Soy leyenda

Una narración en 1ra persona, nuestro protagonista nos muestra sus más profundos pensamientos, sus recuerdos y su manera de sobrevivir en un mundo invadido poco a poco por un virus que va transformando y acabando con la humanidad conocida, se maneja muy bien el suspenso y mantiene una constante en el desarrollo de la historia. Interesantes reflexiones sobre la vida, la sobrevivencia y la humanidad. Fácil de leer, y corto así que se termina rápido, el final fue sorpresivo pero en parte me decepcionó un poco el giro que dio la historia.

Historia corta pero intensa. Nos adentramos en un mundo apocalíptico en el que una pandemia (ahora ya sabemos de qué va esto) provoca la aparición de una nueva raza, de “vampiros”, que ha terminado con la civilización tal y como la conocemos.
El autor nos presenta a un personaje que intenta sobrevivir en un mundo deshumanizado y sin esperanza. Consigue adentrarnos en un clima de agobio rutinario sin fin, partiendo de la desesperación que acaba impulsando las acciones de Neville, nuestro protagonista. Nos cuenta su historia, su pérdida, sus fracasos, sus éxitos y su singularidad en este mundo.
Lo interesante de esta historia no se centra en las características de esta nueva raza, sino en cómo reacciona a la supervivencia. Una vez más el género nos lleva a plantearnos cosas que damos por supuestas en nuestro día a día.

En resumen: Si has visto la peli de Will Smith y piensas que no va a aportar, te equivocas.
Soy Leyenda es esa historia que piensas que no te va a sorprender pero a pesar de tu terquedad, lo consigue. Y en un formato “lo breve si bueno, dos veces bueno”

Acabo de releer esta edición del clásico de Richard Matheson "Soy leyenda" para algunos la mejor novela de vampiros del siglo XX. Es una novela muy corta, apenas 164 pp, que por el argumento y como está escrita se lee de un tirón.

Esta es una edición especial que conmemora el 60 aniversario de la obra, incluye el guión que el propio autor escribió para la productora Hammer y que, por motivos de censura, nunca se llegó a rodar. Una lástima ya que también se incluye un prefacio del autor en el que escribe sobre las tres adaptaciones que hasta su muerte se hicieron de su novela. Las dos primeras no le gustaron en absoluto y, paradojicamente, la que más le gustó fue la última, la protagonizada por Will Smith, aunque como el propio Matheson reconoce poco tiene que ver con su libro, comparte el título y el nombre del protagonista y poco más.

Como he dicho en esta edición se incluye el guión escrito por el autor de la novela, las últimas lineas del prefacio son elocuentes, Matheson piensa que el éxito de la versión de Will Smith hará difícil que vuelva a rodarse otra película basada en su libro, a pesar de que esa última adaptación poco tiene que ver con el original, en ese sentido con la publicación del guión que escribió dice: "Ahora, con la ayuda de la imaginación para aportar las imágenes que acompañarían a las palabras de este guión, podéis comprobar lo que habría querido hacer yo con ella"

En fin, es una lástima que no haya un productor que quiera coger este toro por los cuernos, sería una muy buena película, creo yo.

Breve, intensa y mucho más profunda que su última adaptación cinematográfica protagonizada por Will Smith.

Me ha sorprendido mucho (para bien) esta novela porque si el mundo fuera una prenda de vestir Richard Matheson consigue darle la vuelta sin que se vean las costuras. El punto de partida de colocar a un único humano en un mundo de vampiros es muy original, mientras que el día a día de Robert Neville, su acercamiento paulatino a la ciencia y los flashbacks recordando una vida que jamás volverá culminan en un desenlace que me ha parecido brillante.

"Allí estaba, sin futuro y sin presente, pero todavía se mantenía en la brecha".

Porque ya seas un humano rodeados de vampiros, un vampiro rodeado de humanos o incluso un humano rodeado de humanos hay momentos difíciles en los que hay que mantenerse en la brecha... y sobrevivir.

Robert Neville es el único superviviente de una guerra bacteriológica que ha asolado el planeta y convertido al resto de la humanidad en vampiros. Su vida se basa en asesinar al mayor número posible de estos seres durante el día, y soportar el asedio de estos cada noche. Para ellos, él es el único monstruo que lucha por subsistir. Todo un clásico de su género. Es un perturbador relato sobre el aislamiento, la soledad, una reflexión sobre la normalidad o anormalidad, bien y mal, y desconcierto ante lo diferente.

Opinión:

🩸 Por fin vuelvo a reconciliarme con este señor, con Matheson después de que con la "Casa Infernal" acabara decepcionada.

Es un libro de lectura fácil, con mucha acción, ágil...y situaciones angustiosas. Me encanta como el libro es enfocado a ese mito del vampiro de una forma peculiar, y saliéndose de todo lo que había leído sobre ello, y es ahí quizás dónde reside la fuerza de esta novela. Otorga un matiz científico bien desarrollado.

🩸 Totalmente recomendable y nada que ver con la película que protagoniza Will Smith, decir que es similar es pura fantasía.

LLegue a este libro despues de escuchar un comentario de un escritor en el que mencionaba su frustración por como lo habían llevado al cine, era una gran novela y no le hicieron justicia, y justo es lo que encontré, un libro que adictivo de una narrativa fluida que te genera la necesidad de seguir leyendo hasta el final y seguro que al llegar a este punto no te va a quedar a deber.

Hace tiempo que tenía ganas de "hincarle el diente " a este clásico de Richard Matheson. Mi antecedente más cercano, como para muchos de vosotros, era la película protagonizada por Will Smith en 2007 y, claro, me he llevado alguna sorpresa porque la película es una adaptación acorde a los tiempos que corren y se toma licencias que distan mucho de la historia original. Y no hablo sólo del final ( no os cuento más que no quiero destriparlo 😉)
Os recuerdo un poco de qué va la cosa. Nos encontramos en un mundo postapocaliptico ( otro más) donde una guerra bacteriológica ha asolado el planeta y convertido a los seres humanos en algo muy cercano a lo que llamamos vampiros. Y en este terrible escenario nos encontramos al único superviviente del género humano, Robert Neville, cuya vida se ha reducido a sobrevivir cada día y acabar con el mayor número posible de estos nuevos seres que se han adueñado de todo. Ingrata existencia cuando sabe perfectamente que ya no existe un futuro al que aferrarse.
En el libro se describe el día a día de Neville como una cadena de actos rutinarios y monótonos. Por el día repara la casa, sale a por comida y acaba con algunos vampiros. Por la noche se encierra en su casa, escucha música a todo volúmen y bebe whisky. Así un día tras otro. También lo persiguen sus propios fantasmas, recuerdos de una vida pasada que nos dan pistas sobre el hombre que fue y que ya no es. Porque lo que queda ahora es la tremenda soledad que le acompaña y que no le da tregua. El autor le regala algunos momentos de esperanza pero lo que aquí prevalece es ese sentimiento de soledad, de ser consciente de ser el último hombre sobre la tierra, el último de su especie, una leyenda. El libro transmite muy bien este sentimiento de desarraigo, de no pertenecer a nada, del fin de una época y el deber de dar paso a algo nuevo. Muy recomendable.
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Escribir una crítica acerca de este libro es complicado. ¿Cómo puedes hacer justicia a una historia tan desgarradora que es capaz de reinventar un género tan manido como es el de los vampiros? Con tan solo poner el título en google te puedes encontrar con decenas de opiniones que comparten el entusiasmo que siento ahora tras haberla terminado. Con esa sensación de que acabo de leer un libro importante. de que ya puedo afirmar que conozco la leyenda de Robert Neville.
No sabría con que quedarme. La deliciosa y ligera prosa de Matheson te envuelve desde las primeras palabras. Lees y te sientes solo y desesperado en un ambiente hostil a las primeras de cambio. Y eso es fundamental en un libro tan corto para poder disfrutarlo en su totalidad. Sentir que eres un ser aislado que, ni siquiera, puedes permitirte el lujo de relajarte en ningún momento. Sentir que necesitas desahogarte y no encuentras el modo de hacerlo más allá del alcohol y el dolor. Sentir que si encuentras a tu nemesis podrás al menos enfrentarte a un dolor que es imposible de controlar. Todo en este libro es desolación y, sobre todo, desesperación y, cuando menos lo esperas...
Matheson tiene más cosas que contarte. Porque este libro ha conseguido su importancia por algo que va más allá que contar una historia de vampiros. Durante sus escasas doscientas páginas el autor te invita a plantearte los pilares básicos de lo que es ser un ser humano y lo que es vivir en sociedad. Y lo hace de un modo tan fantástico que tienes que leerlo para que lo puedas disfrutar en su totalidad. Y es que, el título del libro, resume por completo la verdadera esencia de esta maravillosa historia.
Una de esas novelas inolvidables que coloca a Matheson en la cima de la literatura fantástica.

Algunos de los mejores libros que he leído pertenecen a ese género tan injustamente denostado como es el de la ciencia ficción. Y uno de los que más me impactaron fue Soy Leyenda (1954), de Richard Matheson.

Esta novela, en la que lo fantástico se une al terror clásico, fue escrita muchos años antes del boom de los zombies en la literatura y el cine. En rigor, aquí no hay una invasión de muertos vivientes sino la Humanidad entera convertida en una legión de vampiros por culpa de una bacteria desconocida. Sólo hay un superviviente: Robert Neville. Nuestro protagonista.

La acción transcurre en la ciudad de Los Ángeles, donde Neville vive atrincherado en su casa, convenientemente adaptada para ser convertida en una fortaleza inexpugnable. Todas las noches se congregan centenares de vampiros a su alrededor, tratando de hallar algún modo de entrar y acabar con él.

“¡Sal, Neville!”
Un personaje especialmente de Soy leyenda escalofriante es Ben Cortman, también transformado en vampiro, que cada noche le llama desde el otro lado de la puerta de una forma insistente: “¡Sal, Neville!”.

El asedio se repite cada noche, y Cortman no falta a su cita para insisitr una y otra vez: “¡Sal, Neville! ¡Sal!”. Y aunque el último ser humano sin vampirizar que resiste en el planeta trata de ignorar a sus sitiadores escuchando música clásica y bebiendo whisky, muchas veces se desespera. Más que el peligro, es el sentimiento de soledad lo que más le angustia:

“A pesar de todo lo que tenía o podría tener (excepto, por supuesto, otro ser humano), la vida no prometía más cambios o mejoras (…) La idea de vivir cuarenta años más así le estremecía”.

Pero no será su vecino quien le convenza de que debe salir y rendirse, sino Ruth, otra superviviente que aparece de la noche a la mañana en su vida, como por arte de magia . Pronto Neville descubrirá que Ruth es uno de ellos, una espía infiltrada tras las líneas enemigas, aunque por alguna extraña razón ella puede moverse sin problemas bajo la luz del día (Matheson nos explica más adelante cómo y por qué). Ella derriba la última resistencia de Neville gracias a su enorme poder de convicción:

“Ya no serás un Robinson Crusoe extraño, encarcelado en una isla nocturna rodeada de océanos de muerte”

El desenlace, aunque de entrada pueda parecer previsible, es absolutamente soberbio. El último acto de la novela es brillante y magistral, con un contenido filosófico que realmente trastoca al lector. Me cuesta mucho explicarlo sin spoilers, así que me limitaré a decir que merece la pena leerse la novela de cabo a rabo, disfrutarla página a página y, sobre todo, saborear su magnífico final. No importa si has visto ya la película, la lectura del libro te sorprenderá.
(SIGUE LEYENDO LA RESEÑA EN EL ENLACE):
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Voy a comenzar esta reseña contándoles una historia. Mi mamá y yo éramos muy asiduas al cine, nos gustaba salirnos a las dos solas e ir a babosear a ver qué película encontrábamos, y en una de nuestras salidas por allá del 2007dimos con “Soy Leyenda”. En un principio no estábamos muy seguras si verla o no pero al final Will Smith terminó convenciéndonos y entramos con no muy altas expectativas, pero señores, la película nos gustó tanto a ambas que una semana después regresamos con mi papá y luego con mi hermano y una vez más con unos amigos. Es decir que al final esta película se convirtió en un clásico para nosotras y cada que teníamos chance la veíamos diciendo los diálogos.

Pero aunque he visto la película infinidad de veces, nunca había tenido chance de leer el libro, de hecho no me llamaba mucho la atención pues la película me gusta tanto que pensé que no iba a disfrutarlo igual, pero hace unos días me llegó el libro y me llamó la atención lo delgadito que es así que me puse a curiosear y desde las primeras páginas me quedó claro que hay una diferencia abismal entre el libro y la película. de hecho puedo decirles que son prácticamente distintas y solo tienen en común un par de cosas.
El, Robert Neville, era el único superviviente del mundo. Por lo menos, del mundo que conocía.
El libro nos cuenta la historia de Robert Nevill, el que parece ser el único sobreviviente humano de una bacteria que acabó con la humanidad.
Su vida es monótona y rutinaria. Durante el día se encarga de cuidar su casa, buscar alimentos, ir a la biblioteca y durante las noches vive encerrado en su casa con un vaso de whisky en la mano y música clásica de fondo, mientras los vampiros buscan llegar a él.
Y es que esa bacteria que atacó convirtió a todos los humanos en vampiros, no los vampiros clásicos que conocemos del folklore, sino unos vampiros de origen científico que poco comparten con la idea general de los vampiros.
Y antes de que la ciencia hubiese destruido la leyenda,
la leyenda devoraría la ciencia y todo lo demás.
Ahora bien, al leer esto seguro creen que los vampiros son el tema principal del libro pero nop, a mi parecer es alrededor de Robert que todo se mueve. Y es que a lo largo del libro seremos testigos de cómo la soledad lo va acabando poco a poco. Lo vamos ir viendo consumiéndose lentamente al no tener a nadie con quien compartir.


Además de la soledad, Neville tiene que lidiar con ser el último representante de una raza extinta. ¿Realmente está bien que él siga luchando por nada? ¿Qué siga consumiéndose cuando ahora es el eslabón más débil de la cadena? Estas son las constantes preguntas que le rondan por la cabeza, es decir que más allá de los vampiros Robert es su propio enemigo, del cual por desgracia no tiene ni un pequeño respiro.
Otra vez el impenetrable enigma de su deseo de vivir. ¿Por qué? No había, quizá, respuesta. No se había resignado a nada, no había aceptado aquella vida. Sin embargo seguía allí. ¿Instinto? ¿Estupidez? ¿Exceso de imaginación? ¿Era la vida algo más que palabras, una potencia tangible que gobernaba la conciencia? ¿Intentaba la naturaleza, de algún modo, sobrevivir en él?
El libro en sí es muy pequeño pero pese a su tamaño es sin duda un libro exquisito y poderoso. La narración del autor es sublime y transmite mucho al lector. Es una narración en tercera persona que a veces nos lleva al pasado para retomar las cosas en el “presente” con más fuerza. Y su final… solo puedo decir que no me lo esperaba pero ha sido un excelente cierre para la historia de Neville.
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