Relato de un náufrago

Si bien esta no es una novela, sino más bien una crónica literaria, la verdad es que es una de mis obras favoritas de García Márquez. No sólo porque lo narrado en esta obra está basada en un hecho real, sino porque Gabo demuestra que sabe narrar bien. Creo que aquí hay un fugaz destello de genialidad que no lograría alcanzar en sus novelas sino hasta años más tarde. No sé si es porque la historia es, hasta cierto punto lo suficiente dinámica como para mantenerte atento en todo momento o porque sabe en que momento manejar elipsis. Creo que hay pocas cosas "innecesarias" dentro de esta narración, a diferencia de sus primeras novelas: "La hojarasca"; "El coronel no tiene quien le escriba" o "La mala hora", donde realmente se siente que hay algo de relleno en sus historias (y eso que son obras excesivamente cortas).

Obra excelente y que creo que es poco valorada justo por ser más una crónica periodística y no una novela, aunque eso sí, aquí hay algo de lo real maravilloso que tanto presumió Alejo Carpentier que poseía nuestra región Latinoamericana, simplemente increíble.

Mis queridos seres míticos. Yo de nuevo por aquí para poder cerrar el año en paz, con más lecturas terminadas. El día de hoy les traigo un maravilloso libro de un conocidísimo autor colombiano, ganador del premio Nobel a la Literatura, ni más ni menos, que el amor de nuestras vidas, Gabo, también llamado Gabriel García Márquez. Así que, sin más, comencemos.

Es necesario que aclare algunas situaciones para que puedan, de lleno, meterse en la lectura. Este párrafo se lo pueden saltar los que sepan de qué va el libro y el porqué se escribió. Pues bien, se trata de la compilación de una crónica/relato que García Márquez escribió en 14 entregas para El Espectador, un periódico de Bogotá, Colombia, en el año de 1955. de manera que las personas y eventos aquí mencionados, en realidad ocurrieron. Pueden ir a Googlearlo, cosa que yo hice, y hay todo tipo de reseñas e incluso fotografías del marino en cuestión y sus amigos que cayeron al agua junto con él en ese momento. Hasta aquí, todo normal. Sin embargo, es necesario que mencione otro par de cosas. La primera es que el barco en el que iban, que era militar, llevaba contrabando de Estados Unidos. El segundo es que el gobierno de la época solía reprimir a la prensa y todo lo que tuviera que ver con evidenciar al gobierno. Así pues, en esas circunstancias, no sólo fue escrito este texto, sino que también fue publicado.

Bien, ¿de qué va la historia? Pues Luis Alejandro nos cuenta, en primera persona, los días de embarcación tras salir de Estados Unidos, los días navegando, sus diez días de naufragio y cómo fue que llegó a tierra y fue tratado por las personas. Para ilustrar la situación, que puede parecer poca en papel, en mi edición se adjunta un mapa con la ruta que siguió el barco, el punto exacto del accidente y el camino que siguió la balsa del náufrago hasta el punto donde por fin tocó tierra de nuevo. Hasta este punto la historia parece demasiado sencilla, entonces, ¿porqué este libro gusta tanto a las personas?

Uno de los principales motivos por el que Relato de un náufrago agrada tanto, es porque se narra de una manera rápida, cadenciosa y entendible. Su lenguaje es sencillo y puede hacer de un simple tiburón el ser más maravilloso del mundo. Además, claro está, por todo el trabajo periodístico que García Márquez hizo para poder lanzarlo al público. Por si fuera poco, también es relevante y la gente lo lee por el mero morbo de pensar en las consecuencias que pudo tener para el escritor colombiano y el marinero compatriota después de aparecer en el periódico. Sin embargo, aquí a mi me entraron un par de dudas al respecto que se ven reflejadas, principalmente, en qué tanto editó o escribió el mismo García Márquez. Según él afirma, Velasco era un gran narrador; pese a eso, siento que muchas de sus frases son demasiado rebuscadas, demasiado poéticas, para pertenecer a un ciudadano promedio de la clase trabajadora. Claro que eso no demerita en nada la historia y todo lo ocurrido, sólo que, a mis ojos, lo descarta hasta cierto punto de la idea de autobiografía. de cualquier manera, no deja de ser un libro maravilloso.

(Reseña completa en mi página).
Enlace: https://librodeultratumba.bl..

"Relato de un náufrago" relata la historia de Alejandro Velasco que cuando llega a Colombia es proclamado héroe.

Más que una novela es un reportaje periodístico que Gabriel García Márquez publicó por entregas en "El Espectador". A lo largo de este diálogo, el superviviente de la tragedia aclara que no hubo ninguna tormenta, como sí habían dicho las autoridades colombianas, y que cayeron al mar por llevar carga de contrabando. Así pues, este relato se convirtió en denuncia política y le costó el exilio al periodista.

No podía pasar el #agostolatinoamericano sin leer una obra que llevo bastante tiempo queriendo leerla del maestro Gabo. Es muy cortita y muy muy recomendable como toda la obra de este autor.

Este es uno de esos libros que tienes que leer en el instituto, pero que o no lo lees con atención o no terminas de leerlo. Esta vez sí lo he leído entero y he de decir que me ha sorprendido al resultar interesante(es un caso real rodeado de polémica) atractivo (el estilo y la tensión de la historia me han mantenido pegada al libro) y no muy extenso. Esperaba encontrar hispanismos propios de Colombia que entorpecieran el ritmo de lectura, pero no ha sido así. No hay nada como una buena historia y un buen escritor..

Relato de un náufrago
Gabriel García Márquez

" Lo que no sabíamos ni el naufragó ni yo cuando tratabamos de reconstruir minuto a minuto su aventura, era que aquel rastreo agotador había de conducirnos a una nueva aventura que causo un cierto revuelo en el país , que a él le costó su gloria y su carrera y a mi pudo costarme el pellejo".

Les traigo una historia maravillosa , real que sucedió en mi país pero que por cuestiones políticas fue cambiada, hasta el dia que este hombre Luis Alejandro Velasco un marinero decidió ir al diario EL Espectador y contar la verdadera historia. El dueño del diario Guillermo Cano decidió que el reportaje lo hiciera Gabriel García Márquez.
Así empezó todo , este marinero perdió su gloria y quedó olvidado , Gabo tuvo que salir del país exiliado en Francia, porque el régimen de ese momento una dictadura militar en el país que ejercía el general Gustavo Rojas Pinilla, no permitía que la prensa publicará sino reportajes sociales pues estaba censurada , sacar a la luz la verdad de este naufragio era una vergüenza para el .
Es una historia maravillosa contada en primera persona , cuando se publicó en el diario el Espectador por catorce días era el año 1950 y la firmo su protagonista.
Años después en 1970 Gabo decide publicarla en forma de libro y se descubre como ese gran narrador que es.
Todo esto viene en momentos de incertidumbre para este país que amo.
Un país que puede ser de los mejores vivideros del mundo , con gente buena y que a pesar de todo se levanta todos los días pensando que todo cambiará y será mejor.

En febrero de 1955 el destructor A. R. C. Caldas se encontraba de regreso a Cartagena luego de haber pasado algunos meses en Estados Unidos donde había sido sometido a reparaciones. El día 28 del mes a causa de una ola —y no de una tormenta como el gobierno de Rojas Pinilla dijo originalmente— ocho tripulantes cayeron al mar y en medio de la confusión y tensión propia del momento solo Luis Alejandro Velasco logró abordar el bote salvavidas, sobrevivir 10 días en el mar y finalmente volver a tierra sano y salvo para contar su historia y convertirse en el héroe nacional de turno. Esta es la crónica que un tiempo después fue publicada primero por entregas en El Espectador ese mismo año y que luego en 1970 tomó la forma de libro que conocemos.

Con este libro conocí al Gabo reportero, pues que recuerde es la primera vez que leo algún escrito de él que no sea alguna de sus novelas o sus cuentos. La historia procede de aquella época en la cual Gabo aún no era el afamado novelista que todos conocemos, sino de cuando comenzaba a hacer su camino como reportero de algunos de los periódicos más importantes, primero en la costa del Caribe y luego en Bogotá.

Para la escritura de esta crónica, Gabo tuvo 120 horas de entrevista con Velasco prestando especial atención a los detalles, a si este se contradecía y a lo que pudiera ser relevante para el momento, cuando ya todo el país había escuchado una u otra versión de la historia. Con esta entrevista construyó cada uno de las entregas que fueron publicadas en el periódico. Esto me parece impresionante, pues deja muy clara la profesionalidad de Gabo en su faceta de periodista, sobre todo ante un reto como lo era contar esta historia: habían pasado bastantes días ya, se habían hecho muchas declaraciones al respecto y la versión oficial ocultaba un poco los hechos de ese día en la nave.

Aunque la voz en el libro es la de Velasco, pues obviamente es el único personaje que estuvo a la deriva en la balsa por 10 días, el estilo de Gabo se logra reconocer de forma indiscutible. Las descripciones que hace, las figuras literarias que usa no son ajenas a su obra, pues son de un estilo muy marcado, muy propio de él y que no tardaría en plasmarlos en sus novelas.

Es un relato que logra transmitir desespero, angustia, desesperanza, emoción y hasta tranquilidad. Todo esto en cada uno de los momentos cumbres del relato y gracias —en la justa medida— al decoro que tuvo Gabo al escribirlo. Si bien son de épocas y géneros muy diferentes, esta crónica me recordó un poco a Crónica de una muerte anunciada: En ambos casos el final de la historia es inminente, es obvio; pero uno no se quiere perder detalle alguno de cómo sucedieron las cosas.

Si bien es un relato que todo el tiempo está en primera persona, nunca se hace monótono ni repetitivo, cada día tiene sus propios avatares y suponen un reto para el cada vez más desgastado náufrago.

Esta es la obra periodística más famosa de Gabo, de las cuales también están La aventura de Miguel Littín clandestino en Chile y Noticia de un secuestro. Acá fue donde Gabo se descubrió como un narrador, donde descubrió sus cualidades y la potencia de su voz. Si quieren comenzar a leer a Gabo, creo que este es un buen punto de inicio.

Relato de un náufrago ha sido una de mis últimas lecturas del año, siendo este libro mi primera toma de contacto con Gabriel García Márquez. Seguramente necesitaré una 'segunda toma de contacto' si quiero conocer el estilo del autor ya que este relato se ambienta en un hecho real de 1955, tiempo en el que G.G.M. era periodista. Debido a esto, podemos decir que su historia se encuentra escrita por el mismo protagonista que naufragó y sufrió en carnes propias las vicisitudes de su desventura. Mi nota no ha podido ser otra que la máxima permitida, ya que no me encuentro capacitado para juzgar una experiencia de tal calibre y someterla a la fría visión de la crítica literaria siendo yo un ignorante en cuanto a técnicas de supervivencia. Recomiendo este libro a aquellos que quieran conocer la crueldad del injusto azar y se interesen por las divagaciones de un náufrago transcurridas en 10 días a la deriva. Con poco más que una balsa y una constante perseverancia, Luis Alejandro Velasco describe el paso del tiempo en medio de una nada a la que llamaban Caribe y las medidas exasperadas de un hombre desesperado. El sentimiento de empatía generado tras cerrar las páginas de esta obra promete no dejar indiferente a nadie.

Primero que nada debo aclarar que no soy muy fan de este autor, pero...PERO, relato de un náufrago me atrapó completamente. Mientras escuchaba el audiolibro (porque lo hice mientras hacía resúmenes para la facultad) me ponía nervioso que pasara tanto tiempo en el mar, alucinando, sin comer y sin tener agua para tomar por más que estés rodeado de agua. Y cuando más pensás que se va a salvar y ese calvario se termina, no, te sigue maltratando psicológicamente hasta que por fin se le dan las cosas. Hay que aclarar que esta historia fue una entrevista que Márquez le hizo al protagonista de esta historia y que luego de un tiempo, por culpa de un diario, el autor tuviera que exiliarse en otro país.

No es ni por asomo el libro quedó recomendaría de García Márquez. No es malo, pero no parece en mi opinión escrito por el, no es representativo de lo rico de su pluma. No se porque de tantas obras eligieron esta en mi colegio.
Sin dudas me hubiese parecido más acertado crónica de una muerte anunciada.
Me hace acordar un poco al viejo y el mar, pero no le llega ni a los talones.
García Márquez es de mis 5 escritores favoritos, pero este libro es en mi opinión es el más prescindible.

Efectivamente, tal y como dice la sinopsis esto no es un relato al uso, es la crónica de una supervivencia. La historia de Luis Alejandro Velasco que estuvo diez días en una balsa sin alimento y con la compañía puntual, a las cinco de la tarde, de los tiburones que lo esperaban y de su reloj que, imagino, impidió que se volviera loco. Me ha gustado porque García Márquez siempre escribe bien, aunque hable de la economía mundial o de la clorofila de las plantas. Una historia que impresiona no solo por lo que sufre el protagonista sino también por lo que hay detrás, el prólogo es muy interesante