Legado en los huesos

Hay trilogías que tienen una primera parte realmente estupenda y que, en la segunda, te decepcionan porque la historia ha perdido fuerza, los personajes ya no evolucionan o el autor empieza a meter "paja" y la historia central llega a prácticamente desaparecer. Pero no es eso lo que pasa con Legado en los Huesos. Ésta es una más que digna continuación de su predecesora. Nos encontramos con una historia maciza, contundente y que no deja nada al azar. Todo está vinculado, todo tiene un porqué y sabemos que todo nos será revelado a su debido tiempo. No hay precipitación, no hay lapsus ni olvidos.

Un impactante thriller, una historia fascinante con toques mágicos, un juego del gato y el ratón con mucha acción y un final perfectamente ejectuado.

Me ha gustado pero menos de lo que me gustó el primero.

Los personajes pierden fuerza. Nos encontramos con una Amaia que después de dar a luz pierde mucha de la garra que tenía en el primero. Sí, en el ámbito laboral sigue siendo la inspectora estrella pero en su ámbito personal es todo un lío. Con la llega del bebé su vida personal se descontrola sufriendo lo que me pareció un leve caso de depresión postparto. No se siente buena madre y va cuesta abajo.

Pero ella no es la única que pierde fuerza, todos los personajes lo hacen. Empezando por James que me pareció tan increíblemente bueno que llegó a ser hasta aburrido. Me han entrando ganas de que la autora lo convierta en la tercera entrega en un asesino en serie o en un lunático que se carga a la gente a golpes de hacha y los entierra en el bosque. Cualquier cosa con tal de darle un poco de color a un personaje de lo más soso.

Sobre las alusiones a las leyendas de la zona que en el primero tanto me gustaron en este he sentido que se ha abusado un poco de ellas. al menos en la forma como se utilizan. Así como en el primero los pequeños roces de Amaia con los personajes de leyendas me gustaron en este segundo me parece que tiene más “avistamientos” que los de Expediente X.

Aun así, el caso me ha parecido bien construido y me ha gustado. La forma de relacionarse este con el primero está muy bien aunque no me ha gustado la dirección que ha tomado con cara a la tercera entrega de la serie.

Sin embargo, sigue siendo un buen exponente del género ideal tanto para los novatos en él como para los que no lo son tanto que quieren cambiar un poco.

Una de mis cosas favoritas de la trilogía del Baztán es su ambientación, los contrastes de luz y oscuridad que esta localización le permite a la autora y que utiliza a la perfección. Esa zona rural de extensa vegetación verde, bosques infinitos llenos de musgo y de leyendas. Un lugar donde la lluvia es constante y anochece pronto, es un buen lugar para ambientar un thriller.

La primera parte de la trilogía me gustó mucho, pero me ha gustado todavía más el segundo libro, del que os hablo hoy Legado en los huesos. La inspectora Amaia Salazar resolvió un caso terrible en el anterior libro que aún hoy sigue dejando huella, ya que el asesino parece tener conexión con otro sasesinatos y asesinos, todo el caso parece mayor de lo esperado. Mientras Amaia lidia con su vida privada, que en esta ocasión sin querer contar demasiado vendrá revuelta, llena de dudas y de sensación de inutilidad. Con todo esto, todavía hay espacio para los dolorosos recuerdos de la infancia de la protagonista y su lucha contra el trauma que lleva persiguiendole años.
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Para mi, el mejor de los tres.
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