Toda la verdad de mis mentiras

Lo leí dos veces. La primera lo devoré, prácticamente no dormí y lo terminé en dos días. al igual que en todas sus historias, Beta me llevó a través de las páginas con un ritmo vertiginoso y me sentó en un asiento de esta autocaravana, me abrochó fuerte el cinturón para que no me escape y me condujo a un viaje de esos que no tienen retorno para nadie.

Coco es nuestra protagonista, y es una mentirosa. Miente a todos sus amigos, porque lleva más de un año enamorada hasta la nariz de Marín, su mejor amigo y compañero de piso que, además, es el ex de una de sus amigas. Cuando deciden hacer una despedida de soltera épica para Blanca, y se emprenden en unas vacaciones grupales en autocaravana por la costa, ninguno piensa que quizás todas esas mentiras y secretos que tienen entre todos, puedan explotar y salpicarlos a todos.

La experiencia de esta lectura no se puede describir de otra manera que no sea "intensa". He llegado a sentir dolor físico por la relación de Coco y Marín. Cada acercamiento y cada movida en el tablero a favor de Coco me daba un subidón de adrenalina que se me apretaba en el pecho. Como si ella fuese yo, o como si la quisiera demasiado. Todos los personajes de este libro son entrañables, cada uno con sus mambos y sus propios secretos que siempre terminaban por lastimar a alguien más, pero que se entrelazaban con el hilo conductor de una manera exquisita. Nada se da de golpe, todo lleva su tiempo y ese ritmo en la historia hace que sea tan real que te lo crees.

Una de las cosas que más me gustaron de este libro fueron los poemas de Gus, uno de los "amigos" del grupo. La forma en la que su poesía teje el camino de su propio secreto pasando totalmente desapercibido es maravillosa. No lo ví venir, quizá sí después de la segunda mitad del libro pero ya era demasiado tarde, porque toda esa mentira que cargaban había empezado a supurar.
Ese es uno de los motivos por el que lo releí. Teniendo claras las verdades y los secretos, leerlo de nuevo fue todavía más intenso y lo disfruté todavía más. "Toda la verdad de mis mentiras" no es una historia de esas que te marcan por lo complejas u originales. Es una historia de esas que te podes cruzar en la calle, simple y tangible al punto de movilizarte todos los sentimientos.
No descarto una tercera relectura en algún momento porque, ya es inevitable, me enamoré hasta las narices de estos personajes. de Coco, de Marín, Blanca, Loren, Gus e incluso de Aroa.
Me enamoré de las historias, de las tardes de playa y las noches de vino. de los kilometros en el "Alcón milenario" y de la frienzone a la que se le fue la olla.
Me enamoré aún más de la pluma de la autora que en pocos meses se convirtió en mi favorita y me enamoré el efecto que tiene en mí.
Dudo mucho que algo supere esta experiencia. Directo al top del 2019.
En la semana la reseña extendida y detallada en el blog, donde les cuento los porqué de todo este fangirleo ❤️
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Toda la verdad de mis mentiras es una novela de amor y desilusiones, pero también de humor, mentiras y experiencias que te invitan a reflexionar sobre quiénes son tus amigos de verdad y quiénes no merecen la pena. Un road trip romántico, fresco y divertido ideal para el verano.
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Coco, Marín, Aroa, Gus, Blanca y Loren son un grupo de amigos con muchos secretos entre ellos. Durante la historia iras descubriendo uno a uno a los personajes, los secretos que esconden y lo que se ocultan entre todos, Coco y su conflicto amoroso, Marín y sus dudas sobre lo que realmente quiere , Aroa y sus obsesiones, Loren guardando todos los secretos pero conviviendo con todos sin decir nada, Gus y sus poemas en los que desahoga sus pensamientos, y Blanca y su despedida de soltera en la que jamas imaginaria pasaran tantas cosas y fuera tan surrealista. La historia esta muy bien contada, Elisabet cambia de personajes contándote desde en primera persona como cada uno de ellos vive todo lo que ocultan y tienen que disimular todo delante de los demás.
Una despedida que lejos de ser una fiesta, será la despedida de las mentiras, en las que saldrán a La Luz una tras otra y harán dudar de la amistad y el amor.
Sin duda Elisabet lo ha vuelto a hacer, una lectura amena, divertida , romántica, con un toque de sexo como ya acostumbramos a ver en sus novelas, pero muy actual y muy real, como todas sus novelas, fresca y natural .
Yo he disfrutado muchísimo de la lectura, y he devorado el libro en apenas horas.
Si os gusta la autora no os va a decepcionar.

¡Estoy algo confusa porque antes de leer esta novela vi una gran cantidad de reseñas, bueno más bien de puntuaciones en GoodReads, Babelio o Alibrate, y ninguna bajaba de las 4 estrellas. Y una vez leída, quizá por mis altas expectativas, no me ha parecido un libro tan bueno. ¡Quizá no era el momento de leer esta novela o quizá es que esperaba más!

¡Todo esto no quiere decir que no me haya gustado ehh! ¡Que no se mal interprete! Porque la verdad es que me he pasado horas enganchada al libro sin poder parar de leer...¡y es que con Betacoqueta siempre me pasa lo mismo!

Me gusta la trama que se plantea, me gustan los personajes que recoge esta historia y las experiencias que se viven. Éstas me parecen del todo reales y eso hace que me sienta mucho más cercana a la novela y a sus personajes, que son completamente humanos, con sus virtudes y sus defectos. Pero sobre todo, lo que me ha gustado de esta novela es que se ven los distintos tipos de amor que pueden formarse (amor de amigos, amores tóxicos, amores románticos, amores pasajeros, amores de hermanos, de madres...) y que todos estos tipos de amor (porque no se salva ninguno) tienen sus más y sus menos, su mejores y sus peores momentos y como de todos podemos salir reforzados y con algún aprendizaje...algunos de estos amores se quedarán por el camino, otros seguirán con nosotros durante toda la vida, otros solo nos acompañarán un cierto tiempo, algunos se irán para después volver...

¡Leyendo a Elísabet Benavent tienes aseguradas risas, amor y melancolía, sexo y picardía y grandes momentos que se quedarán en el corazón!

Es verdad que con este libro, el principio se me hizo un poco cuesta arriba y hasta la página ciento y pico no empecé a cogerle el gustillo. Creo que tiene muchas reflexiones y en algún momento esto se me ha hecho un pelín bola.

Tengo que decir que desde el primer momento hice mis hipótesis y acerté en casi todo. ¡Supongo que esto me pasa por leer tanto a la autora...!
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Segunda parte de Canciones y Recuerdos, amé este libro al igual que el primero, lo lei aún mas rápido y me divertí mucho, me enojé y me alegré de nuevo, es un subibaja de emociones.
Las relaciones de Jimena, Adriana y Macarena se van acentuando más, se van encontrando con ellas mismas y van buscando ese camino que las haga felices. Me gustó mucho que se le dé hincapié a la fortaleza de ellas tres mas alla de todas las dudas y prejuicios.
El final es bastante predecible, pero creo que el mensaje de la novela no pasa por el final en sí, sino por el crecimiento de cada uno de los personajes.
Una vez mas senti mucha conexion con las tres mujeres y me costó mucho poder desprenderme de ellas y darle fin a la novela, es lo lindo de sentir tan humanos a los personajes no? encariñarse y no querer llegar al fin.
Super recomendable!

Su estilo, como es habitual en ella, es dinámico, coloquial y cercano. Sus personajes, tanto protagonistas como secundarios, tienen su propia historia que entrelaza con la principal de manera muy acertada.
Sin embargo, a mí me faltó más en la relación romántica de Coco y Marín. Tuve la sensación de haber disfrutado mucho más de esa amistad tan fuerte y, en cambio, no tanto cuando deciden aventurarse a ser pareja. En cuanto a las escenas sexuales, hay gran cantidad de ellas y son muy explícitas y apasionadas, sobre todo a partir de la segunda mitad del libro.
El lenguaje es directo en exceso, diría que rozando lo soez en muchos pasajes de la novela. No lo critico como un aspecto negativo que me haya impedido disfrutar el libro, pero sí que llegaron a saturarme un poquito.
Sin duda, el punto fuerte de la autora son los diálogos. En mi opinión, no porque estos sean brillantes, sino porque la autora les da mucho protagonismo, son abundantes y tienen chispa.
Al igual que en sus otras novelas, Elísabet ha creado unos personajes que expresan sus emociones mucho mejor a través de los diálogos que narrando sentimientos o compartiendo pensamientos.

Me pareció un elemento muy original la idea de mostrarnos los poemas de Gus. Creo que eran versos muy bonitos y a mí me encantaron.
En realidad, el personaje de Gus despertó mucho interés en mí, tanto o más que los propios protagonistas. Mete la pata hasta el fondo y comete mil errores, pero es de esos personajes que te atraen a pesar de sus movidas.

Toda la verdad de mis mentiras ha sido una lectura entretenida, divertida por momentos y libre de dramas profundos. La he disfrutado pero sin llegar a emocionarme ni dejarme huella. El epílogo me pareció previsible y me llamó la atención que al final la autora le cambiase el nombre a los protagonistas. Quinientas y pico páginas llamándoles Coco y Marín y, al terminar, me los bautiza con otros nombres. Pues qué queréis que os diga, a gusto muy personal, me pareció un poco tonto. Pero, en fin, supongo que lo haría como una forma de simbolizar el nuevo proyecto de compartir sus vidas juntos como pareja.

Ya tenía ganas de leer otro libro de Elisabet, lo confieso, ME ENCANTA.
Una lectura de esas que quieres estirar y leer despacito para que duren más pero que eres incapaz de soltar y no paras de leer. Esta es una novela romántica, con una buena carga narrativa, con diálogos fluidos y contada en primera persona por ambos protagonistas. Además de la historia principal incluye otra que nos mantendrá ahí expectantes, intentando averiguar quién se esconde detrás.

Pese a no sentirme identificada con Coco, si que pude entender sus miedos, su indecisión y sus comederos de cabeza. Ella es divertida, sexi, amiga de sus amigos y segura de sí misma, una tía guay que me gusto desde el minuto uno. Me ha gustado mucho su lenguaje claro y sin tapujos, su “soy idiota” me enganchó enseguida.

Marín es él. Un chico guapo, pero de los que no se lo tienen muy creído. Que ha tenido una vida dura pero que ha sabido superarse y casi superarla, que lleva con la cabeza alta sus cicatrices. Un chico responsable, quizás en exceso, que intenta cuidar siempre de los suyos. Trabajador, divertido, de los que preparan el desayuno al compás de la música, al que le gusta bailar, ver pelis de domingo tirado en el sofá y salir a divertirse de vez en cuando. Todo un amor. Tanto que al principio se me hizo demasiado.

He tenido que asimilar y pensar mucho para poder escribir la reseña del blog, porque, debajo de una sencilla historia, algo tan simple como confesar que estas enamorada hay bastantes más cosas.

Si me echas de menos,
dilo.
Di que te gotea en el pecho,
que hay días que hacer charco
y noches que termino en el desagüe de otra boca.
Di que formo parte de la sinfonía de tu silencio,
di que no vale la pena,
pero que ahí estamos.
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Elisabet no defrauda, sigue haciendo que un libro de más de 500 páginas que se te haga corto. Una bonita historia de amor, amistad y alguna traición. Elisabet tiene la habilidad de que conectes con los personajes, que los sientas cerca tuyo. Que los odies o los ames.
https://silviayloslibros.blogspot.com/2019/03/toda-la-verdad-de-mis-mentiras-de.html?m=1

Una vez más Elísabet Benavent ha vuelto a dar en la tecla. Ha escrito un libro que engancha desde la primera hoja.

En este libro se cuenta la historia de Coco y sus amigos. Coco tiene un secreto, un secreto para casi todo el mundo menos para su amigo Loren: todo el mundo piensa que está enamorada de su ex, Gus, poeta por redes sociales ligón donde los haya, pero en realidad está enamorada de su mejor amigo que también forma parte de la pandilla, Marín.

Aroa y Marín estuvieron juntos y quizás ya no lo están. Y Blanca, la más centrada, se va a casar por eso sus amigos le preparan una despedida de soltera de los más peculiar: hacer todos juntos un viaje en caravana.

Y así el grupo de amigos pasan unos días que no olvidarán nunca. Enredos, líos, cuernos, amor, desamor, dudas, miedos se encuentran a raudales en este libro pero sobre todo muchas muchas mentiras que salen a flote a lo largo de los días que dura el viaje.

Lo recomiendo para pasar un rato ameno. Se lee sin el menor problema y una vez que empiezas no puedes parar. Ocurre siempre con sus libros. Ella sabe cómo hacerlo.

El libro nos cautiva desde el principio con el desparpajo de Coco y lo surrealista de las cosas que les pasan a todos. Benavent nos hace sonreír con sus comentarios y ese toque de humor que está presente a lo largo de la novela. Vamos, que prácticamente después de dos o tres capítulos ya estamos metidos de lleno en la historia. Además, es tan cercana que parece que Coco está hablando contigo, de amiga a amiga. Quizás no le ha contado la verdad a sus amigos, pero no se miente a sí misma. Me encanta lo locaja que es y las cosas que se le pasan por la cabeza. Es un caso, jajaja.
Describiría a Marín, pero me gusta más la descripción que hace Coco de su amigo. ¿Preparadas?: "Marín es tenaz. Es sincero. Es educado rozando lo british. Es caótico pero brillante. Es un melómano que tiene la canción adecuada para cada momento. Tiene ese estilo inimitable de las personas que han nacido con el don de la elegancia. Cuando sonríe, se hace de noche en algún punto del mundo. Es divertido, buen hermano, buen compañero de piso." Y así hasta el infinito y más allá. No me extraña que la mujer esté hasta las trancas por él, jeje.

Hablemos ahora del resto de componentes del grupo. Blanca es la mejor amiga de Coco y, aun así, no se ha atrevido a decirle lo de Marín. Está a punto de casarse y el trabajo la estresa, así que el viaje en caravana es una excusa perfecta para relajarse. Aroa es la típica chica perfecta con cuerpo diez que atrae a todo el mundo por la luz de ninfa de los bosques que irradia. Con Gus me pasó algo raro. A pesar de lo bocazas que es a veces, que no hace las cosas como debería y que no se abre ni con sus amigos ni con el lector, en el fondo tiene un par de cosas buenas y no podemos odiarlo. al menos, no del todo. Y Loren... el pobre es el que se come todos los marrones por ser el que mejor guarda los secretos y por saber mediar entre todos.
Puede que parezca que algunos personajes son demasiado perfectos, véase Marín y Aroa. Pero no lo son. La verdadera naturaleza de cada uno acaba saliendo a la luz. Esta es una de las cosas que nos enseña Benavent: por mucho que una persona nos parezca perfecta, todos tenemos nuestros defectos e inseguridades aunque no hablemos de ellos.
Poco a poco aumenta la tensión en el grupo y se van desvelando los secretos, más o menos predecibles. En algunos momentos Coco parece un poco hipócrita aunque, si os soy sincera, lo entiendo hasta cierto punto. Todos nos volvemos un poco irracionales cuando algo nos afecta mucho y no hemos tenido tiempo de interiorizarlo. Y oye, que no somos perfectos y las malas costumbres cuesta quitarlas. Por suerte, ella sabe sobreponerse como puede y seguir siendo fiel a sí misma. Sin duda, me quedo con eso.
¿Y lo mejor de todo? Que Benavent habla del amor libre, de un amor que no entiende de posesión, celos y demás sentimientos tóxicos. Pero somos humanos y sentimos celos y a veces somos tóxicos por mucho que no queramos serlo. Nos come el miedo y en muchas ocasiones nos controlan nuestros defectos e inseguridades. Y eso es lo que hace que esta novela no sea una historia de amor idílica, sino algo real con sus más y sus menos y con un ligero toque de sueños por cumplir. Me gusta que hable de sentirnos bien con nosotras mismas, de basar nuestra vida y nuestra felicidad en nosotras en lugar de cargar a otra(s) persona(s) con ese lastre, de depender de los demás. Nos anima a ser valientes, a valorarnos y a darlo todo por lo que queremos, pero también a comprender y entender que necesitamos nuestro espacio.

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