Alexiévich lo hace de nuevo. Me pregunto realmente cómo hizo (emocionalmente) para sobrevivir a la búsqueda, transcripción y elección de testimonios, ¡cuántas voces, cuánto dolor, cuántos secretos que pudieron ser revelados! Este libro es otra guerra, un rostro nuevo, la otra cara de los silencios exigidos por años. A lo largo de la lectura te guía la voz de Svetlana: el inicio de la guerra, sus cotidianeidades, el porqué de enrolarse, la resistencia, la desesperación, la Victoria...Y están los testimonios, tantos como personalidades hay: cortos, punzantes, cómicos, románticos, desgarradores. Hay momentos en los que no puedes hacer más que detenerte y darle un respiro a tu corazón, ¡es tanto el dolor y la crueldad! Una idea sembrada de patriotismo que llevó a tantas mujeres a las filas, que alimentó sus esperanzas de Victoria y las apartó de la vida.... Realmente indescriptible, no tengo palabras y, aunque con el corazón maltrecho, estoy deseando leer más de ella... |