Atlas. La historia de Pa Salt

Terminar una saga como esta, llena de aventuras, emociones y misterio siempre se siente como una pérdida, el final de un viaje que recordarás con cariño a través del tiempo. Teniendo en cuenta las circunstancias que envuelven la publicación de Atlas. La historia de Pà Salt, he vivido todas esas sensaciones en mayor medida. Quiero antes que nada, agradecer a Harry Whittaker que terminase esta historia que su madre no pudo finalizar. No quiero ni pensar la presión y responsabilidad que debe haber representado para él, terminar esta saga.
La historia de Pà Salt no decepciona, y aunque seguramente no será mi favorito de la serie, representa unos valores con los que no puedo más que empatizar. Resiliencia y resistencia ante la corrupción de los ideales de uno mismo. Una historia dura y triste por momentos, pero que a la vez te reconcilia con el ser humano. Alguien muy querido para mí siempre me decía que el mundo aún resiste porque pese a todo, hay mucha bondad en algunos humanos y este libro me ha hecho recordar eso.
También nos habla de un gran amor, de esos como decía Serrat “de los de antes de la guerra”. Lucinda Riley y Harry Wittaker, consiguen que todo encaje como si fuese fácil, llevándonos a un final emotivo en el que sabremos más no sólo de las siete hermanas, sus familias biológicas y su carismático y misterioso padre y qué circunstancias le llevaron a adoptarlas; si no también de otros personajes entrañables como Marina, George y Claudia. Mientras, la estirpe perdura.
Pese a todo, en algunos momentos creo que se dan demasiadas casualidades y circunstancias favorables dentro de lo desfavorable. Para una mayor comprensión de todo, creo que este desenlace hubiese sido estupendo en dos volúmenes, pues en algunos momentos he sentido una sensación de precipitación en la resolución, sobre todo en la parte de las adopciones. En general lo he disfrutado y me ha parecido un buen desenlace para una saga con algunos libros brillantes en mi modesta opinión.
Recomiendo leer las notas de Harry Whittaker para entender lo especial que es que este libro haya llegado a los lectores. Buen trabajo, Harry y Lucinda !! ❤📚🌌🖤

Empecé este libro con muchas ganas y mucha pena. Ganas porque la serie de las siete hermanas me ha encantado y tenía mucha curiosidad por conocer al personaje que estaba detrás de todo y del que menos sabíamos: el padre de las hermanas. Y con pena porque, desgraciadamente, Lucinda murió hace poco y no sólo esta es la última novela de la serie sino la última que, más o menos, escribió. Por eso, la he hecho durar, alternándola con otras novelas y leyendo pocas páginas cada día.

Éstas son mis impresiones

En las anteriores novelas fuimos conociendo a cada una de las siete hermanas. Cada libro se dedicaba por completo a una de ellas que, como sabéis, buscaba en él sus orígenes ya que todas fueron adoptadas por Pa Salt. al mismo tiempo, íbamos conociendo alguna cosilla del resto de hermanas pues todas aparecían en algún momento. También se mencionaba al padre, recientemente fallecido. Pero tanto su misteriosa muerte como su más misteriosa vida daba mucho que pensar. Sinceramente, al principio pensé –creo que se dijo así- que serían solo siete libros. Pero al leer el séptimo y ver que seguía sin saber casi nada de Pa Salt, me quedé un poco en shock. ¿Cómo era posible? Pronto se supo por qué: habría una octava novela. El problema es que Lucinda falleció antes de poder escribirla. No obstante, tenía muchas notas escritas y mucho hablado con su hijo, Henry Whitakker que es quien, finalmente, ha escrito el libro.

Lo primero en este caso es preguntarse si Henry ha conseguido imbuirse del espíritu de Lucinda. Pues sí: porque lo sabemos, si no, perfectamente podríamos pensar que la novela la ha escrito la propia Lucinda. Son sus personajes, sus historias, su forma de escribir. En este sentido podéis estar tranquilos.

En cuanto a la trama, me ha gustado muchísimo. No sabíamos nada del pasado de Pa Salt y ahora sabremos todo. Empieza la novela cuando este es un niño, huérfano de madre y que acaba de perder a su padre, que ha de huir y es acogido por una familia en Francia. A través de los diarios que escribió, vamos conociendo su vida. Desde que era un niño hasta el final, ya anciano. Una vida muy movida llena de aventuras en la que, poco a poco, iremos encontrándonos con personajes que han aparecido en las otras novelas. También iremos viendo cómo fue adoptando a cada una de las niñas y por qué precisamente a ellas y no a cualquier otra. Estos retazos del pasado hechos diarios se van alternando con el presente. Todas las hermanas, incluida la hermana perdida, se reúnen en Atlantis. Es precisamente la hermana perdida la que tiene el diario de Pa Salt. La que hace copias que todas van leyendo a la vez. Cada día leerán cien páginas y se irán dando cuenta de que no conocían a su padre, ni siquiera sabían su verdadero nombre. El pasado y el presente se van alternando: el primero a través de los diarios, el segundo a través de una narración en tercera persona. Las hermanas se irán enterando de muchas cosas, de su padre y de ellas mismas. Lo mismo que nosotras.

Me ha hecho muchísima ilusión reencontrarme con todas las hermanas y con las parejas, allegados o lo que sea que hicieron en sus respectivas novelas. También conocer a un hombre tan fascinante como Pa Salt. Y conocer a un nuevo personaje, Elle. A los personajes les fui cogiendo muchísimo cariño a lo largo de la lectura de las siete novelas anteriores y este octavo libro es un broche final perfecto para todas ellas.

La trama es super entretenida y, lo más importante, da respuesta a todas las preguntas que nos fuimos haciendo en las novelas anteriores así como a las que ni siquiera se nos ocurrió plantearnos. Por supuesto, tendremos alguna que otra sorpresa, muchas aventuras, una preciosa historia de amor, una historia de venganza… En fin, pasan tantas cosas que la diversión está asegurada.

Conclusión final

Con esta novela termina una de las series que más he disfrutado. Sé que os puede dar pereza leer ocho novelas pero, de verdad de la buena, os animo a hacerlo porque todos los libros merecen muchísimo la pena.

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Acabar una saga como esta produce una enorme alegría pero a la vez una gran tristeza.
En esta historia conoceremos por fin la verdad de uno de los personajes mas importantes pero a la vez uno de los personajes más ocultos de la saga como es Pa Salt.
Se trata de una historia muy emotiva que reporta momentos de gran felicidad pero también momentos muy duros y tristes incapaces de dejarte indiferentes.
Otro de los puntos que en mi opinión resultan muy emotivos y tiernos para todos que amamos esta saga, es el reencuentro que vamos haciendo a lo largo de la historia con todos los personajes de las historias anteriores.
Como en las entregas anteriores, se va alternando la historia principal en este caso la vida de Pa Salt, con la historia en la que las hermanas van descubriendo el secreto mejor guardado y todos los sentimientos y sensaciones que esto desencadena en ellas.
Uno de los mayores retos de esta novela es el que tenía que enfrentar Harry, el hijo de nuestra queridísima Lucinda, y por el que tenía la grandísima presión de terminar esta novela a la misma altura que las que su madre dejó en el legado. Por esta parte os aseguro que podéis estar tranquilos ya que resulta prácticamente dilucidar que parte es de Lucinda y que parte es de Harry.
A través de una prosa sencilla pero muy emotiva nos adentramos entre estas páginas de las que resulta difícil salir ileso.
Gracias Lucinda y gracias Harry por habernos regalado estas maravillosas historias.

Las hermanas D'Apliesse se han reunido a bordo del Titan para darle un último adiós a su amado padre.
Juntas afrontarán el pasado de Pa Salt gracias a su diario.
Una novela llena de misterio,intrigas, hermandad,romance e historia y muchos secretos por desvelar.
Esta es la última entrega de la serie de las siete hermanas, saga que si no conocéis os invito a leer, a mi me ha encantado y este broche final no puede estar mejor.

Contada en dos tiempos como las anteriores,conocemos desde 1928 hasta la actualidad la vida del enigmático Pa Salt y en el 2008 con la reunión de las hermanas y todo lo que conlleva desvelar el pasado de aquel que amaron tanto y que tan poco conocían, el cómo, dónde y porqué de sus adopciones.

Entre la ficción histórica y una novela de aventuras,es una historia entretenida, interesante y adictiva.
Lucinda ha escrito una saga familiar llena de intrigas muy bien construida, absorbente y emocionante que su hijo Harry ha sabido completar con un final redondo,gracias a las notas dejadas por la autora.

Con gran ambientación, te trasporta por muchos escenarios, un gran viaje que puede ser algo lento pero compensa, despejando todas las incógnitas que quedaron abiertas en anteriores libros.

Un sin fín de personajes, ya conocidos,muy bien contruidos,ahora conoceremos al enigmático padre y aquellos que lo acompañaron, fieles y agradecidos.

Pa salt me parece excepcional, un hombre que dedicó su vida a buscar lo que más amaba y dispuesto a proteger y cuidar a aquellos a los que llama familia.

Una historia que habla de cuentas pendientes, vínculos familiares creados sin sangre heredada, lealtad absoluta, amor incondicional y miedo a perder lo que más se quiere pero sin perder nunca la esperanza.

Esta novela en particular tiene de todo para poder disfrutar de una gran historia.
A mi me ha encantado,os animo a conocer esta peculiar familia

Como no podía ser de otra manera, en cuanto pude he leído la última novela de la saga de las siete hermanas de Riley. Como ya dije en mi comentario de la séptima novela: "La hermana perdida", estas novelas tan rosas o románticas no son mi primera elección de lectura, pero a mí me puede la historia, y esta saga tiene una historia muy adictiva con mucho toque de misterio y mucho enredo. Es verdad, que si tienes altas expectativas literarias, aquí no vas a satisfacerlas, pero como evasión están muy logradas. Es un mundo de ensueño donde hay muchas personas buenas (quizás demasiadas) pero que les pasan muchas cosas malas y que gracias al gran protagonista Pa Salt, todos se salvan de sus respectivas tragedias.
En esta historia, la que cierra la saga, conoceremos por fin desde su más tierna infancia al gran hombre, Atlas Tanit, que así se llamaba, aunque después adoptó otros nombres, según la necesidad de la aventura que viviese en ese momento, y que cuando se convirtió en el padre de sus hijas adoptivas, decidió quedarse con D'Aplièse, porque deseaba honrar a las Pléyades (en inglés, «Pleiades») las estrellas que le habían guiado a lo largo de su vida, de modo que se le ocurrió el anagrama D'Aplièse para el apellido de las hermanas. Se desvelan todos los misterios alrededor de Pa Salt, el origen de su enorme fortuna, como construyó Atlantis, como fueron apareciendo uno a uno todos los personajes de la historia y por qué fue adoptando a las seis niñas en lugares tan distantes y distintos como Río de Janeiro, Noruega, Inglaterra, Australia, España y Kenia. Además y muy importante, conocemos el significado de la hermana perdida, porque en la anterior novela, siempre pensé que era muy fantasioso todo eso de la búsqueda de la séptima hermana por parte de todas las demás. Sin embargo es verdad que en el mito de las Pléyades, todas las hermanas se convirtieron en estrellas para huir de un terrible enemigo que las perseguía sin cesar, como en esta historia. Todo está muy bien ensamblado, todo obedece a unas circunstancias muy concretas y explicadas en esta novela y esto es lo que me ha convencido para opinar que es una muy buena historia.
Pero, como digo, le falta una revisión editorial, o alomejor, de traducción, no sé bien, o, es que Harry Whittaker, el hijo de la fallecida Lucinda Riley, tiene menos experiencia narradora que su estupenda madre. Por ejemplo, hay términos que no me gustan este lo emplea a menudo para referirse al personaje que le toca hablar o actuar y es algo tosco. Pero no quiero abundar en lo que me ha rechinado de la lectura, porque me quedo con la Historia, es un gran homenaje de Harry a su madre y un final muy bien orquestado y redondo para la saga.