Las gratitudes

Michka se ha hecho mayor y está perdiendo las palabras. Ella, una mujer que ba vivido siempre rodeada de letras, las ve mezclarse hasta confundirse con el vacío más insondable. Pero por las noches, cuando todos duermen bajo los efectos de los somníferos, ella sueña. Sueña que posee aún todas las palabras, que todo lo que vivió vuelve a verla.
Michka se está quedando sin palabras pero mantiene intacta la memoria. Y solamente está esperando a que su pasado la encuentre para poder hallar la manera de darle las gracias.

Son muchísimas las personas que me han recomendado leer a esta autora. Por eso, a la hora de leerla iba con unas expectativas altísimas. ¿Las ha cumplido? obviamente y rotundamente sí. Las gratitudes es un libro BONITO, así con mayúsculas, pero también es tierno, desolador por momentos, sobre todo en los que ves que no hay nada que hacer ante las enfermedades que nos acechan en la vejez, solamente podemos tratar de ralentizar el tiempo y sus estragos. En mi caso, me hizo recordar los últimos años de mi abuela. No se vio afectada por una afasia sino por el alzheimer, y es cuando te das cuenta de que te has dejado cosas en el tintero, de que no les dijiste lo suficiente cuánto les querías o mostraste tu gratitud porque siempre estaban a tu lado.
Decir gracias es relativamente fácil. Todos los días lo hacemos. Pero realmente mostrar lo agradecidos que estamos a alguien ¿cuántas veces? Es mucho más difícil mostrar este agradecimiento total y sincero ¿no crees?. Y esto es este libro, un homenaje a esas personas que estuvieron con nosotros, que nos apoyaron, que nos tendieron la mano cuando nos hizo falta.
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Hay libros que hacen que veamos el mundo más bello tras su lectura. Este es para mí uno de ellos. Es el tercer libro que leo de Delphine de Vigan y los tres me han ensanchado por dentro de una u otra forma. Me gusta su mirada empática, sus guiños de humor y su escritura cargada de humanidad que expresa mucho en pocas páginas: la vejez (su soledad, su vulnerabilidad y sus fortalezas, la manera que tenemos de tratarla, su proceso de aceptación…), la memoria y el lenguaje como conformadores de nuestra existencia individual y colectiva, los vínculos o los muros insalvables con la familia (real o escogida)…
La figura de Michka se nos va dibujando a través de las miradas de Jérôme y Marie, de sus diálogos con la anciana y de los sueños de esta.
Cuando eres joven piensas que el tiempo no es ilimitado, que siempre hay tiempo para decir “te quiero” o “gracias”, la protagonista no quiere “guardarse las cosas dentro” y dejar pasar su última oportunidad para dejar ningún “gracias” por el camino.

Siguiendo la técnica utilizada en Las lealtades, de Vigan describe en esta espectacular novela el problema de una anciana que sufre afasia y ve cómo poco a poco pierde su capacidad de expresarse.
Marie, su vecina, agradecida por el modo en que Michka le trató a lo largo de su vida, no le abandona y comprueba en cada visita el deterioro de la anciana así como los cuidados que Jérome, el logopeda de la residencia le presta.
De Vigan no escribe una novela negativa. Recurre continuamente al sentido del humor a través de los juegos de palabras, que el traductor ha conseguido conservar. de este modo el lector hace frente a la dureza de la vejez ayudado por la muleta de las sonrisas.
Genial

De Vigan nos presenta una historia con tres protagonistas, la enternecedora Michka, una anciana en sus últimos años de vida, Marie, una joven vinculada con Michka, y Jérôme, el logopeda del geriátrico en donde la anciana fue ingresada.
La manera en que trata el tema de la vejez, el avance de los años y enfermedades que los mismos pueden acarrear, está perfectamente realizada, con respeto y brindándonos un punto de vista que pocas veces es visto en los libros o en general.
Por partes, con Michka se ríe, pero también se sufre, se llora y se la quiere abrazar. Es un personaje hermoso.
Como el título lo dice lo central en todo es “la gratitud”, el dar las gracias, y lo vemos trabajado en los tres personajes. Todo nace con Michka, pero sigue con Marie y Jérôme.
Es un libro que lleva a reflexión desde la primera página y que explora esos lazos que vamos generando tanto con nuestras familiar como aquellos que hicieron algo que nos marcó en la vida.
Es un libro que desarrolla la historia simpleza y nos lleva a analizar si somos lo suficientemente agradecidos ya sea con palabras o gestos.