La isla del tesoro

Esta es la historia de Jim Hawkins y sus aventuras a bordo del Hispaniola para saquear un tesoro. Después de un encuentro con un pirata borracho y bastante intimidante en la posada que regenta con sus padres, Jim se encuentra en posesión de un mapa del tesoro y, finalmente, de una tripulación variopinta con la que irá a navegar para ver qué lugar X está marcando.

La historia tiene lugar en gran medida una vez que la tripulación llega a la isla, y casi todo lo que podría salir mal, sale mal. Los susurros de motín ponen a todos nerviosos, y nuestro personaje principal, Jim, tiene un corazón de oro pero la mente impulsiva de un adolescente, lo que lo convierte en una toma de decisiones muy interesante para resolver problemas de motín.

Es una historia de traiciones, secretos, amistad, lealtad y aventuras, y es bastante entretenida. Si estás dispuesto a leer ficción clásica, este es un gran lugar para aprovechar la oportunidad.

La isla del tesoro es una novela de aventuras de lo más entretenida, e imprescindible, en mi opinión, para todos aquellos que hemos crecido entre historias de piratas y espadachines.
Es una historia de finales del s.XIX cuando las historias se publicaban por fascículos, no se entretiene en descripciones infinitas pero si las necesarias para crear el ambiente de los escenarios donde transcurre la trama y ésta discurre sin muchos giros ni sorpresas... (Tampoco esperéis una obre trepidante, porque se trata de una historia bastante clásica, mapa tesoro, pelea y no os digo quien gana pero creo que ni falta que hace)
Los personajes son fascinantemente ingleses, incluso los de peor calaña son irremediablemente ingleses, algo que me ha resultado muy divertido y entrañable. En cuanto a la historia es fácil de leer y divertida, aunque las escenas de acción cuesta de seguir si no tienes a mano un dibujo de un barco antiguo con todas sus partes. Pero es una buena lectura.
PARA QUIEN: Amantes de las novelas de aventuras, friki de los barcos y/o de los piratas
LO MEJOR: Jhon Silver el Largo, pedazo personaje.
LO PEOR: No tener ni idea de navegación.

La Isla del Tesoro, de Robert Louis Stevenson, es una historia de aventuras, piratas y tesoros; me encantan las historias de tesoros.
Es excelente, un clásico, y la inspiración de muchas otras versiones similares; muchas en pantallas chicas y grandes, para chicos y grandes, pero como siempre, el libro les dice: a un lado que ahí les voy.
Si quieren disfrutar de una buena aventura, se los recomiendo por completo. Lo van a disfrutar.
leído el 11 de marzo del 22

#LaIslaDelTesoro de #RLStevenson (1883) 📖 @editorialgribaudo 📚

Jim Hawkins es hijo del posadero que regenta la posada El Almirante Benbow, y presencia la llegada a esta de un viejo marinero de aspecto rudo, con una cicatriz que le cruza el rostro, que huye de un marinero de una sola pierna y que trae consigo un cofre. Tras ciertos eventos, Jim descubre el contenido de este cofre y en él encuentra el mapa de una isla con marcas que señalan un tesoro: ¡el tesoro del Capitán Flint! Este descubrimiento le llevará a embarcar en «La Española» con dirección a esa isla desierta que guarda el tesoro, acompañado por los que se convertirán en leales compañeros: el caballero John Trelawney y algunos de sus sirvientes, el doctor David Livesey y el capitán Alexander Smollett; pero un barco necesita una tripulación y la de ellos es un tanto sospechosa. No solo Jim y sus fieles compañeros de viaje son conocedores de lo que señala este mapa, hay otros que saben lo que se puede conseguir si se hacen con él. El cocinero de a bordo es John Silver el Largo, pirata al que muchos temen, y este junto con gran parte de la tripulación (la mayoría piratas y marineros poco leales) se lo pondrán difícil a Jim y a los demás al llegar a la isla. John Silver es el «verdadero capitán», es la cabeza pensante y el que idea las estrategias necesarias para hacerse con ese tesoro y deshacerse de aquellos que le estorben... ¿Qué aventuras, peligros, tratos y negociaciones vivirá el joven Jim en esta su aventura en la Isla del tesoro? 🏝️🏴‍☠️☠️🛶

Tenía ganas de leer esta novela considerada la novela de piratas por excelencia, una obra que ha servido de inspiración para multitud de creaciones posteriores en diversos ámbitos. En ella están la mayoría de los elementos relacionados con el mundo de los piratas que todos conocemos.

Cuenta con una buena ambientación, carismáticos personajes y una buena tensión y ritmo narrativo que ayudan a que sea la gran novela de aventura que es. La he disfrutado, muy amena de leer y de esas que se pueden disfrutar tanto a edades tempranas como no tan tempranas.

¡Reseña completa en el blog! ☠️

"La isla del tesoro" de Robert Louis Stevenson
Jim Hawkins es el hijo del dueño de una posada llamada “Almirante Benbow”. Allí llega un hombre muy peculiar que canta tonadillas marineras y se hace llamar capitán. Éste le pide a Jim que le avise si se acerca un hombre con una sola pierna, a cambio el hombre le paga, pero muere de repente. Jim descubre que el capitán era un bucanero y los otros dos lo buscaban y encontrará el mapa de un tesoro. Decide ir a buscarlo junto al doctor Lovesey y un noble. A partir de ahí vivirá muchas aventuras.
*Me ha encantado releer ésta maravillosa historia en esta fantástica edición. Me ha encantado volver a vivir con Jim tantas aventuras. Me gusta mucho cómo escribe Stevenson y cómo te hace imaginar que estás en el lugar.

¡Bastante bueno! Realmente me hizo sentir la aventura, a pesar de que sus personajes son un poco unidimensionales y el protagonista solo aporta la narración. Quizás sus puntos fuertes habrían calado mejor en mi de no ser por querer señalarlos una vez tras otra tan directamente. Vean El Planeta del Tesoro, es una excelente adaptación.

¿Quién no ha querido ser pirata? Conviviendo con mil peligros en la mar, descifrando cartas y mapas, buscando tesoros o gritando «¡Al abordaje!»... En fin, es imposible contener la emoción y no regresar, aunque sea por un instante, a aquellos tiempos en los que la piratería y la armada se enfrentaban entre el pasillo y el salón.

Cuando Robert Louis Stevenson (1850-1894) escribió La isla del tesoro (Gribaudo, 2022), para ocupar las lluviosas tardes y complacer a Lloyd Osbourne, su hijastro - y también un apasionado de los relatos de bucaneros-, no podría imaginar que la novela sentaría las bases de las historias de aventuras. Y se convertiría en un clásico juvenil reconocido internacionalmente. Su primera publicación, como era común en la época, tuvo lugar por entregas en la revista Young Folks, (1881-1882) bajo el pseudónimo del Capitán George North.

En ella conoceremos la historia de Jim Hawkins, hijo del dueño de la posada Almirante Benbow, que padece una vida monótona en la bahía del Cerro Negro, lo que se verá alterado con la aparición de un misterioso anciano. Este le cuenta que, tiempo atrás, formó parte de la tripulación del Capitán Flint, reconocido pirata, y en sus aposentos aún se encuentra un baúl con un contenido codiciado tanto por antiguos camaradas como por otros corsarios. 

Fallecido el bucanero, Flin abre el baúl y descubre un antiguo mapa de una isla perdida. Es su oportunidad de vivir una gran aventura y, reuniendo ingenio y valor, se dispone a averiguar el misterio del mayor botín de un pirata del que se haya tenido noticia. En este trepidante viaje no estará solo. Contará con la compañía del Doctor Livesey y el Señor Trelawney. Además, se encontrará con el afamado bucanero John Silver «el largo» -personaje con el que ha influido en la imagen actual del pirata-, quien fuera miembro de la tripulación del Capitán Flint, y también con el resto de piratas, medio mercenarios, con los que tendrá que lidiar para llegar hasta la misteriosa isla.

Aunque la aventura no solo consistirá en esa travesía, ya que asistiremos a un viaje de iniciación, al crecimiento interior, de Jim, que dejará de lado la vulnerabilidad para convertirse en un adulto que se verá obligado a tomar sus propias decisiones, tanto por el destino adverso, como por su deseo de triunfo. Una obra que se devora en cualquier etapa de la vida y que siempre nos muestra algo distinto, oculto, misterioso... de nuestro viaje. 
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Creo sinceramente que este es el tipo de clásico del que un niño podría disfrutar. Yo, sin embargo... Bueno, tenemos matices aquí.

Primero tengo que decir que esta no es la primera novela de Stevenson que leo y, sin embargo, sí es la que menos me ha gustado. ¿Por qué digo esto? Bueno, para empezar, no tengo ningún problema con la narración. al contrario, me ha parecido tan buena y fácil de seguir como cualquier otra obra (de este autor, digo). Precisamente esta es una de mis razones por las que digo que un niño la disfrutaría.

La otra razón de esto es que... ¿cómo decirlo? A nivel trama y personajes, todo me parece muy simple.

Tenemos de protagonista a un niño de unos 12 o 13 años, que de la nada se ve inmerso en una aventura a través de los Océanos, embarcándose sin saberlo con una tripulación de piratas y yendo en busca de un tesoro. No voy a hacer spoiler, pero sí diré que el plot siempre avanza en una dirección concreta sin importar qué.
El esquema es el siguiente:
El prota y sus 4 o 5 compañeros = Los buenos, deben ganar.
Silver y el resto de piratas = Los malos, deben perder.

Y esto es justo por lo que digo que es el clásico perfecto para niños (o incluso adultos nostálgicos). Porque no es muy elaborado. Da igual que los piratas tengan una clara ventaja desde el inicio (en teoría), sabes que es el prota quien va a ganar. Sabes, incluso, que por muy malvados que los piratas sean o por muy imprudente que el prota se comporte, esto va a acabar de determinada manera.

En resumen, me parece una buena novela si la vemos como el inicio de todas las historias de piratas que ahora pululan por ahí. En caso de verla como una obra común, corriente y verídica de piratas... No la recomiendo. Los piratas se ven aquí como villanos de caricatura, delincuentes de boquilla que realmente no tienen capacidad de matar a una mosca.

Aunque conocía esta historia gracias a las adaptaciones de Los teleñecos y Disney, y a pesar de saberme de memoria estas películas, la lectura no se me hizo pesada en ningún momento. Solo con leer el primer capítulo empecé a degustar el sabor de una buena historia y me vi transportada a la posada Almirante Benbow, punto de partida de las aventuras de nuestro narrador Jim Hawkins.

Jim es un chico atolondrado y deseoso de vivir aventuras que, en más de una ocasión, pone en peligro tanto su vida como las de sus compañeros. Por suerte, cuenta con la habilidad especial de todo protagonista: por muy insensatas que sean sus ideas, siempre acabarán saliendo bien.

Mientras que en las películas se centran mucho en la travesía a a bordo del Hispaniola, lo cierto es que en el libro en seguida llegan a la famosa isla del tesoro, sin contratiempos y sin echar de menos al único desaparecido durante el viaje. Me sorprendió que el famoso señor Arrow, un personaje que siempre muestran como alguien recto y cumplidor de las normas, en realidad es un borrachuzo que desaparece de escena sin aportar nada a la historia. Después de desembarcar y liarse parda entre motines y polvorines, ambos bandos se quedan en tablas y comienzan las negociaciones. Aquí es cuando la historia pierde fuelle, por suerte tenemos a Jim y sus "brillantes ideas" para animar la lectura hasta el final. Lo único que no me gustó fue que no expliquen qué ocurre con Jim y su parte del tesoro. Da la sensación de que el autor tenía prisa por terminar y se le olvidó escribir un par de páginas para dejar un final bien cerrado.

A lo largo de todo el libro hay muchísimas palabras que desconocía porque están relacionadas con todo el tema de los barcos y, salvo ciertas personas, imagino que la mayoría de lectores tampoco sabrán su significado. Y me gustó que todo estuviera explicado a pie de pagina, así no me he perdido en ningún momento y he podido imaginarme cada descripción al detalle.

A pesar de ser una obra con muchas décadas a sus espaldas, destila originalidad y calidad en cada una de sus páginas. Es una de esas historias que se disfrutan sin importar los años que hayan pasado o la edad del lector. Es una novela fantástica que debe leerse, al menos, una vez en la vida.

Saludos ;)

El libro es muy bueno. El autor con su narrativa consigue atrapar fácilmente al lector. Con su lectura vivirás aventuras con piratas, rebeliones en barcos, tesoros, etc. Pero aparte de ser un libro de aventuras, Stevenson profundiza respecto a la dualidad moral sobre el bien y el mal, enfrentando a personajes con valores completamente opuestos. El pirata Israel Hands (uno de los antagonistas) justifica así esta desviación y decadencia de la moral: —Durante treinta largos años he recorrido los mares, durante treinta años he visto bueno y malo, mejor y peor, tiempo hermoso y horrendas tempestades; víveres escasos á bordo; agua casi agotada, y zafarranchos y rebeliones, y luchas, y muertes, y abordajes... ¡oh! ¡tantas cosas!... Pues bien, lo único que no he visto en esos treinta años es que lo bueno produzca nada bueno. El que pega primero es el afortunado y nada más. Los muertos no muerden, Jim; esa es mi opinión, esa es mi fe, y así sea... — También descubriremos al inolvidable John Silver, un personaje muy carismático, que nos enseñará a no fiarnos de nadie, por que a veces, nada es lo que parece