Aura

Les traigo hoy la reseña de AURA de Carlos Fuertes, de este libro o más bien relato que acabo de leer, porque es bastante cortito. En mi opinión, me ha parecido un libro bastante extraño que me ha hecho sentir igualmente: extraña o rara con una gran incertidumbre en el ambiente que se mantiene hasta el final o casi hasta el final de la novela. Aún así, me ha gustado. La prosa y la forma de expresarse del autor es excelente y parecer ser culta en cuanto a la composición y al uso de palabras. Por eso, y pese a lo bizarro del relato le doy 5*

Aquí les dejo una descripción sobre de qué trata esta historia:

La historia comienza cuando Felipe Montero, un joven historiador inteligente y solitario que trabaja como profesor con un sueldo muy bajo, encuentra en el diario un anuncio que solicita un profesional de sus cualidades para un trabajo con un muy buen sueldo. El trabajo, en la calle Donceles 815, consiste en organizar y escribir las memorias de un coronel francés y traducirlas al idioma español para que puedan ser publicadas. En dicha casa habitan la viuda del coronel, Consuelo Llorente, y su sobrina Aura. La novela transcurre alrededor de Aura, dueña de unos impresionantes ojos verdes y una gran belleza, y su extraña relación con su anciana tía. Felipe se enamora de Aura y quiere llevarsela de allí porque piensa que Aura no puede hacer su vida por Consuelo que la tiene atrapada. al adentrarse en las fotografías y escritos del coronel y la viuda, Felipe pierde el sentido de la realidad y encuentra una verdad que supera la fantasía y amor.

La línea entre realidad y surrealismo es muy delgada, igual que la estrecha cuerda floja de un espectáculo circense; si se camina bien sobre ella todo el público tira voces y gritos sorprendidos de ese gran talento, pero si se falla y cae, el espectáculo se convierte en una muerte instantánea sin remedio alguno; Carlos Fuentes logra más que sólo caminar en esa cuerda, se desliza en ella como si de flotar se tratase, el público no grita, simplemente se queda atónito ante el gran talento que posee.
“Aura” despierta en el lector el deseo de caminar en esa cuerda, mirar a ambos lados y apreciar la realidad y lo sobrenatural desde las alturas. Esta historia cubierta de una combinación perfecta del francés y el español nos enfoca en la historia de tres personajes: Felipe, Aura y la señora Consuelo, creando entre ellos un enredo y complicado amor desesperado, posiblemente confundido con dependencia, obsesión, y pasando de todo ello a un dilema entre la realidad y lo sobrenatural. Felipe, quien podría ser llamado nuestro protagonista, entra en la poderosa controversia del amor, y lucha con la poca cordura que le queda para salvar a Aura de las manos dominantes de la Señora Consuelo, nunca imaginó que aquel anuncio de trabajo que parecía una salida de sus problemas acabaría siendo la des fortuna más grande de todas, la cual lo mantendría encerrado en una caja llena de controversias.
“Aura”, publicada en México en 1962, es una de las novelas más representativas de Carlos Fuentes, escritor y diplomático mexicano nacido en 1928, ganador de varios premios, entre ellos el Cervantes; Carlos Fuentes nos regala a través de su narrativa una visión completamente alejada de lo “común” que tenemos a nuestro alrededor, te hace razonar, sacar conclusiones, vivir emociones, gritar e incluso asustarte. El cambio drástico que tiene entre capítulo y capítulo te provoca seguir leyendo y sentir que son insuficientes las pocas páginas que esta novela posee. Sin embargo, no le cambiarías nada, pues tiene las porciones suficientes para ser una novela espléndida.
Hago una invitación abierta a todo lector: leer “Aura” es una experiencia única, una puerta que abre al mundo sobrenatural, una puerta nunca antes vista. Carlos Fuentes murió en 2012, pero nos dejó un legado bellísimo, una narrativa exquisita, como lo es “Aura”, una cuerda floja entre lo real y lo sobrenatural.

Estaba dandole vueltas a la cabeza a como enfocar una reseña de una obra tan especial como esta Aura. Después de dos días de terminar este cuento, y de releerlo hasta en dos ocasiones más, trataba de encontrar el modo perfecto para abordarlo, para sintetizar las sensaciones que experimentas cuando te adentras en ese oscuro zaguán despintado del 815. Intentaba encontrar una razón que pudiera justificar el por qué de que, cada una de las palabras que salieran de mis dedos, iba a ensuciar la experiencia que supone descubrir lo que esconde detrás de esta historia.
Creo que tan solo puedo acercarme a ella transmitiendo todo lo que ha quedado estancado en mi cabeza. Esa obsesión por una obra que resuena con una espantosa naturalidad cada vez que pienso en ella. Esa seducción que conquistan los libros a los que sabes que vas a volver, tarde o temprano, quizás esta misma noche.
La historia que Carlos fuentes nos trae invita a que tú seas partícipe de un descubrimiento estremecedor, lleno de ambigüedades. El autor es consciente de que tú serás aquel que decida lo que mereces sentir al conocer el desenlace de su obra. Te convierte en el protagonista, en el centro de su calculado universo, te certifica como el historiador que tendrá que descubrir lo que se esconde en los papeles biográficos del general Llorente. Y caerás rendido ante la presencia de Aura.
Y es que todo cambia cuando la conoces. Todo aquello que te estremecía, que enfriaba tus ánimos, que ennegrecía aun más las penumbras a tu alrededor...todo pasa a un segundo plano cuando estás cerca de ella. Son esas sensaciones que experimentas cuando el mundo adquiere sentido. La orilla de Itaca, la desnudez de los amantes, la increíble electricidad que te produce rozar una piel que deseas.
Pero no te engañes. Eso no esconderá el horror. No te hará desviar la mirada ante las ratas, ni mucho menos ante los demonios. Eso no hará que tu estremecimiento desaparezca cuando sientas el tacto helado de la muerte. Lo que ves a tu alrededor seguirá oculto entre las sombras. Pero nada te apartará de la oscuridad ahora que te has habituado a ella. Todo a tu alrededor carecerá de sentido ahora que has entendido la mirada de Aura.
Estás donde quieres estar. Un infierno o esos lugares inciertos que algunos llaman hogar. El verdadero amor siempre regresa para quedarse al lado de los que lo entienden. No se olvida, ni aun cerrando la historia...

Vaya relato más perturbador y adictivo acabo de leer. Resultaba completamente hipnótica su lectura. A priori, el uso de la segunda persona para narrar una novela suele sacarme algo de la historia, no me termina de enganchar. Pero en este caso creo que ha contribuido mucho a profundizar en ese aura perturbadora y grotesca. Carlos Fuentes tiene una prosa exquisita, que alegría haberme encontrado con él. No os cuento nada de la trama, que es muy cortita. Pero merece la pena su lectura.

Aura, de Carlos Fuentes, es considerada no un relato largo, no una novela, sino una nouvelle, género que cabalga entre los dos ya mencionados. Lo impresionante de la trama es que transcurre en un caserón de la calle de Donceles de la ciudad de México, hoy zona de libreros de medio uso, donde un joven aspirante a historiador y traductor del francés es contratado para que descifre unos documentos dejados por un hombre que ya hace tiempo murió. Y entonces comienza la aventura. Carlos Fuentes recurre al mito celta de la famosa wicca y la traslada a la trama mexicana. La wicca, la misma figura que la iglesia católica satanizó, como lo hizo con todos los símbolos de las culturas que antecedieron la llegada de la Iglesia católica a la primera página de la historia y la convirtiera, por una derivación del antiguo inglés en witch, es decir, de la mujer sabia del pueblo celta, encargada de tomar las grandes decisiones de aquellas tierras ancestrales, la que reunía las tres mujeres básicas: la niña, la joven y la anciana, se impuso la idea de la bruja. La revelación será contundente en la novela de Fuentes. Prohibida por un funcionario de Educación, cobró un mayor auge de ventas en nuestro país, de tal manera que Carlos Fuentes quería darle trabajo de agente editorial al susodicho funcionario de gobierno para ver si el resto de sus títulos -vía la prohibición- se eleva de nueva cuenta en ventas. Aura, de Carlos Fuentes, altamente recomendable.

Me ha parecido interesante. Me gustan mucho las historias sobrenaturales. Ojalá se hubiera extendido más, me ha sabido a poco. Creo que va todo un poco apresurado, me hubiera gustado que se hubiera detenido más tanto en las descripciones como en los personajes. No te da tiempo casi ni a encariñarte de ellos o cogerles manía. Es un libro muy breve, se lee muy rápido.

Tres cosas tiene esta novela por las que no puede ser de mi gusto (que, aclaro nuevamente, no significa que me parezca mala): que es una novela gótica y fantástica, que el desenlace lo anticipé mediada la historia y, quizás la más importante, que la termino sin tener clara su pretensión, que empieza con la elección de la cita que encabeza el texto y que a continuación expongo, esto es, si es una denuncia o una mera representación, más o menos compleja, de los estereotipos de la mujer como ser oscuro, bruja, más pegado a la naturaleza, en su sentido más profundo, a los instintos y a nuestro verdadero ser, teniendo a la maternidad como fin supremo y la necesidad de mantenerse bella y joven para poder ejercer todo su poder sobre el hombre para el que será su perdición.

“El hombre caza y lucha. La mujer intriga y sueña; es la madre de la fantasía, de los dioses. Posee la segunda visión, las alas que le permiten volar hacia el infinito del deseo y de la imaginación… Los dioses son como los hombres: nacen y mueren sobre el pecho de una mujer…“ Jules Michelet

Por otro lado, todo el engranaje de significados y símbolos, de referencias a otras obras, que puede pensarse como propósito principal del autor y así entender la obra como un juego, no es algo que puedan compensar todo lo dicho. En definitiva, que no soy el lector que Fuentes buscaba para su obra, por muy generoso que me haya mostrado con las estrellas.

Perturbador, necesita más lecturas para sacarle todo el jugo.

Tensión e incertidumbre por un lado y por otro, fascinación y miedo.
Esos son los sentimientos que ha movido dentro de mi este pequeño relato.

Casi desde el principio te quedas atrapada en el ambiente viciado de la casa en la que entras de la mano de Felipe, un historiador que decide aceptar un trabajo un tanto raruno, a raíz de leer el anuncio en el periódico.

¿Cuál es el empleo? Organizar y terminar las memorias inconclusas de un general que murió hace ya tiempo. Su viuda, Consuelo, es la que ofrece el empleo porque es muy importante para ella que estas memorias sean leídas. Lo extraño del tema es que el contratado, deberá vivir con ella mientras realiza el trabajo...

Ya se te ponen los pelos de punta cuando, acompañando a Felipe, descubres que la casa está totalmente a oscuras y que la luz eléctrica es prácticamente inexistente; lo que hace que el ambiente de la casa sea más agobiante. Asimismo, la casa es una mansión antigua, con puertas que no se pueden cerrar y muchísimos rincones escondidos.

La rareza de la señora junto con el comportamiento de la sobrina (Aura) que vive también en la casa, nos pondrán sobre aviso de que algo extraño, sobrenatural, está ocurriendo allí. ¿Lo descubrirá Felipe? ...

Me ha encantado. 70 páginas de relato y no falta absolutamente ningún ingrediente para pasar miedito y quedarse descolocada al cerrar el libro. ¡Lo recomiendo! Si puedes leerlo de noche y a solas...mucho mejor hahahaha