Jade es hija de los Halgboots, una chica marcada desde que nació y que los dioses la escogieron para que se casará con el príncipe. Ella es una guerrera, pero tiene un secreto que nadie tiene que saber porque ello pondrá en peligro a toda su familia. Una vez que llega el momento de ir a la capital y enfrentar su destino. Allí conocerá a Glenn, su futuro marido. Un chico con ideales completamente diferentes al rey. En esta historia la autora ha construido un mundo complejo en el sentido de que hay diferentes tipos de seres y cada uno tiene su territorio y sus costumbres, e incluso hay rivalidades y odios entre ellos. Raiden es el hijo bastardo del Rey Doppel, está en la capital, para hablar con el rey. Él y su primo son emisarios y están en una tregua para ver si llegan a un tratado de paz y dejar la guerra en la frontera de ambos y que no muera nadie más. Entre Raiden y Jade hay una conexión especial, van a conocerse y pasar tiempo juntos porque el rey la nombra a ella consejera para el tratado de paz. van a conocerse el uno al otro, sus deseos, anhelos y miedos. Para ella su destino es casarse con el príncipe, él no tiene nada que poder darle a ella. Ella es una marcada con un secreto, él es el hijo bastardo. También conoceremos a Centella, Alpha, Don y Centella ellos son susurrantes, personas malditas que se encuentran y harán una pequeña familia. El romance va a ser lento y prohibido. Pero lo que sienten es mucho más fuerte que el deber de ambos, lo que ellos sienten es más fuerte que ninguna otra cosa. Van a pasar cosas en la grieta, algo que hace mucho que trajo problemas para todos, algo está despertando y hacerse a la idea no será fácil. El final es de infarto, traición, secretos y una pequeña solución a cosas, pero también deja clara muchas otras y la guinda para la continuación que espero con muchas ganas. Me gusto descubrir una cosa porque sospechaba una, pero la otra me dejó con la boca abierta. + Leer más |