Sandman: Benévolas de Neil Gaiman
¿Has estado enamorado?. ¿Horrible no es así?. Te hace tan vulnerable. Abre tu cofre y abre tu corazón y significa que alguien puede entrar dentro de ti y arruinarte.
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Sandman: Benévolas de Neil Gaiman
¿Has estado enamorado?. ¿Horrible no es así?. Te hace tan vulnerable. Abre tu cofre y abre tu corazón y significa que alguien puede entrar dentro de ti y arruinarte.
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Sandman: Fábulas reflejos de Neil Gaiman
A veces te despiertas. A veces la caída te mata. Y a veces, cuando caes, vuelas.
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Sandman: El fin de los mundos de Neil Gaiman
¿Hay alguna persona en el mundo que no sueñe? ¿Quién no contiene dentro de ellos mundos inimaginables?
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Sandman: País de sueños de Neil Gaiman
No es necesario que las cosas hayan pasado para ser verdad. Los cuentos y los sueños son las verdades sombrías que perdurarán cuando los simples hechos sean polvo y cenizas, y se olviden.
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Sandman: Preludios y nocturnos de Neil Gaiman
Obtienes lo que cualquiera obtiene: obtienes toda una vida.
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Sandman: La casa de las muñecas de Neil Gaiman
Porque el amor no es parte del mundo de los sueños. El amor pertenece al deseo, y el deseo es siempre cruel.
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Stardust de Neil Gaiman
Los ojos azul celeste de ella le devolvieron la mirada, y en aquellos ojos fueron incapaz de discernir la posibilidad de volver a separarse jamas.
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El océano al final del camino de Neil Gaiman
Te voy a decir algo muy importante: por dentro, los adultos tampoco parecen adultos. Por fuera son grandes y desconsiderados y siempre parece que saben lo que hacen. Por dentro, siguen siendo exactamente igual que han sido siempre. Como cuando tenían tu edad. La verdad es que los adultos no existen. Ni uno solo, en todo el mundo.
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La joven durmiente y el huso de Neil Gaiman
Se puede elegir- pensó, tras un buen rato allí sentada- Siempre se pude elegir
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Objetos frágiles de Neil Gaiman
Creo que así es como voy a recordarte, con mi cabeza reposada sobre la blanca curva de tus senos, escuchando los aposentos de tu corazón.
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Objetos frágiles de Neil Gaiman
Me había enamorado de ella en blanco y negro, cuando aún no tenía ni diez años.
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Objetos frágiles de Neil Gaiman
«(Escribir es un poco como cocinar. Hay veces en que, por más que lo intentes, al bizcocho no le da la gana de subir y no sube; pero, de vez en cuando, el bizcocho te sale tan bien que ni tú mismo te lo crees.)»
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Objetos frágiles de Neil Gaiman
«¿Sabes lo que es querer a alguien con toda tu alma? Lo más duro, lo peor de todo es que nunca dejas de quererle. En tu corazón siempre queda una pequeña parte de esa persona.» |
Objetos frágiles de Neil Gaiman
«A todos los efectos relevantes, yo estaba muerto. Quizá, en algún rincón muy íntimo de mi ser, gritaba, lloraba y aullaba como un animal, pero esa era otra persona, una persona que no tenía acceso a mi cara, ni a mis labios, ni a mi boca, ni a mi cabeza, de modo que exteriormente solo me encogía de hombros, sonreía y seguía funcionando. Si hubiera podido dejar de existir físicamente, dejarme ir así, sin más, sin tener que hacer nada, abandonar la vida como quien sale por la puerta, lo habría hecho. Pero me iba a dormir por la noche y seguía despertando por la mañana, desilusionado por el hecho de seguir ahí y resignado a continuar existiendo»
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American gods de Neil Gaiman
...estaba dispuesto a morir si ese era el precio que había que pagar por estar vivo.
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American gods de Neil Gaiman
Aquel frío no era normal; era de ciencia ficción. Era una historia ambientada en la cara oculta de Mercurio, de la época en que se pensaba que Mercurio tenía una cara oculta. Se encontraba en algún lugar del rocoso Plutón, donde el sol no es más que otra estrella, si acaso un poco más brillante que las demás. Aquel sitio, pensó Sombra, era casi idéntico a uno de esos lugares en los que el aire se trae en cubos y se sirve como si fuera cerveza.
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El océano al final del camino de Neil Gaiman
¿Cómo vas a ser feliz en este mundo? Tienes un agujero en el corazón. Tienes dentro de ti una puerta que conduce a otro mundo más allá del que tú conoces. Te llamarán, a medida que vayas creciendo.
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El océano al final del camino de Neil Gaiman
A veces los recuerdos de la infancia quedan cubiertos u oscurecidos por las cosas que sucedieron después, como juguetes olvidados en el fondo del armario de un adulto, pero nunca se borran del todo.
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Cuando su padre envió a Coraline a contar los objetos azules, las puertas y las ventanas, ¿Cuantas contó de cada una?