La ridícula idea de no volver a verte

"Dicen que la Humanidad se puede dividir entre aquellos cuya infancia fue un infierno, en cuyo caso siempre vivirán perseguidos por ese fantasma, y aquellos que disfrutaron de una niñez maravillosa, que lo tienen aún mucho peor porque perdieron para siempre el paraíso." (Pág. 67).

Qué hermoso lo que me pasó con este librito. Me lo gané en un té lotería hace un par de años y así como llegó fue a parar a la biblioteca. Siempre que iba a elegir uno decía, ese no. Hace unos días decidí por lo menos pegarle una ojeada y me atrapó. Con lindas reflexiones por parte de la autora, y con lindos relatos sobre la vida de una mujer muy admirable. Un libro lindo, lindo. Una visión de la vida y la muerte muy real. Y el relato de una parte de la vida de una mujer que tuvo Miles en contra pero que quedó para siempre en la memoria del mundo.

✨ “Y me hacía feliz sentir que allí, a tu lado, bajo aquel sol hermoso y frente a aquellas vistas divinas del valle, no me faltaba nada. Eso me daba fuerza y fe en el futuro. No sabía que no habría futuro alguno para mí.”

Me encantaría ser objetiva e imparcial, de verdad que sí, pero me vais a tener que disculpar; esta historia ha caído del cielo expresamente para mí y ha irrumpido en mis oídos y mi corazón, haciéndome pedazos y arropándome a la misma vez. Ojalá no hubiese sido necesaria tan pronto. Ojalá me hubiera regalado un poco más de tiempo.
Desde que recuerdo me he refugiado en los libros. Han sido mi bote salvavidas, mi distracción, mi forma de evadir esa realidad que no alcanzaba a entender o aceptar. En los buenos momentos, lo he celebrado con ellos; y en los malos, me he escondido entre sus páginas, les he pedido consuelo y me he sentido comprendida y menos sola. Ellos no me hacían preguntas incómodas, ni me gritaban, ni se burlaban de mis sentimientos o trataban en vano de subirme el ánimo con palabras vacías. Por eso, les estaré eternamente agradecida y es también por eso que escribo; para que otros niños (y no tan niños) rotos como yo sean capaces de conocerse y sanarse y para dejar de tirar piedras sobre mi propio tejado.
Había una única excepción que me retenía en el mundo real con esas manos tan grandes y ásperas y esa voz grave y dulce. Sin preguntas incómodas, ni gritos, ni burlas, ni palabras vacías; solo bondad y amor. Tal vez el amor más puro que haya experimentado. Me sentaba en sus piernas y me contaba historietas, haciéndome sentir la niña más afortunada del mundo, a pesar de todo. Era su humildad, su sencillez y sus chistes malos lo que yo tanto admiraba y valoraba. Las tardes al lado de la chimenea comiendo castañas que él mismo asaba y pelaba. Las películas malas de vaqueros. Los animales. El tocadiscos. La funda roja de mi violonchelo. Veinte años de recuerdos y ni uno solo, ni medio, malo.

«La ridícula idea de no volver a verte» ha sido el libro que me ha ayudado a sobrellevar la muerte de mi abuelo, como quizá lo hizo el diario de Marie Curie con Rosa Montero. Un diario que, por cierto, me ha sacado lágrimas como puños, por contener unos recuerdos tan sumamente dulces que Marie escribió a su marido, Pierre Curie, para tratar con el duelo de su repentino fallecimiento. Además, fue este el que incentivó a la autora a escribir, incluso, de su propio dolor tras perder a su compañero de vida, Pablo.
No tengo ningún comentario negativo. Es más, en versión audio libro, al ser narrado por Rosa, parece mucho más íntimo y emotivo de lo que ya es de por sí. Tiene una voz bonita, tranquila, sabe dónde y cómo parar, la entonación que debe usar, hasta se atreve a hacer comentarios que me han sacado alguna que otra carcajada. He estado completamente enganchada hasta el final; pasando por la curiosa y zigzagueante vida de Marie Curie que, como sabemos, descubrió el radio y el polonio; tratando temas como la desigualdad, la ignorancia, el machismo, la hipocresía, los traumas y la terrible obsesión por honrar a los padres.
Sin embargo, lo que me ha resultado más relevante ha sido escuchar cómo desaparece cruelmente esa intimidad que se forma con tu pareja, con las manías y las rarezas conjuntas y el amor incondicional que se profesa y te deja rota, sin aliento, incapaz de asimilar que jamás volverás a vivir esos momentos que tanto han complementado tu existencia. Seguir adelante con todo esto sobre tus hombros es complicado, pues únicamente queda la memoria y lo que se guarda en el corazón. Aunque es increíble cómo meros objetos (que no son más que eso) adquieren un valor incalculable, pues pertenecieron en su día a nuestro ser querido que hoy ya no nos acompaña, y parece que nos teletransporta a su lado por un rato.
Recomiendo encarecidamente este libro, tanto en formato papel (con fotografías incluidas), como en formato audio. Desde ahora, es uno de mis favoritos y siempre que me encuentre perdida, porque en este mundo ya no me queda ningún bote salvavidas, volveré a él.
Gracias Marie Curie. Gracias Rosa Montero. Gracias, abuelo, por ser tan especial, por la sabiduría que me dejas.

No podía perder la ocasión de conocer a esta autora y estrenarme con un libro al que le tenía muchas ganas, sin saber de qué iba...me llamaba a su lectura porque su portada destila libertad.
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Ha sido un maravilloso descubrimiento y seguiré leyendo su obra, espero encontrar más joyitas como ésta.
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Estamos ante una obra corta que mezcla la vida de la científica y Premio Nobel Marie Curie y la de la propia Rosa Montero. No sé si llamarlo ensayo, obra de investigación o biografía, pero lo cierto es que se lee sin darte cuenta y se disfruta como un tesoro.

Que Marie Curie fue una super mujer ya lo sabía, pero no conocía hasta qué nivel llegaba, hasta que he leído esta historia. Veréis, conocía de sus premios Nobel (el que compartió con su marido Pierre y el que ganó en solitario), imaginaba lo que tuvo que pelear por tener su sitio cómo científica y por obtener el reconocimiento que merecía, pero no sabía cómo y cuánto tuvo que hacerlo.
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Lo que más me ha gustado leer es su modo de trabajar ¡que de burradas hicieron en ese laboratorio por Dios!, y saber cómo superó cada obstáculo, cómo aguantó la radiación durante años. Me ha gustado conocer sobre sus hijas, no sabía que la mayor ganó otro Nobel..🤔 la de cosas que no sabemos sobre las científicas 🤔
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Gracias a escritoras como Rosa Montero aprendemos más y mejor.
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Lo bonito ha sido leer esa mezcla de ambas vidas y lo que tienen en común, a pesar de lo atemporal que resulta la coincidencia.

Se trata de un libro de no ficción entre biografía de Marie Curie y la de la propia autora. En ella nos habla también de la superación del dolor tras la muerte de un ser querido.

Me ha gustado muchísimo conocer más a fondo la vida de Marie Curie; sabía cosas sobre ella pero ni de lejos todo lo que se nos cuenta en el libro. Sin duda, una mujer a la que admirar, por la época en la que le tocó vivir, por todo lo que luchó (y sufrió) y por todo su trabajo y excelencia.

Es un libro corto, no os vais a encontrar una biografía al uso. La autora nos va contando de una manera bastante amena la extraordinaria vida de Curie.

Como puntos negativos, diré que la narración de la autora me ha gustado mucho en ciertos puntos pero en otros todo lo contrario. Y aunque es una chorrada, me molestaba un poco leer y encontrarme hastaghs constantes que para mí no tienen sentido en este libro.

Nota: 7'5/10

"La ridícula idea de no volver a verte" de Rosa Montero.

A Rosa Montero le dieron el diario que Marie Curie escribió tras la muerte de su marido para que escribiera el prólogo, pero le resultó tan fascinante, le surgieron tantas ideas...que en lugar del prólogo escribió este libro. Y es fantástico, no solo nos muestra y habla sobre Marie Curie científica, descubridora del radio y el polonio y que obtuvo 2 premios Nobel convirtiéndose en la primera persona en conseguir este logro, fue la primera MUJER en Francia que presentó una tesis doctoral calificada con sobresaliente Cum Laude, la primera MUJER en ocupar un puesto de profesora en la Sorbona (Universidad de París) y todo esto y mucho más, me repito siendo MUJER, en un mundo de hombres, siendo madre (ella se ocupaba de sus hijas) y siendo ama de casa (también se ocupaba de las tareas domésticas). A través de este diario (que se incluye al final del libro) vemos su parte más íntima que es en la perdida de un ser querido, en este caso su gran amor y Rosa Montero magistralmente reflexiona sobre este tema por el que todos hemos pasado o vamos a pasar y lo hila contándonos pasajes de su vida ya que ella también ha pasado por la perdida de su gran amor.

Es una mezcla de biografía de Marie Curie, autobiografía de Rosa Montero y ensayo.

En una entrevista, la autora dice que "este no es un libro sobre la muerte, es un libro sobre la vida" y me parece una manera muy adecuada y bonita de definirlo.

Es lo primero que leo de Rosa Montero y no será lo último porque me ha gustado mucho. Se aceptan recomendaciones 😊

#babelioespañol

La ridícula idea de no volver a verte (2013) me ha gustado mucho, una belleza de libro: por la calidad de la escritura, por la originalidad del tema y por lo interesante de la historia. Es un libro inclasificable en su género, ni novela, ni biografía, ni ensayo. Es una narración con fotos y remembranzas concernientes a la vida de Marie Curie y, en paralelo, a la vida personal de Rosa Montero porque existe un paralelismo entre las dos historias: la idea de este libro partió después de la lectura por Montero del breve diario que la científica Marie Curie escribió tras la trágica muerte en 1906 de su esposo Pierre Curie, arrollado por un carruaje. En paralelo Montero escribe sobre la pérdida de su esposo Pablo en 2009, fallecido por enfermedad.
Es un libro sobre el dolor del duelo, sobre la separación del ser amado, es un libro lleno de preguntas que se hacen dos mujeres en dos épocas diferentes, entre ellas la ridícula idea de no volver a ver nunca a quien ha sido el centro de sus vidas. Marie Curie dice en su breve diario « los momentos de calma son raros y tengo sobre todo este sentimiento obsesivo de desamparo, con momentos de angustia, y también una inquietud, y a veces la idea ridícula de que todo esto es una ilusión y que vas a volver… »

Son páginas que hablan de la superación del dolor, de las relaciones entre hombres y mujeres, del esplendor del sexo, de la buena muerte y de la bella vida, de la ciencia y de la ignorancia, de la fuerza salvadora de la literatura y de la sabiduría de quienes aprenden a disfrutar de la existencia con plenitud y con ligereza.
Enlace: https://pasiondelalectura.wo..

El duelo siempre ha sido un tema peliagudo, casi tabú, de esos que se viven en soledad para "no molestar" al resto. Y a mí me ha gustado mucho cómo lo ha tratado Rosa Montero en este libro, como ha puesto voz y ha normalizado ese sentimiento.

Pero La ridícula idea de no volver a verte es mucho más que eso, el duelo es el punto de partida para contarnos un poquito de la vida de la gran Marie Curie. Es una especie de biografía de la científica, muy cortita, y centrada en su parte más humana y no tanto en sus descubrimientos científicos. Pero a mí estás pequeñas pinceladas sobre Curie me han gustado mucho y me han dejado con ganas de saber más de ella.

Además, Rosa también aprovecha para hablarnos del papel de la mujer en la sociedad, tanto desde tiempos de Curie como en la actualidad. Nos deja muchas reflexiones y muy interesantes, yo ya os digo que tengo el libro marcadísimo y lleno de post its.

Todo está narrado de una forma muy sencilla y cercana, lo que hace que el libro más que leerse se beba. Lo único a lo que no le encontré el sentido fue a la inclusión de hashtags en el texto, lo hace bastante y durante todo el libro, pensaba que en algún momento explicaría el porqué pero no lo hizo y fue algo que me dejó un poco intrigada.

Como primer acercamiento a Rosa Montero he salido muy satisfecha, me ha resultado una lectura muy amena, que hace reflexionar y que a la par nos hace conocer un poco mejor el lado más personal de Marie Curie.

En este libro, Rosa repasa la vida de Marie Curie, centrándose en aspectos más personales que sus logros científicos: su amor por su marido, Pierre, el duelo tras su muerte prematura, el escarnio y repudio al que se vio sometida cuando se volvió a enamorar años después, esta vez de un hombre casado, su relación con sus padres, con sus hijas...

En paralelo, Rosa hace reflexiones muy interesantes sobre la vida de la mujer en aquella época y en la actual, que hemos avanzado, pero no tanto, y expone su experiencia, entre otras cosas con la pérdida de su marido, el afrontamiento de la vejez...

No había leído nada de Rosa Montero que no fuese novela, y me ha resultado ameno e interesante. Es cierto que me gustó más el comienzo y que luego se me fue desinflando, pero quizá porque toca temas que yo aun no integro como míos.

No llevaría ni 10 páginas de «La ridícula idea de no volver a verte» cuando supe que iba a ser un librazo para mí. Efectivamente, lo fue.

Un libro de tipo ensayístico con el que Rosa Montero aborda el duelo por la pérdida de su pareja haciendo paralelismos con el duelo de Marie Curie tras el fallecimiento de Pierre Curie.

Para mí este libro es claramente dos cosas a la vez: una introspección de su propio duelo proyectado en el relato a través de Marie Curie; y una forma de reivindicar la persona de Marie, más allá de la científica. Aquí vemos, obviamente, aspectos profesionales de Curie, pero también otros más íntimos y personales: vemos a una joven con inquietudes, la esposa, la madre, la viuda, la amante, la mujer.

Aunque creo que cualquiera puede empatizar con el dolor de Marie/Rosa Montero, lo cierto es que si has pasado por un duelo, este libro te aportará muchísimo más que un relato a través del cual puedas sentir. Serás tú quien protagonice el libro, te verás reflejado en sus palabras y te guiará en el proceso (o te reconocerás en él).

El duelo es diverso y único, porque cada persona tiene el suyo, sin embargo es también un proceso universal. Cada uno tiene su pérdida pero ve comprendido su dolor en otras personas que han pasado situaciones similares.

Cuando hay una pérdida significativa, hay, sobre todo al principio, un dolor lacerante que existe sin siquiera pensar en la ausencia. Cuando compartes el camino con una persona que ha pasado un proceso similar al tuyo, hay muchas situaciones y sentimientos que no necesitas explicar, que se sobreentienden y se cuentan con silencios compartidos. Todas esas preguntas existenciales y abstractas que nos hacemos, existen también en la otra persona.

Es muy reconfortante y sanador encontrar a un compañero en un proceso como este. Imagino que por eso Rosa Montero quiso compartir su dolor con Marie y, además, acompañarla en su duelo por Pierre.