Naranja de sangre

“Con la copa cogida por el tallo, me bebo un vino, luego otro, con la esperanza de ahogar las voces angustiadas que me susurran al oído acerca del juicio y cuánto tiempo me llevará prepararlo.” ~ Naranja de sangre de Harriet Tyce.

Alison, abogada y madre de una niña pequeña, vive entre dos aguas. Por un lado, su marido Carl, psicoterapeuta en paro. Por el otro, su amante Patrick, procurador y quien le pasa los casos. Pero Alison tiene además una adicción al alcohol y en ocasiones, cuando abusa de su consumo pierde la consciencia. El día a día de Alison transcurre en un bucle de aspiraciones y arrepentimientos, de nuevas promesas y de falta de voluntad.

Paralelamente a la historia de engaños y autodestrucción de Alison, tenemos el caso al que se enfrenta: Madeleine, una mujer acusada de asesinar a su marido, que no recuerda nada de esa noche y que estaba sometida a malos tratos. Madeleine también tenía adicción al alcohol.

Narrado en primera persona y en presente por Alison, el libro se lee de un tirón, está bien escrito y es adictivo. Sin embargo, por momentos me ha parecido que la historia estaba estirada, quizá precisamente por el hecho de que está narrado en primera persona y refleja los pensamientos reiterativos de Alison, y limita el punto de vista de los hechos a la percepción que tiene la protagonista de los mismos.

La investigación por el asesinato del marido de Madeleine está en segundo plano y su historia subyugada a la vida diaria de Alison. A partir de la mitad del libro mejora y ya se comienza a intuir el porqué de muchas preguntas previas pero no es hasta el final que todo cobra cuerpo con un giro que descoloca.

Naranja de sangre es un thriller de los conocidos como domestic noir. de hecho, en este caso está más que justificada la denominación, ya que apenas salimos de este ámbito.

Alison es una abogada cuya carrera no es todo lo estelar que podría, pero acepta casos de todo tipo y está en proceso ascendente. Está casada con Carl, un marido entregado y responsable que demasiadas veces debe hacerse cargo en solitario del cuidado de la hija de ambos. Alison llega tarde a casa del trabajo, bebe en exceso en numerosas ocasiones y no es capaz de cuidar en lo más básico a su hija cuando se queda a solas con ella. Además, Alison tiene una aventura con un compañero de trabajo. Es una relación tóxica de la que siempre se dice a si misma que saldrá, pero de la que no consigue librarse por más que se vea sobrepasando sus propios límites una y otra vez.

«Se va antes de que pueda seguir discutiendo. Me desplomo sobre el sillón del rincón. Ojalá no me hubiese emborrachado tanto. Me limpio los mocos y las lágrimas de la cara con la manga de la chaqueta, hasta que mi cabeza se derrumba sobre mi hombro y pierdo la conciencia.»

Entonces Alison recibirá el encargo de llevar la defensa en un caso de asesinato. Su primer caso de asesinato. Desde el principio, algo no encaja en la versión de su defendida. Ella confiesa que es la autora del crimen, quiere declararse culpable y asumir la condena que le sea impuesta. Pero Alison no puede dejar de pensar en que de todas las piezas, hay alguna que no encaja.

«-Siento que estés disgustada -digo-. Pero teniendo en cuenta que hemos estado trabajando con el objetivo de que se declare no culpable de asesinato, y que hemos preparado la defensa en base a eso, es importante que revisemos al detalle todas las consecuencias posibles. Necesito asegurarme de que lo entiendo todo.
Se vuelve hacia mí, alterada. Lo hace tan rápido que me encojo por miedo a que me pegue. Finalmente retrocede y se sienta otra vez. «

No obstante, no parece Alison demasiado concentrada en el caso. Las cosas en casa van cada vez peor y su marido empieza a estar demasiado harto de su comportamiento y su incapacidad para mantener bajo control el alcohol. Por si la vida de Alison no fuera ya un desastre, empieza a recibir mensajes anónimos de alguien que parece conocer sus secretos. ¿Será un cliente resentido? ¿Alguien de la oficina? ¿Otra de las mujeres con las que comparte a su amante? Sea quien sea, está al tanto de sus encuentros extramatrimoniales. ¿Desvelará su doble vida antes de que ella sea capaz de poner orden en ella? Tiene que arreglar las cosas con Carl. Tiene que ser mejor madre y centrarse en su vida profesional. Pero… ¿está realmente segura de lo que quiere?

La autora nos mantiene atrapados en la rutina de Alison, en su inestabilidad y su desequilibrio emocional durante más tiempo del que nos gustaría. Personalmente, se me ha hecho muy complicado (por no decir imposible) empatizar ni tan siquiera un poco con la protagonista. Sabe desde el principio lo que realmente la está dañando y no encuentra ni un poco de voluntad para alejarse de ello.

Me llamó desde el principio la atención el caso de asesinato que se le asigna. Pero no es más que un rumor de fondo en la trama, mientras que asistimos al enfermizo ir y venir de la protagonista. Me ha recordado en demasiadas ocasiones esta protagonista a la de la chica del tren. Esta otra protagonista tampoco me resulto demasiado interesante y también incluía una historia de fondo que me atraía, pero la autora no me dejaba profundizar en ella.

No ha sido hasta el último cuarto de la novela cuando me he sentido un poco enganchada. Y el camino hasta ese punto ha sido largo y tedioso en algunos momentos. He estado muy cerca de bloquearme con esta lectura. Pero finalmente logré llegar hasta el final y los últimos capítulos, así como el final, he de decir que me gustaron. Aunque el giro final se ve venir, es justo decir que el lazo que ata el final de la novela con el principio es realmente bueno.
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Super recomendable, es fantástico. Me atrapó desde el inicio, con unos personajes diferentes, enigmáticos, atrayentes. La trama ya comienza con fuerza, con apremio. No hay lugar para el aburrimiento, siempre estás mordiéndote las uñas necesitando conocer más. Sin duda, de principio a fin, atrapa. Lo leí en un suspiro. La pluma de la autora es sencilla, no cuesta nada seguir la historia y se hace muy ligera. En esta historia me ha pasado algo que nunca me había ocurrido antes. Me ha encantado y no he empatizado, ni siquiera me ha caído bien, ningún personaje. Algo totalmente insólito y ¿sabéis qué? Me ha dejado un sabor de boca increíble.

En cuanto supe que era un thriller, ya quería tenerlo entre mis manos. Y este ha sido una lectura ,muy fácil y rápida, porque me duró apenas dos días. La autora ha sabido contar la historia desde una lectura fluida e intrigante.

Alison trabaja en un bufete, donde el procurador, Patrick y ella mantienen una relación, que al principio se basaba solo en sexo, luego en algo más.

Alison, casada con su marido Carl, tienen una niña a la que de apodo la llaman Tilly. Una niña que por mucho que su madre le haga feos, y se olvide de ir a por ella al colegio, la sigue queriendo.
Su matrimonio cada vez va a peor, y todo ello se ve influenciado por su romance externo. Alison bebe mucho, y aunque quiera parar, nunca lo hace, hasta perder el conocimiento. Todo eso, le afecta a su vida normal, y sobre todo a la relación con su hija Matilda.

Tendrá que defender a una madre que intentó sobrevivir para que su hijo estuviera a salvo, aunque por ello, le cuesten años de cárcel.

Un intrigante thriller, en el que no pasan desapercibidos el amor, los celos, el sexo, y sobre todo las mentiras. Porque nadie parece ser quien realmente es. Y nunca tienes la sensación de conocer plenamente a nadie.


PUNTUACIÓN.

Para mí, este libro tiene un 4/5. Me ha gustado mucho, pero quizá me haya quedado con ganas de más de la historia.

Sin duda, lo recomiendo, ya que es una lectura fácil y entretenida.


Muchísimas gracias una vez más por leerme.!!!! Un beso!!!
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El año 2020 decidí empezar con un buen thriller y animada por las reseñas me decidí por "Naranja de sangre" de Harriet Tyce. Me atrajo especialmente el hecho de que la autora ejerció como abogada criminalista en Londres y sabía de que escribía. Esta es su primera novela, clasificada como domestic noir, un subgénero definido así recientemente, especialmente después del éxito de "La chica del tren" de Paula Hawkins. Suspense en el seno de hogar, donde no hay detectives ni policías, pero si mucho suspense.
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En "Naranja de sangre" la historia está contada por Alison, una abogada criminalista muy exitosa que recibe su primer caso de asesinato. A la vez descubriendo detalles sobre su clienta y su fallido matrimonio, se enfrenta a la ruina del suyo propio. Acusada constantemente por su marido, Carl de ser una mala e inatenta madre, Alison se pierde en la bebida y una aventura descontrolada con uno de sus colegas del trabajo. Alison se encuentra enredada más y más en sus mentiras y desesperada por sus fracasados intentos de reparar su matrimonio.
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Aunque esta narración en la primera persona debería acercarnos a ella, al principio pasa exactamente lo opuesto. El lector no aprueba de lo que hace Alison, la critica de la misma manera que lo hace ella misma, siente asco al leer algunos fragmentos. Algo muy muy parecido a lo que pasaba con "La chica del tren".
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De hecho, al leer toda lo novela es casi imposible no hacer las comparaciones con "La chica del tren". Hay muchas similitudes, quizás demasiadas. La historia se lee bien, pero es igual de pausada, el suspense está creciendo hasta el punto que empieza a aburrir un poco. El final es previsible. Especialmente si uno ya conoce la otra novela...
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Resumiendo, si no has leído "La chica del tren" y te gustan los thrillers psicológicos pausados que no tienen mucha acción, este libro te va a encantar. Pero si ya conoces la novela de Paula Hawkins, a que no sea que eres un fan tremendo, quizás deberías buscar otro título. le doy 3 de 5 estrellas por el estilo muy ágil, pero la originalidad de la historia deja mucho que desear.
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Al iniciar la lectura creí que la historia se iba a centrar en el caso de asesinato que debe defender la protagonista. Sin embargo, según avanzaba con la lectura, la vida personal y profesional de Alison era lo que primaba. Quizá esa haya sido la principal causa de que la historia me haya decepcionado en algunos casos, aunque debo añadir que mi opinión general sobre el libro ha sido buena, puesto que me ha enganchado desde el minuto uno. La pluma de la autora ha sido sencilla y ligera lo que ha hecho que me haya gustado. En cuanto a los personajes, no he podido empatizar con la mayoría de ellos. Carl, un marido manipulador que no dejaba que su mujer tuviera opiniones propias ni la dejaba expresarlas. Patrick, mayor manipulador aún. No quería tener nada serio con Alison y la despreciaba en muchos de los casos, pero la buscaba desesperado en otras ocasiones. Y por último, Alison. La protagonista me ha parecido fuerte en cuanto a su trabajo, sin embargo ha dejado manipularse fácilmente por Carl, Patrick y sus malas costumbres han hecho que en la mayoría de las situaciones dejara mucho que desear como madre.
Por lo general, buena lectura si lo que buscas es un thriller ágil, sencillo y que te enganche muy rápido.

En este libro vamos a conocer a una mujer llamada Alison, una abogada a la que le tocará defender en juicio a una mujer que asesinó a su marido a puñaladas. Además, Alison tiene graves problemas con la bebida y le está siendo infiel a su marido, Carl, -con el que tiene una hija llamada Matilda- con un compañero de trabajo (Patrick), y de una forma un tanto obsesiva y tóxica.

La trama ha sido muy entretenida e intrigante, aunque un poco predecible a ratos. Aunque hay una cosa que ha hecho que el libro no acabe de gustarme y son sus personajes. ¿Qué costaba no hacer algún personaje no detestable? Alison me ha parecido una mujer insufrible, una mala madre y una esposa horrible. Carl es un esposo igual de horrible, un machista y un hombre insoportable, al igual que Patrick.

A medida que leía el libro pensaba: espero que esto no haya pasado nunca de verdad. Había cosas que me parecían horribles e incómodas, otras que deseaba que se acabaran ya y poder pasar página... Aunque eso no lo veo malo, lo veo hasta bueno porque que un libro consiga crear estas emociones en mí es señal de que está muy bien narrado y descrito.

Desde luego, es un thriller alucinante. Un domestic noir como ninguno. Con muchísima personalidad, que es lo que hace falta ahora en este tipo de literatura.

Os lo recomiendo si queréis un domestic noir diferente e innovador, con un desenlace totalmente satisfactorio.
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La verdad que no conocía muy bien esté género tan de moda llamado Doméstic Noir, pero me ha encantado y en donde la escritora refleja una historia oscura y obsesiva.

Alison es el personaje principal, una abogada criminalista que lleva una vida agradable. Casada con Carl, tiene una hermosa hija de seis años, pero nada de eso es suficiente para Alison que tiene un gran problema, su alcholismo. Consumida en su vició, siempre busca alguna excusa para tomar una copa de más y dejar extinguir del todo su matrimonio. Además de la relación bastante obsesiva y secreta que tiene con Patrick, su amante y compañero de trabajo.

Justo en esa etapa de su vida le llega la oportunidad de investigar un caso de asesinato. Madeleine Smith su cliente, apuñalo a su marido quince veces, pero ella no recuerda nada.

A partir de ahí la vida de Alison se tornará complicada, además de mensajes sospechosos que le están enviando y que demuestran que alguien la está vigilando y que sabe todo lo que hace en su vida personal.

La manera de narrar de la escritora me gustó bastante, aunque por momentos se me hizo un poco lento. Los personajes son increíbles, extraños y morbosos, ideal en esté tipo de novela, donde ayudan a crear ese clima siniestro. El final no me gustó mucho, ya que lo encontré un poco predecible, pero esto no quita la gran habilidad de la escritora para meternos en la trama.

En definitiva, un libro entretenido, ideal para pasar un buen rato. Buena recomendación literaria para los que les guste el género.

La premisa de la que parte este libro es arriesgada, pues nos presenta a una protagonista cuyo comportamiento es muy cuestionable: después de interminables jornadas de trabajo como abogada en Londres, Alison se va de bares con sus compañeros y en muchas ocasiones acaba borracha como una cuba. Su marido es el que cuida a la hija de ambos, de 6 años, que más de una vez la ha visto durmiendo la mona. Por si eso fuera poco, Alison tiene un amante y muchas tardes se va con él después del trabajo, con lo que sigue sin atender a su hija, pues vuelve a llegar a casa cuando ella ya está durmiendo. Y Alison es consciente de todo esto: como dice el subtítulo de la cubierta, «sé que lo que hago está mal, pero no puedo parar».

Solo llevaba leídos unos pocos capítulos y recuerdo que pensé que no tenía mucho sentido que el libro girara en torno a una persona tan deleznable. Incluso me planteé si valía la pena seguir. Sin embargo, el ritmo es bastante frenético y enseguida me vi envuelta en la trama, porque llega un momento en que te pica la curiosidad: el comportamiento de Alison es tremendamente destructivo, pero en un momento dado te das cuenta de que ahí hay algo más, de que en todo lo que está pasando hay algo que empieza a no cuadrar. Poco a poco las pistas van siendo más claras pero la situación pinta cada vez más embrollada, de manera que es imposible dejar de leer porque quieres ver a dónde lleva todo eso. Y para mí el final es totalmente satisfactorio, y eso que faltaban ya poquísimas páginas para terminar el libro y no me imaginaba cómo iba a hacer la autora para deshacer el entuerto.

Otro punto que me ha gustado muchísimo es que el libro refleja lo que es el trabajo de abogados y procuradores en el Londres actual. Además habla mucho de los pasos que sigue cada caso en los tribunales, pero no se hace pesado en absoluto; Harriet Tyce, la autora, trabajó durante 10 años como abogada y ese conocimiento se refleja en la trama. Después de unas larguísimas jornadas de trabajo, los bares se llenan de abogados, procuradores, pasantes y becarios dispuestos a relajarse un poco y beber unas copas, y en esas reuniones a veces la línea que separa la vida profesional de la personal es muy fina. Todo esto me ha parecido tremendamente verosímil: podía imaginarme más de un episodio de los que se cuentan ocurriendo en la vida real.

Al final, lo que más me ha gustado es la sutileza con la que evolucionan los personajes y cómo la autora consigue que poco a poco vayamos cambiando de opinión con cada uno, e incluso quedan algunos personajes con muchas luces y sombras de quienes no sabemos bien qué pensar. Pese a su patético inicio, al final la protagonista me ha conquistado, aunque me hubiera gustado que se hubiera puesto firme mucho antes y hubiera sido más contundente ante algunas situaciones.

Naranja de sangre es una apuesta arriesgada, pues quizá haya gente que no logre empatizar con Alison, pero a mí me ha gustado precisamente por eso: Harriet Tyce tiene la valentía de crear una novela en torno a una persona que, al menos al principio, es difícil que caiga bien, pero tiene la habilidad suficiente para hacer cambiar al lector de opinión con los sutiles giros que da la trama y destapando poco a poco el carácter de los demás personajes. Si estáis aburridos de los domestic noir, dadle una oportunidad a este libro. A mí todo su planteamiento me ha parecido muy original, con un desenlace de lo más satisfactorio.

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Alison bebe demasiado y está afectando a su familia y trabajo. Es abogada y tiene que defender a una mujer que ha matado a su marido, lo que nos llevará a la vida de esta, llena de secretos. Un compañero de trabajo tiende a traspasar los límites, llevándonos por su turbio mundo... Alguien la vigila y le manda anónimos, sabe lo que hizo.

Me ha quedado totalmente patidifusa. No podía parar de leer, metiéndome en la piel de Alison, que es quien narra. No siempre he estado deacuerdo con ella, pero entendía su frustración, sus ganas de huir, sus malos momentos y sus ganas de cambiar, pero sobre todo su obcecación por salvar a una mujer que ha matado a su marido, llegando a unir las piezas de esa historia que no terminaba de encajar. Personajes bien definidos, hechos para odiar, tener lástima o sentirte identificado. Uno me daba mala espina desde el principio y no me equivocaba, el final ha sido totalmente perfecto e inesperado, y me encanta cuando el título cobra sentido. Habla de secretos, adicciones, infidelidades, celos, ansiedad, trastornos mentales, pero sobre todo ahonda en las relaciones de maltrato, tanto físico como psicológico, que nos van minando poco a poco. No sabemos lo que estamos dispuestos a hacer por alguien a quien queremos hasta que llega el momento, y nunca llegamos a conocer a las personas del todo. Es una historia oscura, sórdida y perturbadoramente fantástica, donde todo lo que creía que estaba bien estaba mal y al revés... No volveré a ver una naranja sanguina de la misma forma 🙈