Tu nombre después de la lluvia

Este es el primer libro de la trilogía de Dreaming Spires, ambientada
en la Inglaterra de principios del siglo XIX. En esta primera entrega nos presenta a Alexander, Lionel, Oliver y a August. Alexander es un profesor universitario que trata de estudiar las "nuevas ciencias" (parapsicología), Lionel es un seudo-arqueólogo, trata de conseguir piezas históricas importantes para colecciones de grandes ricos ingleses y Oliver es traductor en la Universidad de Oxford. August es un medium y al mismo tiempo párroco anglicano. Estos cuatro amigos están unidos por su interés en las ciencias paranormales y por una revista especializada en ese tema: Dreaming Spires.
Esta revista no está pasando por su mejor momento, y por ello Alexander decide irse, junto con Lionel y Oliver, a Kilcurling, un pequeño pueblo irlandés a pocos kilómetros de Dublín. Por lo visto, allí se ha producido una muerte muy extraña en un castillo medieval, y según la leyenda hay una Banshee ligada a la familia que reside en él, a la que consideran responsable de asesinato.
Durante la estancia de nuestros protagonistas en Irlanda tendrán que lidiar con los habitantes del pueblo que son reacios de hablar de la Banshee y de las moradoras del castillo, Rhianon y Eilish, que lo único que quieren es vender el castillo para poder empezar una nueva vida. Alexander les ayudará a encontrar posibles compradores a cambio de que ellas les ayuden a investigar a la Bunshee.
Y así es como conocen a Señor Delancey, al Señor Archer y a la Señorita Stirling, que a pesar de que son personajes secundarios van a jugar un papel muy importante en esta historia...

Para aquellos que les gusten la novela gótica esta es su saga. Aquí encontrarás todos los estereotipos: castillo encantado rodeado de tinieblas, sus dueños con una vida difícil y un carácter aún más difícil, seres encantados, y por supuesto una historia de amor.

La novela al principio se hace algo lenta, es básicamente la presentación de los personajes y se hace algo pesada. No es hasta la mitad cuando empieza la acción.
Lo que más me ha gustado de esta novela es que es un compendio de géneros que es difícil decantarte cual es el que más lo define; nos podemos encontrar con aventura, fantasía, intriga y romántica. Desde mi punto de vista veo una novela más de intriga, ya que realmente la trama principal es investigar quien es el culpable de los asesinatos. También es destacable lo bien documentada que está la autora sobre la mitología irlandesa, temática que me resulta interesante, como buen gallega que soy me atrae todo lo relacionado con la mitología celta.
Lo que menos me ha gustado: la historia de amor. Yo soy lectora del género romántico, pero en este caso se nota que es una novela juvenil, ya que nos encontramos un amor demasiado intenso, que para mí es empalagoso e inmaduro.
Ahora empezaré con la segunda parte, a ver si me gusta tanto como me ha gustado esta...

Empiezo comentando que esta reseña forma parte de la iniciativa Adopta una autora, en la que participo desde hace más de un año y en la que tengo la suerte de tener asignada como autora adoptada a Victoria Álvarez, mi escritora favorita desde hace varios años. Si avanzáis hacia el final de esta reseña podréis ver el resto de enlaces de este ciclo de entradas dedicadas a ella con las reseñas del resto de sus novelas, o si queréis saber más sobre ella, podéis ir directamente a la entrada recopilatoria en la que os facilito el índice con su bibliografía y más datos sobre ella por aquí.
En esta ocasión he decidido cambiar un poco el formato de la reseña dado que voy a marcarme un hat-trick y voy a intentar plasmar mi opinión acerca de esta maravillosa trilogía sin caer en spoilers de ninguna de las partes que la componen. Quizás esta es, hasta ahora, su obra más conocida, si obviamos el éxito que está teniendo su última publicación La Ciudad de las Sombras, la primera parte de otra trilogía publicada por Nocturna Ediciones y que supone una especie de secuela/spin-off de Dreaming Spires. Como suele pasar con el dilema de ver antes o no la trilogía clásica de Star Wars que la de los orígenes de Darth Vader, en este caso también es un poco al gusto del consumidor, según cómo queráis descubrir una historia que al fin y al cabo forma un todo. Y por supuesto, aunque no hace falta que lo aclare, podéis leer tranquil@s porque esta triple reseña está redactada SIN SPOILERS, de ninguna de las novelas.
Los personajes principales son los tres compañeros “periodistas” que han creado un periódico especializado en sucesos paranormales y se dedican a investigar la veracidad de esos mitos y leyendas que les roba el sueño a la gente supersticiosa de la época. La voz cantante la lleva Alexander Quills, un profesor serio y responsable que no da nada por sentado hasta que lo ha verificado con una precisión casi científica. A su lado siempre está Lionel Lennox, que se une a las investigaciones por puro afán de aventura, libertad y mujeres impresionadas por su profesión. Y por último, para compensar las personalidades de sus compañeros, Oliver Saunders aporta la calma y la tranquilidad necesarias para unos encargos de lo más inquietantes, con su aire romántico y su sentimentalismo. Juntos forman un equipo muy eficaz y con el que nos encariñamos desde los primeros capítulos de presentación. Este sería el momento para dejarme llevar por la vena fangirl que me domina muchas veces para dejar claro mi amor eterno por Lionel. Desde esa primera aparición en el segundo capítulo dentro de una tumba egipcia cual Indiana Jones, lo mío con este personaje fue un crush de manual, cuando ni la propia autora sabía el potencial que había generado con él. Luego el tiempo me ha dado la razón y siempre será uno de los personajes más queridos tanto por ella misma como por la mayoría de l@s lector@s y sólo por conocer a Lionel ya merecería la pena leer estos libros.
Sin embargo, personalmente creo que una de las mejores creaciones de Victoria Álvarez es sin duda la señorita Stirling, un personaje crucial con el que no queda claro si el trío protagonista gira en torno a ella o viceversa. La señorita Stirling es la sofisticación hecha personaje, tan complicada e interesante como un cubo de rubik en el interior de la última muñeca matrioska. En serio, creo que la única que conoce en profundidad a esta chica es la propia autora porque tiene tantas capas de misterio por encima que es muy difícil quitárselas todas si no se lee la trilogía entera. Puede pasar desapercibida en la primera parte o ser un personaje secundario más, pero es uno de los mejores personajes secundarios con complejo de protagonista que he llegado a conocer en un libro. Si con Lionel me he contenido (un poco), con la señorita Stirling simplemente no puedo porque es toda una queen de la seducción misteriosa, nunca sabemos qué piensa, qué siente ni qué hará. Ni siquiera sabemos por qué hace lo que hace mientras vamos leyendo y aún así, no podemos dejar de admirarla sin motivo aparente.
Como viene siendo habitual en la bibliografía de esta autora, en esta ocasión tenemos una trilogía de ambientación histórica de principios del siglo XX con todo el encanto de una buena novela paranormal. Y como podéis ver en la ficha técnica, abarca tantísimas temáticas que muy difícil clasificarla (algo que me parece maravilloso), pero sí que os aseguro que el amor juega una parte importantísima en todas las novelas. La trilogía en conjunto abarca unos 6 o 7 años en la vida de los personajes, con los correspondientes saltos temporales entre una novela y la otra, así que es muy fácil ver su crecimiento y cómo van cambiando sus circunstancias en ese tiempo. Como contexto, y gracias a que se trata de una historia de viajes de aventuras podemos ver los principios del siglo pasado en varias localizaciones muy exóticas como son los castillos irlandeses, las plantaciones sureñas de Norteamérica o las ciudades aristocráticas de Centroeuropa, como comentaré a continuación.
En cuanto a las tramas de cada novela, sin ánimo de contar más de lo que las propias sinopsis revelan, se distinguen cada una por la ambientación en la que nos encontramos. de esta forma, en Tu nombre después de la lluvia viajamos a un castillo irlandés mortificado por los lamentos de una banshee; en Contra la fuerza del viento, cruzamos el océano en uno de los transatlánticos de la White Star Line para llegar hasta una plantación en Nueva Orleans en la que los restos de un misterioso naufragio traen de cabeza a los aldeanos; y por último, en El sabor de tus heridas volvemos a Centroeuropa para adentrarnos en maldiciones de dinastías húngaras y seres inmortales. Todos los viajes están llenos de aventuras más allá de la investigación principal que llevan a cabo en cada uno en los que coincidimos con personajes secundarios misteriosos, divertidos y por supuesto, los interesantes malvados odiosos que toda buena historia necesita.
Por otro lado, algo digno de destacar es la amplísima documentación que hay detrás de esta historia y que a pesar de haber comenzado hace bastante años, la autora continúa hoy en día empapándose de la época para poder trasladarnos con tanta exactitud a las primeras décadas del siglo XX, también en la trilogía secuela que actualmente sólo tiene publicada la primera parte, La Ciudad de las Sombras.. La ambientación tan cuidada y envolvente que encontramos en los tres libros, sea cual sea el escenario en el que se encuentren los protagonistas, es el resultado de la ingente cantidad de bibliografía que consulta Victoria Álvarez para escribir al detalle cada escena. A mí simplemente me maravilla porque sin darnos cuenta aprendemos curiosidades, leyendas, lugares o nombres que de otra manera ni nos hubieran interesado, y con una simple mención a través de una conversación o de un apunte de algún personaje, adquirimos cultura histórica. Es verdad que es muy difícil mantener el rigor histórico en una novela paranormal o con tintes sobrenaturales, pero esta autora consigue fusionar ambos géneros porque precisamente la época que domina era una sociedad llena de supersticiones, de leyendas y de misterios que le dan ese juego para entretejer realidad con fantasía.
Respecto a la calidad narrativa, cualquiera que sea haya acercado a cualquiera de sus anteriores libros podría intuir lo cuidadosa que es Victoria Álvarez al escribir, pero con Dreaming Spires se despliega toda la elegancia narrativa que tiene esta autora. Como comentaba antes, no sólo las descripciones son impecables, sino que además la progresiva construcción de los personajes y el enredo de tramas en los que se ven envueltos se combinan con ese ambiente de misterio permanente junto a esos aires de elegancia victoriana. No deja de ser una narración de sencilla pese a lo que pueda parecer, porque no tiene estructuras complicadas ni usa vocabulario desconocido más allá del estrictamente necesario para la época que describe. Creo que esta es la clave de que sus libros gusten tanto al público juvenil como al público más maduro, y que capte fácilmente a lectores y lectoras por igual porque combina muchos factores de forma muy natural. Esta habilidad se merece la máxima puntuación para esta historia inolvidable y estos personajes magnéticos, que todavía se quedarán unos años más con nosotros, porque Victoria aún tiene mucho que contar.
En otras palabras, voy a recomendar a Victoria Álvarez hasta la saciedad y un poco más porque desde que la conozco no ha hecho más que superarse. Ha sido un placer ir viendo su evolución poco a poco hasta la que creo que es su mejor obra, hasta el momento y en conjunto. Esta trilogía lo tiene todo, pero literalmente: aventura, misterio, romance, fantasía, historia, acción… Hasta resulta complicado catalogarla entre literatura adulta o juvenil porque abarca muchísimos géneros y franjas de edad. Es alucinante cómo Victoria Álvarez ha conseguido llegar a tantísim@s lector@s tan variados que posiblemente no habrían cogido ninguna historia de época anteriormente, así que no os asustéis si no sois asidu@s al género histórico porque os aseguro que no importa, hay muchísimas probabilidades de que esta historia os enamore por completo.
Enlace: https://enmitiempolibro.blog..

Después de leer varias novelas suyas, Victoria Álvarez se ha convertido en una de mis autoras españolas favoritas y, por eso, no podía desaprovechar la oportunidad de hincarle el diente a esta trilogía suya. Y, por supuesto, este primer libro no me ha decepcionado. Aunque si bien es cierto que el inicio es demasiado introductorio para mi gusto, creo que la autora recrea muy bien ese ambiente propio de la novela gótica; por no hablar de lo bien desarrollados que están los personajes. Pero vamos a ir paso a paso.

Como ya os he mencionado anteriormente, Tu nombre después de la lluvia es una lectura que no me ha decepcionado; al contrario, me ha gustado mucho. La pluma de la autora es exquisita, y la manera de narrar los sucesos y de describir los ambientes en los que se desenvuelven los personajes es, simplemente, sensacional. Ahora bien, tengo que advertiros que este libro no destaca, precisamente, por tener un ritmo de lectura ágil y fluido; al contrario, más bien tiene un ritmo pausado, lento, y esto se nota, sobre todo, en la primera parte del libro. Obviamente, esto, como en todo, tiene su parte positiva y negativa. Lo bueno es que la autora se toma su tiempo en presentarnos a los personajes —sus respectivas historias, personalidades, ocupaciones…—, el contexto en que viven, los escenarios en los que se mueven, el tipo de relación que tienen los tres protagonistas de la historia, etc. Y lo malo —y este es el único punto negativo que le voy a poner a esta historia— es que la primera parte del libro es demasiado introductoria, e, incluso, hay partes, a lo largo de la novela, que son algo tediosas. Personalmente, esto no me ha supuesto un gran problema porque yo ya conocía el estilo de la autora (y sé que, en el inicio de sus novelas, suele detenerse mucho en presentar a los personajes, en explicar bien la ambientación en la que se desarrolla la trama, en ahondar en detalles, etc.), y, aunque yo prefiero los libros con un ritmo ágil y frenético, en este caso, no me ha molestado que la lectura sea lenta y pausada (pero eso no quita el hecho de que, objetivamente, sea un libro demasiado introductorio y tedioso, y no sea para todo el público lector). No obstante, no os desesperéis; una vez pasada esa primera parte, la cosa empieza a ponerse más interesante, aparecen nuevos personajes, los misterios empiezan a aflorar, y el ritmo se vuelve algo más trepidante.

Una de las cosas en las que destaca Victoria Álvarez es en la construcción y el desarrollo de sus personajes. Es una maestra en la creación de estos, y, obviamente, esto se ve reflejado en su obra. ¿El resultado? Unos personajes bien creados, construidos y desarrollados, y me refiero tanto a protagonistas como a personajes secundarios. En cuanto a personajes principales, tenemos a Alexander, Lionel y Oliver, tres amigos con personalidades muy dispares y con muy pocas cosas en común, excepto el cariño que les une y el interés por lo paranormal. de los tres, el que más me ha llamado la atención ha sido Alexander, un hombre curioso, sabio y melancólico, cuyo pasado le persigue y le atormenta. Es quien aporta racionalidad a este pintoresco grupo, y, seguramente, sea el personaje con el que haya conectado más (y haya sentido más empatía) por su trasfondo e historia. Después, tenemos a Lionel, personaje que ya conocía de la otra trilogía. Es descarado y mujeriego por naturaleza, pero sus ocurrencias nos sacará más de una sonrisa. Por último, tenemos a Oliver, el idealista y soñador del trío (y que menos me ha convencido); un personaje que adora el romanticismo y las novelas góticas.

Los personajes secundarios —sobre todo, los femeninos— van a cobrar una especial relevancia dentro de la historia. Entre todo ellos, voy a destacar a Briannon O'Laoire, una mujer de armas tomar y de naturaleza desconfiada, quien no durará ni un segundo en proteger a su hija, Ailish, de cualquier mal. También tengo que hacer una especial mención a la señorita Stirling, una mujer envuelta en un aura misteriosa, que, seguramente, cobre un mayor protagonismo en los siguientes libros de Dreaming Spires.

Pero Victoria Álvarez no solo destaca por la construcción y desarrollo de los personajes, sino también por el gran trabajo de investigación y documentación que realiza para poder desarrollar un aspecto tan importante —para una novela de este calibre— como es el de la ambientación. En este aspecto, la autora no se corta ni un pelo en darnos todo lujo de detalles del contexto histórico (principio del siglo XX) y de los diversos lugares que aparecen en la novela (Egipto, Reino Unido e Irlanda). Gracias a esto, el lector puede recrear perfectamente en su cabeza los diferentes escenarios por los que se van moviendo los distintos personajes. Asimismo, como ya he mencionado anteriormente, la autora recrea de manera magistral ese ambiente propio de la novela gótica que se traslada, sobre todo, a los escenarios de Irlanda. Además, la autora nos regala descripciones espectaculares sobre estas tierras tan mágicas, además de ahondar en aspectos sobre la cultura irlandesa, sus costumbres, sus leyendas (sobre todo, aquellas que tiene que ver con las banshees), etc.). Obviamente, el elemento paranormal está presente a lo largo de la novela, pero no es tan primordial y/o importante como, aparentemente, se deja entrever en un principio.

En conclusión, Tu nombre después de la lluvia de Victoria Álvarez es una novela que no me ha decepcionado; al contrario, me ha gustado mucho (como cualquier libro de esta autora). Como ya he dicho antes, es cierto que, siendo objetiva, es una historia con un ritmo muy pausado que, en ocasiones, peca de ser tediosa en algunas partes, pero, por las razones que he expuesto en la reseña, a mí esto no me ha supuesto un mayor problema. No obstante, esto se ve compensado con unos personajes entrañables y bien desarrollados y una ambientación espectacularmente bien creada.

Reseña completa: https://labibliotecadeairin.blogspot.com/2022/04/resena-62-tu-nombre-despues-de-la.html#comment-form.

El libro tenía todos los ingredientes para que fuera un libro que me encantase, pero se ha quedado en un "bueno, no está mal"

La historia se desarrolla entre Oxford, de donde son los 3 protagonistas principales e Irlanda en 1900. Alexander, Lionel, Oliver y August son los encargado de una revista de temática paranormal que parece estar de capa caída y necesitan una buena historia para reflotarla. Les llega la oportunidad un día donde Alexander recibe una carta desde Irlanda donde una vecina del pueblo les cuenta la historia de una banshee, un espíritu que augura la muerte de los integrantes del clan al que pertenece con sus horribles sollozos, sin embargo parece que está banshee no se centra solo en los miembros del clan porque al parecer no solo vaticinó la muerte de un vecino del pueblo sino que se piensa que fue ella la que provocó esa muerte. Así que Alexander, Oliver y Lionel viajan a Kircurling para averiguar que ocurre con esta misteriosa banshee.

Es innegable el trabajo de documentación de Victoria Álvarez que nos da un paseo por el folclore irlandés y consigue atraparte en su atmósfera. Los personajes están muy bien construidos, unos más que otro y algunos incluso creo que están desaprovechados, como es el caso de August único médium del grupo que no viaja desde el principio y cuando va a Irlanda no se ve en ningún momento esas dotes de médium. Victoria, la sobrina de Alexander me parece que también está desaprovechado, es un personaje con mucha fuerza que solo sale al principio. Personaje a destacar, la señorita Sitirling, que no solo atrae las miradas de los personajes masculinos del libro sino que también consigue encandilar al lector.

Otra cosa que no me ha gustado y esto es algo que me suele pasar prácticamente en el 90% de libros juveniles, esa historia de amor tan intensita, es que no puedo con ellas, pero esto es algo muy personal, y bueno ese afán que me ha parecido notar en el libro de emparejar a todos los personajes con alguna mujer.

Pero lo que más me ha hecho bajarle la nota es sin duda esa primera mitad del libro que se hace bastante tediosa, entiendo que se tenga que presentar bien la historia y personajes antes de empezar con la chicha de la trama, pero 300 páginas me parecen excesivas y puede hacer que más de uno abandone el libro, porque tragarse 300 páginas de aburrimiento por muy bueno que sea el libro al final se hace cuesta arriba, que 300 páginas podría ser un libro entero.

Y bueno que el tema paranormal, a pesar de que parecía que sería el tema principal de la historia, se me ha quedado muy corto, aunque la banshee tiene su importancia al final, no le da tanto juego como podría haberle dado y sobre todo como he dicho antes el papel de August que podría haber sido mucho más interesante en ese aspecto teniendo en cuenta que es médium.

No me ha dejado ganas de seguir con la saga inmediatamente para ver que pasa con los personajes, así que lo leeré en un futuro, aunque no cercano.

En fin, que el libro no está mal, que la autora escribe muy bien, pero esas primeras 300 páginas se hacen difíciles.

Una historia atmosférica, llena de brumas y niebla, el castillo encantado de la colina, rodeado de olas espumosas y un acantilado, de ramas y estatuas escalofriantes, con una banshee que chilla cada vez que alguien está a punto de morir... y un pueblo que teme a sus dos inquilinas y a su terrible espíritu. Porque nadie sabe quién será el siguiente ni por qué, porque aterra no saber lo desconocido, porque es más fácil juzgar y poner etiquetas. Si es fácil hacerlo en el siglo XXI, a inicios de los años 1900 se convertía en algo habitual y rutinario.

Lo que más he disfrutado de esta novela ha sido el estilo de Victoria Álvarez. Había olvidado lo metódica que es con cada aspecto añadido en la historia, donde cada pequeño detalle, ese que aparece de manera superficial o esa frase que se dicen los personajes de pasada, encontrará su lugar y su desenlace en la trama. Y lo maravillosamente documentado que está todo: leer Dreaming Spires ha sido como embarcarme entre la vegetación de los alrededores del castillo y el frío que despiden sus paredes, es estar en la Irlanda de principios del siglo XX con apenas abrir el libro y dar un paso detrás de otro junto con sus protagonistas.

Ha habido momentos que me costaba recuperar el hilo de la historia porque, no voy a negarlo, es una historia lenta y que se toma su tiempo en avanzar. Una vez leía unas cuantas páginas estaba completamente inmersa en todo lo que estaba sucediendo, pero volver a leer costaba un poco. de todas formas y aún teniendo en cuenta que las primeras cien páginas son muy muy introductorias, son totalmente necesarias para ubicar a sus protagonistas.

Ay, Lionel. No me caía nada bien al inicio, deslenguado, mujeriego, indecente y lo daba por un caso perdido, pero no. Quiere a sus amigos y daría lo que fuera por ellos. Se ve incluso una cierta evolución, un poco apagada, pero existente en toda la longitud del libro. Y me muero de ganas de seguir conociéndole, aunque haya cositas que ya se vean venir.

Alexander también ha robado un cachito de mi corazón. Es todo lo contrario del anterior. Serio, un caballero sin armadura, profesional y científico, con el corazón roto por el pasado. Me ha gustado ir descubriendo sus capas conforme avanzaba en los capítulos.

Oliver es el que más curiosidad me dio al inicio y el que más se desinfló al final. Ese romance fue tan repentino y, a la vez, encaja tanto con la personalidad que se nos presenta... que por una parte estoy sumamente frustrada y, por otra, totalmente resignada.

Los toques de realismo mágico, de espíritus, de magia y de folclore irlandés me han parecido deliciosos en la historia. Todo tiene su razón de ser, la puerta que se abre para seguir tirando del hilo hasta llegar al final.

Quizás hubiese preferido un ritmo un poco más uniforme a lo largo del libro porque, aunque me había acostumbrado a la lentitud de la trama y tampoco me hubiese importado un poco más de chicha, toda la acción se apelotona en los últimos capítulos de tal manera que me ha resultado un poco apabullante. Aunque, de nuevo, maravilla el cómo se ha resuelto todo en el desenlace.

Y es muy de agradecer que el final sea cerrado en cuanto a este primer libro, así puedo intercalar algunos libros más antes de lanzarme a por las nuevas aventuras de los protagonistas.