Ahí abajo, entre raíces y huesos

Hace unos meses les hablaba de una de mis mejores lecturas del año: Cada corazón, un umbral. Hoy tengo el placer de volver a visitar el extraordinario universo creado por Seanan McGuire y recomendarles Ahí abajo, entre raíces y huesos, la segunda novela ambientada en el mundo de los Niños Descarriados y que funciona como un relato independiente. Una precuela que nos cuenta la historia de Jack y Jill, las gemelas que son dos de las protagonistas del primer libro, para contarnos en profundidad cómo llegaron a transformarse en las chicas que conoceremos años más tarde en la Residencia para niños descarriados de Eleanor West.

“Ambas querían que la gente las viera a ellas, no la imagen que de ellas se habían hecho otras personas”.

Cuando conocemos a Jack y a Jill en Cada corazón, un umbral las chicas tienen diecisiete años y nos hablan un poco sobre Los Páramos, ese aterrador mundo donde fueron a parar cuando tenían solo doce años, y que sentían como su verdadero hogar. En Ahí abajo, entre raíces y huesos podremos ver cómo terminaron allí, qué clase de vida las hizo tomar la decisión de entrar en un viejo baúl y bajar por unas escaleras oscuras y polvorientas hasta un sitio donde horrores y maravillas las estaban esperando.

Dividida en cuatro partes, la novela empieza por presentarnos a Chester y Serena Wolcott, una pareja de egoístas que deciden tener hijos no porque realmente quieran ser padres, sino como una oportunidad de obtener mayor estatus entre sus compañeros de trabajo y conocidos. Como si un hijo fuese el accesorio que necesitan para entrar en ese círculo de elogios y alabanzas por su buen trabajo de ser padres que recibían los otros y del que se sentían excluidos por no tener descendencia.

“Serena y Chester Wolcott habían sucumbido al peligroso encanto de los hijos ajenos. No tardarían en descubrir el error que habían cometido. La gente como ellos siempre lo descubre”.

Y aunque Serena quería tener una niña para transformarla en una princesa perfecta, y Chester un niño con el que jugar a la pelota y fuese la envidia de sus amigos, terminan teniendo a dos niñas: Jacqueline y Jillian. Pero eso no hace que cambien sus deseos. Ambos padres las criarán de manera que, aunque sean gemelas, no puedan ser más diferentes entre sí. Jacqueline se transformará en la princesa que usa siempre vestidos y que nunca puede ensuciarse, mientras que a Jillian le cortarán el cabello y podrá correr y jugar en libertad con otros chicos, al menos mientras los chicos la acepten y no la vean como un bicho raro.

Así, crecerán juntas pero separadas, envidiando la libertad que tiene la otra sin saber que de alguna manera las dos son miserables cumpliendo con los estereotipos que les han impuesto sus padres, sin tener oportunidad de descubrir por ellas mismas qué desean o quieren ser. Así que, cuando a los doce años encuentran la puerta a Los Páramos y se ven arrastradas a un mundo donde vampiros, hombres lobos, terrores abisales y científicos locos campan a sus anchas, cada una toma un camino que las aleja aún más, pero que de alguna manera las lleva a encontrar su verdadero hogar.

“Miradlas encontrándose a sí mismas en este lugar azotado por el viento, donde ni siquiera contemplar la luna resulta siempre seguro”.

En Los Páramos, rompiendo con todo lo que hasta ahora le habían impuesto sus padres, Jacqueline la princesa se transformará en Jack y se irá con un científico loco para ser su aprendiz y trabajar duro haciendo todo tipo de experimentos; y Jillian, ahora será Jill y aprovechará para usar vestidos hermosos y vivir en la comunidad del castillo del Amo, rodeada de lujos. Aunque cada elección viene acompañada de un alto precio, porque el mundo donde fueron a parar es cruel y nada es gratis.

En esta segunda novela todo lo que había hecho que amara Cada corazón, un umbral está presente: mundos que desbordan imaginación y personajes complejos y diversos. Jack y Jill son dos hermanas que no tuvieron la oportunidad de crecer rodeadas de amor, y durante toda la primera parte de la novela Seanan McGuire me hizo leer con el corazón en un puño por el dolor que me provocaba ver la negligencia (o crueldad) con la que actuaban sus padres. Y aunque Gemma Lou podría haberlas ayudado aún más, no tuvo suficiente tiempo para hacerlo.

Mención especial se merecen tanto la cuidada edición de Runas que viene acompañada por las espectaculares ilustraciones de Rovina Cai, como la extraordinaria traducción de María Pilar San Román que se encarga de transmitir a la perfección el tono casi poético de las palabras de McGuire.

“Ambas niñas, aunque tomando rutas distintas, siguiendo caminos distintos, habían llegado a su hogar”.

El daño que puede provocar cumplir con los roles preestablecidos, dos niñas que crecen sin amor, dos hermanas que deben aprender a encontrar su lugar en el mundo… Ahí abajo, entre raíces y huesos es el tipo de historia que no puedes parar de leer, donde belleza y horror se dan la mano para mostrarnos que hay muchas maneras de ser niñas y que todas son igualmente válidas, y que hay lazos que ni siquiera la crueldad puede romper. No puedo hacer otra cosa que recomendarles que lean las novelas de Seanan McGuire. Este libro, como su predecesor, va directo a mis mejores lecturas del año. Estoy desando ver cómo nos sorprenderá McGuire con las próximas entregas de este universo que me tiene fascinada.

》"You could have gone back (..) but you would've not going home."

En este segundo libro de la saga Wayward Children de Seanan McGuire, nos encontramos con Jaqueline y Jillian, más conocidas como Jack y Jill, dos hermanas gemelas, hijas de un matrimonio que, originalmente, no quería tener hijos. A pesar de ser gemelas, las hermanas comparten muy poco en común. Jacqueline es la hija perfecta, la favorita de su madre; femenina, elegante y respetuosa, mientras que Jillian es la preferida del padre, aventurera y amante de los deportes; básicamente es el hijo perfecto que su padre no pudo tener.

Seguimos a ambas niñas durante su infancia, creciendo y formándose como personas, cada día cuestionando el amor de sus padres y las reglas y estereotipos que estos mismos les imponían, hasta que un día, cuando tienen 12 años, encuentran un baúl. Todo dentro del mismo desaparece para convertirse en una escalera que conduce hacia abajo. Siguiendo este camino es como terminan en The Moors, un nuevo mundo lleno de magia, ciencia y muerte, que se destaca por una luna roja como la sangre que mira desde arriba y por estar gobernado por The Master, un ser terrible que tiene la fama de secuestrar niñas.

》"I think the rules were different there. It was all about science but the science was magical. It didn't care what whether something could be done, it was about whether it should be done. And the answer was always, always "yes"."


Hacía unos meses que había leído Every heart a doorway, la primera entrega de esta saga, y como estaba extrañando todo ese mundo, me decidí por leer este siguiente libro, aprovechando que junio era el mes del orgullo. Sí, tiene rep lgbt+ además que tanto en este libro como en Every heart a doorway se habla mucho de los roles de género y los estereotipos impuestos por la sociedad y cómo esto afecta si lo forzamos en infantes y adolescentes.
Sabía que iba a tratar una historia distinta pero no sabía cuán distinta iba a ser al primer libro. Sobre todo considerando que el final del primer libro deja con ganas de mucho más!

Para mi sorpresa, este libro transcurre antes que Every heart a doorway así que no, sigo con las ganas de la continuación de ese (habrá que esperar gasta 2020 para Come Tumbling Down). Pero a pesar de este ser una precuela, me terminé enganchando mucho con la historia y hasta creo que puedo decir que me gustó más que el primero 🙈

En este, a comparación de Every heart a doorway, nos encontramos con un world building no solo algo más complejo sino que también con una atmósfera más oscura. Mucho más oscura. Es mucho más creepy; The Moors, el mundo en el que terminan Jack & Jill, es un territorio lleno de criaturas paranormales tales como vampiros, hombres lobo, gente que vuelve de la muerte, científicos locos(?), etc. Y no solo el mundo es más oscuro sino que los personajes también lo son. The Master y el Doctor, cuyo nombre no recuerdo, causaron alguna impresión en mí, sobre todo The Master.

En cuanto a los personajes principales, Jack & Jill... Leyendo el primer libro definitivamente quise saber más sobre el mundo de ellas dos, sobre todo por Jack. Amo mucho a Jack. Se convirtió en uno de mis personajes favoritos, sin dudas. Toda su curiosidad y su participación en la ciencia, o pseudociencia, mejor dicho, fue algo que me re gustó de este libro. Esa mezcla entre magia y ciencia es siempre bienvenida 🖤


》"The master will take you to the highest tower and he'll make you rudeless, and he'll make you swift, and most of all he'll make you his."


Vi que varios lectores de esta saga recomendaron leer este antes que Every heart a doorway por los "spoiler" que hay en EHAD acerca del mundo de Jack & Jill. Por mi parte, no los considero spoilers. Si bien los hechos del primer libro suceden después del segundo libro, pienso que la autora lo elaboró así por algún motivo, y pienso que ese motivo es porque EHAD es bastante introductorio para la saga y para todos los mundos a los que fueron los chicos que en Every heart a doorway terminaron en ese hogar para niños, por ende, está bueno leerlo por orden de publicación y no por cronología de los hechos.


》 "The Moors exist in eternal twilight, in the pause between the lightning strike and the resurrection. They are a place of endless scientific experimentation, of monstrous beauty, and of terrible consequences.” .
Enlace: https://www.instagram.com/p/..

Este libro es al mismo tiempo la continuación y la precuela de *Cada corazón un umbral* y cuenta la historia de Jack y Jill en el mundo que les tocó cuando atravesaron su puerta mágica
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También es un retelling de un poema infantil que comienza "Jack y Jill subieron la colina". En el poema original, Jack y Jill son hermanes, un nene y una nena. Lo interesante de esta historia es que se trata de 2 gemelas, dos mujeres. Realmente sus padres esperaban otra cosa de ellas, esperaban una parejita de nene y nena y nacen dos nenas. Entonces las acostumbran a vivir a ya a Jacquelyn como una Lady y a Jillian como hombrecito, cuando ellas lo que quieren es otra cosa
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Un día encuentran en su casa una escalera que las lleva a este lugar que se llama Los Páramos y allí descubren efectivamente su verdadera personalidad y pueden ser quienes realmente son. Jack es una persona muy inteligente y con mucha curiosidad y Jill se puede dedicar a ser mimada y vestirse con vestidos hermosos, que era lo que ambas querían en realidad
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Por supuesto, todo tiene una trampa y es que Jill vive con un vampiro y Jack con un científico loco, y es que Los Páramos es un mundo oscuro
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La novela reflexiona sobre la rivalidad entre hermanas y sobre las expectativas que ponen los padres en les niñes, aún antes de que hayan nacido
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La prosa de Seanan McGuire es increíble y directa, dice lo que tiene que decir en el momento exacto. Tiene esa onda Neil Gaiman o Roald Dahl que lo vuelve una Fantasía oscura preciosa
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Se los recomiendo muchísimo por porque es entretenido, ágil súper cortito tiene menos de 200 páginas y logra hacer reflexiones profundas en esa poca cantidad de páginas.

En el primer libro de la saga de los niños descarriados conocimos a las gemelas Jack y Jill. En este segundo, la escritora hace que crucemos la puerta que nos hará conocer sus orígenes. La historia de dos hijas modeladas para ser perfectas por los caprichos de sus padres, que encontrarán unas escaleras que las llevarán a los Páramos, un lugar regido por el miedo y la muerte para el que tal vez no estén preparadas y donde deberán tomar decisiones que las cambiarán para siempre.
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“Algunas aventuras son crueles, porque esa es la única manera que conocen de ser amables”.
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Si la primera novela me fascinó, este segundo libro sube el listón todavía más. Seanan nos mete de nuevo en una espiral terriblemente oscura y cruel, maquillada a modo de cuento de hadas clásico, donde la abuela de las niñas, Louis, intentará prepararlas para el mundo que las está esperando ahí fuera, haciéndoles entender que hay un millón de maneras distintas de ser niñas, todas válidas, y ninguna de ellas implica estar haciendo algo malo. Pero el mal acecha a las pequeñas en el Páramo y cada elección que tomen tendrá unas implicaciones, tanto si lo desean como si no.
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Una historia cambiante, como la evolución de la personalidad de las gemelas, que nos va a hacer reflexionar sobre la frustración, la familia, el sentimiento de culpa y de vergüenza por lo que uno es, el amor, la fina franja de playa en la que danza el bien y el mal… El paseo de Jack y Jill al pueblo para hacer los recados es escalofriante.
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“Hay momentos que lo cambian todo, y una vez han cambiado las cosas ya no hay marcha atrás”.
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Y eso es lo que os ocurrirá cuando entréis en el universo de estos niños descarriados, viviréis momentos mágicos y otros cargados de maldad que no podréis ni querréis olvidar. Es lo que tienen los buenos cuentos, nos acompañan para siempre.

No sé el porqué pero cada vez que me adentro en esta saga siento como si fuera mi hogar, creo que la forma de narrar tan maravillosa de Seanan es la culpable de ello, a pesar de todas las cosas turbias que ocurren siempre en sus historias.

Cada vez tengo más claro que los libros de esta autora son mi zona de confort al 100%.

Esta historia la llevada esperando desde que leí el primer libro y lo que la he disfrutado ha superado mis expectativas.

Algo que la autora expresa y expone de manera magistral son los problemas sociales y familiares, me encanta como de una forma tan sutil te hace ver todo lo que está mal en una situación concreta.

Esta segunda parte se centra, sobre todo, en como el entorno y el como se cría a los niños va a influir, en gran medida, en su futura personalidad.

Creo que esta es una lectura que podrán disfrutar muchas personas. Incluso si no has leído el anterior libro se puede disfrutar por completo de esta segunda parte.

En resumen, estoy deseando volver a leer ya algo de Seanan y eso que acabo de terminar este libro.