Loba negra

Tres días he tardado en leer Loba Negra. de nuevo desde la primera página enganchada. de nuevo una Antoni Scott sublime y un inspector Gutiérrez que cada vez me gusta más, y de telón de fondo las mafias rusas en España. Merece la pena leerla, aún sin haber leído la anterior, Reina Roja.

No sé cómo escribir mi opinión sobre este libro, pero bueno haré el intento de explicarme. Me gustó mucho la trama y la verdad es que entretiene y engancha un montón, aunque el principio no me pareció nada espectacular (también puede ser debió al ansias que tenía de leerlo...) pero luego coge mucho ritmo y la emoción va in crescendo. Por otro lado hay muchos guiños a canciones, cultura popular, libros, y otros que me imagino que al no ser española muchos se me escaparan que me parecieron excesivos, al igual que algunas descripciones y situaciones que más bien siento que me distarían y me hacían perder el hilo. Lo cierto es que Gomez Jurado me cae bien, me gustan sus libros y me encanta su personalidad en las redes, así que no puedo ser muy objetiva ni muy dura porque tiene mi corazoncito ganado.

Segunda parte de la trilogía de Antonia Scott. de los 3, este ha sido el que menos me ha gustado. No sé si ha sido por las altas expectativas, pero me ha parecido una novela muy previsible y plana. Después de lo que me gustó Reina Roja, donde nos dan a conocer unos personajes increíbles, Loba Negra me ha desinflado y me ha costado mucho terminarlo. Pero es una opinión personal... Conozco muchas personas a las que le ha encantado, así que para gustos, los colores. Pero sí que es verdad que me da la sensación de ir un poco a contracorriente, puesto que hay muchas opiniones positivas sobre este libro.

Hoy mi recomendación va dirigida a los y las amantes del thriller.

Si buscas una novela diferente, original, que rompa con los clichés del género, con un personaje único, fuera de serie, con giros inesperados en la trama, con un final muy bueno, adictivo y que te mantenga en intriga constante, entonces debes leer Loba Negra de @juangomezjurado por @penguinlibrosmx.

Se trata de un libro de poco más de 500 páginas que devoraras en cuestión de días gracias a la forma ágil de narrar del autor, si bien es un libro que mantiene al lector en un estado de tensión constante, rompe cada cierto tiempo con ese ambiente pesado que logra construir echando mano de chistes y bromas muy inteligentes de la mano de Jon Gutiérrez, un personaje que me encanta, sin duda es mi favorito después de la principal quien se llama Antonia Scott, un personaje femenino estupendo, brillante, el ser humano más inteligente del planeta de hecho, pero humana a final de cuentas, con muchísimos defectos y conflictos internos, lo que la convierte en prácticamente una persona real, alguien con quien podríamos toparnos fácilmente en la calle en un día cotidiano, dando mucho realismo y coherencia a la novela. En este segundo libro vemos a una Antonia mucho más vulnerable, por momentos incluso desesperada y derrotada, una mujer cuyos tormentos del pasado se suman a su incapacidad de resolver la problemática que enfrentan llevándola al límite, es bastante interesante ver su evolución a lo largo de esta segunda novela.

Ambos, Jon y Antonia regresan en Loba negra, segunda entrega de la trilogía Reina Roja, cuyo primer libro, homónimo de la trilogía es uno de mis grandes favoritos de todos los tiempos. En este segundo libro Jon y Antonia se enfrentan a la mafia rusa y el tráfico de blancas y de drogas son el marco bajo los cuales se desarrollan los hechos. Nuevos personajes hacen su aparición en esta nueva aventura, por un lado tenemos a Lola, un personaje que juega con el lector generando un vaivén de deducciones y conclusiones, algunas podrán ser correctas pero muchas otras fallidas, y por otro lado conocemos a La loba negra, otro personaje complejo y enigmático, quien precisamente da nombre a la novela, y es por eso mismo que yo esperaba mucho más de este personaje, sin embargo me parece quedó muy justo, no demerita a la novela pero me hubiera encantado algo más de poder.
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Segundo libro de la trilogía de Juan Gómez-Jurado terminado y tengo que confesar que es un libro que en general me ha mantenido en tensión pero que no ha conseguido sacarme ese escalofrío que te recorre la columna vertebral cuando lees algo que te impacta y te mantiene alerta y activo a seguir leyendo el siguiente capítulo.

Los hechos tienen lugar entre Madrid y Marbella. Es en la primera zona, en Madrid, donde descubren un cuerpo en el río Manzanares. Antonia Scott está deseando que ese cuerpo sea Sandra Fajardo.

Mientras da lugar a la investigación por saber de quién es el cuerpo, reciben una llamada que les hará tener que desplazarse a Marbella para dar con el paradero de Lola Moreno que ha desaparecido mientras que su marido Yuri Voronin ha aparecido muerto.

Todas las investigaciones les hará llegar a conocer en profundidad la presencia de la mafia rusa en plena ciudad de Marbella.

Magnífica continuación de la saga, me ha tenido enganchada igual que el primero.
La trama es interesante de principio a fin, aunque es verdad que con esta entrega me he reído menos, Jon sigue sacándome una sonrisa porque es un vasco que no es que esté gordo. Me ha gustado mucho el cambio en Antonia, la evolución de su personaje y como, en mi opinión, se va volviendo más humana. En el primer libro parecía un robot, aquí se nota la influencia de Jon y cómo su carácter va cambiando. Además, empieza a entender los chistes, lo cual es de agradecer.
La historia es trepidante, con persecuciones e investigaciones policiales que hacen que el ritmo no caiga en ningún momento. Los temas que se tratan en este libro son actuales y llevan al lector por los recovecos de las mafias rusas, la trata de blancas y el blanqueo de dinero. Ha sido muy interesante leer sobre todo esto, aunque también ha supuesto abrir los ojos a algo que pasa ante todos nosotros y de los que, el ciudadano medio, no es consciente.
Otra obra maravillosa de este autor que me ha dejado con ganas de más. No soy fan de las novelas escritas en presente, pero en este libro el escritor vuelve a conseguir que suene bien, se lea con facilidad y encima, te consiga meter en la historia.
Ahora, a por el tercero.

Después de leer Reina Roja no pensé que Juan Gómez-Jurado pudiera sorprenderme de la misma manera, pero con Loba Negra lo ha conseguido.
Una novela trepidante que me mantuvo enganchado desde la primera página hasta la última. La trama es muy original y el autor nos guía a través de ella de forma ágil y fluida atrapándonos dentro de la historia. Tiene muchos giros sutiles y que no ves venir, consiguiendo sorprenderme en más de una ocasión.

Según avanzaba la novela, sobre la mitad del libro más o menos, la trama me parecía bastante enrevesada y no veía forma de que se resolviera, pero nada mas lejos de la realidad, Juan Gómez-Jurado consiguió atar todos los cabos y culminar con un final abrumador y que te deja con ganas de más.
Antonia Scott me parece uno de los personajes más tiernos y carismáticos que he leído, conseguirá irritarte y sacarte de tus casillas, pero por encima de eso, te sacará más de una sonrisa y te llegará al corazón. El dúo que hace con Jon es único e inseparable, con momentos de tensión, pero también momentos emotivos. Me parecen el mejor dúo policiaco junto a Fox Mulder y Dana Scully de la serie de televisión Expediente X.

He disfrutado mucho de la novela, y aunque Reina Roja sigue siendo mi favorito del autor hasta el momento, he de admitir que Loba Negra le pisa los talones.

Nueva aventura de Antonia Scott y Jon Gutiérrez. Con una Antonia muy tocada por el anterior episodio con Sandra Fajardo y White. Esta vez se han de enfrentar a la búsqueda de una mujer cuyo marido, componente de la mafia rusa en Marbella, ha sido brutalmente asesinado de un disparo de escopeta.
Empieza entonces una búsqueda en territorio un tanto hostil, en dónde no son demasiado bienvenidos por sus colegas policias de la zona. Persecuciones, adicciones y finalmente un desenlace totalmente acertado y imprevisible abre la puerta para la nueva historia del tercer tomo en donde se prevé Antonia se enfrente a Sandra fajardo y a White en la que se prevé la mayor de las aventuras... sin Jon.

Algo más floja que Reina Roja... Que dejó el listón muy alto. Lo que más me gustan son los personajes, en especial Jon, que se le coge un cariño especial. Además, la forma de escribir de Juan Gómez Jurado me gusta especialmente, se lee rápido, con un lenguaje sencillo... Seguiremos leyendo más libros suyos.
A petición del propio autor no diré nada... Pero la última página es de lo mejor del libro!

Me lo merezco. Que dije que, después de no gustarme en exceso Reina Roja, no iba a seguir con la saga de Juan Gómez-Jurado, y he seguido.
Cuando un libro que se vende como trepidante y adictivo me ayuda a dormir... a mí, que vengo de una familia de insomnes...
Que me resulta hasta difícil reseñar el libro porque algunos días no se si lo he leído o lo he soñado.
A ver, que igual es entretenido y si se vende por algo será, pero que el personaje que más te guste sea el malo (o la mala)... no dice mucho del atractivo literario de la protagonista.
Y es que la Scott, aunque aquí parece más real (y más yonqui, que no se quita las pastillitas de colores de la boca a escondidas de su compañero), tampoco acaba de parecerme redondo su personaje, ni alucinante su capacidad de análisis ni sus métodos de investigación. Su compañero y ella llegan siempre tarde, y además el personaje de Jon ha perdido fuelle. Ha perdido la confianza en Antonia Scott (con razón), se pasa el libro enfurruñado y respondón y su trabajo policial no supera la mediocridad. Como si se hubiera desinflado. Además también me resultan ya un poquito cargantes las frasecitas de canciones de Sabina o Mecano, que parece que el libro no va en serio.
Lo salva el giro final, pero tener que llegar a las taitantas páginas para que apetezca seguir leyendo... pues como que no. Aunque igual es simplemente que estaba falta de sueño con los maratonianos dos últimos meses del año que nos tenían reservados los Juzgados.
Esta vez el argumento incide sobre la mafia rusa, tirando de clichés y estereotipos del mafioso ruso tipo, con sus métodos crueles y sus gustos horteras. Se desarrolla, cómo no, en la Costa del Sol. Y el enfrentamiento no es solo entre la policía y la mafia, que aquí la cosa funciona a tres o cuatro bandas, porque interviene la policía de la zona, poco fiable (y no precisamente por sus dotes policiales), la agencia o grupo o lo que sea a lo que pertenecen Antonia, Jon y el Mentor (una especie de CIA europea nada creíble) y los malos, o, debería decir las malas, que son las que más juego dan y más confunden, que no acabas de saber si son buenas, malas, regulares, malísimas o requetelistas.
El libro comienza con una llamada a deshora para que Antonia vaya a Marbella. Ha habido un tiroteo, aparentemente un ajuste de cuentas entre mafiosos, y ha desaparecido la esposa de uno de los rusos asesinados: Lola Moreno, un personaje que va ganando puntos según se avanza en la lectura y que no me hubiera importado que fuera ella quien contara toda la historia.
A Lola la busca la policía marbellí, el ruso que ordenó la muerte de su marido, Antonia y Jon y la Loba Negra, que tiene más protagonismo en la portada del libro que en sus páginas. Todo el mundo a por ella, y ella, que intentando escapar de todo el mundo, se va metiendo en la boca de todos los lobos que se va encontrando, pese a su perro, un bicho enorme sobre el que un aparte del libro nos cuenta su origen y que tiene también su minuto de gloria.
No se, me siguen sin parecer novelas redondas las de Gómez-Jurado, pero serán cosas mías. No se si me atreveré con la tercera. Ya veremos.
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