Rebeca

Rebeca es un libro del que no se puede escapar, sólo con releer la frase: "Anoche soñé que volvía a Manderley", consigue erizarte de nuevo la piel. Una historia contada en dos tiempos, una trama intrigante, el halo de misterio en la mansión de Manderley y la omnipresencia de Rebeca hacen de esta novela una gran obra de la literatura de la época, un thriller psicológico que Alfred Hitchock adaptó cinematográficamente en el año 1942.
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Maxim de Winter abandona su hogar tras enviudar. Años después viaja a la ciudad de Montecarlo, donde conoce a la que se convertirá en su segunda esposa. Tras los primeros meses de relación, deciden volver a la antigua mansión de Manderley, situada entre un extenso bosque y el mar. La nueva esposa de Maxim se encuentra de pronto enfrentada al servicio doméstico de la casa, que no parece acogerla muy bien, y a la sempiterna presencia de la fallecida Rebeca, a quién conoceréis muy pronto si decidís adentraros en esta turbulenta historia.

Alicia Velasco
@laestanteriaazul

Lo que me ha fallado de este libro ha sido la protagonista. Muy conformista, ingenua y muy sosa. El misterio y todo lo que envuelve el caso de Rebeca me pareció intrigante pero sin más. Además pensé que había algo más ya que a lo largo de la historia no se revela el nombre de la protagonista pero me equivoqué. También sentí que se iba mucho por las ramas y eso me hizo lenta la lectura.

"Rebeca" cuenta una historia con la que puedes empatizar más allá de las peculiaridades de la época en al que está ambientada, te puedes identificar bien con los personajes que aparecen. Comienza como un drama que ahonda en las comeduras de cabeza de una joven recién casada con un hombre rico mayor que ella, pero es mucho más. La historia, además de profundizar de manera muy rica en los pensamientos y emociones de la protagonista, que vive a la sombra de "esa que fue antes que ella", da algunos giros y se impregna de suspense, y la forma en que está construida, con ese final que podría parecer tan abrupto, funciona a la perfección. Cabe destacar además el estilo de Daphne du Maurier, rico en detalles y a la vez ágil. Es una historia muy recomendable y que tiene ese sabor de las historias bien contadas y con sorpresas más allá del efectismo.

Rebeca es una novela que posee una gran historia llena de secretos y misterios que lamentablemente tiene un principio tedioso lleno de descripciones y acontecimientos que solo redundan sin aportar mucho a la historia, así que hay que tenerle bastante paciencia ya que el clímax de la obra llega pasadas las 200 páginas. Por otra parte, la narradora me resultó en bastantes ocasiones muy desesperante por su actitud de excesiva sumisión ( se entiende el contexto, pero no por ello, pude evitar sentir cierto desagrado hacia esta mujer).
Al contrario de esta, el personaje de Rebeca pese a que desde el principio sabemos que falleció, a lo largo del texto se siente su presencia amenazante, tal como si estuviese viva, y esto es porque su voluntad caprichosa pervive con mucha fuerza a pesar de su trágica muerte. Conocer la historia de la protagonista, que en mi opinión es Rebeca se me hizo fascinante y ya solo por ello, vale la pena leer esta obra. A su vez Mrs. Danvers ( el ama de llaves) es una mujer obsesionada por preservar la memoria de Rebeca, lo cual la convierte en alguien espeluznante desde que la mencionan.
Estos dos personajes fueron muy bien construidos y junto al lugar donde ocurren casi todos los hechos (Manderley) y las descripciones que este suscita, hacen que el libro sea una muy buena obra gótica.

En general me ha gustado esta historia, pero no tanto como me esperaba. Aunque me gusta como escribe la autora, se me hacen muy pesados los monólogos internos de la protagonista y hay demasiadas descripciones, tantas que me he llegado a aburrir en muchos momentos. La parte de la historia que más me ha gustado es el último tercio, el resto me ha parecido una introducción demasiado larga y tampoco es que la trama sea algo fuera de lo común que no se haya visto antes, tal vez cuando lo escribió si, pero ahora hay muchas historias parecidas, por eso no me ha sorprendido nada de lo ocurrido. Además, la protagonista tiene una falta de autoestima tan grande que resulta frustrante en algunos momentos y su timidez es entendible al principio pero después se hace cargante, Maxim es un personaje que tampoco me ha gustado por sus prontos, que no puede controlar y por su personalidad, además de otras cosas. El final tampoco es exactamente de mi agrado pero no me molesta. Lo que más me ha gustado ha sido la ambientación y los personajes de Mrs. Danvers y de Rebecca, su falta de sentimientos es genial y lo que provoca en los demás.

Este libro me encantó, empieza un poco lento y monótono, pero muy pronto se vuelve intrigante y decididamente el desenlace es totalmente inesperado, no así el final que se prevé a partir del punto de inflexión de la historia.

Maxim de Winter, viudo, viaja a Montecarlo para olvidar su pasado. Allí conoce a una mujer más joven que él con la que contraerá matrimonio y, tras la luna de miel, regresa con ella a Manderley, la mansión de los Winter. Todo es perfecto hasta que la memoria de la esposa fallecida, Rebecca, aparece continuamente como un fantasma entre la pareja.
La ama de llaves de Manderley, la señora Danvers fue la niñera de Rebeca y está obsesionada con su memoria. Desde el primer momento muestra su hostilidad contra la protagonista, que para ella está intentando "ocupar el sitio de Rebeca" y pretende romper el nuevo matrimonio.
La historia la contará la actual señora de Winter, no conoceremos su nombre, solo sabemos que es una joven tímida, de clase media y que se esforzará por saber lo que pasó con la anterior señora Winter, el misterio que envuelve a Rebeca.

Me ha gustado mucho, sobre todo las descripciones que hace la autora, son realmente magníficas, casi he podido sentir que estaba allí. La historia también me ha resultado interesante y, en mi opinión, nada predecible, me he llevado varias sorpresas. La historia ha sido muy interesante, sorprendente y nada previsible para mí. Siempre pensé que Rebeca estaba viva y que aparecería en algún momento, cuando menos se la esperara, y me quedé a cuadros cuando apareció el barco con un cadáver en el interior; con la boca abierta cuando Maxim confiesa haberla matado, y casi me caigo de la silla cuando además descubro que no estaba embarazada si no que estaba muy enferma. Estaba aún reponiéndome de tanta sorpresa cuando leo que a la protagonista no le importa, ni le asusta, ni le molesta, ni le preocupa...que su marido haya matado a su primera mujer.Lo que menos me ha gustado de la novela ha sido la frialdad de los personajes.

Una prolifica escritora de suspenso y terror, con un estilo muy gotico, oscuro, clasico, presenta este libro de una manera muy inteligente y sofisticada, con una narrativa en primera persona donde ya deja ver el suspenso implicito, al no mencionar nunca el nombre, posteriormente va devanando, en situaciones aparentemente cotidianas , el terror detras de cada linea, algo como el monstruo debajo de la cama, no sabes si esta o no pero preferirias no descubrirlo, aporta en todo, incluso existe el denominado “ Sindrme de Rebeca, “. ( celos patologicos hacia una pareja, ), a la industria del cine con este , varias versiones cinematograficas, con los pajaros, no mires atras Jamaica inn entre otros, excelente

La historia te atrapa al poco de comenzar y los giros argumentales te mantienen en suspense hasta el final. El libro está narrado en primera persona, lo cual hace que conozcamos a fondo a la protagonista y que seamos capaces de ponernos en su lugar. Los personajes tienen una personalidad muy bien definida y, la mayoría de ellos, están envueltos por un halo de misterio.