Hoy os voy a comentar el libro que para mi ha sido la mayor sorpresa del año. Y sorpresa de las buenas, he de decir. Normalmente espero que las lecturas que escojo me vayan a gustar, pero esta además me ha sorprendido por diferentes motivos. Me explico. . Comienzo la lectura sabiendo sólo lo que me dice el título: vampiros. Bien. El comienzo me presenta unos personajes femeninos que parecen salidos de una serie americana que todos tenemos en mente. Señoras que viven en un barrio residencial a mediados de los 90 y que combaten el aburrimiento propio de las amas de casa de nivel medio-alto con la creación de un grupo de lectura que es la excusa para la dosis de cotilleo necesaria para sobrevivir en esta situación. La protagonista nos va a caer bien desde el principio, algo patosa y buenaza ella, aunque más adelante nos entren ganas de arrearle algún bofetón para que espabile. Y para salir de este aburrimiento aparece en escena el meollo de la historia: vecino nuevo y buenorro que al principio parece rarito pero que acaba metiéndose a todos ( y a todas) en el bolsillo. Hasta aquí todo bien, porque aunque parece que no pasa nada ser lee a gusto y engancha, aunque más parece una novela de costumbrismo contemporáneo que algo de terror. Y de repente...plafff, súper escena gore de esas que te ponen los pelos de punta. Increíble, porque estás leyendo y de pronto te ves inmersa sin darte cuenta y piensa " hostia, qué fuerte ". Y lo increíble es que parece que esto no tiene nada que ver con lo que has leido antes. Flipante. . Bueno, pues este es el quid de la cuestión. Aquí ya te das cuenta de que puede pasar cualquier cosa y que se avecinan sorpresas de las buenas en las páginas que siguen. La vida cotidiana se mezcla con horror, con misterio, con crítica social y con humor muy negro. Y esa parte dónde se muestra tan bien ese machismo encubierto del " es lo mejor para tii, cariño " que lo único que hace es que den ganas de coger el machete y empezar a repartir estopa. Tenéis que leerlo. + Leer más |