La casa de las voces

Hola a todos! Os traigo la reseña del último libro de uno de mis autores favoritos.

Estamos ante un thriller psicológico de nivel,narrado con bastante diálogo,donde parece una trama sencilla pero que viniendo de Carrisi sabemos que no lo es.

La trama nos lleva a pensar en una historia simple,pero tal como avanzamos se va fraguando la duda,creando un poso ambiguo,no deja que des nada por hecho,pequeñas gotas que te van haciendo creer que hay mucho más,la pluma del autor es simplemente intrigante y fácil de seguir pero no hablamos de una lectura ligera,Carrisi se caracteriza por ser lectura densa,de las que hay que leer con calma porque nos brinda pinceladas casi invisibles pero que dejan huella.

Los personajes son de peso desde el principio,muy bien asentados,equilibrados,una consulta,una paciente,un psicólogo especializado en niños,hipnosis...de aqui puede salir cualquier cosa,todo gira a recuerdos o paranoias de una esquizofrénica,¿esta recordando o se lo inventa?

Hasta la tercera parte del libro no hay manera de encajar todas las piezas pero una vez empieza es imposible soltar el libro,y ni por asomo imaginas el desenlace.

Carrisi ha sabido construir una historia donde dar voz a los que no la tienen,una denuncia social hacia los aislados,los que no tienen cabida en la sociedad y donde sus derechos no prevalecen,como esta sociedad decide que hacer con ellos,ocultarlos a ojos de los demás.

Como siempre el autor no defrauda,esperemos que no tarde tanto en publicar nueva novela,si no habeis leido nada de él os recomiendo que empeceis por "Lobos",una trilogia sublime,se tradujo al español bajo el titulo "Il susurratore" (El susurrador),la mayoria de sus libros ya estan traducidos y los podreis encontrar fácilmente,són brutales!

Carrisi es una apuesta segura. Me han gustado todos sus libros y éste no ha sido una excepción.
Éstas son mis impresiones
Ficha técnica
Editorial: Duomo
Páginas: 378
ISBN: 9788418538131

Sinopsis
Pietro Gerber es un psicólogo diferente a los demás: su especialidad es la hipnosis y sus pacientes tienen una cosa en común: son niños. A veces, niños traumatizados o que esconden recuerdos que son incapaces de evocar. Es el mejor especialista de Florencia y colabora con la policía en casos criminales.
Un día recibe la llamada de una colega australiana que le pide ayuda con una paciente, Hanna. El caso es interesante, pero también muy especial: Hanna es ya una adulta y su recuerdo infantil es un asesinato que no sabe si cometió.

Impresiones
Pietro Gerber es psicólogo infantil en Florencia. Está especializado en la hipnosis de niños y suele trabajar con la justicia, colaborando para intentar resolver casos criminales en los que están involucrados niños.
Un día recibe la llamada de una psicóloga australiana quien le pide encarecidamente que acepte un caso. La paciente a la que ha de hipnotizar es una mujer adulta y eso sale del ámbito de actuación de Pietro pero la doctora australiana insiste: la mujer, a la que ella ha tratado también con hipnosis, reconoció en uno de los trances haber cometido un asesinato cuando era niña. La doctora es tan convincente que Pietro acepta y empieza a ver a Hannah. Mediante hipnosis va retrocediendo al momento en el que Hannah era una niña que vivía con sus padres de una forma nómada pues, cada pocos meses, huían de una casa desocupada a otra para huir de los “extraños”. El problema es que Hannah se le mete dentro, que Pietro se involucra demasiado en la historia personal de su paciente y eso no puede llevar nada bueno…
Adictivo, delirante, intrigante…, todos estos y varios adjetivos del mismo tono son los que puedo aplicar a esta novela: un thriller que no da tregua y que te tiene en ascuas desde el principio hasta el final. Reconozco que dentro de los thrillers los que más me gustan son los psicológicos. Eso de hurgar en la mente de los personajes, de no saber a qué atenerte porque muchas veces ni ellos mismos saben la verdad, me encanta. Y el tema de la hipnosis siempre me ha llamado la atención. Con estos mimbres y el saber hacer de Carrisi, la novela tenía todo para gustarme y así ha sido. Me ha atrapado desde el primer capítulo y me ha tenido absolutamente desconcertada hasta casi el final. Pasadas las tres cuartas partes de la novela ya empiezas a entender por dónde van las cosas (aunque aún habrá unas cuantas sorpresas por descubrir y cabos por atar) pero hasta ese momento no tenía ni idea de qué es lo que estaba pasando y qué me estaba contando Carrisi. Suelo intentar elaborar teorías sobre qué ha pasado o quién ha cometido el crimen (cuando lo hay) pero en este caso me ha resultado absolutamente imposible porque mi desconcierto ha sido en todo momento total. La novela podía ir por cualquier camino y cualquiera me hubiera sorprendido; pero, una vez que todo termina y que entiendes lo que ha pasado, te das cuenta de que es perfectamente lógico y creible y que, de hecho, era la solución más fácil.
La novela se estructura en cuarenta y un capítulos de muy corta extensión. Eso, la abundancia de diálogo y la facilidad de lectura hacen que sea un libro para devorar. Poco me ha durado entre las manos. Es un narrador omnisciente quien nos va contando la historia, siempre focalizando en Pietro Gerber, auténtico protagonista de la historia, incluso más que su paciente Hannah Hall.
Son ya muchas las novelas que he leído de este autor y, espero, muchas más las que leeré en un futuro porque me encantan sus historias y cómo las cuenta. Si aún no habéis leído ninguna, ésta puede ser una buena opción para estrenaros con él porque no pertenece a ninguna serie (Carrisi tiene dos series)
Conclusión final

Una vez más Carrisi me ha tenido absorta entre las páginas de un thriller psicológico desconcertante e intrigante que he devorado sin medida. Muy recomendable.

Lo he devorado. Engancha desde el primer capítulo. Capítulos cortos que terminas siempre con ganas de seguir leyendo uno más... y sin que te des cuenta has terminado. El aspecto psicológico del libro me fascina. Un punto de vista muy especial, pues es el de los niños. Me encanta el personaje de Pietro y como juegan con él. Me hubiera gustado saber más de cómo termina su vida, pero creo que el final es así precisamente para dar paso, si es necesario, a una segunda parte.
La historia no está construida, está tejida... Todos los detalles que no importan, acaban importando. al principio para una novela un poco turbia pero se va aclarando un poco con cada capítulo. No me parece tan "heavy" como otras que he leído.
La he disfrutado un montón y la recomiendo muchísimo, aunque me sigue gustando muchísimo más El susurrador (Lobos anteriormente).

Algunos libros de actualidad basan su popularidad en la forma empleada para ir contando la historia. Con esto quiero decir que es de común encontrarnos con libros cuya forma de narrar es casi siempre comenzando contándonos algo muy llamativo para así atrapar al lector: un crimen, un misterio, una desaparición... Esa forma de contar las cosas me recuerda al tipo de telefilmes que echan en las sobremesas los fines de semana: un crimen, un "algo" misterioso... y luego continúan con el dicho de un "un mes antes", "un año antes"... tirando hacia atrás o hacia delante la historia, y así mantener al espectador delante del tv.

Es triste tener que recurrir a esa forma de contar las cosas para crear un producto, y digo "producto" porque no lo puedo llamar literatura, sino producto. Y con este libro, como con otros muchos que no he reseñado, me ha pasado esto.

Lo escogí por la popularidad y las buenas opiniones que he visto por aquí, y empezó, tal y como he señalado antes, con una puesta en escena prometedora (imaginé fantasmas, apariciones, cosas por el estilo, porque así el autor lo dibujó para embaucar al lector), y aunque el autor estiró, estiró y estiró la historia..., por más que estiró para llenar páginas, la historia se cae, y en mi caso me ha dejado indiferente, o lo que es peor, me ha hecho pensar que es otra novela más del montón.

Pienso, y esta es mi opinión, que no hacía falta estirarla tanto, ni liarla tanto, ni entretejer tanto misterio, porque el final revela lo que revela, y al lector (al menos a mí) se le queda cara de tonto.

Apta solo como entretenimiento, nada más.
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Buenísima historia, te tiene enganchada desde el principio,tanto que me lo he leido en apenas cuatro dias,no podía soltarlo. Te piensas una cosa por el titulo y el resumen y poco a poco vas viendo que no tiene nada que ver,que es muchisimo mas interesante. Segundo libro que leo del autor que me ha gustado mucho.

Leí anteriormente al autor en "El cazador de la oscuridad" y sabía lo adictivo que podía llegar a ser. No me equivocaba, y en apenas dos días he devorado este libro. No sé qué tiene Carrisi pero consigue que no te quites su historia de la cabeza. Sus intrigantes personajes me han acompañado mientras trataba de desvelar (en algún caso con éxito) parte de los misterios de la trama. 

¡Y menuda trama! Protagonizada por Pietro Gerber, un psicólogo infantil al que una mujer  pide su ayuda para, mediante hipnosis, desvelar un terrible suceso de su pasado. Algo que ocurrió siendo niña que poco a poco va desvelandose a través de las sesiones de hipnosis. Una paciente extraña, con un pasado perturbador que pone los pelos de punta y que hace a Gerber cuestionarse si ha hecho bien aceptando su caso. 

En mi opinión la narración no podría ser mejor. Es muy ágil, no le sobran páginas y mantiene muy bien la intriga. La tensión va en aumento a medida que van descubriéndose detalles del pasado de Hanna (la paciente) y el final me ha parecido realmente bueno, todo muy bien hilado una vez que se unen todas las piezas. Adiviné una parte y otra me sorprendió, dejándome con la sensación de haber acertado de pleno al leer este libro. 

Os lo recomiendo mucho, al igual que al autor, a quién tengo que seguir leyendo sin falta.

Desarrollada en una Florencia lluviosa y enigmática, esta historia se centra en un prestigioso psicólogo infantil, Pietro Gerber, al que una colega australiana acude para que trate a una paciente adulta, pero con un pasado pertubador e inquietante. Hanna Hall , ha vivido una infancia alejada de la sociedad, en permanente huida y con la terrible sospecha de haber asesinado a su hermanito Ado.
Poco sospecha Pietro lo que este caso clínico le supondrá a su integridad y a su propia psique. Primero, porque la paciente es adulta, y él está acostumbrado a tratar con hipnosis a niños y segundo, porque Hanna parece que ha llegado para desenterrar los fantasmas del propio terapeuta.
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Con un comienzo que ya nos deja con mucha intriga, Carrisi ha conseguido crear una historia brutal, en la que ha sabido reflejar con toda crudeza y realismo la complejidad de la mente humana y más cuando sufre de algún trastorno. Lo logra con unos personajes profundos y complejos, con un pasado lleno de lagunas y traumas que nos trasmiten de manera magistral sus más profundos temores.
La novela se divide en capítulos cortos y con un estilo ágil y muy visual que nos adentra de lleno en la historia y hace que no podamos parar de leer. Carrisi consigue desde la primera página crear intriga, para luego desarrollar una historia que va ganado en complejidad y en la que nos deja sin saber qué va a pasar, y es que puede pasar de todo, para luego rematar con un final en el que todas las piezas terminan por encajar.
En definitiva, una novela que he disfrutado muchísimo, una historia elaborada y muy bien escrita. de hecho, y según el autor, es de las novelas que más le ha costado escribir. Un thriller que ha logrado sorprenderme.

La casa de las voces de Donato Carrisi me ha resultado una novela muy entretenida y adictiva. Con un comienzo inquietante, que te deja con ganas de saber más de esta historia, resulta imposible ya de soltar este libro. Y aunque en un determinado momento podemos llegar a pensar que la trama está resultando un poco liosa, pronto desenredamos todo ese lío y queda todo perfectamente explicado y justificado.

Con una prosa sencilla y fluida, a la que no le hace falta adornos ningunos, la tensión va aumentando capítulo tras capítulo, aunque no llega a asfixiar. Quizás porque recurre a demasiados clichés del género y a los que estamos acostumbrados a él, ya no nos pilla por sorpresa. Descripciones hay muy pocas, las justas y necesarias para conocer a los dos personajes principales, a los que llegamos a conocer sobre todo por lo que cuentan y por lo que vamos descubriendo de ellos poco a poco. Uno de ellos es Pietro Gerber, un psicólogo infantil que se sirve de la hipnosis para ayudar a los niños a recordar hechos del pasado que le están afectando. La otra gran protagonista es Hanna Hall, una mujer atormentada por un terrible recuerdo de su infancia, que le lleva a creer que pudo asesinar a su hermano…

La trama está contada desde dos perspectivas. Por un lado tenemos un narrador equisciente, que se centra en la figura de Pietro Gerber y por otro, un narrador en primera persona, cuando Hanna es sometida a hipnosis y empieza a recordar momentos de su infancia. Y esta parte es la que más he disfrutado, porque no sabemos hasta que punto todo lo que está contando es real o fruto de la imaginación de Hanna. ¿Qué es cierto de todo lo que cuenta? Y sus actos cuando no está sometida a hipnosis, nos llevan a pensar que realmente recuerda más de lo que cuenta. ¿Qué busca? ¿Qué quiere?

Y así llegamos a un final de vértigo, quizás un poquito apresurado, donde el autor empieza a encajar todas las piezas del puzzle y aunque nos deja con ganas de saber más cosas de sus protagonistas, la historia está bien terminada y no necesita de continuación. Una novela muy recomendable para estos días de piscina o playa.
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