Tita es la hija menor en su familia y de acuerdo a las tradiciones de su tiempo, le corresponde quedarse soltera para cuidar a su madre hasta el día en que fallezca. Pero Tita y Pedro se aman ¿serán capaces de vencer el destino que pende sobre ella? Es una historia que se siente como telenovela pero de las buenas: muchos enredos y dramas tanto amorosos como familiares. Y no lo digo como algo malo. Laura enrevesa la trama y te lo cuenta tan emocionada que no puedes evitar sentirte inmerso en la historia, te atrapa. Un elemento que resultó completamente inesperado para mí fue ver el realismo mágico en acción, el cual logra que la historia adquiera mayor profundidad, mejorándola notablemente. En un principio no sentía muchas ganas de acercarme a la historia porque sabía que la comida es un elemento muy importante la verdad me daba flojera gg. Por lo que me sorprendió gratamente encontrar que está insertado de forma natural: las descripciones de comida no son extenuantes y verdaderamente sirven como conexión con la historia. Lo vemos de diversas maneras: ya sea para desarrollar la trama (dando continuidad u origen) o para exponer el estado anímico de los personajes. Asimismo, me pareció muy bella la relación que establece con cocinar y los recuerdos. + Leer más |