Un cuento perfecto

Uno no puede desaparecer de la vida de alguien a quien ama de esa manera y esperar a que el tiempo haga magia.

Todas las canciones contenían pequeñas bombas en forma de frase o recuerdo. Es sorprendente cómo una melodía puede trasladarte a otro lugar y otro tiempo. Era demasiado tentador. Sabía que si encontraba un refugio en los recuerdos, no saldría de allí.

Pues yo no voy a pedirte que me esperes. Tus alas son tuyas, ojos tristes. Solo tuyas.

Es posible que no podamos encauzar nuestra vida, pero quizá podamos hacer algo por la de el otro.

Las cosas no pueden ser perfectas solo porque tú quieras que lo sean. Median muchos factores y nosotros solo somos humanos.

Lección vital: nunca te esfuerces en eliminar el prejuicio de los ojos de alguien porque probablemente ve lo que quiere ver.
A veces tienes que leerlo varias veces para darte cuenta del error que estás cometiendo.
Y así yo reconocí mi error.

Y yo, apoyada en su pecho, fingía encontrar las estrellas que formaban el conjunto mientras pensaba que el lujo a veces tiene poco que ver con lo material.

Solo éramos dos casi desconocidos muy cómplices.
Sólo éramos dos amigos recientes, torpes y
enganchados a la sensación de sentirse comprendidos.
¿No te ha pasado nunca? De pronto conoces a alguien y
lo quieres en todos tus planes y te parece increíble
haber podido divertirte sin él/ella. Eso nos pasaba.
Sólo éramos un montón de esperanza.

La vida es caprichosa. No hay destino, hay momentos.

Mágico