Mansfield Park

Es una novela coral con muchos personajes. Teóricamente, su protagonista es la joven Fanny Price. En realidad, tarda bastante en ser visible (por así decirlo), más bien se trata de un mueble arrinconado al que nadie presta demasiada atención.
Además, por cientos de páginas tiene un aroma al cuento de la Cenicienta. Incluso esperas el baile en el que la "descubran" y pierda el zapato.
Lo cierto es que no ocurre (prácticamente) nada en todo el libro. Los dos protagonistas maduran por el tiempo y los golpes de la vida, el resto adquieren casi mágicamente en el último capítulo algo de la inteligencia, sensatez y calidez de la que carecieron durante casi 600 páginas.
¿Es creíble? En absoluto.
¿Está bien escrito? Desde luego, es Jane Austen.
A mis ojos se trata más de un cuento de hadas larguísimo que de otra cosa.
¿Hay crítica social? Sí, por supuesto. No deja títere con cabeza, hay tanta falsa bondad, envuelta de educación y buenas costumbres que llega a resultar desesperante. Sin verdadera generosidad, sin ideas propias... todos recitan lo que les han enseñado en la "buena sociedad", pero viéndolos a todos podría ser "buena suciedad".
Me sorprendió por sus reflexiones sobre religión, más "afiladas" de lo que imaginaba.
¿Es entretenido? No.
¿Esperábais que decorase la realidad y fuera políticamente correcta? Mejor si esperáis sentados. Me he puesto armadura y ya no temo que me ataquen con piedras por mi atrevimiento. Pero sigo admirando "Persuasión y "Orgullo y Prejuicio", era mucho esperar que esta me cautivara como aquellas.

Leer libros de Jane Austen para mi es relajarme y disfrutar de bellas historias de vida que aunque fueron escritas hace ya mucho tiempo siguen vigentes pues las personas no cambiamos mucho en ciertas actuaciones que son constantes y que la autora describe con una pluma maravillosa.

En especial este libro cuenta con una protagonista que es un ser maravilloso, lleno de bondad y sobre todo muy justa y madura para su edad y para esa inocencia que una mujer de su epoca maneja.

Personajes como Edmundo su primo un ser que siempre la acompaño cuando llego a su casa desde muy niña siendo timida pero el la protegió y le enseño como vivir en un mundo de esplendor y lujo que ella no conocia.

Ese crecimiento diario de Francis es algo que impacta comparado con la educación tan cuidada de sus bellas primas, mimadas y dotadas de grandes privilegios .

Pero algo bonito es que sus tios siempre la trataron con amor , como una mas de la familia.

Este libro deja muchas enseñanzas para la vida, de la equivocación al consentir en forma desmedida y alabar en su belleza a esos seres que la vida pone en nuestro camino .

Una gran lectura que disfrute al máximo en un grupo por Telegram de @leyendo_jane_austen_ y @helen_cazadora_de_libros ademas de un bello grupo fans de Jane Austen y sus libros.

Leer a Jane siempre ha sido un placer pero con esta novela fue estresante. Quiero pensar que fueron mis propias expectativas lo que causaron mi decepción, yo esperar la bonita pluma de Austen para escribir sobre las historias de amor y solo nos da una pequeña probada en las últimas páginas.

Esta lectura fue una larga descripción de la sociedad en esa época y en específico de lo que vivían las mujeres pobres con parientes adinerados. Las pocas posibilidades que realmente tenían aunque fueran bonitas y de carácter aceptable. No pude conectar en ningún momento con la protagonista, como en otras novelas, la intento hacer fuerte y diferente a lo esperado por la sociedad inglesa, sin llegar a conseguirlo. Nos presenta a una Fanny quien no acepta a un prospecto bastante aceptable para ella pero inconvenientemente falto de valores, además de que idealiza al único hombre que ha sido medianamente amable con ella.

Se que era común el incesto en esa época, sin embargo para mí fue difícil de aceptar y sobre todo porque es un desenlace que nos cuenta en escasos capítulos finales, dejando todo a la imaginación.

Con la agudeza e ironía tan características de Jane Austen, en la presente obra pueden encontrarse un despliegue de temas puramente sociales que la autora critica a través de la conducta de sus personajes. de esta manera, la historia refleja aspectos que van desde las diferentes clases de amor que existen hasta el tipo de moralidad imperante en aquella época, pasando por el eje central alrededor del cual orbitan las novelas de la escritora y que no es otro que el matrimonio. Partiendo de este último, a lo largo de las páginas se desarrolla la visión que se tenía de los enlaces y de la poca o nula relevancia que se le otorgaban al amor, a la afinidad entre las parejas, así como a los sentimientos en general a la hora de aceptar un compromiso. de hecho, queda bien patente que ni la personalidad ni el físico eran importantes, sino que lo primordial era conseguir un partido con una renta elevada y una posición social que beneficiase tanto a las personas que iban a contraer nupcias como a las respectivas familias. Por lo tanto, las ideas y la verdadera forma de ser debían ocultarse con el propósito de ofrecer una imagen que resultase atractiva al candidato o la candidata en cuestión.

Asimismo, se pone en tela de juicio ese pensamiento moralista bajo el cual se emitían opiniones prejuiciosas y extremadamente volubles que dejaban entrever la hipocresía de una sociedad cerrada. A partir de este punto, la escritora habla del papel de la mujer, de las imposiciones estrictas que una dama de buena cuna debía seguir, de la manera en la que se censuraba una idea que se salía de la norma establecida y de la facilidad con la que se tachaba de escandaloso o inapropiado cualquier comportamiento y divertimento que pudiese ser objeto de atención pública. Por descontado, la novela pone de relieve la marcada desigualdad existente entre las clases sociales baja, media-alta y alta, el impacto de la educación y los privilegios en los seres humanos, los diferentes estilos de vida de la ciudad y del campo y la decadencia de la religión. También expone el gran cambio que puede llegar a experimentar una persona enamorada, haciendo que su percepción de la realidad se distorsione y acabe dejando de lado sus ideales.

Este análisis se realiza por medio de los diálogos que mantienen los personajes y que representan el mayor grueso de la obra, dejando el espacio restante a las descripciones pertinentes y a la narración propiamente dicha. Por lo tanto, el hecho de que las conversaciones tengan tanto protagonismo contribuye a que el estilo narrativo sea más directo y un poco complejo dadas las estructuras que se empleaban en la era, aunque sigue siendo un lenguaje accesible que permite al lector adentrarse en la obra y conocer a fondo las opiniones de cada uno de los personajes. Además, la pluma tan sutil y atmosférica de Jane Austen junto al emplazamiento en el que transcurre la trama ayudan a crear un ambiente intimista y bucólico que compensa la mínima dificultad que pueda tener la novela. En lo que a ritmo se refiere, es pausado tanto en la introducción como en el desarrollo y se acelera un tanto en las páginas finales. No obstante, el cambio que se produce no supone un inconveniente para la historia pues la importancia de la misma recae en el camino recorrido y no en el desenlace de este.

En resumidas cuentas, Mansfield Park fue una muy grata sorpresa y quedé encantadísima con el libro. No esperaba gran cosa de ella porque las adaptaciones me habían disgustado mucho y las reseñas sobre la novela tampoco eran muy halagüeñas, así que me alegré cuando me descubrí disfrutando de la lectura. Jane Austen consigue transmitir cada una de sus observaciones desde la página uno, permitiendo que te adentres de pleno en la visión que ella tenía de esa sociedad opresora y que comprendas su funcionamiento a la perfección. Además, me fascinó el personaje de Mary Crawford con todo su desparpajo y honestidad extrema. Es cierto que no es precisamente amable y que puede decir cosas crueles y dañinas, pero es la única que se atreve a comunicar en voz alta los objetivos que todos trataban de alcanzar y por eso rompo una lanza en su favor. Lo último que me queda por añadir es que, a pesar de ese final un tanto precipitado y de lo nerviosa que me pusieron los protagonistas en algunos momentos, me gustó la obra y no puedo más que recomendarla.

Otro libro que me ha costado tres o cuatro meses leer. Me da mucha rabia porque fue un regalo navideño y aún sabiendo que con Jane Austen me esperaban amoríos, matrimonios concertados, bailes y corsés, no pensaba que me iba a aburrir tanto.
No quiero hacer mucha sangre, solo decir que es una historia sosa, protagonizada por una panda de sosos y que solo he podido terminarla gracias a una lectura conjunta que enganché a la mitad y pude encontrar el ánimo.
Una lástima.

Nuestra protagonista aquí es Fanny Price, que para mí ha sido muy diferente a otras que las autoras han tenido como personaje principal en sus obras. A Fanny la mandan a vivir con sus tíos a Mansfield Park.

Este libro en cuanto a ritmo ha sido más pausado y conforme ibas leyendo parecía que no pasaba pero realmente había una montaña rusa de sentimientos y sensaciones por cada uno de los personajes. A cual más caracterizado y con unas personalidades únicas y diferentes. Tengo que destacar a la señora Norris, otra de las tías de Fanny pero la destaco por personaje irritante, cada vez que lo leía me lo tenía que leer por las ocurrencias de esa señora. Sin duda, era irritante pero graciosa a la vez. Todos tenían sus cosas y es lo que hace que en conjunto esta obra sea fantástica con las batallitas y pensamiento de cada uno de ellos.

Como siempre, la autora sorprende en última estancia. Paula y yo siempre que vamos leyendo tenemos una teoría pero siempre acabamos esa frase diciendo a ver con que nos sorprende después.

En cuanto a trama, no es una historia de acción, sino simplemente nos cuenta la vida diaria de esas personas, sus pensamientos, juegos, si se enamoran… pero la forma de contarla hace que se te pase las hojas volando.

Tengo ganas de seguir leyendo los dos últimos libros que me quedan de Jane Austen.

Muy recomendable como siempre.

Al comienzo pensé que no me iba a gustar mucho porque es lento en muchos momentos por el análisis de caracteres detallado de los personajes, pero ese aspecto tiene su razón de ser y la curiosidad y las emociones de lo más diversas en cierto momentos me motivo seguir leyendo porque Fanny Price es una protagonista muy diferente a las que he leído de Jane Austen.

Eso si, si no te gustan los libros lentos: huye. Si quieres leer el análisis detallado de Jane Austen sobre la sociedad de la época, este es tu libro. Es una lástima que no pudiera ahondar más en el tema de la esclavitud en las colonias, pero el resto del libro es bueno y lo he disfrutado mucho.

P.D.: Creo que es el libro en el que no tiene casi romance a lo largo del libro, sino en momentos muy puntuales

Qué pena haber puesto punto final a la obra de una de mis autoras favoritas precisamente con esta novela.

Entré al libro con muchas ganas y expectativas, ya que Jane Austen siempre me hace maravillarme con su escritura, sus historias y su ironía inigualable. Es cierto que esta obra en concreto no suele verse en los tops de la autora, pero para mí, siendo de ella, era bastante garantía para esperar un éxito asegurado.

Además, como la más extensa de Austen, no hacía más que aumentar mis ganas de leerlo (más páginas, más disfrute pensé yo, ilusa de mi). Pero en este caso, nada más lejos de la realidad. Las páginas de más se notan, y no precisamente para bien. Ya que lo que empieza como una historia genial, con todos los ingredientes característicos de la autora, se estira hasta tal punto que termina por hacerse pesado, especialmente durante la parte central de la novela.

Los protagonistas de la novela, a cada cual más soso e hipócrita, no ayudan lo más mínimo. Rematando su historia romántica con un desenlace muy forzado, moralista y edulcorado que no me gustó para nada.

Siempre duele más un libro flojillo si viene de una autora de cabecera, como es el caso. Pero eso no quita de que la pluma de Austen y su ironía se sigan haciendo notar, habiéndome sacado una risa en más de una ocasión.

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Es una de las obras más melancólicas de Jane Austen. En este caso nos encontramos con Fanny, la protagonista de esta novela, que se ve en la obligación de irse a vivir con unos tíos a los que no conoce desde muy pequeña. Ya que sus padres al contar con ocho bocas más que alimentar no podían mantener a todos. Ella se criará rodeada de lujos junto a sus primos Tom, Edmund, María y Julia. Aunque estos siempre le dejarán claro que no es una de ellos, con la excepción de Edmund, que la acogerá bien desde el principio. La familia vivirá una vida bastante tranquila, hasta que llegan los hermanos Crawford, Henry y Mary. Que traerán un poco de emoción a sus vidas.
En esta obra Jane Austen vuelve a hacer una fuerte crítica social como en sus anteriores obras. Nos muestra a personajes muy superficiales, como los primos de Fanny, Mary o Henry. Viendo como lo más importante son las apariencias, tu valor depende del dinero que tengas y de encontrar un matrimonio de lo más ventajoso.
Los personajes están muy bien construidos. Marcando bastante lo opuestos que son entre sí. Aunque yo destacaría al personaje principal de la novela Fanny. Para mí es el personaje que sufre una mayor evolución, empezando por ser la tímida y apocada Fanny que dejaba que todo el mundo la controlará, a ser un personaje que gana en autoestima, con las cosas más claras y haciendo lo que ella cree que está bien, no lo que la dicen. Me parece un personaje coherente durante toda la obra. Tiene unas convicciones muy marcadas, llegando al punto de ser bastante intolerante con las personas que según ella no actúan como deberían. Aunque a la hora de pensar en su personalidad se debería tener en cuenta la época en la que la novela está escrita.
Es una obra que recomiendo, como todo lo que escribió Jane Austen. Destacando su manera de criticar a la sociedad de su época.

Una de las últimas lecturas conjuntas que organicé fue la de este clásico de Jane Austen. Tenía muchas ganas de leerlo ya que sabía que tanto su protagonista como la novela en general son de las menos apreciadas por los lectores.

Fanny Price, una niña humilde, es acogida por sus tíos adinerados hasta que se convierte en una joven muy discreta y educada. Durante toda su vida, le han hecho sentir que era inferior a sus primos, y todos la han tratado con esa idea, salvo su primo Edmund con quien siempre ha tenido una relación muy cercana. Todo se complica cuando llegan a Mansfield Park los hermanos Crawford, Mary y Henry, provocando una serie de enredos y situaciones inéditas.

Como todas las obras de Jane Austen, esta promete momentos divertidos y emocionantes. Aunque ya sabemos cómo acaban los libros de la autora, hay un momento en el libro en que realmente dudamos, y es que está todo tan enrevesado que no sabemos cómo se resolverá todo.

El problema principal que le he visto a la novela es su extensión: Austen le dedica un capítulo entero a cómo colocar los personajes en una carroza, y más adelante varios capítulos seguidos a un proyecto que acaba en nada. Sin duda esta es la novela más costumbrista de Jane Austen, pero a mí no me ha convencido.

Otro punto negativo para mí es su final. Conforme veía que se terminaba el libro, me daba cuenta de que no quedaban suficientes páginas para darle un cierre a la historia de Fanny. Y efectivamente, todo ocurre de forma muy precipitada.

Sobre el carácter de Fanny Price, aunque es verdad que a veces me desesperaba un poco su forma de ser, incluso llegando a considerarse moralmente superior a los demás, en general tampoco me ha parecido tan mal personaje. Tal vez si comparo con el resto de heroínas de Austen es la que menos me gusta, pero ya tenemos a la tía Norris aquí para cumplir con el cupo de personajes odiados.

A pesar de todo esto, también han habido cosas positivas: he disfrutado mucho de la ironía característica de la autora y de lo bien que escribe.
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