El amor no germina bien cuando se alimenta del dolor.
|
El amor no germina bien cuando se alimenta del dolor.
|
- ¿Te he dicho lo horrorosa que estás esta noche? - No. Dímelo. - No puedo. |
- Sobre todo, te odio porque pienso en ti. A menudo. Es repulsivo, pero no puedo evitarlo. [...] - Me deseas. Y eso te enfurece. |
Cuando hay mucho poder concentrado en un mismo sitio, hay un montón de sombras por las que pelearse.
|
No creo que vaya a ser un buen rey. Nunca he querido ser monarca, y menos uno bueno. Me has convertido en tu marioneta. Está bien, Jude, hija de Madoc, seré tu marioneta. Tú gobernarás. Tú lidiarás con Balekin, con Roiben, con Orlagh del Inframar. Serás mi senescal, harás todo el trabajo, y yo mientras beberé vino y haré reír a mis súbditos. Puedo convertirme en el escudo que pondrás delante de tu hermano, pero no esperes que empiece a ser útil. Esperaba otra cosa; una amenaza directa, quizá. Pero, en cierto modo, esto es peor. |
El amor no germina bien cuando se alimenta del dolor.
|
El amor no germina bien cuando se alimenta del dolor.
|
—Los idiotas son los únicos que no se asustan de las cosas que dan miedo
|
Me besa con fuerza, con una especie de ávida desesperación, hundiendo los dedos en mi pelo. Nuestras bocas se deslizan al unísono, una sinfonía de dientes, labios y lenguas. Siento el impacto del deseo como si fuera una patada en el estómago. Esto se parece mucho a combatir, aunque el objetivo de esta lucha no es otro que adentrarse en la piel del otro.
|
—Antaño, mi gente tenía alas—dice, con un deje evidente de nostalgia—. Y aunque yo nunca las he tenido, a veces siento como si me faltaran.
|
¿Qué criaturas mágicas podemos encontrar en Gringotts, el banco de magos?