Y es el turno de Luke, que está perdido y no es un buen momento para él. Así que decide coger el coche y plantarse en el pueblecito de Newhampton en busca de su mujer y el ansiado divorcio. Lo que no espera es que su querida mujercita, le pida que espere un poco más para poder divorciarse. Así que decide quedarse un tiempo en ese pequeño pueblo.
Harriet consiguió lo que lleva toda la vida soñando, pero que puede desmoronarse de un momento a otro, sobre todo si su recién aparecido marido sigue adelante con lo del divorcio. Harriet nunca lo tuvo fácil, así que tiene todos los muros en lo alto, pero Luke… Luke tiene algo…. y todo se complica cuando él decide quedarse en el pueblo una temporada.
Que maravilla de librin, adoré a Harriet, y se me encogió el corazón con ella en más de una ocasión. Y a Luke, reconozco que al principio me costó cogerle el punto, tan diferente a lo que conocía de él del primer libro, pero al final…. ains Luke.
Una historia preciosa, que por momentos me tuvo con el corazón encogido,pero también sonreí, y me cabreé en cierto momentos, de superar miedos, de dejar de luchar contra uno mismo, de quererse y aceptarse, y soltar lastre del pasado.
Me voy a por la historia de Jason, porque si algo sabe hacer Alice, es crearme la necesidad de seguir leyendo sus historias, y con esta trilogía no iba a ser menos.
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