Aún recordaba la noche en que siendo una niña algo que se deslizó bajo sus sábanas la despertó, algo pelón, carnoso y frío que trepó por sus espinillas, mientras su hermana soltaba un alto, largo y penetrante chillido como si no fuera a terminar nunca, hasta que su madre apareció corriendo y al retirar las sábanas descubrió una peluda rata agarrada al ombligo de su hermana, mordisqueándolo para abrirse paso.
|