Hay momentos que deberían ser eternos

Este ha sido mi primer contacto con Megan Maxwell, la verdad es que siempre he rehuido un poco de sus libros porque no es un género que me llame demasiado la atención y sus títulos además suelen echarme para atrás (véase por ejemplo “Oye morena ¿tú qué miras?”), pero lo vi en audiolibro y me dije, “pues voy a probar”. Y es que mi concentración escuchando no es la misma que leyendo así que necesito historias sin demasiados artilugios argumentales.

¿Ha cumplido mis expectativas? Pues sí, la verdad es que lo que buscaba lo he encontrado, me he entretenido bastante. ¿Es un gran libro? Lo cierto es que desde mi punto de vista no pero entiendo que tenga éxito esta mujer. Es una historia tan llena de clichés y tan previsible…pero hace su función de entretener a veces enternecer y también te saca alguna sonrisa.

Es la típica historia de chica conoce chico, ambos bastante exitosos en su campo de acción y ambos con mochilita de desengaño a su espalda.

Lo que me ha gustado es que nuestros protagonistas están en los “treintaymuchos cuarentaypocos” y esto le da algo de originalidad a la historia. Por lo demás tenemos tragedias que pueden sacarte hasta una lagrimita, momentos preciosos (¡pingüinos! ), secundarios geniales y no tan geniales (de verdad que me cuesta imaginar a una hermana como Teresita). También la autora nos da puntintos de mensajes positivos que nunca vienen mal. Me encanta eso de “Nunca empieces una frase con NO” y la importancia de manternerse positivo ante la adversidad.

Sobre el final no digo nada porque cualquier cosita podría verse como spoiler así que...

Según la propia autora cuenta, lo escribió durante la pandemia pero no quiso introducirla en la historia porque en su opinión estamos saturados ya de COVID y estoy de acuerdo con ella, porque la verdad esta historia con pandemia pues no sería lo mismo. Esos paseos por Ibiza pues no tendrían el mismo encanto y es más, posiblemente con pandemia Marc y Eva nunca se habrían conocido ¿o sí? ¿Creéis que estaos predestinados o todo es cuestión del azar?

En definitiva si queréis algo fácil de leer, sin complicaciones muy de playa, este podría ser vuestro libro. ¡Ahh! y la banda sonora del libro le da un toquecito genial.

Ay dios... Por donde empezar sin hacer ningún spoiler con esta historia...
Es una historia que nos va a hacer parar y pensar, por que la vida aunque pasa rápido debemos vivirla y disfrutarla y es lo que hacen sus personajes.

Esta vez, Megan deja atrás tanto erotismo para meternos en una historia preciosa de amor que aunque ellos lo tengan claro la vida no se lo va a poner fácil.

Que decir que la forma de ser de Eva es muy del estilo que conocemos a las protas de Megan, una mujer decidida, fuerte y con una personalidad arrolladora pero esta vez sin duda el que me ha enamorado por su forma de ver la vida a sido Marc, sin duda esa forma de ayudar a que Eva deje de vivir para trabajar me a encantado.

Ains y los secundarios? No se por cuál decidirme ya que todos se llevan un trocito de mí, menos una... Que esa me ha provocado urticaria😂😂 Los hermanos tanto los de ella como el de él, son unos personajes muy importantes en la historia ya que ellos también tienen sus momentos y veremos también lo que pasa en sus vidas.

Las últimas páginas son frenéticas y me han tenido en un sin vivir ya que hasta que no llegas al epílogo no sabes realmente como terminará la historia.

Así que está vez Megan me a dejado con resaca literaria ya que es una historia que al mismo tiempo que te hace reír, tiene momentos en los que me ha encogido el corazón. Una historia real, preciosa, emotiva y sobretodo romántica❤

Una emotiva historia que nos enseña que el mejor viaje de la vida es el amor.
Eva es una mujer independiente, segura de sí misma y muy vinculada con su adinerada familia, a pesar de que sus hermanos, en ocasiones, no se lo pongan nada fácil. Marc Sarriá, más conocido como doctor Sarriá, es un prestigioso y querido cirujano oncólogo en un hospital privado de Madrid. Hace unos años tomó la decisión de vivir el presente y no plantearse el futuro más allá del día a día.

Los caprichos del destino hacen que dos personas tan distintas como Eva y Marc se conozcan una tarde en una azotea y terminen la noche como nunca imaginaron.
Mi opinión personal:
Hay momentos que deberían ser eternos es una historia romántica donde Megan deja de lado ese punto erótico para dar más énfasis a la relaciones del amor a primera vista, y la familia. 
Leer los libros de Megan son bálsamos para aquellas veces que estamos en esos parones de lectura o esos bloqueos que solemos tener los que leemos mucho, son libros sencillos que te harán soltar tanto lagrimas como sonrisas y que te harán pasar un buen momento de lectura.
La narración es sencilla, con capítulos cortos que hace la lectura muy dinámica.
Ambos protagonistas tanto Eva como Max me han gustado, una relación que tiene momentos muy bonitos, pero no todo iba a ser perfecto para este libro ya que la documentación sigue siendo un punto flaco para Megan ya que he visto muchas lagunas en el oficio de Marc, y el final ha quedado precipitado algo que no me gusta en ningún libro. 
En conclusión, un libro que cumple su cometido a la perfección que es el de entretener y hacerte pasar un buen rato de lectura.

✨Hay momentos que deberían ser eternos ✨ de Megan Maxwell

Eva es una mujer que a pesar de que ha tenido todas las facilidades viniendo de una familia acomodada, ha luchado por convertirse en la empresaria y chef que es a día de hoy. En el terreno amoroso no ha tenido tanta suerte, ya que sus parejas se la han jugado y lo ha pasado mal.

Marc es un reputado oncólogo que lo ha pasado muy mal en el plano sentimental cuando su última pareja lo deja en el peor momento de su vida, y ahora mismo no quiere más que lo que le ofrezca la vida.

El destino y un pasador de pelo, hará que este par se conozca y no puedan estar separados, incluso ante las mayores adversidades tendrán que luchar, ¿Lo conseguirán?

❣️Opinión personal❣️

Os voy a confesar que Megan es una de mis escritoras favoritas, he leído casi todo de ella, y este en especial, es uno de los más emotivos que he leído de ella.

La protagonista es una tía fuerte, con carácter como todas las protagonistas que escribe Megan (es algo que adoro de ella) y a su vez es una mujer que detrás de esa barrera de mujer fuerte, esconde unos sentimientos tan bonitos hacia su familia y su chico que me ha encantado.

Voy a ser sincera, el personaje de Teresa lo he odiado desde el minuto 0, y mucho ha tardado la protagonista en mandarla cerca, y esta situación, es algo tan real como la vida misma, si no lo creéis, seguro que habréis oído hablar del dicho, en todas las familias se cuecen habas… pues en esta hay una muy muy cocida.

Me ha encantado la fuerza que saca Eva para no perder a Marc y estar a su lado en todo momento.

Solo puedo decirte Megan, que he llorado mucho pero es una historia tan bonita que ha merecido la pena cada lagrima.

Cuando tu lees un título como Hay momentos que deberían ser eternos, inmediatamente suben las expectativas, imposible no hacerlo; pero cuando aparte de eso, su autora es una de tus favoritas, yá la novela tiene que ser "LA NOVELA". Y hoy terminé ésta historia, e indudablemente recordé lo que era leer las novelas de Megan Maxwell, desde las carcajadas entrada la madrugada, hasta el llanto absoluto con bajón anímico y todo.

Lo que estoy diciendoles es que me enamoré de Marc Sarriá y Eva María García, pero sobretodo me enamoré de su fortaleza y tesón. Ojalá llegue a Colombia este libro porque es para tener en la biblioteca sí o sí.

Eva María García es una mujer de cuarenta y tres años, independiente, empoderada, inteligente y autónoma; una mujer que lleva las riendas de su vida y sobretodo una mujer que amaba profundamente a su familia... Exepto claro, la elitista de su hermana Teresa, alias la Tipitesa.
Es por eso que a pesar que odia y repele con todas sus fuerzas los hospitales, se encuentra acompañando a su hermano Adrián, que está ingresado por su último accidente en moto; es tal la angustia que éstos lugares le causan, que todo su cuerpo se carga de negatividad. En ésas está, cuando un guapo doctor se le acerca, pero ella es tan borde que después de un cruce de palabras, lo deja tirado en la azotea de la clínica, con tan mala suerte que también dejá atrás un precioso y antiguo pasador de la abuela, al cual le tiene mucho afecto.

Marc Sarriá más conocido como el Doctor Sarriá, es un encanto de hombre, una persona optimista, admirable y jovial; un hombre que aporta esperanza a cada uno de sus pacientes, un prestigioso oncólogo, que vela por la salud y bienestar de todos. Por lo que cuando se acerca a Eva en esa terraza, solo pretende infundir un poco de su positivismo en ella, y en cambio se lleva un buen palmo de narices, por el desastroso día que ha tenido ésta.

Un mal comienzo para un hermoso y profundo romance que nacerá entre resetas, adversidades, besos, canciones, conflictos, ilusiones y desdichas.