Agatha Raisin y el veterinario cruel

Hace un par de años reseñé la primera novela protagonizada por Agatha Raisin, y dejé un poco paradas las lecturas porque el cuarto no lo consigo en papel y no quiero quedarme estancada. al final ha podido más la curiosidad por seguir con el personaje, y cuando me toque llegar a ese cuarto libro, pues se hará lo que se pueda (aka leerlo en ebook, no me va a quedar otra... salvo que algún alma cándida decida deshacerse de él de aquí a entonces y me dé tiempo a pillarlo. Es que quiero la colección en papel, qué le voy a hacer. Cruzo los dedos).

La historia comienza cuando Agatha regresa a Carsely, el pequeño pueblo en el que vive en plenos Cotswolds, después de unas fallidas vacaciones en las que viajó a las Bahamas tras los pasos de su vecino, James Lacey, mientras que Lacey, que huye de ella cada vez que la intuye, se había imaginado la persecución y había cambiado de destino largándose al El Cairo sin decir ni pío. Vamos, que Agatha está que trina: tal y como se dice en el libro, cuando persigue a un hombre, es tan implacable como lo fue en su momento en los negocios. El caso es que para desquitarse le hace ojitos al nuevo veterinario local, pero no es la única: la consulta está siempre atestada de vecinas con sus mascotas, tengan estas algo que realmente precise de la visita o no. El día en que el veterinario aparece asesinado, empiezan a salir los trapos sucios sobre un hombre que no era lo que aparentaba y que tenía un buen número de mujeres enfadadas a su espalda. ¿Quién lo habrá matado? Porque hay muchos posibles sospechosos... Por circunstancias de la vida, y para sorpresa de ambos, Agatha y Lacey investigarán juntos el asesinato, y esta insospechada colaboración provoca reacciones muy distintas en ellos, porque Agatha vuelve a dejar volar la imaginación y ya se ve camino del altar junto al guapo militar, mientras que Lacey precisamente colabora con ella porque piensa que ya se le ha pasado el enamoramiento y está a salvo de sus nada sutiles avanzadillas.

Pues nada, aquí estamos de nuevo con Agatha en su retiro tras la jubilación en un pequeño pueblo en el que parece que no pasa nada y siempre se cargan a alguien (¡alló, miss Marple!). También tenemos a una Agatha que sigue un pelín (muuuuuy) obsesionada con su vecino, James Lacey, un atractivo militar retirado que huye de ella como alma que lleva el diablo. Además persisten en ella las dudas del primer libro: cree que no tendría que haberse jubilado, que estaba mejor en Londres... aunque al final siempre tiene que admitir que está encantada de la vida en su pueblecito de la campiña inglesa.

Realmente Agatha no pretende resultar simpática en ningún momento, y no lo es, pero tiene de cada cosa, le pasa de cada cosa, que te tienes que reír aunque no quieras. Y lo admito, me gustó el primero, pero con este me he reído a carcajadas en alguna escena (tengo una en concreto en la cabeza ahora mismo, y hace ya sus meses que leí el libro... no se me olvida y me sigo riendo cuando me acuerdo). Si el de la quiche letal me gustó, este lo he disfrutado más, porque entre otras cosas va más al grano al no tener que presentar personajes, ambientación, vecinos, etc... Abrimos las páginas conociendo ya el mundo de Agatha, así que lo que toca es adentrarse sin dilaciones en el misterio y ver cómo va avanzando la relación entre ella y Lacey por un lado, y entre ella y sus vecinos por otro.

Y es que si Lacey acepta colaborar con ella es porque le aburre intensamente el libro que está escribiendo sobre historia militar y decide meterse a detective en busca de un poco acción; por otro lado, y más importante, porque también cree que Agatha ya no le persigue, cuando realmente son las circunstancias las que hacen que lo parezca. Así que Lacey pasa de no abrirle la puerta a Agatha y hacer siempre como que no está en casa cada vez que le visita, a pasarse todo el día junto a ella y fomentar habladurías en el pueblo, cosa que él no se toma bien porque no son verdad y que ella no se toma bien porque se da cuenta de que él no se lo toma bien xD ¿Y qué pareja forman como detectives? Pues horrorosa, una pareja horrorosa, son como elefantes en una cacharrería, pero siempre acaban por averiguar algún indicio aunque sea de rebote y de ahí van tirando para seguir adelante con la investigación.

También recuperamos a Bill Wong, un policía de veintitantos años con mucha guasa y retranca que parece más maduro que Agatha a su cincuenta y tantos. Encima conocemos en este libro a sus padres, escena que no tiene ningún desperdicio tanto por lo particulares que son como por la aparente ignorancia de Bill de esa particularidad :)

No, no os estoy contando nada de la investigación, pero ya sabéis que no suelo hacerlo. En este tipo de libros es normalmente mucho más interesante la dinámica que se forma alrededor del asesinato que el propio asesinato en sí mismo, porque gracias a él las relaciones entre los distintos personajes se modifican en muchos sentidos, conocemos más a fondo a los vecinos del pueblo o nos presentan a otros nuevos, somos testigos de cómo Agatha se va integrando poco a poco en la comunidad muy a su pesar (o eso cree ella), y al final vamos descubriendo a una nueva Agatha, esa que toda la vida lo ha hecho todo sola, que ha salido adelante profesionalmente siendo agresiva y autoritaria, y que poco a poco va cayendo en las redes de la amistad y la convivencia, volviéndose un poco más cálida y cercana.

¿Que todo esto ocurre porque han asesinado a un veterinario? Pues sí, y tela con el veterinario, todo un personaje... un elemento de cuidado que iremos descubriendo conforme Agatha y Lacey van destapando cosas (queriendo o sin querer). ¿Moraleja del libro? Queridas habitantes de Carsely, por muy vista que tengáis a la sección masculina del pueblo, ¡huid de los veterinarios guapos que aparecen de la nada con ínfulas de gigolós y que odian (mucho, muchísimo) a los perros y a los gatos! xD
Enlace: https://inquilinasnetherfiel..

Me ha encantado descubrir a Agatha Raisin, una mujer de mediana edad, jubilada y viuda que se va a vivir a la campiña inglesa en los Cotswolds, un lugar donde parece que en sus “cottages” existen vidas acogedoras y tranquilas; pero resultan ser el caldo de cultivo para el asesinato.
El veterinario del pueblo, el señor Bladen, aparece muerto por una inyección letal que iba destinada a un caballo de carreras. Parece que era todo un seductor de mujeres y que muchas de ellas tenían motivos para matarlo.
Será Agatha, esa mujer coqueta que da de comer a sus gatos, que bebe whisky doble y también toma el té en la vicaría, cubierta de pieles de zorro, siempre con sus labios pintados, su collar de perlas y con sus tacones puestos, quien haga de detective junto con su buen amigo James Lacey y resuelvan dos asesinatos que parecen guardar relación.
La lectura es muy ligera, llena de enredos y cotilleos y me ha encantado el humor de este “cozy mistery” con situaciones de lo más inverosímiles que te hacen pasar un rato de lo más agradable y divertido.

Por fin he hecho hueco para terminar esta historia, que parece corta pero tiene capitulos bastante largos.

No puedo compararlo con el ingenio de Agatha Christie ni mucho menos. Es como mucho una versión de pueblo apartado. Aunque Raisin si se parece un poco a Miss Marple. Dos señoras mayores entrometidas.

Quizas por los gatos o por alguna otra razón, Raisin se me hizo mas pasable pasada la mitad del libro. Va aprendiendo de sus errores y no es tan creida como al principio.

Y si, he empezado por el libro 2. Son casos diferentes pero al parecer la evolución de Agatha va acorde según avanzas por las historias. Así que si me caia algo mal al principio de esta, ahora me da algo de rollo tratar de leer el primero que pinta que me caerá peor.

El humor en la obra es... Relativo. No es para partirse de risa, pero supongo que no es tan oscuro como en los casos de su tocaya.

Para pasar el rato como lectura antes de dormir no está mal. Después de todo, sigue siendo de misterio y no logré averiguar quién era el culpable hasta el final.

En general los libros de Agatha Raisin entretienen, no se puede decir que no. Pero eso si, no esperes una Miss Marple moderna como muchos dicen porque me parece un insulto.
Es una señora de mediana edad que siempre por casualidades o suerte descubre los misterios, o mejor dicho, los misterios se topan con ella.
A medida que vas leyendo la serie de libros te das cuenta de que cada vez desaparece más, tomando protagonismo otros personajes. Y el ultimo de sus libros ya sí que pasa de ser una relaciones públicas jubilada con dinero, con mucha vida a sus espaldas, con autoridad, personalidad a una señora insulsa, que se deja mangonear, sin voz ni voto y totalmente acomplejada.
Es una lástima a mi parecer que haya caido tan en picado.

Es la segunda entrega de las aventuras de la aprendiz de detective, Agatha Raisin.
Ella es una ex relacionadora pública que se prejubila y se va a vivir a la campiña inglesa, donde se suscitan una serie de curiosos y peculiares acontecimientos, en los cuales ella se involucra a modo de investigadora privada.
En esta ocasión, y tras un viaje decepcionante al Caribe en pos de su vecino James, Agatha descubre que en su pueblo se ha instalado una clínica veterinaria y decide llevar a su gato a un control de rutina, dicho en otras palabras, quiere conocer bien al veterinario. In situ se da cuenta que este individuo es "muy popular entre las vecinas del pueblo".
El veterinario es hallado muerto en un establo mientras practicaba una intervención a un caballo, y es aquí donde Agatha y su vecino James, junto con el joven policía Bill, unen esfuerzos para investigar si dicha muerte fue accidental o fue un asesinato.
Este libro me gustó mas que el primero, el del Quiché letal, y os animo a pasar un rato muy agradable y divertido con la singular vida de Agatha Raisin, sus amores y desamores y la aventura que representa para ella el descubrir el asesino.

Esta segunda entrega de Agatha Raisin me ha gustado mucho más, nuestra protagonista nos sorprende con un nuevo caso y con nuevas anécdotas. El misterio ha estado mejor elaborado, las historias son mucho más divertidas y Agatha sigue metiéndose en líos. Es la clase de libro ideal para intercalar entre lecturas más densas.

De nuevo estamos ante una historia sencilla, aunque a diferencia de lo que me pasó en el primer libro el final no lo vi venir tan pronto. Agatha, que se aburre mortalmente a la vez que está encantada con su nueva vida, se interesa por el asesinato de un veterinario que parecía tener a todas las vecinas del pueblo locas. Y esto le permite acercar posturas con su atractivo vecino, por lo que se introducen elementos de lo que podría ser una comedia romántica.
Me ha sorprendido ver que entremezclada con la trama del asesinato encontramos los líos del pueblo y que estos no distan mucho de todo lo que vemos en las novelas sobre adolescentes. Me gusta que se represente a personas de edades ya más avanzadas teniendo sus más y sus menos, sus líos amorosos, sus peleas, sus reconciliaciones. Se ha comprado a Agatha con Mss Marple y, a ver, ambas son señoras (Agatha un poco más joven que la señora Marple) que resuelven crímenes de manera aficionada, pero ahí acaban todas sus similitudes. Ah, bueno, ambas son señoras inglesas muy inglesas, pero en el caso de Raisin es un poco más viva, más políticamente incorrecta, tenaz y divertida. Menos perfecta y, por eso mismo, mejor para mí. Es una mujer descarada, dispuesta a comerse el mundo. Y lo consigue, aunque a veces tiene sus patinadas.
En esta ocasión entra en escena James Lacey, el vecino del que todas las mujeres solteras, viudas y divorciadas del pueblo codician. Casi por azar sus destinos se unen, pero solo porque Agatha parece perder un poco e interés en este militar jubilado.
Como podéis ver, lo que más destacan son sus personajes, todos únicos y divertidos, muy bien formados con mucha personalidad.
No es un libro muy largo, así que lo veo perfecto para todos aquellos que, como yo, os gusten las novelas de misterio pero os dé pereza adentraros en historias densas y farragosas. También si estáis buscando algo ameno y divertido para pasar un rato, si no tenéis mucho tiempo para leer o si, simplemente, queréis disfrutar de una historia que atrapa de principio a fin.
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Segundo libro que leo de la saga Ágatha Raisin y os puedo asegurar que me lo he pasado mejor que con el primero. A pesar de las buenas críticas creo que fue el no saber muy bien qué me iba a encontrar lo que me dejó un poco fría. Me entretuvo pero sin más. Con este nuevo caso me declaro fan de la "detective"

Como seguro que todos ya sabéis estamos ante un cozy mistery. A grandes rasgos, una investigación policial de un crimen pero muy light en el que no se produce ensañamiento en la muerte, no se recrean en los temas de la sangre... Tengo un artículo en el que os explico qué es este subgénero dentro del noir. Os lo dejo por aqui.

Poco hay que añadir a un libro de Ágatha Raisin que no se haya dicho, una protagonista muy peculiar, una mujer que pese a declararse totalmente autosuficiente y que no necesita a ningún hombre se dedica a perseguir a uno, misterio, pesquisas, muerte, y risas, sí, también hay momentos de muchas risas así que me parece una lectura ideal para estas fechas.

Esta saga es una de las más vendidas en Reino Unido y ahora nos la trae Salamandra. Creo recordar que ya van por el cuarto tomo. Y tú, ¿te la vas a perder?
Enlace: https://tulibroytu.wordpress..

He vuelto a los Cotswolds...

En esta segunda entrega de la serie cozy crimen de M.C. Beaton, Agatha Raisin se enfrenta a la muerte del nuevo veterinario del pueblo. Una muerte que para la policía es solo un desgraciado accidente, pero para la detective amateur es un misterioso crimen sin resolver.
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Me lo he pasado genial leyendo esta nueva aventura de la Raisin. A pesar de que el caso me ha parecido un poco más serio que el anterior y de que Agatha ha refinado sus medios de investigación, la historia me ha parecido igual de divertida y los enredos y situaciones embarazosas en los que se ve envuelta la protagonista consiguieron provocarme más de una carcajada. Como os dije en la reseña del primer libro, es una lectura de confortable a la que te entregas sin esfuerzo y disfrutas sin más pretensiones.
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Estos libros han sido un gran descubrimiento y aviso, enganchan... por suerte, la autora llegó a escribir más de treinta novelas de la serie. En España ya hay tres libros publicados, el cuarto llega el 7 de julio y espero que Salamandra siga confiando en ellos.

Seguimos a Agatha Raisin, con su mismo humor, ironía y terquedad. Me ha gustado menos que el primer libro, aunque sigue siendo muy entretenido y divertido, supongo que porque no me ha caído muy bien Lacey, que adquiere gran protagonismo y Agatha todo el rato quiere pasar tiempo con él, añadiendolo así a sus planes detectivescos.