Todo lo que somos juntos (Deja que ocurra 2 )

Había leído que el primero era mucho mejor y efectivamente así es. Aunque me ha gustado, no he sentido esa magia que sentí cuando leí el primer libro de esta bilogía. Aun así, Alice nos demuestra una vez más que tiene una pluma adictiva y que sus personajes son reales. Estoy deseando leer mucho más de ella. Todo lo que nunca fuimos me maravilló pero esta segunda parte no me ha llegado tanto.
Han pasado tres años desde la última vez que Axel y Leah se vieron. Mientras que Leah ha rehecho su vida en Brisbane, Axel ha vivido sumido en sus recuerdos, haciendo su vida en Byron Bay pero anclado en los días que pasaron juntos, incapaz de superarlos. Leah va a exponer por primera vez en una galería y Axel necesita ser testigo de ello. Será entonces cuando sus caminos vuelvan a cruzarse y todo lo que había estado guardado en un baúl con candado volverá a salir a la luz trayendo consigo todos los recuerdos que llevaban tres años cogiendo polvo. Recuerdos con los que Leah ha luchado con uñas y dientes por dejar atrás.

En la primera parte, vi una Leah rota aprendiendo lo que era vivir de nuevo. Esa Leah impulsiva que actuaba y después pensaba, ahora, tres años después, es una mujer y es más madura. Pero poco a poco veremos que esa niña que Leah lleva dentro sigue ahí, con una sonrisa y el color en los ojos. Sin duda, esa madurez, ese quererse primero a ella misma y aprender a pensar también en ella me ha encantado. También he visto como comete errores y aprende a vivir con ellos, Leah está aprendido lo que es la vida. En esta segunda parte he visto otra Leah que, si soy sincera, me ha parecido todavía más real.
Leah fue mi favorita de la primera parte pero aquí Axel me ha ganado bastante. Ha aprendido de sus errores y está dispuesto a hacer las cosas bien por una vez en su vida y a plantar cara tanto a los demás como a sí mismo. Me ha gustado ver ese cambio y esa madurez en este personaje. Ha sido como verle pasar de etapa aunque la esencia de ese chico que sigue amando su trocito de mar y los cielos despejados sigue ahí.
Reencontrarme con el resto de personajes también ha sido una de las cosas que más me ha gustado del libro. Qué ha sido de su vida en esos tres años y cómo han cambiado. Tendremos algunos personajes nuevos como Sam o Hans, pero quiero destacar a Justin y Oliver, los hermanos de Axel y Leah, que me han gustado mucho más que en la primera parte.

Alice Kellen repite la estructura del primer libros: capítulos cortos a dos voces. Esa dinámica hace muy amena la lectura y es algo que me ha gustado. Y ahora vamos a lo que me ha decepcionado un poco, este libro gana en madurez pero pierde en esencia. Me explico, podemos llegar a vernos reflejados tanto en Leah como en Axel, ambos están buscando su camino en la vida y eso es algo que hacemos todo en algún momento: buscarnos a nosotros mismos, buscar qué queremos. Pero, he echado de menos esa intensidad entre los personajes, la chispa que tenían. El primer libro me hizo sentir mucho más.
Aun así, creo que esta bilogía ha tenido el final que merecía y siempre le guardaré cariño a la historia de Axel y Leah.

En definitiva, Todo lo que somos juntos nos regala el final que Axel y Leah merecían. Una historia de amor más madura, donde veremos un crecimiento en los personajes que no dejan de ser reales. La pluma de Alice sigue siendo adictiva pero, me ha faltado la magia de la primera parte, y eso ha influido un poco.
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.🌷Reseña: En esta segunda parte de la bilogía, Leah se ha ido a la universidad, donde intentará terminar sus estudios y sobreponerse a la pérdida de Axel, pero sobre todo a la decepción de sentirse abandonada por el amor de su vida. En esa nueva ciudad tendrá un pequeño estudio de pintura, donde sin saberlo, estará creando las obras que pondrán de nuevo a Axel en su camino. Aunque mantiene una relación con Landon, un compañero de universidad que la da el apoyo y la seguridad que necesita, Leah no consigue avanzar en el terreno sentimental, ya que sigue enamorada de Axel y no ha superado el modo en que todo terminó. Pero su vida dará un giro en el momento en el que tras exponer sus obras en una galería, le llega una proposición para viajar a Paris con una beca y exponer sus obras en una galería. Solo serán dos meses de beca, pero la cambiarán la vida. Estando en Paris tendrá que elegir entre crear sus obras a través de sus sentimientos, o crear obras vacías, pero que son las reclaman los compradores.
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.🌷Opinión: A pesar de las malas críticas que había leído sobre el libro, tengo que decir que a mi personalmente me ha gustado muchísimo. La historia me ha tenido enganchada de principio a fin, y me ha dado muchísima pena terminar el libro.
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No solo de romántica vive el lector
Como ya sabréis, no es que no lea románica, de hecho me da la sensación de que leo más de la que pienso, pero es cierto que cuando la leo no me gusta quedarme solo en la historia de amor. Creo sinceramente que se nos cuentan tantas cosas cuando se nos habla de un amor (cuando la novela es buena), que no puedo no aprender de ellas.
En el caso de la historia de Deja que ocurra, tanto en el primer tomo como en el segundo tomo, aunque en este más, se nos habla de eso que a veces nos aterroriza: el equivocarnos. Tanto uno como otro, a lo largo de la historia, tendrán que tomar decisiones que atañen única y exclusivamente a su vida, pero, cómo no, siempre hay daños colaterales.
Y sé que sonará dura esa expresión, pero una de las cosas que nos deja claro Alice Kellen es que hay decisiones que solo las podemos tomar nosotros, que no podemos depender de un pilar inamovible y que, aunque duela, necesitamos aprender con golpes.
Sin hacer spoiler, en Todo lo que somos juntos aprendemos que te andar solo es muy difícil, que andar con otro lo es también y que, en definitiva, la vida tiene sus cosas malas y buenas. No podemos plantearnos, como lo hacía Axel, que la vida es fácil, porque te la puedes hacer fácil, pero al final quieres y te quieren. No podemos plantearnos, como hace Leah, que la vida es estar con los demás, porque no es verdad, porque habrá momentos en los que tendremos que aguantarnos a nosotros mismos y, aunque nos quieran, no podrán y no deberán aguantarnos.
Así, entremezclándose los dos puntos de vista, con el esfuerzo por seguir adelante en lo vital, en lo cotidiano: los estudios, el trabajo, lo social, etc. se desarrolla la parte final de una de las mejores historias de amor que he leído. No por el amor, que se desborda, sino por lo bien que plasma el desasosiego vital y el esfuerzo por continuar a pesar de él.
Colores y trazos
Si tuviera que concretaros a estas alturas lo que opino de la bilogía es que malamente he hecho la reseña, pero lo haré por si acaso. Me ha encantado. Como he dicho más arriba, es una novela con la que he llorado, me he reído y he estado horas sin dormir, a pesar de que trabajaba al día siguiente.
Es cierto que tiene algún pero, como el hecho de ser predecible, pero eso va inherente al género, que tiene una estructura y, aunque no sepas qué, sabes cómo va a pasar y bueno hace que sepas qué esperar. de todos modos, lo dicho, tiene tanto gracias a sus personajes ya los temas que toca que ese pero desaparece muy rápido.
Así, iremos avanzando en esta historia, la de Leah, y la de Axel, claro, que nos mostrará el esfuerzo por seguir adelante, por llenar de color unas vidas que en un momento determinado quedaron vacías por miedo. Una historia que pasará de dos a uno y de uno a dos. Y espero que os animéis a averiguar qué significa esta ecuación y a descubrir la belleza de los submarinos amarillos.

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En “Todo lo que somos juntos” continua la historia de Leah y Axel, tres años después del desenlace que ocurre en “Todo lo que nunca fuimos”.

Leah consigue encauzar su vida, supera la muerte de sus padres y empieza sus estudios en la universidad. Su personaje avanza y madura un montón.
En cambio Axel, pierde un poco el rumbo...

Pero, por algún motivo, sus vidas van a volver a cruzarse.
¿Como creéis que acabaran las cosas entre esta pareja?

Algunas frases bonitas:
“... el recuerdo de las personas permanece en detalles que parecen poca cosa, pero que terminan siendo los que de verdad importan”
“Es fácil juzgar las cosas desde fuera sin molestarte en intentar entenderlo”
“Esa comodidad, la seguridad de saber que tu vida no va a ser como una montaña rusa, con sus altibajos, sino como un trayecto tranquilo del que disfrutar sin la necesidad de abrocharte el cinturón”
“Quizá no todas las historias estén destinadas a ser un , pero no por ello el trayecto recorrido vale menos la pena”
“Arriesgarse debería de ser un requisito fundamental”
“¿Por qué a veces invertimos mas esfuerzo en los que no lo merecen que en esas personas que si lo hacen y tenemos delante de las narices?”
“... a veces hace falta caer porque el mundo se ve diferente desde el suelo”

Todo lo que escribe Alice Kellen es oro y puro sentimiento.
Nunca en la vida he leído una historia tan bonita como la de Leah y Axel. Me he enamorado de cada palabra, de cada página y me ha hecho emocionarme hasta tal punto que no he podido aguantar las lágrimas.
Me resulta muy difícil explicar lo que siento sobre un libro cuando me ha gustado tanto y con esta bilogía no tengo apenas palabras para describir lo perfecto que es. En cada página había tal cantidad de sentimientos que aún no entiendo como Alice ha sabido plasmarlos tan bien con palabras y me siento muy afortunada de que esos sentimientos tan bonitos los haya querido compartir con cada uno de nosotrxs.
Por favor, si aún no lo has leído y te gustan este tipo de libros tienes que leerlo porque, de verdad, es precioso.
P.D.: Ahora lo único que me apetece es leer todos los libros de Alice y sobre todo ''Nosostros en la luna'' porque tiene una pintaza...

¡Me ha gustado mucho y considero que los personajes han evolucionado y crecido a lo largo de la bilogía; van directos a mi estantería de favoritos!

Me ha gustado mucho, se nota mucho la evolución de los personajes respecto al primer libro.
La pluma de la autora es fabulosa😍 osea me ha mantenido super enganchada, aunque me ha gustado más el primer libro.
Me ha gustado el rumbo que ha tomado la historia, y sobre la forma en la que ha cambiado Axel en este segundo libro.
Ojalá pueda leer pronto más libros de Alice kellen, porque estos has sido una M-A-R-A-V-I-L-L-A

En esta segunda parte y final de la bilogía también suspiré y me emocioné, aquí vemos a sus protagonistas más maduros, independientes, con sueños cumplidos, con más determinación... han cambiado, sin embargo su esencia sigue siendo la misma a pesar del transcurso del tiempo. Los sentimientos siguen ahí ocultos en medio de pinturas, galerías, ciudades distantes, rumbos dispersos pero que vuelven siempre al punto de partida: Axel y Leah y la inmensidad del amor que existe entre ellos.

Simplemente: Alice Kellen ❤️. He conseguido empatizar con ambos protagonistas en todo momento y he disfrutado mogollón de la historia.

Me ha gustado ver que Leah ha continuado con su vida, es cierto que la mayoría del tiempo sigue pensando en Axel pero por lo menos no se echo a la pena y decidió experimentar todo lo que le ofrecía Brisbane; eso si, puso todo su corazón en la pintura más no en abrirse de verdad a una nueva relación.
En cuanto Axel, no se aleja de ese lugar que es tan propio y tan él, solo que ahora se le suma que decidió apostar por otro camino más cercano al arte pero desde una distancia prudencial. Debido a ese trabajo tiene la excusa para volver a ver a esa chica que se sigue colando en sus pensamientos y por nada del mundo quiere perderse su primera exposición.
He disfrutado con la evolución que tienen ambos, han madurado y afrontaron diferentes obstáculos para desprenderse de fantasmas, miedos e inseguridades para lograr, primero encontrarse ellos mismos y segundo para construir una buena relación.
Alice Kellen me sigue conquistando con su estilo, admiro la manera en que potencia los pequeños detalles y como logra trasmitir tantas emociones.
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