3.5
Este libro es de un autor al que conocí al leer El ultimátum de la Tierra, una novela de fantasía juvenil. Ahora ha dado el salto a la novela policíaca y Un ángel no debería morir es el primer libro de una trilogía ambientada en Alicante.
Yo no soy una lectora habitual del género novela negra pero este verano me he sentido un poco más abierta con respecto a esta temática y he leído un par de libros de misterio. En particular, de esta historia me atrajo que estuviera ambientada en España, y aunque no conozco Alicante, creo que uno de los puntos fuertes son las referencias a lugares de la comunidad y al ambiente que se vive allí.
Estamos ante una historia narrada a dos tiempos, por una parte seguimos la investigación en 2009 y por otro vemos acontecimientos del pasado en los años ochenta. El padre de Clara también fue inspector de homicidios y hay algunas cuestiones en las que está relacionado, además de darnos pistas sobre el secreto que Clara desveló cuando era niña.
Me ha gustado esta doble temporalidad que permite conocer como ha sido la vida en España a lo largo de los años. Los ochenta fueron importantes, el país se había adaptado a vivir en democracia y el cuerpo de policía todavía tenía un largo camino por delante para ser más apegado a un protocolo, además también se trata el impacto de las drogas en la sociedad por aquellos años. La línea presente situada en 2009 nos queda ya lejana pero a mí me ha parecido novedoso que se situé ahí y no en la actualidad, como suele ser costumbre.
La novela no es muy larga y se lee con facilidad pero le da tiempo a tener un buen desarrollo. Creo que hay bastante investigación detrás, estamos muy acostumbrados a leer o ver casos de asesinato y sus investigaciones, pero casi siempre ambientadas en Estados Unidos, y en mi caso particular, no tengo mucha idea de cómo funciona todo ese sistema en España. Sí que he visto algunas series españolas pero me cuesta seguirlo. ¿Se ocupa la Guardia Civil? ¿La policía? Un tema que se trata en el libro es la falta de coordinación entre cuerpos, por ejemplo, de una comunidad a otra, como puede ser Cataluña con los Mossos. En España siento que nunca nos hemos organizado muy bien, sobre todo en los aspectos burocráticos, y ni siquiera ante temas tan importantes como una investigación de asesinato se puede acceder a todo lo necesario por la descoordinación.
Los personajes principales son Clara y Santi ante todo, aunque hay algunos secundarios, son estos a los que acabaremos conociendo mejor. Con los dos, pero especialmente con Clara, he tenido un problema, y es que en esa comisaría no hay nadie mentalmente sano. Clara tiene un grave problema de ansiedad, depresión o incluso estrés postraumatico, no lo sé, pero está claro que no está en condiciones de trabajar y menos en algo así. Siempre esta débil por no comer o no dormir, no cuida su salud y se medica de una forma poco controlada. Muchas veces se desmaya o no se entera bien de lo que ha ocurrido, tiene muchos asuntos que resolver, así que no entiendo por qué ha decidido dejar la psicología para ser inspectora, que es una profesión mucho más dura para la que no está preparada todavía. Pienso que antes, y ella como psicóloga debería saberlo, tendría que tratar sus problemas, descansar, porque cada vez va a peor.
Por su lado, Santi tiene también un pasado muy doloroso y ahora está muy solo. Es algo mayor, su única compañía es su perro Turco y aunque creo que es el más confiable, tampoco lo veo cien por cien funcional para un puesto así.
En cuanto a los secundarios, no puedo decir que me fiaría de que ellos para que resolvieran el caso de un ser querido. Me ha chocado un poco la calidad del personal de la comisaría, porque creo que ninguno se salva. Falta de moral en algunos casos, otros son racistas, otros tienen problemas mentales que limitan su funcionalidad, a los superiores solo les importa quedar bien ante los altos cargos, etc Para mí esto ha hecho que sea un poco agotador, ya que si algo se transmite bien es ese estado de tristeza que tiene Santi y la ansiedad y soledad de Clara.
La trama de la investigación me ha gustado y no sospeché quién podía ser el asesino hasta que tuve una pista de a qué podía dedicarse. Creo que es algo inesperado y está bien, pero el final es un poco abrupto. Es una trilogía y diría que es necesario leerla toda para ver cómo acaba lo que aquí ha comenzado.
Creo que esta novela es un inicio prometedor, es la primera novela del género del autor y muestra potencial, con el tiempo podría hacer historias más complejas. Hay una buena base, pero pese a eso, no ha sido una lectura para mí porque toca temas muy desagradables.
He recordado por qué no suelo leer novelas de esta temática y es que me dejan una sensación amarga al terminarlas, por eso me inclino por lecturas con temas más amables.
Por ejemplo, el abuso hacia las mujeres está muy presente en la historia, desde la trata de personas, al asesinato de la víctima, el abuso a niñas, intentos de violación, asesinato, falta de credibilidad, etc Tampoco me ha gustado que se recalque tanto el físico de Clara y el de Magdalena, la víctima, ambas están constantemente sexualizadas. Casi en cada escena en la que aparecen se habla de su aspecto y estoy un poco cansada de estas historias en las que la asesinada siempre es una joven bellísima, de piel pálida, sensual pero angelical y a la que el asesino busca por parecerse a una muñeca. Es un cliché muy usado y que funciona, porque el morbo que despierta atrae a muchos lectores, pero personalmente prefiero que haya variedad y, como digo, en este tipo de novelas negras se abusa de la violencia física y verbal hacia las mujeres. Existe, por supuesto, pero creo que en estos libros, consciente o inconscientemente, se incluye porque levanta morbo.
Y hablando de morbo, he recordado que hay una crítica en el libro que me ha gustado mucho y se dirige hacia los medios de comunicación y a la manera de cubrir una noticia de este tipo. Lo que importa es la audiencia y se pierde la ética. El morbo genera audiencia y la ética de la prensa se deja a un lado ante este tipo de oportunidades, incluso llegando a intentar mostrar imágenes del cadáver o crear grotescas simulaciones, obviando el dolor de familiares y allegados.
Por ahora, creo que seguiré leyendo de forma limitada este tipo de temática, especialmente en tiempos como este que estamos viviendo me apetecen lecturas que me levanten un poco el ánimo. Sin embargo, siempre hay excepciones y en mi caso me encanta la serie Cormoran Strike, de Rowling, porque conjuga bien los casos que trata y la vida de los protagonistas.
Creo que si os gusta el género disfrutaréis más que yo esta lectura, diría que cumple con todo lo básico y que además presenta una buena ambientación en Alicante. Engancha y cuenta con unos personajes protagonistas que no son meras herramientas, sino cuyas vidas interesan y les aportan un trasfondo que les da personalidad.
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