La química del odio

Para ser una segunda parte de una historia me ha gustado más que la primera. En este libro Carme Chaparro sigue con la historia que había empezado en la novela "No soy un monstruo" y va añadiendo también a distintos personajes.
Aunque tengo que decir que había un personaje en la primera historia que no me caía bien y ahora tampoco.

Segundo libro de la saga protagonizada por Ana Arén. Y en esta ocasión la he disfrutado incluso más que la primera novela. Engancha desde las primeras páginas. Quizás el único defecto que lo podría poner es que el caso, si de primeras puedes llegar a creértelo, luego se complica de una manera que ya te resulta un poco menos creíble. Pero cuando llegas allí, estás tan inmersa en la historia que te da igual. Quieres saber cómo se va a resolver y quién está detrás de todo. Los personajes están muy bien perfilados, en especial, el de su protagonista. Y la historia contada con mucho ritmo y con una intensidad que no decae en ningún momento. Muy recomendable si os gusta el género. Eso sí, mi recomendación si no la habéis leído, empezad por el primer libro, No soy un monstruo.
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Estamos ante la segunda entrega de la trilogía de Ana Arén. Después de la primera parte, No soy un monstruo, con ese final tan explosivo me imaginaba que esta parte continuara de ese estilo.

Se me hizo bastante difícil de leer. Me dio la sensación de que había muchos personajes y en algunos momento la forma de redactar se hacía lenta y pesada.

Como punto positivo, las ideas, la documentación de la escritora me parece buena. Consigue meterte en la trama, pero en este caso, creo que sobraban algunas páginas.

En el caso de la resolución de los asesinatos, me pareció un poco engorrosa, rocambolesca y complicada... Quedan cosas que no ha resuelto, y me da la sensación de que no se van a resolver en el último libro.

Si leíste el primer libro, puedes continuar la historia, pero no esperes el mismo ritmo.

Hoy os dejo la última lectura del mes de agosto. Ha sido una LC con @el.rincondemislecturas @rakelsnm @leyendoconmiren @mankell_81 @cristipity.books, en el que vamos a leer la trilogía completa y Delito.

〰 En esta segunda entrega la autora nos presenta varios asesinatos y una vez más una investigación contrarreloj para resolverlos.

〰 Empezaré por el hecho de que el misterio que rodea a los asesinatos y la forma de plantearlos me ha gustado, han conseguido mantener mi atención y hacer que quiera seguir leyendo.

〰 En cuanto a la narración, se lee bien y ayuda el hecho de tener capítulos cortos, pero desde mi punto de vista creo que hay escenas que sobran porque no aportan mucho a la historia. Si consigue enlazar bastante bien todas las subtramas que nos vamos encontrando. También resuelve bien el uso de diferentes narradores que hacen que veas la historia desde diferentes puntos de vista.

〰 Sin embargo, el final no me ha gustado nada. Me ha dado la sensación que es algo que se ha sacado de debajo de la manga, no sé si con la intención de sorprender al lector con algo que no esperase, porque ciertamente no puedes verlo venir porque no hay nada en todo el libro que te haga sospechar.

〰 Ha sido una historia entretenida, que nos ha dado para hacer teorías en el grupo y que de deja leer. Vamos a por él tercero a ver qué nos depara.

En esta segunda entrega de la trilogía siguiendo la misma tónica de su primera obra, lleva al lector desde un comienzo que invita a la intriga a permanecer imantado a sus páginas en gran parte de la lectura. La protagonista, unos meses pasados tras la resolución del anterior caso y con ello el haber pasado una fase personal crítica se reincorpora al cuerpo nacional de policía y le adjudican un nuevo caso de asesinato, concretamente el de una duquesa. Relacionada con personajes de las altas esferas de la sociedad española.

Vuelve a encontrarse una vez mas con un caso de gran repercusión social, siendo el punto de mira tanto de su propio jefe como de la propia crítica social. Un nuevo equipo de trabajo y el apoyo incondicional de Joan, su pareja.

La novela mantiene las mismas particularidad que la primera entrega, un caso que salvando alguna particularidad, podría ser real, los detalles de la investigación y de las exploraciones forenses muy bien perfiladas, fruto de un gran trabajo de documentación por parte de la autora, añadiendo técnicas por parte del asesino o por parte de los investigadores muy particulares y meticulosas lejos de los estereotipos habituales en este tipo de novelas.

Los personajes están bien perfilados, creo que estaría bien leer la primera novela, aunque como es mi caso, a pesar de que la tenía algo oxidada he podido construir una idea clara de los mismos y no ha sido difícil seguir la trama ubicándoles en la historia. La protagonista es muy potente, emocional y profesionalmente. Sin pelos en la lengua.

Mantiene la intriga y la tensión a lo largo de la lectura. giros constantes, dudas, cuerpos que se van añadiendo, historias paralelas que se van aclarando, para explotar al final con una bomba de información que te sorprende.

Subyacen temas sociales muy actuales, los niños robados, el feminismo, el empoderamiento de la mujer en el mundo laboral, dentro de la policía, lo cual no creo que sea muy común, los medios de comunicación desde dentro con sus particularidades es otro punto a favor de la novela, tratado con naturalidad.

Una novela en la que el mal y el odio están muy presentes en la que van encajando todas las piezas para cerrarla con un final muy acertado.
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Después de leer No soy un monstruo, como me gustó tanto, decidí leer este libro. Esperaba algo como el anterior, pero nada que ver. Puede que mis expectativas estuvieran muy altas y eso ha hecho que no me crea nada de esta historia. A demás, me ha hecho replantearme que el libro anterior que leí, el primero de esta trilogía, no es tan bueno como pensaba. La historia tiene un comienzo normalucho, el crimen no es nada original, luego hay otro que parece que puede dar mucho juego, pero al final ni uno ni el otro. El desarrollo de la investigación es absurdo, los motivos más ridículos aún y el desenlace de la investigación, increíble. A mi parecer, es una tomadura de pelo a los lectores de este género. La investigadora, cansa de tanto drama. El jefe es el típico cliché de capullo integral. Los nuevos personajes están ahí por rellenar. Pero lo peor de todo es el desenlace. El "cómo" se efectuaron los crímenes no se lo cree ni la autora, la explicación de "por qué", es ridícula y muy poco desarrollada, quedando muchos flecos sueltos. Y ya la resolución y caza del asesino..... No tengo más sinónimos para explicar lo absurdo que me resulta. Poco creíble y apresurado. Como he dicho, este libro me hace ver las lagunas del anterior. Tenía preparada la tercers parte, pero no voy ni a molestarme. Nada recomendable si te gusta este género.

Tan solo he necesitado dos simples días para devorarme este libro que nuevamente, como el primero, me ha encantado.

Pocos libros han conseguido que con su lectura se me haya puesto la piel de gallina, y este ha sido uno de ellos. Este libro es una pequeña continuación del primero “No soy un monstruo” pero no es necesaria su lectura para leer este. Solo son unos pequeños matices pero no evita que en ningún momento estés perdido mientras lees este.

El ambiente gira en una serie de muertes o asesinatos que de nuevo tiene que investigar la inspectora Ana Arén, tras volver a su trabajo el día de Nochebuena.

Nada hace presagiar lo que realmente ha pasado y quién o quienes son realmente los culpables. Su final me ha dejado helado, gratamente sorprendido porque no me esperaba para nada un final así. ¡Me ha encantado, os lo recomiendo totalmente!

Solamente puedo decir que el odio dentro del cuerpo es muy malo.

En general me ha parecido una buena novela, aunque tengo sentimientos contrapuestos.

Seguimos con otro caso de Ana Arèn. Segunda parte de la trilogía aunque se puede leer por separado.

Creo que Carme Chaparro ha dado demasiadas vueltas a los asesinatos para resolver las tramas muy rápido. de cada uno de ellos fácilmente se podría haber escrito una novela entera.

Lo mejor de todo el desarrollo del personaje principal y la interacción con la primera novela.

Aunque el final me ha parecido un poco precipitado, me ha encantado como ha unido todas las tramas para concluir la historia.

Me ha dejado con ganas de leer el tercer libro de la saga. Así que allá vamos!!

De nuevo me sumerjo en la literatura de Carme Chaparro. Confieso que quería leer su último libro y justo cuando lo empecé, en la introducción, descubrí que formaba parte de la trilogía de No soy un monstruo que leí hace algún tiempo. de nuevo, la escritora nos hipnotiza con su pluma y nos muestra los recovecos de la inspectora jefa Ana Arén y sus colaboradores para desentrañar los crímenes que se desvelan entre estas páginas. Nos encontramos con una protagonista intentando recomponerse de la tragedia, un comisario que hará todo lo posible por destituirla, un compañero en la sombra que ante todo es policía. Su primer día de regreso y los cadáveres se amontonan en el Anatómico Forense y ella tendrá que descubrir quién y por qué. He disfrutado de su lectura que me he bebido en un par de días.

Esta es la primera novela de Carme Chaparro que me he animado a leer, creyendo que era independiente y autoconclusiva. Y, aunque es cierto que se puede leer perfectamente sin haber leído No soy un monstruo, se hacen tantas referencias a la anterior novela (spoilers incluidos, evidentemente), que es mejor leer antes a su predecesora.

La química del odio es un thriller cuya trama transcurre en Madrid y que no deja al lector indiferente.

¿Qué vamos a encontrar en esta novela? Lo que vamos a encontrar
en esta obra no es solo lo que aprendemos de los asesinos o lo que el odio puede llevar a hacer a una persona, sino que vamos a hallar varios crímenes perpetrados por una mente brillante que tratará de poner a prueba a Ana Arén, protagonista indiscutible de la obra.

Es la historia de Ana, de cómo se levanta tras el duro golpe recibido tras el caso Slenderman. Es la vida de una mujer que trata de volver a encontrarse a sí misma, a ganarse el respeto de sus nuevos compañeros y cazar al criminal que es capaz de sesgar varias vidas sin sentir remordimientos.

Es también la historia de Inés, que cumple condena y que, a pesar de todo, podría ayudar a Ana si quisiera.
Es la historia de una amistad rota y de un odio capaz de acabar con todo.

Y el odio, que todo lo arrasa, que todo lo puede. Los anhelos de lo que no se puede tener y se consigue ilegalmente.

Es, en definitiva, una historia que muestra la verdad de las personas, su lado oscuro. Una historia sobre el odio y el renacimiento. Una historia sobre salir adelante cuando todo parece perdido.

Lo que más me ha gustado: La forma en que los personajes van adentrándose en esta nueva etapa de sus vidas en homicidios (Ana acaba de empezar como inspectora jefa de las dos unidades de homicidios y casi todos sus compañeros son nuevos o han sido trasladados con ella desde su anterior unidad). Cómo se va formando un nuevo equipo y la manera en que Ana aprende a volver a confiar en sí misma.

La trama que se enrevesa, pero no demasiado como para parecer demasiado increíble. Esa forma en que los crímenes son importantes en la historia, pero lo son más las identidades de las víctimas y cómo fueron en vida.

Lo que menos me ha gustado: Lo previsible que resulta la trama en algunos puntos. Es fácil adivinar algunas respuestas, aunque eso no quita que también haya sorpresas y un desenlace a la altura.

Lo lenta que va la trama en algunos puntos, con demasiadas descripciones y conversaciones que se alargan hasta mostrar algo en claro. Se podría haber acortado o dado cierta agilidad a la historia.