque de un modo u otro siempre consigue trasladarte a esos pasajes que recorren sus personajes.

Thriller eléctrico, vibrante, contemporáneo, ambientado en un pueblo costero vizcaíno, cargado de suspense e intriga en el que nada es lo que parece que me ha mantenido atrapado de principio a fin y en el que se demuestra como una mentira mal utilizada puede convertirse en algo imposible de controlar.

Alex, de profesión jardinero, pero activo en cuanto a formas ilícitas de conseguir un dinero extra para pagar sus deudas, se despierta un pabellón industrial abandonado junto a un cuerpo con signos de violencia y a una piedra afilada cubierta de sangre, el problema es que el jardinero no tiene ningún recuerdo sobre lo acontecido en las horas anteriores. Con miedo, dudas y totalmente contrariado decide huir del lugar e ir atando cabos a medida que va recuperando ciertos recuerdos de lo que pudo haber pasado en esa horas previas al extraño despertar.

Decide pues comenzar a investigar por su cuenta y tratar de aclarar que el es lo que realmente ha sucedido con un ritmo trepidante, unos personajes cargados de ocultismo y muy bien trazados dentro de un pueblo pequeño en el cual cada uno guarda bajo llave sus secretos más íntimos. Y todo ello en un intervalo muy corto de tiempo, apenas pasan unos días en llegar al desenlace , lo cual favorece el ritmo de lectura.

Muy fiel a su estilo, el autor logra creerte parte de la trama, bien con las descripciones espectaculares de los lugares donde se desarrolla la trama, fusión de realidad y ficción, la importancia del mar y de la lluvia en la zona, también con unos personajes muy naturales y contemporáneos que facilitan mantenerte atrapado pero sobretodo por la forma de narrar en primera persona, en este caso en voz del protagonista, quien trasmite lo que va sintiendo en cada página y tras cada hallazgo o decisión que va tomando, la angustia o la liberación que va surgiendo en sí mismo, para mi la clave de la novela.
Enlace: https://eltxokodeinaki.blogs..

Leí a Mikel Santiago hace tiempo en La última noche en Tremore Beach y me enganchó muchísimo , por lo que tenía muchas ganas de empezar la trilogía de Illumbe, pero creo que entre esto y las criticas tan buenas que estaba leyendo, me hice unas expectativas demasiado altas y, a pesar de que El Mentiroso tiene una buena historia y se lee muy rápido, para mí gusto fue de más a menos, no terminé de empatizar con Alex, el protagonista de la historia y se me hizo un pelín largo el final. Por el momento tengo aparcado el segundo libro en la estantería de Pendientes que no urgen.

Este libro me ha enganchado mucho, forma parte de une trilogía que se desarrolla en Illumbe, un pueblo imaginario y misterioso de País Vasco. El lector se encuentra hundido en un laberinto en el que se entremezclan verdades et mentiras hasta descubrir lo que ocurría realmente al personaje principal, Alex un joven jardinero que se despierte al lado de un muerto desconocido en une fábrica abandonada.

Este libro me ha encantado. de los que ha escrito Mikel Santiago hasta este mismo momento, este es mi libro favorito. Te tiene intrigado en todo momento. Me ha gustado que haya dividido el libro en partes y que los capítulos dentro de estas partes no sean demasiado largos.

Las ganas que yo tenía de leer la trilogía de Illumbe no eran de este mundo. Cuando leí “La última noche de Tremore Beach” pensé que si un libro en el que hay algunas cosillas paranormales me engancha, es que este hombre es muy bueno.

Con “El mentiroso” se abre la trilogía y confirmo que Mikel Santiago se cuela entre mis escritores de apuesta segura:

Más allá de la historia, es la forma de escribir… me engancha desde que empiezo a leer. Hay pocos libros o escritores que consigan que desde la primera página ya esté dentrísimo de la historia. Mikel es uno de ellos.

Una ambientación muy cuidada, que te envuelve y te tiene todo el tiempo entre asustado y tenso. Si es que las montañas y valles del norte siempre son un punto a favor en estas historias.

Los personajes de Mikel siempre son poliédricos. Tienen mil aristas y no sabes muy bien por donde van a tirar y esto hace que te pases la lectura desconfiando de todos y con los “y si…”. Nadie es 100% bueno, ni 100% malo. Real como la vida misma.

Creo que de los libros que he leído de este autor, es el que me ha parecido más flojo…
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El comienzo es un poco raro, nuestro protagonista Alex, tras un accidente de tráfico, no se acuerda lo que pasó durante un periodo de tiempo, asique según avanzamos en la trama tenemos que ir montando la historia…
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Pero nuestro protagonista lo único que soltará serán mentiras , un personaje que no me ha gustado, me ha parecido muy crio, muy quejica, un mentiroso…
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El autor ha “jugado” con lo que va recordando Alex, lo que oculta y lo que pensamos, creando una trama que bueno, no tiene demasiados giros y es poco creíble.
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Es una novela un poco lenta, en la que no se profundiza nada en los personajes , o lo Justo para seguir con la historia.
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El final ha sido un poco predecible y bastante rápido , pero en general es un libro ligero, ágil , entretenido.

Cuantas mentiras ocultamos cada uno de nosotros a nuestros seres queridos, y hasta qué punto llegaríamos para mantener la historia. En esta, hay un mentiroso, sobre todo, pero también hay muchos más. El pueblo de Illumbe es pequeño, pero esconde muchos secretos que amenazan con salir a la luz.
3 días he tardado en leer la novela, y porque otras actividades me interrumpían la lectura, porque si no, la hubiera leído de un tirón, así de adictiva me ha resultado.
La geografía vasca y pueblos como Guernica, o Bermeo son el escenario donde transcurre la acción, pero el autor nos explica al final que tanto el pueblo de Illumbe como la casa de Punta Margúa del abuelo, no son lugares reales. Sin embargo, está tan bien narrado que yo misma me he visto en esos acantilados, y en esas playas. Me ha encantado el retrato de todos los personajes de la novela:
La familia que forma Alex con su abuelo y Dana es entrañable, los quieres enseguida y por extensión, al resto de los personajes, toda la familia de Erin, la novia de Alex, y qué me decís de las amigas de Begoña, la madre fallecida del protagonista, qué trío tan bien diseñado.
Toda la novela es un acierto, y no hay una investigación policial al uso, pero sí hay mucha intriga y mucho suspense. El final casi es de infarto. Muy recomendable para pasar muy buenos ratos leyéndola, yo voy a seguir con los otros títulos de la trilogía.

Si algo caracteriza a Mikel Santiago es su manera de engañar al lector. Una vez más, con "El mentiroso" lo ha conseguido.

Me gustaría destacar que es un engaño limpio, es decir, no se saca un conejo de la chistera, ni quedan cabos sueltos. La historia está perfectamente unida, y con sentido, lo cual hace que cuando todo se descubre, el lector se quede con la boca abierta, ya que al menos yo, no lo había visto venir.

Me encanta la manera en que Mikel Santiago narra sus libros. Me parece muy cercana al lector, como si al final un amigo nos contase la historia. Así consigue que la historia atrape más, al sentirte parte de ella.

"El mentiroso" empieza fuerte, el protagonista despierta en una nave abandonada junto a un cadáver, pero no recuerda nada. Ya con esta premisa, el thriller está asegurado.