También llueve en verano

Un pequeño pueblo entre las montañas. Una mujer que vuelve a casa para pasar un verano. Y el descubrimiento de que ese lugar tal vez pueda combatir la tormenta. Vuelve Sara Ballarín con También llueve en verano una historia única que no hace reflexionar sobre la vuelta a los orígenes.
Alicia Sierra es una ingeniera aeronáutica que disfruta de una vida estable en Hamburgo. Sin embargo, la empresa para la que trabaja está en medio de un ERE que afecta a gran parte de la plantilla y que la deja compuesta y sin trabajo en un país que en realidad no es el suyo. Mientras piensa qué hacer con su futuro, decide aprovechar el verano para regresar a su pueblo donde todavía viven su hermana, su sobrino y su madre. Allí se reencontrará con viejas amistades y con aspectos difíciles de su adolescencia, ya que fue víctima de acoso escolar. En ese pequeño pueblo de la España vacía también conocerá a Jaime, que, sin quererlo, se convertirá en alguien muy especial.

Mi valoración personal:
Vuelve la fresca y divertida pluma de Sara Ballarín. La autora oscense que ya conociéramos por títulos como El cuaderno de Paula, El vuelo de Lena y Contigo en el mundo nos sumerge esta vez en una novela que te hace reflexionar sobre la vuelta a los orígenes, la reconciliación con la memoria y el amor como bálsamo para curar las heridas.
Alicia Sierra vuelve a su pueblo natal tras un recorte de personal en su empresa. Alicia residía en Hamburgo y ejercía como ingeniera aeronáutica. Sin mas ataduras en un país que no es el suyo y convencida por su hermana Gala, regresa a su pueblo, ese que abandonó hace quince años y que solo ha regresado en un par de ocasiones.
A su vuelta, Alicia, deberá luchar con aquello que la hizo huir; los recuerdos de una infancia donde el acoso escolar no la dejaban ser ella. 
Su madre que está en un avanzado Alzheimer que no la reconoce, su hermana Gala que se acaba de divorciar y el cuidado de su sobrino serán el eje central que mueve la novela, pero no todo va a ser malo para Alicia, en este pequeño pueblo perdido entre montañas conocerá a Jaime el profesor de sus sobrino.
Una historia de amor, de conflictos familiares, pero sobre todo es una historia de saber enfrentarse cara acara con un pasado que le ha hecho daño y que sin ella darse cuenta la ha forjado con una personalidad donde le cuesta entablar relaciones.
Con una narración sencilla, fresca y ligera, nos encontramos no tan solo ante un libro romántico, si no que esta vez diría que Sara, se ha centrado más en hacernos recordar esa infancia donde las horas y las preocupaciones se diluían en baños en la playa o el rio o en montar en bicicleta y querer volar. Una historia donde el amor es el centro d la novela, el amor no solo de pareja, sino de amistad, de familia y el amor a la tierra que te vio nacer y crecer, en definitiva las raíces de uno mismo.
Con unos personajes cotidianos, sencillos, de esos que te puedes encontrar en cada pueblo, Sara hace que empatice con cada uno de ellos y te sientas parte de la novela.

En conclusión, una novela que te hará pasar unos días agradables donde he sentido que ha sido su novela más nostálgica y retrospectiva a en comparación con las anteriores y que Alicia podemos ser cada uno de nosotros.

Creo que será la primera reseña en la que hable de más personajes que los protagonistas, porque creo que hay dos personas en esta historia que son indispensables y se merecen su mención.

Por supuesto, la protagonista, Alicia. Creo firmemente que es el foco principal de esta historia.
Una mujer con un pasado muy tormentoso que ha provocado que la única solución que encuentra a los problemas que le surgen es huir. Y huir no es la solución.

Con 18 años recién cumplidos "huye" de su pueblo natal donde ha tenido una infancia y adolescencia difícil. Después de terminar sus estudios universitarios y de no prosperar en su primer trabajo en la ciudad, decide alejarse de todo aún más y vivir en Hamburgo.

El día en que le despiden de su trabajo en Hamburgo y mientras piensa en qué hacer con su vida, recibe la llamada de su hermana mayor, debe volver urgentemente al pueblo para cuidar a su sobrino durante el verano. Y tras quince años alejada de su familia y su hogar, Paula debe volver al que fue su infierno personal.

Y todo empieza a cambiar.

Es un personaje súper fuerte, digna de admirar. Adora a su sobrino pequeño, ama profundamente a su madre, desea ayudar a su hermana en su peor momento y lo intenta todo por un futuro con Jaime. Es un poco impulsiva, de esas que en el calor del momento lo dan todo, pero cuando se enfría se da cuenta de sus posibles errores.

Jaime. Todo el que lea este libro quedará completamente enamorada de este hombre. Pero desde la primera aparición, lo digo en serio. También tiene sus pequeños fantasmas y lo único que no soporta y perdona en la vida es que le den la espalda. Pero menudo personaje masculino, profesor de vocación, pero de los de verdad, de los que se implican al máximo con sus alumnos y hacen todo lo que esté en su mano para que sean felices. Leal, cariñoso, pasional y cabezota.

El pequeño Tito. No puedo no nombrarlo, también he acabado muy enamorada de este niño. Es especial y amoroso. Me encanta la evolución que tiene en la historia gracias a su Tata y a Jaime, pero sobre todo a él mismo que es muy valiente.

Gala. Tampoco puedo dejar pasar a este personaje. Es el que más sufre en todo el libro, pobre mujer. A veces, muchas en realidad, me han dado ganas de matarla, y santa paciencia que tiene Alicia con esta mujer porque yo la habría mandado al infierno hace mucho tiempo, PERO tenemos que empatizar un poco con todo lo que le está pasando.

Como veis, he nombrado a estos cuatro personajes del libro que creo que son muy importantes unos para otros, pero sobre todo para el conjunto de la historia, no sería lo mismo sin todos. Por eso creo firmemente que la autora sabe crear personajes únicos, completos e inolvidables. Y eso es muy de admirar.

Digno de mención también lo bien tratado por parte de la escritora uno de los temas más difíciles que vivimos con el bullying y acoso escolar, una lacra que se debe erradicar cuanto antes. Porque NO es cosa de niños.

En resumidas cuentas, me ha encantado el libro, lo he leído en apenas dos días (cuando tengo tiempo no paro) y estoy súper agradecida a la editorial por darme la oportunidad de descubrir a esta autora y su encantadora pluma

Creo que esta es la primera vez en mucho tiempo que no sé exactamente cómo expresar lo mucho que he disfrutado una lectura. Tengo que reconocer que, a pesar de que había leído muy buenas críticas y estas fueron la razón por la que me animé a darle una oportunidad, cuando empecé a leerlo pensé que no lo iba a disfrutar tanto como decían. ¿Por qué? Por la narración. No me malinterpretéis, la narración no tiene nada malo, pero mi experiencia leyendo este tipo de libros no ha sido del todo buena, así que no me lo tengáis muy en cuenta. La verdad es que después de haberlo disfrutado tanto me tengo que dar con un canto en los dientes, porque, sin ninguna duda, estamos ante uno de los mejores libros que he leído este año.

La trama comienza con nuestra protagonista, Alicia, que inesperadamente se encuentra sin trabajo en un país extranjero. Por ello, sin muchas opciones y tras una llamada de su hermana, decide pasar el verano en el pueblo en el que se crio y al que juró que nunca volvería. Allí, junto a nuestra protagonista, nos encontraremos con Gala, su hermana, que... ¡vaya personaje! Y en el buen sentido de la expresión, porque si Gala me ha hecho sentir emociones tanto negativas como positivas –más negativas que positivas tampoco nos vamos a engañar– es porque es un personaje super bien construido, con sus luces y sus sombras. No solo preocupa y saca de quicio a su hermana, sino también al propio lector, así que preparaos para la montaña rusa que es vivir con ella. Junto a ella tenemos a Tito, el sobrino de Alicia e hijo de Gala, un amor con patas, todo sea dicho; y la madre de ambas, con la que viviremos momentos muy dulces, pero también muy dolorosos debido a la enfermedad que padece. Además, conoceremos a Jaime, con el que Alicia sentirá una conexión casi inmediata y con el que se va a ir fraguando una relación que amenaza con poner la vida de ambos patas arriba.

Es precisamente la relación entre dos personajes –y ellos de forma independiente– lo que, junto a la narración, más me ha conquistado. Si Gala está ahí para sacar de quicio al lector y jugar con nuestras emociones, el objetivo de Alicia y Jaime es el contrario. Son dos personas maravillosas con un rumbo claro que se conocen y se complementan a la perfección. Nada de dramatismos ni celos, solo dos personas que se entienden, se apoyan y se respetan incluso cuando no están de acuerdo, porque, aunque muchos libros nos muestren lo contrario, esto es el amor. Y, ojo, esto tampoco quiere decir que todo sea de color rosa entre ellos, ni mucho menos. Es más, vamos a sufrir mucho a pesar de no existir esa toxicidad, pero vamos a reír mucho más junto a ellos, así que es una relación que, sin duda, vale la pena leer.

Con respecto a la narración, la historia está narrada en primera persona por Alicia con un lenguaje coloquial e, incluso, en contadas ocasiones, puede llegar a ser vulgar, pero sin ser de mal gusto. Esto es un poco complicado de explicar con palabras, pero, para haceros un resumen, este libro es muy español, está repleto de expresiones y formas de expresarse propias del día a día en España, y eso de primeras fue lo que me hizo pensar que este libro no sería para mí. No me juzguéis, soy española, pero mi experiencia con este tipo de narración muchas veces no ha sido buena, ya que se tiende a exagerar cayendo en tópicos que, en vez de hacer gracia, resultan realmente pesados. Obviamente, este no ha sido el caso, sino que ha resultado ser todo lo contrario. Una narración ligera y extremadamente divertida que nos trasmite, además, un muy buen rollo por parte de la protagonista. Un plus super acertado para lo bien trabajada que están la trama y los personajes. Todo esto ha hecho que me costara cerrar el libro una vez lo había acabado. A veces cuesta despedirse de personajes que te han trasmitido tanto. Y digo despedirse, porque probablemente no me volveré a reencontrar con ellos en una temporada, pero, sin duda, volveré a ellos en cuanto lo necesite, porque esta historia se ha llevado un trocito de mí.

En definitiva, También llueve en verano de Sara Ballarín es una historia que, aunque en un principio parezca sencilla, se va metiendo casi sin darte cuenta dentro de ti. Una trama que me ha hecho disfrutar tanto como hacía tiempo que no hacía, queriendo alargar la lectura lo máximo posible y necesitando pasar mucho más tiempo junto a Alicia y Jaime. Qué queréis que os diga, estos personajes son un amor. Con ellos me he divertido, llorado y reído mucho. Y, ojo, casi la totalidad de las lágrimas derramadas fueron fruto de la risa, porque, como os digo, en estas páginas no hay dramatismo más que el de la propia realidad.
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Hace ya un tiempo que leí a Sara Ballarín con Contigo en el mundo y me gustó mucho su forma de escribir. Por eso, cuando vi que sacaba este nuevo libro pensé que no podía perder la oportunidad de leerla de nuevo. Y ya os adelanto que ha sido un auténtico gusto leer este libro. Pero bueno, empecemos…

Alicia tiene toda su vida montada en Hamburgo, pero la empresa para la que trabaja hace un ERE y ella es una de las que acaba en la calle. Además, poco después su hermana la llama para que vaya a ayudarla con su hijo porque está pasando por graves problemas personales, así que a pesar de sus reticencias por volver a un sitio que la hizo tan infeliz, decide regresar y ayudar. Pero tener que hacer frente a los fantasmas del pasado no va a ser fácil. Ni si quiera dejar que la vida la sorprenda…

Y, hasta ahí voy a contar. Más que nada porque es un libro que sorprende, que te deja con ganas de más, que te hace pensar y valorar ciertas cosas.

El primer tema al que quiero hacer mención es el acoso escolar. Sí, es algo que me parece total y absolutamente fundamental, a parte de una de las tramas del libro. Lo mejor de este tema es que se ve desde varios puntos de vista distintos y te hace reflexionar mucho a cerca de ello. Sufrir acoso escolar y sentir que nadie te entiende, que nadie puede ayudarte es algo verdaderamente triste. Esas personas no saben cómo reaccionar y ven que la gente se du alrededor no hacen nada. Pero lo que me gusta de esto es la reflexión que sale a lo largo del libro sobre esto.

Por otro lado tenemos el tema de la familia. Es bien sabido que en todas las familias hay roces, hay momentos en los que los miembros están más o menos unidos… En este caso, la familia de Alicia no es una familia muy unida pero sí que hace plantearse cosas al lector. He de decir que la historia con su hermana o con su madre no dejan indiferente absolutamente a nadie y hacen pensar y valorar ciertos momentos de la vida que nos dejan un poco machacados. Podría decir que este es uno de los temas fundamentales.

Y, por último, el tema de las segundas oportunidades. Es tan especial el saber dar segundas oportunidades… Y sí, digo «saber dar» porque no todo el mundo tiene la capacidad de reflexionar y hacerlo. Por eso esto es tan importante a lo largo de la historia. Es un tema complicado de manejar, pero creo que la evolución de los personajes, sus pasados, sus presentes, todo, hace que se entienda a la perfección y consiga sacarte una sonrisa.

Llegando a los personajes, solo voy a hablar de Alicia, protagonista indiscutible del libro. Es ese tipo de persona que aunque rehúye del mundo, querrías tener a tu lado. Así de sencillo. Tiene unos valores, una integridad y una forma de ser de lo más especial y es muy sencillo poder comprenderla y entender por qué actúa de tal o cual forma. Sinceramente, es uno de esos personajes que se te meten dentro y de los que querrías saber más porque conectas de una forma especial.

Luego hay otros personajes a los que vais a adorar y otros a los que vais a odiar. Lo voy avisando ya por si acaso, pero creo que merece la pena comentarlo porque…. bueno, ya lo veréis cuando lo leáis.

Así que puedo decir que ha sido una gran lectura que me ha sorprendido mucho desde el principio porque yo me esperaba algo y ha sido otra cosa. Pero otra cosa especial, bonita, que te ayuda a conectar con el mundo y a ver ciertas cosas con otros ojos.

Es un libro de vida, de familia, de amor, de amistad… Es un libro que coge un trocito de tu alma y lo estruja. Es un libro que te hace reflexionar y plantearte muchas cosas. Es un libro que ayuda a ver más allá.

Así que sí, lo recomiendo mucho. No decepciona. O al menos a mí, todo hay que decirlo. Pero si os lo estáis pensando, cogedlo, abrid la primera página y dejaros llevar. Ojalá lo disfrutéis tanto como yo.
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También llueve en verano es el primer libro de la autora que leo, me ofrecieron colaborar con este libro y tras leer la sinopsis me convencí. Antes de leerlo, pensaba que sería la típica comedia romántica veraniega con la que pasar un par de tardes entretenidas, pero no. Aunque es un libro fresco y de lectura ágil con partes entretenidas y divertidas, también tiene momentos cargados de mucha tensión y drama. Es una historia agridulce que te invita a reflexionar sobre las diferentes formas que tenemos las personas de afrontar un problema y en como repercuten en nuestro entorno. Reconozco que no es lo que esperaba, pero aún así, me ha gustado. Os cuento:

El libro comienza con Alicia, nuestra protagonista, residente en Hamburgo pero con raíces en un pequeño pueblo del Pirineo. Es una mujer con éxito académico y laboral, pero la empresa para la que trabaja hace un ERE y es despedida. Mientras medita qué hacer con su vida, Gala, su hermana mayor que atraviesa un divorcio complicado, la convence de ir a pasar el verano a su pueblo para ayudarla a cuidar a su sobrino, Tito y a su madre, enferma de Alzheimer. Alicia hace las maletas y vuelve a pasar el verano al pueblo que juró no volver a pisar y allí se reencontrará con Berta, una amiga de la infancia y conocerá a Jaime, un atractivo zaragozano profesor de su sobrino. Viviremos momentos típicos de pueblo con señoras cotillas, verbenas y chapuzones en el río y veremos cómo Alicia descubre el amor. Sin embargo, también tendremos que verla enfrentarse a los fantasmas de su pasado en ese pueblo, lidiar con la enfermedad de su madre, el temperamento de su hermana y los problemas escolares de Tito.

También llueve en verano es un libro con una trama completa, bien estructurada y con personajes muy bien definidos que hacen que las situaciones sean creíbles. La historia está bien hilada y en continua progresión, para mí, el libro mejora con cada página. No tiene descripciones excesivas ni del pueblo ni del entorno, aunque sí suficientes para que imagines los escenarios sin problema, al fin y al cabo, ¿quién no ha estado en un pueblo en verano? Me han gustado las vías que abre el libro, ya que además de encontrarnos con un romance entre los protagonistas, también trata temas como el acoso escolar, las tensiones familiares, problemas para decidir qué futuro queremos, la pérdida de un familiar, el Alzheimer y miedo a enfrentar el pasado.

Los personajes me han convencido, aunque en algunos momentos Alicia me ha desesperado y no he comprendido a Gala. Alicia, pese a ser una mujer adulta con sus treinta años bien cumplidos, toma decisiones en algunas ocasiones infantiles y en otras, tratando de ser más madura, desoye sus propios deseos. Quiere encontrar la felicidad pero no sabe por dónde empezar a buscarla. Es una mujer inteligente y valiente, trata de ser madura y superar su situación, pero creo que en algunos momentos, es demasiado dramática. de Jaime no tengo nada malo que decir, me ha parecido un personaje masculino precioso. Es un hombre tierno, maduro y generoso, que pese a tener un pasado difícil, no duda en darlo todo. Como pareja, Alicia y Jaime me han gustado y convencido ya que son perfectamente complementarios y pese a sus diferencias, saben estar para el otro, la complicidad que muestran en la historia es maravillosa. Me ha gustado que la relación que se establece entre ellos se va cociendo a fuego lento, es sincera y, sobre todo, sana.

En cuanto a la forma de escribir de la autora, tengo que decir que me ha gustado. Escribe de una forma que hace que te acabes el libro en un abrir y cerrar de ojos, de hecho, yo leí del tirón porque necesitaba saber qué pasaba entre los personajes. Consigue que te identifiques con sus problemas, sus miedos y sus alegrías, pero me ha faltado conocer más puntos de vista. Conocemos la historia desde el punto de vista de Alicia, pero me hubiese gustado saber en muchas ocasiones qué pasaba por la cabeza de Jaime e incluso de Gala. Por otro lado, aunque me ha gustado que el libro abarque no solo la historia de amor, creo que algunos de los temas que trata, como por ejemplo, el del acoso escolar, se queda en algo superficial ya que no profundiza demasiado y lo mismo he sentido con el pasado de Jaime al no conocer realmente su visión. Sin embargo, tengo que deciros que tanto los momentos en los que nos plasma lo terrible que es el Alzheimer, como la desesperación de Gala me han convencido y puesto un nudito en la garganta.


En resumen, También llueve en verano es un libro que disfrutaréis si os gustan las historias de romance que se cuecen a fuego lento, con momentos divertidos y momentos cargados de drama. Es un libro que no solo trata de amor, sino también de la importancia de la familia y de conocerse y encontrarse a uno mismo. Es un libro con personajes maravillosos y una historia de amor sana y real. En conjunto, el libro ha sido una buena lectura, espero que le deis una oportunidad y disfrutéis muchísimo su lectura.
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