Anna Karenina

Ha sido mi primera novela de Tolstoi, pero ya quiero hacerme con más. Cada vez me gustan más los clásicos (y también los autores rusos), no son los libros más fáciles o livianos, pero este es de esos libros que cuando acabas, sientes que merece muchísimo la pena invertir un poquito más de tiempo, porque están tan bien escritos y tienen tanta calidad, que te resulta difícil compararlos con las novedades o las novelas contemporáneas.
Me he encontrado con que Anna Karenina es mucho más que una historia de amor. Tolstoi también realiza un retrato perfecto de la psicología humana (la pasión, la desdicha, la alegría...) y de la sociedad rusa de su época. Hace una una crítica muy dura a la hipocresía de la aristocracia, capaz de despellejar y marginar a alguien que se deja llevar por el corazón y la pasión, cuando ellos mismos realizan los mismos actos, pero sin embargo no lo exponen abiertamente.
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Porque se llama Ana Karenina el libro, no lo sé, pero si se que la historia de Ana se pudo haber contado en unas 200 hojas, que es al menos lo que esperamos algunos al saber que se trata de Ana y su amante. Pero esta historia está envuelta en más que una historia de romance, los problemas dentro y fuera del matrimonio, así como la guerra, la política y la economía son también parte de los problemas de los personajes dentro de esta historia, no solo los carcome el no estar con la persona amada, sino, también los problemas económicos, la reputación en la alta sociedad rusa.

Tolstoi participó en las guerras que fueron el principio de las transformaciones sociales. Él siguió las etapas más importantes de la revolución en su carácter de propietario terrateniente o colaborando con distintas organizaciones sociales. Bajo este aspecto su conducta vital, es continuador de escritores, artistas y eruditos del Renacimiento y del Iluminismo. Por lo cual es un hombre que participó activamente y de distinta manera en las grandes luchas sociales de su tiempo y que se convierten en escritor a través de las experiencias de su vida.

El problema central de sus obras es el problema ruso de los campesinos, el cambio decisivo de la literatura europea, la derrota de la revolución del 48. En Ana Karenina se manifiesta lo cerca que está Rusia al régimen capitalista. Ahora no se trata de un simple fracaso económico, sino que está la perfilación del capitalismo, contra la cual Tolstoi está en protesta. Ilustra en la obra las grandes catástrofes, los grandes cambios trágicos de los destinos humanos, naturalmente a través de una minuciosa y detallada descripción de las fuerzas motrices, es decir, no sin la epicidad intensa en el sentido profundo de la palabra.

Tolstoi en esta obra expresó los aspectos significativos y fuertes de la rebelión campesina como también lo incompleto, atrasado, incierto y pusilánime. Por ello la posibilidad de acción de los personajes cae en el dilema de: capitalización o fuga.
El autor le da particular importancia al aspecto físico de sus personajes, a los fenómenos físicos que provocan o acompañan los procesos psicológicos; pero su modo de escribir no cae en puramente lo físico y psíquico, sino en la acción. En Tolstoi la acción es incesante en torno a posibilidades extremas, jamás alcanzadas pero siempre presentes, del carácter de cada personaje. Esto abarca desde las posturas políticas que toman hasta las relaciones que establecen cada uno de ellos con sus pares. Esto hace reflejar las críticas de Tolstoi a las problemáticas de su contemporaneidad. Levin oscila entre el conservadurismo reaccionario en ocasiones, otras considera irrebatibles los argumentos contra la propiedad privada de la tierra. Son dos puntos extremos donde el personaje trata de comprender los problemas de la época en relación a posibles soluciones de sus problemas vitales. La relación de Levin con su hermano, con su mujer, con sus amigos y con otras personas están conectadas a sus intereses vitales, esas oscilaciones revocan y concretan su rostro sin borrar sus contornos. Oblonsky, Vronsky y Karenin: hombres que representan la burocratización de la nobleza y se convierten gradualmente en máquinas que dividen el trabajo. El personaje de Ana oscila entre su deber de madre, esposa y mujer en la sociedad y su imagen dentro de la nobleza. Ana, particularmente es la intensificación extrema de las pasiones: su personaje muestra en una forma trágicamente intensificada, las antinomias que están presentes, pero diluidas y degradadas, en todos los amores y en todos los matrimonios burgueses. Tolstoi caracteriza la belleza de Ana únicamente a través de su influencia sobre la acción, a través de las tragedias que provoca en la vida de otras personas y en la suya propia. Su suicidio tiene una particularidad: Sus últimas palabras fueron “¡Señor, perdón por todo!” antes de ser arrollada por el tren. En esta simple frase, que de simple no tiene nada, Tolstoi construye la siguiente característica de la personalidad de Ana: Ella pide perdón a Dios e indirectamente a los lectores también. Ya que depende del lector determinar si su atracción emocional de Ana supera el juicio moral a su vida. En última instancia para los lectores el perdón puede menos o quizás más importante que la identificación con ella.

Al mismo tiempo, cada escenario o episodio dentro de la novela está ligado al desarrollo de cada personaje. Existe una conexión de cada parte individual de los personajes. Por ejemplo los bailes, en los círculos en la sociedad, en las visitas, en las conferencias, en los diversos trabajos agrícolas, en las carreras de caballos, en los juegos de cartas. Son diversos aspectos y fenómenos que no son simples escenarios ni accesorios, describen y realzan el cómo las acciones representan la totalidad de las cosas para la evolución íntima de uno o más personajes de la novela.

Por todo lo expuesto anteriormente punteo con 5 estrellas esta obra. La considera una de las mejores obras que leí por la complejidad de cada personaje, las conexiones de sus destinos y las críticas políticas y sociales que el autor manifiesta en cada página.

Sin duda una de las mejores obras del Realismo ruso, aunque tengo que reconocer que me costó arrancar con esta lectura, al principio me resultó excesivamente descriptiva y no lograba conectar con los personajes, tuve que comenzar la lectura varias veces sin pasar de las primeras 50 páginas. Sin embargo, una vez superado este bloqueo descubrí una historia verdaderamente adictiva. La trama principal se centra en el adulterio de Anna Karenina, pero comentar solamente este punto no le hace justicia a esta obra, ya que nos muestra con todo lujo de detalle la sociedad y la cultura rusa de la época, así como el papel de la mujer en la vida social y familiar del momento.
Bajo mi criterio es un clásico de la literatura que sin duda os recomiendo.

Me gusto mucho este libro ya que narra a la perfección como era la sociedad rusa en esa época.
Hay capítulos que se me hicieron demasiados denso y lentos y eso hizo que me atrasara bastante con la lectura (pero eso no quita que no me haya gustado el libro)
Los personajes no me gustaron, (y además no tuve afinidad con ninguno), porque daban demasiadas vueltas y a veces no llegaban a un punto en específico y eso molestaba bastante.
Y el final era demasiado obvio, era más que sabido que Anna iba a terminar de esa manera.

Como han mencionado otros comentarios, esto no se trata de una novela de amor. Es un análisis de los dos extremos de la burguesía, entre los hedonistas y aquellos que buscan el deber ser.
Por un lado tenemos a Ana, un personaje burgués pasional e impulsivo y del otro Levine, un ser más racional, en búsqueda de lo esencial y verdadero. Y Tolstoi nos adentra no solo en su mundo y contactos, nos revela lo que hay dentro de ellos. El desarrollo de sus inseguridades, de sus miedos, sus juicios, cómo intentan descifrar a los que tienen en frente, y cómo buscan encajar en la sociedad que los hace sentir como presas.
Creo que el libro lleva el nombre de Ana porque así, juzga aquello que no le parece de la burguesía; para mí al proyectarse Tolstoi con Levine, busca reprender sobre los impulsos y superficialidades, busca la excelencia, el deber ser, lo esencial para el alma y el bien común.

Se que es un clásico y una de las grandes novelas del siglo XIX , pero es un libro que me molesta por varios aspectos influenciados por la tónica e ideales de Tolstoi.

Para ser una de las grandes historias de amor de la literatura, en realidad, los momentos mas memorables son tristes y dolorosos.
Se castiga a Anna solo por dejarse llevar por la pasión y el corazón (aunque es un personaje bastante autodestructivo). Se que las preocupaciones éticas son relativamente diferentes de las actuales pero deja un desasosiego entender que como mujer no podías buscar otro tipo de felicidad sobre el impuesto por tu familia y la sociedad o de lo contrario serías castigada.

OJO: mi comentario va dirigido a la trama, por lo demás esta la perfecta introducción y descripción de los personajes, una gran narrativa y dinamismo excepcional.

Anna Karénina es un libro difícil de reseñar, por la multitud de temas que trata pero también porque ya se ha dicho todo sobre él. Así que os dejaré mis impresiones de la lectura.

A pesar de lo que pueda parecer por su título, Anna Karénina no solo trata de una mujer que lo dejó todo por un hombre, sino que nos encontramos con un sinfín de personajes de igual o más importancia. Para mí, el verdadero protagonista de la historia es Levin, que además es el que más refleja los pensamientos del autor. Además su historia es la que más me ha interesado, a pesar de perderse a menudo en descripciones y reflexiones más propias de un ensayo que de una novela. Estas partes, lejos de aburrirme, dotan a la novela de mayor profundidad y lograron despertar mi interés de historiadora (salvo algún momento en concreto).

No logré en ningún momento empatizar con Anna, pero sí me acabó dando pena. Lo que me fascinó totalmente es ver lo completo que es el libro y sobre todo la maestría que tiene el autor a la hora de perfilar sus personajes: en esta novela nos encontramos con un mosaico de la sociedad rusa del siglo XIX y cada personaje tiene su propia personalidad, sus inquietudes, sus reflexiones. He sentido que llegaba a conocerlos a todos durante la lectura.

Aunque pueda parecer una novela densa, el estilo del autor vuelve la experiencia lectora muy agradable, incluso adictiva por momentos.

Es una lectura que recomiendo a todo el mundo, al menos intentarlo, ya que se suele tener una idea preconcebida de los clásicos rusos que no siempre es acertada.

En definitiva, estoy muy contenta de haber leído este clásico después de tanto tiempo y, aunque no llegue a ser el libro de mi vida, me ha gustado muchísimo.
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Woow, qué librazo, de sus más de mil páginas menos de 100 me parecieron tediosas, es el libro más largo que he leído hasta ahora y qué maravilla...

Me encantó la ambientación, los personajes, la verdad me esperaba una obra compleja e inentendible (compleja por el contexto, si lo es), pero nada qué ver, son personajes súper reales, humanos, con dualidades, con defectos e historias que contar, qué hermoso ❤️

Mi personaje favorito es Lievin y el ver cómo dentro de su estatus encuentra más paz en la simpleza, ufff Kiti me hizo llorar un montón pero final feliz, Anna una conquistadora de lectores, Vronsky un amante con moral 😂 y Alexandrovich un aristócrata conservador y sin sentimientos hecho y derecho.

Anna Karénina de León Tolstói.

Empecé este libro con un poco de miedo. Nunca había leído a ningún autor ruso y, si creéis que será un historia escriba de forma compleja, os aviso de que no.

En esta novela encontramos la historia de cinco familias, de las cuales iremos sabiendo más y más a medida que avanza la trama: Los Oblonski, los Scherbarski, los Karenin, los Liovin y Los Vronski.

Cosas que me complicaron un poco la lectura son, sobre todo al principio, ubicar a los personajes. Los principales son bastantes, pero una vez sabemos algo de cada uno es todo más llevadero.

También me frenaron las tramas de personas secundarios, que eran menos interesantes, y al ser así, tampoco me quedaba con sus nombres y su función.

Las partes que considero paja, como pueden ser en las que se habla de labores de campo y política, creo que si se hubieran recortado, o directamente suprimido, ahora no tendríamos que leer un ladrillo.

Lo que más me ha gustado ha sido lo bien creados que están los personajes, su profundidad y complejidad.
No soporté a Anna Karénina, un damita frágil, sobre todo de mente, que me hacía enfadar y odiarla por su forma de ser (hecha así aposta, sin duda).
El personaje que más adoré, sin duda, es Konstantín Liovin, aunque en mil páginas también le habría dado algún capón que otro. Éste tiene todo el peso de la historia, su trama es la más interesante y desarrollada, me parece un gran protagonista.

La ambientación y la pluma de este autor son una fantasía que te embauca cuente lo que cuente.
Este libro me ha dejado un buen sabor de boca, aunque no os voy a engañar, no todo es bueno, porque como dije antes, habría quitado partes y me habría quedado tan a gusto.

No va a ser mi libro favorito. Tampoco de mis clásicos favoritos, pero sin ninguna duda quiero leer más de Tolstói, pero necesito años de descanso porque no sabe sintetizar y tiene tochos.

Mi resumen es que Tolstói me ha dejado totalmente cautivada y con ganas de conocer más de sus obras, pero este libro lo recomiendo para leerlo con paciencia y, a poder ser, en compañía.